Se acabó la suerte de los flamencos en La Voz: escabechina y expulsiones

¿Sabéis eso de que los que cantan flamenco tenían cierta ventaja en La Voz? Pues lo de ayer fue una escabechina de flamencos. Fue como soltar quince águilas reales en medio de una bandada de pájaros rosas de esos.

Aunque… quizá sea un despiste…

Pero vayamos por partes.

Jesús Vázquez iba vestido como para ir al cumpleaños de la niña de la curva, con una chaqueta color blanco nuclear de esos con los que no puedes hacer nada, porque te miran y se te mancha.

Fue verle y tener que ponerme unas gafas de sol para que no se me quemaran las retinas y con todo y con eso ahora en el barrio me llaman Stevie.

Pero no soy el único que lo notó y como el chaval con el calor de focos se cuece más que un pulpo en una feria gallega, pues cogió la chaqueta y la lanzó a tomar por donde salen los trenes bala marrones.

La que sí que tiene estilo es Tania Llasera, que salió con unos pendientes azules colganderos que parecían la cortina anti moscas de la puerta del pueblo.

Sigamos con los estilismos: Laura Pausini llevaba un escote que cada vez que tomaba aire le emergían los melones que parecían dos calvos subiendo en un ascensor.

Por último, para cerrar este capítulo, ¿alguien me explica porqué Alejandro Sanz y Antonio Orozco se ponen chaqueta si luego se la remangan? ¿Alguien puede por favor enviarles un Whatsapp para decirles que han inventado unas prendas que se llaman camiseta de manga corta?

PAUSINI

El primero en cantar fue Rai. Jo, que actuación más trepidante. Era una cosa tan loca que cantó sentado en un sillón. Un poco más y se marca el tema tumbado en un chaise longe. Acabó la canción con un tono agudo que yo creo que llevaba un dispositivo que llegado a ese punto le apretaba los testículos.

La siguiente fue La Flaka, que cantó una canción de La India. Joder, ¿es que todo el mundo tiene mote? Total, que la mucha retorció tanto su canción para adaptarla a su estilo que al final parecía una toalla escurrida.

En un momento dado Jesús Vázquez se quedó picueto porque La Flaka le miraba mucho el pelo y preguntó que si pasaba algo. Y ahí Alejandro Sanz, que parece más soso que la dieta de un hipertenso, soltó: «Algo pasa con Mery». JA JA JA Pedazo de cabroncete.

Pablo cantó ‘Angel’, una canción que habla de un señor de Cuenca que se llama Ángel Luis y que tiene un pinchazo con el coche en una comarcal y tiene que comerse las migas de pan que encuentra entre los asientos mientras espera a la grúa.

Después cantó Maverick, que iba vestido de anuncio de laxante de los años 70. Llamadme loco, pero creo que lo hizo un poco… reguleras. Y por decir esto en el momento menos pensado parará a mi lado una furgoneta negra conducida por unas adolescentes que me secuestrará y golpeará por ofender a su ídolo.

«Eres de esas personas que tienen algún fallito vocal pero su carisma está por encima», dijo Malú. La traducción es: «Es guapo y si canta como un gallo con anginas no pasa nada».

Y el público salvó… Sí, a Maverick. Y Laura salvó a… La Flaka. Ups. Una que canta flamenco, qué sorpresa. Dijo Laura que porque era lo que la gente quería.

ALEJANDRO SANZ

José Manuel, que es más varonil que rascarse los huevos, cantó la canción de Titanic. Os lo juro. La versión cantada por un maromo era tan mala que creo que Rose se quería tirar por la popa porque era lo que estaban poniendo en el barco. A la mitad de la canción salió una bailarina acrobática, creo que para intentar distraer la atención. Eso sí, al final José Manuel pegó un berrido lírico que no se diga que no sabe.

Irene cantó una canción de Beyoncé, pero en español. Empezó muy bien y muy bien significa comportándose normal, pero según avanzó la cosa se empezó a poner nerviosa y empezaron las convulsiones. Esta chica cuando canta hace imitaciones de gente metidas en bañeras en las que se cae un tostador enchufado. Es la viva estampa de la electrocución. De cantar bien.

Antonio Orozco prometió que si alguno de su equipo ganaba La Voz él se rapaba. Y Malú replicó: «A mí no me rapéis, que luego me echan al monte y no se sabe la especie…», JA JA JA JA CRACK

Y también dijo Orozco que cuando era pequeño su madre le ponía como de niña y le llevaba por el mercado llamándole Manuela. ¿Pero qué coj…? Porque ya tiene Orozco pelos en los huevos, si no, a esa mujer le retiraban la custodia.

Marcos cantó a continuación. Los músicos se los tuvieron que poner subidos en una escalera para que no les hiciera sombra. Este chaval es tan grande que debería cantar la banda sonora de Godzilla.

Y cantó Saúl. Os lo resumo: caras de gustirrinín de Malú y Alejandro Sanz, que no se sabe si están oyendo una canción o dando una vuelta por una zona rocosa en una bici sin sillín. Por supuesto, a todo el mundo le conmovió y le llegó al corazón… menos a mi, por lo visto.

Alejandro Sanz cantó con su equipo Corazón Partío, una canción sobre un chico que llega con un infarto a las urgencias de un hospital provincial un domingo a las cuatro de la mañana. Allí cantó cada uno como le salió del mismísimo, así que en lugar de una canción eso parecía Frankenstein en un karaoke.

Total, que los espectadores salvaron a… ¡José Manuel! Por favor, que le quiten el móvil a los hijos, que como son jóvenes tienen los pulgares super desarrollados y mandan mensajes muy rápido.

Entonces Jesús Vázquez tuvo que ponerse a gritar como un descosido para que la gente se callara en el plató. El día menos pensado aparecen los antidisturbios y se lían a porrazos con los que gritan nombres de los concursantes.

Y Alejandro Sanz salvó a… ¡¡Marcos!!

OROZCO

Antonio José cantó ‘Amiga mía’, la canción de Alejandro Sanz… Y Alejandro Sanz le miraba raro, desconfiado… como cuando vas a un restaurante chino y pides ternera y oyes un gato chillar en la cocina.

Turno de las gemelas que se cansaron de acojonar huéspedes en un hotel y se dieron a la canción. El caso es que cantaron bastante bien. «Mola Mazo», dijo Pausini haciendo un análisis musical que cágate lorito.

Antonio Tomás es el que mejor canta de todos los que hay en La Voz. Y si alguien tiene narices a contradecirme que sepa que le enviaré mi padrino y nos veremos fuera de las murallas al amanecer con las pistolas cargadas.

Raquel salió vestida con pintas de azafatas del Un, Dos, Tres… lo que pasa es que le cambiaron la calculadora de las pesetas por un micrófono. Cantó una canción que se llama Hello, que trata de un conductor de autobús que está hasta los cojones de decirle hola a la gente según van subiendo. En cada puta parada. Todos los días. Ocho horas al día.

Y el público salvó, con casi un 60% de los votos, a… ¡ANTONIO JOSÉ!

Y Orozco salvó a… ¡RAQUEL! Era lo lógico.

MALÚ

Joaquín cantó por Luis Fonsi. Y con un piano. Había más pena sobre escenario que en último episodio de David el Gnomo. Sí, sé que los más jóvenes no sabéis de qué os hablo, pero daba una pena que ríete tú de la madre de Bambi.

Juañarito cantó… una canción flamenca. Mira tú. Y las ballenas viven en el mar y las almorranas duelen. Cosas súper sorprendentes. Exijo una serie venezolana sobre este tipo. Se llamaría «Amar así, Juañarito».

Diego Cartón fue el siguiente. Para presentarle Jesús Vázquez dijo: «le hemos quitado la guitarra y…» y al segundo siguiente salió el muchacho a cantar una guitarra. ¿La tendría escondida? Y si es así, ¿dónde? Sí, vale ahora no me digáis que no habéis pensado todos y todas en el mismo sitio: metida por el cul… oído.

«Tengo novio, no puedo decir…», dijo Pausini cuando Jesús Vázquez le preguntó si Diego seguía estando buenorro. ¡¿Veis?! fue aconsejárselo la semana pasada y hacernos caso. ja ja ja ja

Diana cantó el tema Fever (fiebre), un alegato musical que homenajea la lucha de los antigripales en pro de la humanidad.

«La patata en la mano sería el coño en la mano en italiano», nos explicó Laura Pausini justo antes de saludar a su novio y decirle que volvía pronto a casa. ¿Había ahí un mensaje subliminal para el novio?

Y los espectadores salvaron… ¡¡A JOAQUÍN!! Ja ja ja ja a lo mejor es que miré mal, pero a Juañarito se le cambió la cara…

Y Malú salvó a… ¡¡DIANA!!

OJO: DEBACLE FLAMENCA EN LA VOZ. Sólo queda La Flaka. Saúl y Juañarito se van con el señor Duende y Mr Quejido a sus respectivas casas.

Pero, lo dicho, ¿no será un despiste para hacer ganadora a La Flaka? Mi gran esperanza es Antonio José, que fue el que más apoyo tuvo del público…

¡Pronto lo sabremos!

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