Jimmy Peters, con la camiseta de Inglaterra (Dominio público).
Vamos a cerrar la semana con otro pionero. Esta vez, con el primer jugador negro de la historia del rugby. Es Jimmy Peters.
James Peters nació el 7 de agosto de 1879 en Salford, Inglaterra. Sus padres eran artistas de circo. Su padre, de nombre George, era jamaicano, y murió atacado por unos leones en su jaula. Su madre, inglesa, no pudo o quiso hacerse cargo de él y lo entregó a otro circo, donde el pequeño Jimmy trabajaba como jinete. Pero sufrió una caída, se rompió un brazo, y el circo le abandonó. Tenía 11 años.
Recaló en un orfanato en Greenwich, donde empezó a practicar varios deportes, destacando en todos ellos.
Tras formarse como carpintero, por motivos de trabajo se trasladó a Bristol, donde empezó a jugar en el club local (los actuales Bristol Bears), no sin polémica: un directivo del club dimitió por no estar de acuerdo con que un negro jugara en el equipo.
En 1902 se estableció en Plymouth, donde siguió jugando. En 1906, fue convocado por primera vez por la selección inglesa y debutó el 17 de marzo de ese año, día de San Patricio, ante Escocia. Se convirtió en el primer jugador negro en jugar un partido internacional de rugby. Anotó, además, dos ensayos. Poco después jugó un partido más, ante Francia, donde logró otro ensayo.
Más tarde ese año se vio envuelto en una polémica. Los springboks sudafricanos estaban haciendo una gira de invierno por Europa. Tenían un partido contra la selección del condado de Devon, pero al enterarse de que entre ellos estaba Peters, que era negro, se negaron a jugar. Finalmente, Devon no alineó a Peters y el partido se celebró.
Peters, que jugó dos partidos más con la selección inglesa hasta 1908, sufrió un accidente laboral en 1910 en el que perdió tres dedos. Pero pese a ello, siguió jugando, hasta que en 1912 decidió pasarse al hermano profesional del rugby union, el rugby liga.
Regresó al norte de Inglaterra y jugó un año en el Barrow y otro en el St. Helens, donde se retiró en 1915. No obstante, tras colgar las botas se fue a vivir a Plymouth, donde murió el 26 de marzo de 1954, con 74 años de edad.
Espero que os haya gustado el artículo. Volvemos el jueves que viene, ya en febrero.
Los porteros de fútbol siempre dan mucho juego. Son como los fotógrafos de prensa. No hay ninguno que no sea un personaje (para lo bueno, normalmente). Es gente muy carismática y algunos de ellos se convierten en grandes leyendas, entre otras cosas porque además, suelen ser bastante longevos como jugadores en activo. Hoy os traigo a uno de los legendarios de verdad, procedente del país que inventó el bendito deporte del fútbol y que tuvo el dudoso honor de encajar los que, probablemente, sean los dos goles más famosos de la historia. Viajamos a mi querida Inglaterra para hablar de Peter Shilton.