¿Soplamos? (GTRES)

Hoy, 29 de noviembre de 2017, se cumplen exactamente 10 años, una década, del debut de este blog en la parrilla de 20minutos. Lo hizo con un post del ya fallecido Laurent Fignon. Desde entonces, han pasado muchas cosas. A mí personalmente y al mundo en general.

España ha ganado un Mundial y dos Eurocopas en fútbol, el Real Madrid ha ganado tres Champions League y el Barça otras tantas (y mi Atleti ha perdido dos finales). El Sevilla ha ganado tres Europa League y el Atlético, dos. Rafa Nadal ha ganado 13 torneos de Grand Slam (cuando estrené el blog, llevaba ya tres). La selección española de baloncesto ha ganado tres Eurobaskets, dos platas y un bronce olímpicos. Pau Gasol ha ganado dos anillos de la NBA… vaya década para el deporte español, ¿eh?

¿Y qué decir fuera del deporte? Cuando estrené este blog, el primer iPhone llevaba apenas unos meses en venta. Aún no existía el sistema operativo Android. Facebook tenía 58 millones de usuarios al mes. Ahora tiene unos 2.000 millones. Twitter tenía unos 200.000 usuarios mensuales. Ahora tiene 330 millones de usuarios al mes. Instagram ni existía. Las teles de tubo todavía se vendían más que las de plasma o pantalla plana. Aún no había acabado la primera legislatura de Zapatero. No teníamos ni idea de qué era el ISIS… Y yo aún no era padre.

Da vértigo pensar dónde estaremos dentro de 10 años. No sé si este blog seguirá. Seguramente, los blogs ya no existan, no como los conocemos ahora. Ni los teléfonos inteligentes, ni los ordenadores…

Pero centrémonos en lo que sabemos. Yo, personalmente sé que este blog ha cumplido la década gracias a vosotros, a los lectores, que sois más de 12 millones (sólo tengo datos desde 2011, así que seréis más). Y no puedo más que tener unas líneas para todos los responsables de 20minutos, y en especial para mi exjefe Arsenio Escolar, que por dos veces me ‘compró’ la idea y al que no puedo agradecer más que lo hiciera.

Y mientras pueda y quiera, aquí seguiremos. 10 años más. O 20. O los que hagan falta. De nuevo, GRACIAS.

Hasta mañana.

He de admitir que soy bastante amigo de lo simbólico. Soy de los que se emociona cuando el cuentakilómetros del coche alcanza una cifra redonda. Por eso, el de hoy no podía ser un post más, debía de ser especial. Y es que, amigos, este que leéis es el post número 2.000 de este blog.

Había pensado varias cosas para celebrarlo, pero ninguna de ellas terminaba de convencerme. Así que me he decidido por lo más fácil y por lo que creo que es lo mejor. Algo tan sencillo como dar las gracias.

En primer lugar gracias a mi padre, porque sin él no existiría en absoluto este blog. Fue él, como comprador de prensa deportiva y amante del deporte en general el que metió en mí la semilla del interés por la información deportiva. Era yo muy niño y esperaba la llegada de mi padre con el periódico. Él, que siempre fue un buenazo, me dejaba que me lo leyera antes que él incluso. Y después, me dejaba que recortara fotos, titulares y alineaciones. El bagaje informativo que adquirí en esos finales de los 80 me ha servido de mucho. Y a día de hoy mi padre es, seguramente, mi más fiel lector, así que gracias, papá.

Gracias también a las dos personas que más quiero en el mundo, mi mujer y mi hija, a quienes tantas horas les robo por este blog. También, claro, a mi madre y a mis hermanos, que me leen aun cuando no les interesa lo que escribo (en algún caso solo, ¿eh?).

Es obligado que le dé las gracias a esta que es mi casa, a 20minutos, en concreto a Arsenio Escolar, que por dos veces confió en mí y en este blog (no es fácil encontrar cosas así en esta profesión de trenes que pasan y no vuelven) y a Melisa Tuya, la gran madre de los blogs veinteminuteros. Y también, claro, a todos los compañeros que por algún motivo u otro han hecho por difundir esta bitácora.

Pero el agradecimiento especial es a los lectores, claro, los verdaderos artífices de estos 2.000 artículos. Los que fielmente han ido visitando durante estos nueve años las historias que os dejo cada día, hasta superar los diez millones de visitas (que se dice pronto, estoy abrumado).

Gracias a todos. A por otros 2.000.

Movilla en un partido entre el Rayo y el Madrid disputado en Vallecas en febrero de 2012 (GTRES).

Seguimos con fútbol, y este vez de nuestra Liga. Hoy vamos a hablar de uno de esos jugadores que la mayoría de entrenadores quiere tener siempre en su equipo. Es José María Movilla.

¿Quién era?: Un centrocampista español de los 90 y la pasada década.

¿Por qué se le recuerda?: Pues por su paso por equipos como el Málaga, el Atleti, el Rayo o el Zaragoza, donde siempre ofreció trabajo infatigable.

¿Qué fue de él?: Se retiró en 2014 en las filas del Real Zaragoza. En la actualidad, dirige una Escuela de Fútbol que lleva su nombre y que opera en la localidad madrileña de Leganés. Lo podéis seguir en Twitter.

¿Sabías qué…?: Movilla pasó en su infancia por las categorías inferiores del Real Madrid.

– A pesar de ello, de niño era hincha del Atleti.

– Cuando jugaba en el Moscardó, compaginaba su carrera futbolística con un empleo como basurero.

– Estaba en el mítico Numancia que se enfrentó en 1996 al FC Barcelona y casi da la sorpresa al empatar a dos en la ida en Los Pajaritos y llegar a ponerse por delante en el Camp Nou por 0-1. El Barça remontó y ganó 3-1.

– De su paso por el Málaga se llevó una costumbre: llevar bajo el uniforme una camiseta del Cristo del Cautivo de Málaga.

Movilla, en su presentación con el Zaragoza cuando firmó en 2012 (Archivo 20minutos).

– Fue pieza clave en el Atleti del último añito en el infierno, hasta que Gregorio Manzano, en su primera etapa como técnico del Atleti, decidió prescindir de él.

– Luis Aragonés estuvo a punto de hacerle internacional, pero finalmente la cosa no cuajó.

– Es el jugador más veterano en vestir la camiseta del Real Zaragoza en partido oficial.

– En 612 partidos como profesional, marcó 22 goles.

– Fue expulsado cuatro veces en su carrera.

Biografía, palmarés, estadísticas: José María Movilla Cubero nació en Madrid el 8 de febrero de 1975. Debutó como profesional en 1994 en las filas del Moscardó, desde donde fue cedido al Numancia en 1995. En 1997 se fue al Ourense y al año siguiente llegó al Málaga, donde estuvo tres temporadas, la última cedido en el Zaragoza. Entre 2001 y 2004 jugó en el Atleti. Por el Zaragoza fichó en 2004 y pasó tres años, tras los que se fue al Real Murcia, donde estuvo dos temporadas. En 2009 firmó por el Rayo, donde jugó hasta 2012, año en el que volvió al Zaragoza, donde se retiró dos años después. En su palmarés tiene una Copa del Rey y una Supercopa de España, ambas con el Zaragoza.

Os dejo con un reportaje sobre la escuela de Movilla:

Hasta mañana.