Quién fue… Ernst Happel: la leyenda del especialista de la Copa de Europa

Happel, en 1978 (WIKIPEDIA).

Happel, en 1978 (WIKIPEDIA).

Vamos a cerrar la semana con otro entrenador de esta miniserie que empezamos hace unos cuantos viernes. En esta ocasión, os voy a hablar de un tipo muy carismático, puro ADN de fútbol europeo, con experiencia en varios países y un fantástico currículo. Es Ernst Happel.

Nacido en Viena el 29 de noviembre de 1925, con 16 años entró en las categorías inferiores del Rapid de Viena, con cuyo primer equipo debutó en 1942 como defensa central. Junto a Max Merkel, otro de los entrenadores austríacos más destacados, formó una pareja que durante años colocó al Rapid en el primer puesto del fútbol austríaco. En el equipo vediblanco estuvo 14 temporadas, en las que logró seis títulos de Liga. En 1955, emigró a Francia para jugar dos temporadas en el mítico Racing de París, para regresar al Rapid y retirarse después en 1959. Con su selección, por cierto, jugó 51 ocasiones entre 1947 y 1958. Happel jugó dos Mundiales, el de Suiza 54 y el de Suecia 58.

Pasaron cuatro años entre su retirada y su incorporación a los banquillos. El primer equipo que le dio una oportunidad fue de Países Bajos: el ADO Den Haag (La Haya). En este equipo estuvo seis años y pese a que el ADO siempre estuvo a la sombra de otros clubes, lo logró llevar a la victoria en la Copa de 1968. Tras este éxito, fue contratado por el Feyenoord en 1969.

En el equipo de Rotterdam fue donde alcanzó la gloria. En su primera temporada, ganó la Liga y la Copa y al año siguiente logró llevar al Feyenoord a la final de la Copa de Europa y ganarla. Fue el 6 de mayo del 70 en San Siro, ante el Celtic de Glasgow, con un resultado de 2-1 tras la prórroga. El Feyenoord se adelantaba así a su eterno rival, el Ajax, en la carrera por ser el primer equipo de Países Bajos en convertirse en campeón de Europa. Por desgracia para el Feyenoord, ese sería su primer y último (por el momento) título europeo. Meses más tarde, culminaría el éxito derrotando al Estudiantes de La Plata en la final de la Intercontinental. Su filosofía se puede resumir en una de sus frases más famosas: «Prefiero ganar 5-4 que 1-0».

En 1971, el Feyenoord ganó otra Liga holandesa, pero dos años después, Happel cambió de aires y se vino a España, en concreto, al Sevilla FC. Lo sorprendente es que en aquel momento, el equipo hispalense estaba en 2ª. El objetivo, claro está, era ascender a Primera, pero Happel no cuajó. El técnico vienés tenía un carácter introvertido y una derrota en un derbi ante el Betis por 3-0 desencadenó su destitución.

Happel, como seleccionador de Países Bajos (WIKIPEDIA).

Happel, como seleccionador de Países Bajos (WIKIPEDIA).

Happel regresó al Benelux, en concreto a Bélgica, para hacerse cargo del Brujas. Bajo su cargo, el equipo flamenco vivió su mejor época: ganó tres Ligas seguidas (entre 1976 y 1978), una Copa belga (77) y lo hizo subcampeón de la UEFA en 1976 y subcampeón de Europa en 1978. Los belgas cayeron en Wembley ante el Liverpool de Dalglish y Souness.

Los éxitos en el Brujas le llevaron a la selección de Países Bajos, con el objetivo de lograr en Argentina 78 aquello que no pudieron lograr en Alemania 74: ganar el Mundial. Pero la oranje se quedó de nuevo a las puertas. Otra de sus frases más famosas la pronunció minutos antes de saltar al Monumental a disputar la final: «Señores, son dos puntos», le dijo a sus jugadores.

Tras una breve experiencia en 1979 en el Haralbeke belga, ese mismo año llegó a otro de los equipos con solera de aquel país: el Standard de Lieja. Pasó dos temporadas en este equipo y con ellos ganó la Copa de su país. Pero fue en 1981 cuando Happel llegó al otro equipo donde se hizo leyenda: el Hamburgo alemán. Como ya era habitual en Happel, cosechó trofeos también en la ciudad hanseática. En 1982 ganó la Bundesliga. Repitió al año siguiente y además, logró hacer al equipo alemán campeón de Europa, en su tercera final como técnico. Disputada en Atenas, el Hamburgo de Hrubesch y Magath venció a la Juventus de Paolo Rossi y Michel Platini por 1-0. Ernst Happel se convertía así en el primer entrenador de la historia que ganaba la Copa de Europa con dos equipos diferentes (luego le sucederían Ottmar Hitzfeld, Jose Mourinho, Jupp Heynckes y Carlo Ancelotti). El brillante periodo de Happel en Hamburgo se cerró en 1987 con una DFB Pokal. Y regresó a casa.

Entre 1987 y 1992, Happel entrenó al Swarovski Tirol, al que hizo dos veces campeón de Liga y una de Copa. Su último empleo lo tuvo en 1992, como seleccionador austríaco. Pero Happel, el especialista de Copa de Europa, fue un fumador empedernido durante toda su vida y un cáncer de pulmón acabó con su vida el 14 de noviembre de aquel 1992. Se iba así un técnico fundamental en la historia del fútbol europeo. Su legado sigue vivo, sobre todo, gracias a que uno de los más emblemáticos estadios de Europa, el antiguo Prater, lleva su nombre desde el mismo año de su muerte.

Os dejo con un reportaje (en alemán) sobre Happel:

Buen fin de semana.

6 comentarios

  1. Dice ser AreaEstudiantis

    Muy buena la historia de hoy. Gran entrenador sin estridencias. Buen finde!!

    http://areaestudiantis.com

    07 noviembre 2014 | 08:53

  2. Dice ser igesar75

    Un mito de los banquillos que el «gran público» conocemos más por dar nombre al estadio donde «La Roja» cosechó uno de los mayores éxitos de su historia reciente. Hay muchos datos desconocidos y sorprendentes para mí, especialmente el hecho de que entrenara al Sevilla en Segunda. Dado su palmarés y su currículum ya por aquella época, me pregunto de dónde sacaría la pasta el club hispalense (estando en Segunda, con muchísimos menores ingresos que los que pudiera obtener en Primera) para pagarle el sueldo a este señor, a no ser que este rebajara mucho su caché, claro (que también lo dudo….). Aunque también hay que decir que a principios de los 70 la mayor parte de los ingresos se obtenían de la venta de entradas, abonos, etc; los ingresos por derechos televisivos, publicidad, etc, que es la mayoría actualmente, en aquella época eran los menos.

    Su colega y compatriota Max Merkel, mencionado en algún momento del post, sí lo conocía (de oidas/leidas) porque ganó una liga con el Atlético a principios de los 70. Por sus expeditivos métodos de entrenamiento cuasi militares era conocido como «míster Látigo», según contó una vez Adelardo, el capitán, uno de sus entrenamientos «favoritos» consistía en subir todo el graderío del primer anfiteatro del Calderón saltando con los dos pies juntos.

    07 noviembre 2014 | 10:18

  3. Dice ser Loshovic

    Pues confieso que a pesar de su gran palmarés yo sólo conocía al prota de hoy por el nombre del estadio vienés. Ha sido muy interesante conocer su trayectoria.

    07 noviembre 2014 | 11:43

  4. Dice ser Mario

    Es el menos conocidos de los «especialistas» en Copa de Europa, aunque la verdad que la Copa de Europa casi siempre la gana el que más suerte tiene y no el mejor equipo. Para mi el mejor entrenador de la historia es, sin duda: http://goo.gl/o7Pknk

    07 noviembre 2014 | 12:02

  5. Dice ser CowboyZZ

    Buen articulo. Es curioso lo que cambian los tiempos, como los fumadores fumaban en todas partes (yo todavia tuve profes en EGB que fumaban en clase e incluso fue debate en la universidad en los 90)

    El Feyenoord, cuanto tiempo tiempo que no se habla de el como un equipo potente en Europa, algo parecido a equipos como el Racing de Malinas o el Brujas en Belgica.

    09 noviembre 2014 | 19:53

  6. Dice ser ruomalg

    No podía faltar este trotamundos en la galería de entrenadores del blog. Dos veces campeón de Europa con equipos que no son los más punteros de Europa, precisamente. Ni idea de que hubiera entrenado en España, y tampoco sabía que fue seleccionador de Holanda. La verdad es que como muchos supe de él gracias al antiguo Praterstadion (estadio que pude ver por dentro hace ya ocho años), aunque me informé sobre él antes de la victoria de España en la Eurocopa.

    Cowboy, me parece que estás confundiendo al Racing de Malinas con el K.V. Malinas; el que ganó la Recopa en 1988 contra el Ajax (y de paso, la Supercopa de Europa contra el P.S.V.) fue el segundo. En cuanto al primero, su mayor logro fue ser subcampeón liguero hace más de 60 años. Yo también confundí uno con otro durante un buen tiempo (gracias en parte al libro sobre el año 1996 en el mundo del deporte cuyas pegatinas se vendían con El Norte de Castilla). Por otra parte, es verdad que los actuales formatos de competición han perjudicado mucho los intereses de las ligas de calidad media como la belga, en beneficio de las más potentes. Otro equipo que no es ni la sombra de su pasado es el Göteborg, dos veces campeón de la UEFA en la década de los 80, y que a punto estuvo de jugar una final de la Copa de Europa (gran remontada la del Barça con un Pichi Alonso que tuvo su día).

    11 noviembre 2014 | 20:59

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