Hoy voy a hablaros de uno de esos pioneros del fútbol, uno de esos personajes que merece la pena recordar, porque con ellos se explican muy bien los orígenes del deporte rey. Es Arthur Kinnaird, undécimo Lord Kinnaird.
Nacido en Kensington, Londres, el 18 de febrero de 1847 en el seno de una familia aristócrata escocesa, Arthur Kinnaird estudió en los prestigiosos colegios de Cheam y Eton, además de en Cambridge, donde se preparó para hacerse cargo del banco Ransom, Bouverie & Co., propiedad de su familia. Este banco se fusionó con otros hasta crear el Barclays, del que fue director hasta su muerte.
Pero de manera paralela a sus estudios y su ocupación, Lord Kinnaird fue un apasionado del fútbol. Fue futbolista del Wanderers FC y del Old Etonians FC, equipo de ex alumnos de Eton que fue fundado por el propio Lord Kinnaird.
Jugó en todas las demarcaciones (incluida la de portero) y ostenta en la actualidad un récord que aún no ha sido batido: Jugó nueve finales de la FA Cup (debutó en la segunda de la historia), ganando cinco de ellas (tres con los Wanderers y dos con el Old Etonians).
Pero el nombre de Arthur Kinnaird está ligado también a otro hecho: Ostenta el dudoso honor de ser el primer autor de un gol en propia puerta de la historia. Ocurrió el 24 de marzo de 1877, en la final de la FA Cup entre el Wanderers FC y la Universidad de Oxford. Ganaron los primeros 2-1, pero el gol de los universitarios se lo introdujo Lord Kinnaird, en ese momento portero, al dar un paso atrás sin querer e introducirse él mismo y el balón en la portería. Este hecho permaneció oculto hasta un siglo después, cuando una investigación de la FA lo sacó a la luz. Al parecer, Lord Kinnaird, que era miembro de la Federación, se las apañó para que el hecho nunca se supiera y así no ver su reputación dañada.
Por lo demás, os diré que Lord Kinnaird fue una vez internacional, con Escocia (aunque había nacido en Inglaterra, optó por jugar con la selección de su familia), ante Inglaterra, en el segundo partido internacional de la historia. Tenía fama de ser un jugador muy duro y como curiosidad, os contaré que siempre jugaba con pantalón largo y con una gorra azul y blanca.