La de hoy es, para muchos, el mejor diseño de camiseta de todos los tiempos. Es un icono de los 80 y de un fútbol alegre que encandiló a todo el mundo, hasta que un tal Emilio Butragueño se empeñó en desmontarlo. Es la camiseta de Dinamarca del Mundial 86.
Los colores de Dinamarca han sido siempre camiseta roja y pantalón blanco y a la inversa fuera de casa. En 1979, la empresa Hummel (nacida en Hamburgo, Alemania, pero que en 1980 fue comprada por un empresario danés y trasladada al país escandinavo) firmó un contrato con la DBU o Federación Danesa de Fútbol para proveer al equipo nacional de Dinamarca de la ropa deportiva.
El bombazo lo dieron en 1986, con el Mundial de México. Dinamarca presentó un diseño rompedor para la época. Dividieron la camiseta en dos mitades. Una mantenía el rojo original y la otra, un diseño de milrayas rojas sobre fondo blanco, que desde lejos parecía rosa. Todo esto, con las icónicas puntas de flecha de Hummel en los hombros (que junto a un estilizado abejorro son los logos de la firma).
El alegre fútbol de ataque que jugaban los daneses, con Michael Laudrup, Morten Olsen, Preben Elkjaer o Allan Simonsen enamoró a medio mundo. En la primera fase derrotaron a Escocia, Uruguay y a la RFA, exhibiendo un juego arrollador. Pero en octavos, en Querétaro, se encontraron a España y a un Butragueño en su mejor momento. Cayeron 5-1, como recordaréis los que ya habíais nacido o sabréis los que no.
Sea como fuere, ese uniforme (y su versión de segunda equipación, en la que cambiaba el panel rojo por uno blanco), se quedó grabado en el imaginario popular y es un ítem de coleccionista.
Tanto éxito tuvo y tiene esta equipación que Hummel ha vuelto a editarla (junto a otros diseños famosos de la Dinamita Roja), esta vez sin el escudo de la DBU (porque ahora su proveedor es Adidas), para todos aquellos que quieran lucir un trozo de la historia del fútbol de los 80.