Poema que es más bien un relato, y que resuena, por ese clima que crea a la vez cotidiano, evocador y universal, a las prodigiosas narraciones de Richard Ford.
«NIRVANA»
sin mucha elección
y casi sin quererlo,
él era un joven
a bordo de un autobús
que cruzaba Carolina del Norte
rumbo a
algún lugar
y empezó a nevar
y el autobús paró
en un café
sobre las colinas y
los pasajeros
entraron.
él se sentó en el mostrador
con los demás,
pidió y le
trajeron su comida,
que estaba particularmente buena
lo mismo que el café.
La camarera no era
como las mujeres que él
había conocido.
No se hacía la interesante,
un humor natural emanaba
de ella.
El cocinero decía
cosas locas.
El lavacopas,
atrás,
se reía
con una risa
limpia
y placentera.
el joven miraba
la nieve a través de las
ventanas.
Quería quedarse
en ese café
para siempre.
Un curioso sentimiento
lo inundó :
que todo
era
bello
ahí,
que todo permanecería
siempre bello
ahí.
entonces el chofer
avisó a los pasajeros
que ya era tiempo de irse.
el joven
pensó, me voy a quedar
aquí, me voy a quedar aquí.
Pero
se levantó y siguió a
los otros hasta
el autobús.
Encontró su asiento
y miró el café
por la ventanillas.
el autobús arrancó,
dobló una curva,
y fue camino abajo,
alejándose de las colinas.
el joven
miraba
hacia adelante.
Los otros pasajeros
charlabande otras cosas
leían
o
intentaban
dormir.
no se habían dado cuenta
de la magia.
el joven
puso su cabeza
contra el asiento,
cerró los ojos,
fingió
dormir.
Nada quedaba
sólo escuchar el
sonido
del motor,
el sonido de las
ruedas
en la nieve.
Seleccionado y comentado por Hernán Zin.
Si, más bien un relato cortito. Es algo que nos ha pasado a todos, seguramente. Muy realista.ADOPCIONES A MEDIDA: http://busco-perrosdeadopcion.blogspot.com/DIFUSIONES SIN MEDIDA: http://difusionesanimalessinmedida.blogspot.com/Me cae muy bien Hernan Zin
05 abril 2009 | 18:15
Muy guapo el texto. A veces pasa, la belleza de los instantes necesita siempre de un receptor para existir y cuando es un unico receptor entre tanta gente la belleza se rinde a este.
05 abril 2009 | 18:22
hola a todos,un poema simple pero lleno de reflexiones,sobre todo la parte que dice:»no se habían dado cuentade la magia.»Cuantas veces estamos ciegos y nos nos vemos ni nos ven,besotesa,excelente semana…ALE.
05 abril 2009 | 20:28
Bukowski es muy grande. Me ha gustado mucho. Me alegro de que exista este pequeño rincón en este periódico.
05 abril 2009 | 20:59
Es curioso yo soy un fanático de Bukowski y lo considero más poeta que novelista, aun así parece que el mercado editorial ha relegado sus poesías a un segundo plano. Este poema me encanta pero mi preferido es «El pájaro azul». Gracias por la poesía no la conocía.
05 abril 2009 | 22:36
PARA NIRVANA LAS FOTOS DE LA VIUDA EN TETAS EN EL PLAY BOY USA DE ESTE MEShttp://comielotrodia.wordpress.com
06 abril 2009 | 08:50
la naturalidad de sacar un poema de una situación cotidiana, de un instante en cualquier vida «normal», de cuantas veces hemos pensado en quedarnos y sin embargo nos hemos ido, no dando opción a cambiar nuestro destino ¿hay destino?Me ha gustado mucho, otra vez, Hernán.
06 abril 2009 | 10:50
Que heromoso. Hay un nirvana terrenal para cada hombre del mundo. A veces un cáfe, otras un callejón o un salón de clases.No entiendo por que nos encanta huir del paraiso.Tal vez Adán y Eva no fuero expulzados, si no que se sentían demaciado bien para seguir viviendo
04 octubre 2009 | 05:11
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08 noviembre 2009 | 16:42
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08 noviembre 2009 | 16:42
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08 noviembre 2009 | 16:42
Good post!As i was passing by here and i read your post.It’s quite interesting.I will look around for more such post.Thanks for sharing.
19 enero 2010 | 08:39