Pienso en ese abuelo que camina despacio, veintitrés minutos desde su casa a la megasuperficie comercial, atravesando un parque, bordeando un cementerio. En el supermercado de la megasuperficie comercial recorre unos pasillos sabidos de memoria, toma lo que vino a buscar comprobando bien el precio, y espera paciente en la cola hasta llegarle su turno, saluda a la cajera, le entrega el pack de cuatro yogures naturales (la oferta del día), paga a la cajera con monedas, lo lleva justo, hasta los céntimos, y sale después caminando con sus yogures en la mano, y en el paso de cebra freno mi taxi al verle dispuesto a cruzar, pero en esto él mueve su brazo, como tratando de decirme que no, que pase yo mejor, que no me detenga y circule; él no tiene prisa y además le gusta ser cívico con los coches, ayudar en la medida de lo posible. Es un gesto tonto, apenas imperceptible ese de dejar pasar a un coche aunque él tenga preferencia, pero insisto en que no tiene prisa y prefiere no molestar y a la par serle útil a alguien, que alguien le acabe levantando el brazo en señal de agradecimiento: gracias, buen hombre, por dejarme pasar (le di a entender levantando yo también el brazo) . Y me atrevería a decir que se siente orgulloso de ello, que se siente bien consigo mismo, y al pasar mi taxi, si no vienen más coches a los que hacerles lo mismo (pasen, pasen) continuará caminando, cruzando despacio el parque, bordeando el cementerio, con apenas un pack de yogures naturales en la mano, satisfecho por algo que tal vez al resto le pase desapercibido. Y esta noche, después de una cena liviana, abrirá el yogur de la victoria y guardará la tapa con +2 puntos en el sobre de las tapas canjeables.
La relatividad de lo importante
24 comentarios
Los comentarios están cerrados.
Tierno mundo nos perdemos si no estamos atentos.
Buen fin de semana a todos.
13 noviembre 2014 | 22:15
Tierno mundo, sin duda, como tus palabras.
Sin embargo, tu tono es tan melancólico que parece que escucharas nostálgicas canciones mientras escribes. Y para nada lo digo de forma crítica, cada cual se expresa de la forma en que quiere percibir el mundo, pero me pregunto de qué forma lo percibirías con otras «bandas sonoras»…Entonces, quizás tus palabras no expresen sólo ternura y melancolía, y tus mensajes serían más fuertes de lo que ya son.
Quizás tan sólo debieras escribir sonriendo…tal vez te gustaría intentarlo 🙂
¡Buen fin de semana a ti tambíén! ^^
13 noviembre 2014 | 23:45
… pues no tengo yo ganas de que me llegue la jubilación, para dejar de correr, para permitirme el lujo de perder el tiempo… lástima que también llegarán las arrugas, snif!
14 noviembre 2014 | 00:17
Nos gusta ayudar, ser generosos; nuestro ADN profundo es así. Ser amables es poner hierba bajo nuestros cansados pies, ternura en nuestro desconcertado corazón humano, ralentizar nuestra alocada alma, darnos tiempo para ver la belleza en sus detalles íntimos, respirar orgullosos el aire compartido. A veces es un paso de peatones, otras dejar pasar la compra del super antes a aquel que sólo lleva un par de artículos. Todo nuestro quehacer diario está lleno de pequeños grandes momentos, de generosos detalles, de alimentos que como el yogur del anciano son livianos pero muy saludables, devolviéndonos la salud del alma, cicatrizando las heridas de nuestro siempre maltratado yo.
14 noviembre 2014 | 00:32
es muy bonito a la par que peligroso… yo le volveria a invitar amablemente a que cruzase.. xke un amago tonto y puedes acabar atropellandolo o sino el siguiente que pase.
14 noviembre 2014 | 00:37
Si de vez en cuando nos surge el ADN amable, ¿por qué no hacemos el esfuerzo de llevarnos mejor entre todos?
http://lacasadelcomicduendeverde.blogspot.com.es/2014/11/el-sexo-o-la-comida-una-de-manara-con.html
Buen fin de semana
14 noviembre 2014 | 06:41
En general así somos
los abuelos cascarrabias,
gentiles, buenos, amables
hasta que se colma la taza,
Siempre en los paso de cebras
lo mismo, solemos hacer
los que ya no llevamos relojes
el tiempo ya, poco importa.
Y yo lo hago también,
hasta que un impaciente conductor
el claxon le toca a un viejo
que tarda más en cruzar,
que los segundos programados
en casi todos los semáforos,
con los que nuestro Exmo. Alcalde
ha sembrado la ciudad.
Si a un viejo pitorrean
suelo perder los estribos
primero miro al pitón,
con los ojos abiertos y fijos
y si nuestras mirada se cruzan,
con un movimiento de cuello
le suelo decir tantas cosa
que algunos hasta se avergüenzan
y juntando sus dos manos
me suelen pedir perdón,
yo como si fuera un cura
le hago la señal de la cruz
dándole la bendición
aunque lo de, Ego te absolbo…NO
Otros, que de todo hay
me suelen gritar:- Y a ti
qué coño te importa?
Entonces pienso…
en su santa su madre,
en el paciente de su padre
y a toda su ralea,
que le grite a todos ellos
y le digo amablemente,
sin acritud ni aspereces.
Deje de vociferar,
sea un poquitín educado
y márchese usted a la mierda.
14 noviembre 2014 | 07:58
¿..?
14 noviembre 2014 | 08:11
Así leído, queda súper chulo, q entrañable, ese hombre con sus yogurcitos, cediéndote el paso, pensando en ti y en tu posible pasajero, si le ponemos claro de luna d bso dan ganas hasta de mear mermelada, pero no Daniel, no, eso solo ocurre en las peliculas, lo lógico seria encontrarte al mismo hombre con paraguas en mano, tu petado, freno no freno, me da tiempo, justo en mitad del paso d cebra el hombre en cuestión quiere pasar, levanta el paraguas como si fuese Gandalf con su vara, frenas en seco, grita como un puto loco, da unos toquecitos en los faros, tu te cagas en su padre, no le dices mucho mas x edad, aceleras raudo y veloz, miras por el espejo y ese hombre sigue brazos en alto maldiciendo el día q naciste, pq no tiene nada mejor q hacer, salvo gruñir, y quejarse de lo perra q es la vida… Luego el se va al bar a tomarse un chato y ya tiene tema de conversación con los amiguetes…
Pero si, tal y como lo has contado, es mas bonito, mas tierno, se acerca la Navidad, y todo es paz y amor…
Feliz fin de semana de luz y de color.
14 noviembre 2014 | 08:20
Pues apetece hacer como el viejillo.
Feliz fin de semana
14 noviembre 2014 | 09:44
Lo que hace ese abuelo es proteger su vida!, no más!
no arranca su propio motor hasta que la vía esta absolutamente libre, no se fía de sus prótesis, de las suelas de sus zapatos, de sus reacciones y se protege al máximo!.. la pregunta es por qué? para qué?
…lo curiso-penoso es cómo nos aferramos a la vida aunque ésta no tenga nada que ofrecernos, nada, costumbrismo, monotonía, eso en los casos leves, en los severos son sobresaltos, dolor, malas noticias…
…o nos ponemos las pilas o terminamos así!
…en vez de comernos la vida, nos come ella lenta y a cachitos!
..en una ciudad costera del sur, hay un locuelo abuelo súper joven con muchísima luz en los ojos, que vive entre unas rocas, se ha hecho hasta su propia terraza mirador, no sé como dá largas a la poli, pero allí está un año sí y otro también, cual Faulques «el pintor de batallas» de la novela de Pérez Reverte…
o aderezamos la vida o…
empecemos por éste finde por ejemplo!, perdamos muchos de nuestros prejuicios y mostrémonos tal como nos reconocemos por dentro: ansiosos, curiosos, valientes, pelín intrépidos, solo con eso ya estámos ganando una grandiosa batalla a ésta cruel vida!
Sr.al sur de Gomaranto, no se esfuerce usted tanto en mostrarnos su fealda -ayer- y dejénos imaginarlo como se le vé por aquí: un trovador de palacio, en éste caso el palace de dani díaz
manuel, en qué quedamos? lo suyo con maría fue una historía real o fictícia?
…que toda la vida es sueño y los sueños sueños son…
Dani, espabila!, si no cotizas alto te quedas en centimillos solo para joghourt!, dán puntos en los yoghures??????????????
feliz finde!
14 noviembre 2014 | 10:33
K abuelete más tierno !!! Yo me sé de una abuela que » no quiere molestar » pero lleva ya más de 10 años quejándose de que…Ay que malaaaaa estoy…me quedan 4 días…¡ Qué cuatro días más largoooooosssssss ! …Buen finde creo que pasado por agua !!!
14 noviembre 2014 | 11:55
Yo el yogur lo mezclo con avena , y no dejo pasar un coche cuando me toca pasar a mí, lo siento he de escribir mucho aún aunque sea viejo y no me sobra el tiempo.
Clica sobre mi nombre
14 noviembre 2014 | 13:05
Excelente post
14 noviembre 2014 | 13:38
@Nekane: real…
14 noviembre 2014 | 16:10
Me dejó cierta morriña
ese amor desconocido
que pudo ser largo ¡y no!
pero tenía que haber sido.
Hermosa fue aquella noche:
empecé a besar sus pies
y cuando llegué a sus piernas
ya me abrasaba la sed.
Modisqueaba su ombligo
toda su barriga entera
y en el volcán de sus pechos
mis manos hicieron presa.
Le cerré con dos besitos
sus ojos de enamorada
y en la carne de sus labios
una promesa dejaba.
Después la hice toda mia
mientras la luna miraba
su aliento me estremecía
y el tiempo me traicionaba.
¡Qué poco duró la noche,
qué terca la madrugada!
Sólo me quedó el recuerdo
mezclado con la nostalgia.
Feliz finde a todos.
14 noviembre 2014 | 17:08
Esfera Galáctica. Cuaderno de bitácora: El viento procedente del sur, relativamente cálido, hacía que la nieve llegase al suelo prácticamene derretida, una especie de aguanieve que dificultaba moverse por la pradera sin hacer ruido. Los únicos animales que se pusieron a tiro eran una especie de “renos” de mediano tamaño. Cobré una pieza y solicité a la cabo Lilit ayuda para transportarla hasta el campamento base. A nuestra llegada los lobos estaban ya despiertos, aunque silenciosos y recelosos. La cabo Lilit dió de comer a Colmillo Blanco, de sus propias manos, varios trozos de carne de “reno”. El animal parecía haberse encariñado con ella.
No muy lejos de la laguna el homínido yacía inconsciente, Ello facilitó mucho las cosas.
La herida, muy profunda, de un solo orificio, tenía muy mala pinta y no parecía deberse al mordisco de un animal, aunque eso era lo de menos- debió pensar Robbie mientras anestesiaba diligentemente la zona alrededor de la misma con varios pinchazos. Inmediatamente después Nekane la limpió y desinfectó cuidadosamente.
– Hay que suturar y vendar la herida cuanto antes- dijo Nekane al tiempo que respiraba profundamente para tranquilizarse, emocionada ante aquel homínido al que intentaban salvar la vida a toda costa.
– Es mejor que la suturación la haga Christian- indicó Robbie mientras sujetaba con determinación y firmeza a aquel varón de fuerte complexión, rubio pelaje y ojos claros, por si acaso se despertaba.
– ¿Qué vendaje le vas a poner?, -inquirió.
– Un vendaje de cruz, para no dificultar la circulación sanguínea- respondió Nekane.
– Vamos a trasladarlo hasta la nueva choza antes de que despierte. ¿Y la camilla?- preguntó Robbie.
-Aquí está- respondió el androide de Nekane.
– Pues vámonos cuanto antes. Con algo de suerte cuando despierte ya estará en la cama de la choza, calentito.
– ¿Podemos darle agua?
-Claro que sí, sólo le hemos puesto anestesia local en la pierna derecha. Si se despierta es lo primero que hay que hacer, y ofrecerle alimentos. Probablemente ello le hará pensar que somos de una tribu “amiga”.
– Me refiero- matizó Nekane- a si podemos darle agua ahora, ya que ha perdido mucha sangre; agua y algún preparado alimenticio.
– Llegar a la choza que habrá preparado Vanesa puede llevarnos dos horas al menos. No podemos ir deprisa con un herido; de hecho hubiera sido mejor no moverlo de aquí, haber construido una choza aquí, pero en fin, las circunstancias son las que son. Es cuestión de ir muy despacio. Incorporarlo un poco… ¿qué le vas a dar?
Del improvisado bolso, hecho de pleita cosida con tomiza del mismo material empleando una aguja mediana de madera, en las denominadas “prácticas de utensilios de la edad de piedra”, Nekane sacó un pequeño vaso de cerámica que había modelado y cocido ella misma a unos 700ºC, durante los largos dias de aburrida cuarentena en Sharp Island. Ahora lo estaba utilizando, orgullosa, para alimentar a un “hermano galáctico”.
– Es una disolución de glucosa y extractos de frutos de Sharp Island, -indicó Nekane, mientras vaciaba desde una especie de botella hecha de piel sintética el preparado alimenticio.
– En fin, adelante, no tenemos muchas opciones. Cada vez nieva más intensamente, hay que darse prisa -dijo Robbie.
El homínido no llegó a recobrar la consciencia, pero bebió todo el contenido de aquel vaso e incluso, sorprendentemente, empezó a hablar, en sueños, con gran ansiedad. Nekane apoyó la mano en su frente, y la notó cálida a pesar del frío ambiental. Vámonos ya, -indicó, mientras tapaba al homínido con varias pieles sintéticas.
14 noviembre 2014 | 19:44
Yo no iba a ser menos k IKEA:
MUCHAS FELICIDADES FUTURO PAPI !!!! …y ahora más k nunca: Carpe-diem….soy pesada con TU NOVELA..ésta puede esperar…no descuides TU familia k ahora debe ser TU primera prioridad…
15 noviembre 2014 | 11:08
«Ahora que culmina el primer recorrido de corta y miente sobre los restos del estado de bienestar y que el presidente nos anuncia desde fuera de España lo bien que nos va a los españoles con las consecuencias de sus desastres de sastrería, la Junta de Castilla y León culmina la jugada, imitando a la Comunidad de Madrid, y decreta la liberalización de los horarios comerciales en las denominadas zonas de especial afluencia turística. Esta decisión pone en peligro el comercio. Dudo que el gobierno de la comunidad haya hecho bien las cuentas, porque no estoy seguro de que las grandes superficies creen empleo, si se compara el que crean con el que se destruye con su implantación.
Está de moda liberalizar, o sea, eliminar cuantas barreras y cortapisas sean posibles para que la capacidad de acción que tenga cada uno sea la que determine su supervivencia o desaparición en el mercado. Me pregunto si esto no conlleva que el pez grande se coma al chico; si favorecer a los grandes no supone perjudicar a los más débiles y si esto es justo, o sea, si no atenta contra el bien común; si sobrevivirá el individuo a la potencia de la concentración de capitales que tanto abunda -y más que veremos-; si estas decisiones proceden de la libertad y la conciencia recta de nuestros gobernantes, y hasta dónde alcanza la influencia de los lobbys; si en Castilla y León necesitamos centros comerciales abiertos los siete días de la semana; si estamos construyendo –o consintiendo- una sociedad que vive únicamente para que nuestras tarjetas de crédito exuden día a día en un maratón permanente; si el futuro de esta comunidad autónoma se encuentra en dejar todo el espacio posible a los grandes centros comerciales y en la destrucción del comercio de proximidad; si el modelo de sociedad que queremos es el que nos incita a pasar todos los días de la semana en el interior de espacios sin ventanas, construidos para que nadie se escape sin comprar; si el consumismo es el presente que nos sacará de donde estamos y si es el futuro que deseamos para nuestros hijos y nietos, y para el planeta.
No puedo dejar de preguntarme si el modelo de comercio representado por las grandes superficies nos permite comprar con libertad, y nado entre sombras cuando me fijo en la disposición estratégica de los productos, en la rotación cíclica de las secciones, en la música que lo inunda todo, en el uso de la luz y de los colores, en la ausencia de dependientes especializados en las distintas secciones, incluidas las cajas, donde comienza a haber supermercados sin trabajadores que estén al frente de cada una de las cajas registradoras. Dejo en la sombra de la duda, para quien quiera responder, los tipos de contratos que tienen los trabajadores en estas superficies comerciales o el estrés al que están sometidos, que no es algo despreciable.
A tanto liberal de peluquería que abunda por nuestros lares se le ha quedado corto el liberalismo de Popper, fundamentado en la defensa y respeto de la racionalidad y en el diálogo y han cogido por las hojas el rábano de los postmodernos más acérrimos, que defienden a los cuatro vientos la competitividad, la desregulación y la disminución del Estado. El modelo de vida americana saca a las personas de las ciudades para conducirlas en tropel a los grandes centros comerciales y las encierra en grandes edificios. Un tipo de despersonalización que los poderosos nos imponen como si fuera el paradigma de la libertad personal, y es que siempre hay quien disfraza a la sociedad del rebaño con ribetes dorados.
El “liberalismo salvaje” hace que los fuertes se hagan más fuertes, los débiles más débiles y los excluidos más excluidos. Se necesitan reglas de comportamiento y, si fuera necesario, también la intervención de Estado para corregir las desigualdades más intolerables. […] Hemos creado una civilización que ha deparado un progreso material portentoso y explosivo, pero lo que fue economía de mercado ha creado suciedad de mercado”. Son palabras que acabamos de escuchar, pronunciadas por el Papa Francisco.
¿Será que estos liberales, tan católicos ellos, defensores hasta hace poco de cuantas tesis procedían de Roma, considerarán a este Papa como un no cristiano? Se extiende el modo de vida americano, pero habrá que pensar si no tiene los pies de barro como la burbuja inmobiliaria, Lehman Brothers o la economía especulativa».
por Tomás Guillén Vera
Filósofo
Nadar entre las sombras 09 de Octubre de 2013
15 noviembre 2014 | 11:41
Felicidades Dani! Otro escorpio!!! En ti no lo hubiese imaginafo jw je… me hace gracia q aqui en tu columna todo el mundo escriba d lo q quiera a su libre albedrio ja ja
Maniel no m idealice usted ni en la ficcion, la realidad siempre la sipera !
Feliz dia cumpleañero!
Ja ja. T ha despertado la tuna? Jedud! Q gustos os gadtais algun@s!
16 noviembre 2014 | 16:40
@Nekane: No sería posible en el corto espacio de una vida hacer ni siquiera un somero repaso de todas tus virtudes, de toda tu belleza y de todo tu encanto. ¿Cómo idealizarte? ¿Se puede acaso idelizar lo perfecto? ¿Se puede idealizar el mar, el cielo, la montaña, la ilusión de un mundo mejor, el amor, las flores que adornan la verde pradera?. Ni siquiera intentarlo intención tuve; tu realidad como bien dices, cualquier ficción supera. (O sipera, como a ti te gusta más, y que suena mejor).
16 noviembre 2014 | 17:14
Manuel, se está pasando usted!, y de paso me regala las orejas con su bellísima prosa y mejor poesía,
vaya que tengo defectos! y más cuanto más sincera, clara, llana y libre quiero ser, éstos afloran sin piedad alguna y así tiene que ser!,
la perfección NO existe y librennos de que así sea!
usted, creo que,debe de entenderse un poco más a sí mismo, yo desde la lejana distancia que nos separa y la garantía de no haberlo conocido nunca, ni ya supongo sea posible veo muy clarito que usted de quien realmente está enamorado es del ORDENATA y todo loq ue éste aparatito le permite
hay que ser realista! …una vez más
17 noviembre 2014 | 10:18
@Nekane: Cierto, muy cierto… Pero la imperfección cuando forma parte de lo perfecto es perfecta también, es una imperfección «perfecta». Hay otras imperfecciones que son imperfectas, pero no las tuyas, Nekane. Y no es menos cierto que aquí, por menos de un pimiento, desaparecen letras, aparecen otras que no recuerda uno haberlas golpeado…no tengo muy claro que el ORDENATA sea un amigo, más bien parece un enemigo o archienemigo, una especie de Moriarty, del que hay que cuidarse mucho. Más de una vez se ha bebido el café o el whisky, que suelo dejar en el posavasos que tiene al lado, por el teclado…que queda arriba.
17 noviembre 2014 | 14:08
Jubilación. Divino tesoro.
02 diciembre 2014 | 08:58