Braulio, nombre ficticio, quedaba con su amante en un hostal del centro cada jueves por la tarde, que era el día en el que Paula, su mujer, tenía pilates y café posterior con sus amigas. Sin embargo Braulio no alcanzaba a disfrutar plenamente de su amante: cada vez que se acostaban no podía evitar pensar en Paula, su mujer. Del mismo modo, y en una suerte de bucle imposible, cuando hacía el amor con Paula, no podía evitar pensar en su amante. Las dos mujeres, en fin, esposa y amante, le notaban ausente, pero Braulio no podía prescindir de ninguna, ya que en ambas encontraba un extraño equilibrio indivisible. Lo que Braulio no sabía era que Paula, su mujer, después de esas clases de pilates de los jueves, no quedaba en realidad con sus amigas, sino que alargaba las clases con el monitor de pilates en el apartamento de éste. Paula hacía el amor con aquel hombre cada jueves por la tarde, después de las clases, y sin embargo, ella también pensaba en Braulio. Pensaba en su marido aunque de un modo distinto: lo suyo era simple venganza. Paula sabía casi desde el principio que Braulio tenía una amante. Pero en lugar de reprochárselo, optó por investigar a la amante en cuestión. No tardó en comprobar que la amante de Braulio, a su vez, estaba casada con un monitor de pilates. El resto os lo podéis imaginar.
A pesar de todo, extrañamente, se quieren. Paula y Braulio se quieren. O al menos no tienen intención de separarse. Lo sé porque Paula se dejó olvidado el iPad en mi taxi, y no pude evitar ojear sus notas en forma de diario. Luego devolví el iPad en el local de pilates del que la vi salir justo antes de tomar mi taxi. Llamé a la puerta y entregué el iPad al monitor. Como a él también le dé por leer el diario, arderá Troya.
Ya sé que hice mal en leer aquel diario (otra vez). Pero tú me has leído, lo cual te convierte en cómplice subsidiario.
12 noviembre 2014 | 23:31
De qué pasta estamos hechos
que al mismo tiempo que celosos
somos también tan promiscuo?
En el caso de estos cuatro
que hacen intercambian de parejas
a escondida y que para tres
es un angustioso secreto,
que cuando están copulando
cada una con su santo
y cada uno con su santa
ellas piensan en sus amantes
y ellos en sus ”amanatas”
Y cuando hacen el amor
con sus parejas en sus casas,
los cuatro piensan en lo mismo,
ellas piensan en sus maridos
y ellos en su esposas,
Pues… la cosa tiene guasa,
aunque soluciones hay varias
y una ellas podría ser
un reajuste de parejas,
aunque lo de, pensar en lo dejado
pudiera ser que… aflorara
y no serviría de nada.
La mejor solución sería,
que al menos, una vez a la semana,
por ejemplo cada jueves
con las luces encendidas
las dos parejas en cuarteto,
al principio en terreno neutral
por ejemplo en el hostal,
hicieran cama redonda.
Seguro que serían felices,
copulando y al otro u otra viendo,
y poder en ese momento
cambiar de ”jaco” o de jaca
y volver a ”reintercambiar”
cuantas veces ell@s quisieran
y se lo pidiera el cuerpo.
.
13 noviembre 2014 | 06:44
A mí no me líes, si yo te leo es porque estás bien a la vista. Y si yo te veo, te leo.
Y para lío el que tienen todos estos de tu entrada.
Buen día, Daniel.
13 noviembre 2014 | 08:16
que curiosos monumentos a las ideas humanas
13 noviembre 2014 | 08:21
Hiciste mal?, ja,ja eres un cotilla! a tí te leemos porque te expones!, no compares!, ja,ja, pero lo que te inventas, muchas veces, solo lo salva el buen ojo que tiene spara elegir las fotos de enunciado, a mí me encantan!!!
soy de esas de, una imagen vale más que mil palabras…
Ese mundo que describes hoy no es tan real ni abundante como crees y se agradece! por vácuo, por costumbrista por «asumido»…
hay que darle la vuelta a los conceptos de hombre mujer, pero ya! o no dejaremos nunca ese arbitral e inhumano callejón sin salida que nos destroza como parejas y seres humanos…
Braulio era el feo de mi cuadrilla, venía de Durango, excesivamente moreno, pelo risozo y gafas pasta algo culo vaso, pero era picarón y chistoso, además muy amigo de sus amigos, no tenía «futuro» en nuestra cuadrilla pero terminó con la más guapa de su pueblo, luego seguía detrás de las demás con la dichosa «asignatura pendiente», jodé Garci, a las mujeres nos la liaste con aquella peli-progre devolviendonos todos los chavales que no nos consiguieron, ja,ja y se liaban gordas, sin ipods, ni móviles,ni e.mails, ni pasta para pagar los carísimos comienzos de telefónica..
hoy somos chicas majas, casi todas somos todo lo felices que éste mundo cruel nos deja, eso sí creo que nos lo hemos ganado! por buena gente sin más!
…la realidad siempre supera la ficción
ja,ja
13 noviembre 2014 | 09:49
Lo reconozco, soy cómplice. Te leo y a veces, hasta me tomo la libertad de comentar y contar y dejar trocitos de mi vida por aquí. Espero que no profundices, porque podrías escribir una historia, una historia de amor y desamor, de encuentros y desencuentros. Mis «ojeras» dan parra muchas letras.
Por si acaso, feliz día y mejor semana.
13 noviembre 2014 | 10:05
Me encanta convertirme en cómplice, y mas si se trata de estas movidillas de cuernos, lo q ya no llego a entender es eso de estar de pinchitos extras y estar pensando en casa, uy no, eso no se hace, ni antes ni durante ni después.
Feliz jueves.
13 noviembre 2014 | 11:57
@ Nekane:
Yo también que siempre fui
y aun lo sigo siendo,
el más feo de mi pueblo
hace años envié
lo que de nuevo inserto
en este blog de…
……. 1200segundos
El feo.
A mí me llaman, el feo,
desde pequeño en el patio,
todos los días en el recreo,
los chiquillos a mi paso,
a coro gritaban: El feo.
La verdad que cada mañana.
en el baño me peinaba,
yo, al espejo me miraba,
no, me veía tan feo.
Mi madre que me observaba,
que quizás adivinaba,
cuales eran mis pensamientos,
apretándome contra su pecho.
me llamaba: -Tesoro, mi vida,
mi ángel y mi lucero.
Pero después del desayuno,
de camino hacia el colegio,
oíamos decir a los niños:
¡Mamá, mamá! ¡Ese es el feo!
Que mal rato ellas pasaban,
cuando mi madre callada,
fijamente los miraba,
Y pasado unos segundos,
con aquella sonrisa, que
a ella la caracterizaba.
Les decía: – Buenos días señora,
buenos días lucero.
Yo fui creciendo entre gritos,
de los niños del colegio,
que seguían coreando.
-Ahí va, o ahí viene el feo.
Llegada la adolescencia,
el feo seguía siendo.
y tuve yo que aprender,
a tapar mi fealdad,
con capas de simpatías,
y guindas de amabilidad.
Un dulce apetitoso,
hice yo de mí en verdad.
Pero entre mis compañeros,
se me comenzó a llamar:
-El simpático del feo.
Me casé con la más guapa,
de las mozas de mi pueblo.
Porque además de simpatía,
era trabajador y hombre bueno.
Hemos tenido varios hijos,
aunque ustedes no lo crean,
son guapos como su madre,
y simpáticos como yo.
Su padre que siendo viejo
procuro seguir siendo amable,
y cada año…esto más feo,
aunque creía que eso
en mí, ya no sería posible.
http://www.20minutos.es/noticia/379197/0/rufino/barrendero/
Al Sur de Gomaranto. 25.10.2007.
13 noviembre 2014 | 12:09
Nen…esta obsesión tuya con » parejas que se ponen cuernos » es para HACÉRSELO MIRAR…No sé…se me ocurre que tu idolatrado amor Beatriz -en su día- te los pusiera ??? Sino NO se explica…Millás es friolero porque de pequeño pasó frio viviendo en casa de sus padres…lo mismo lo tuyo tiene tb una explicación…Con esto tampoco quiero que te creas que te comparo con el GRAN Millás…otro idolatrado tuyo y al que yo he leído por tus recomendaciones…En fín…eso si: tendremos el placer para diciembre de poder leer -al fin- tu ETERNA NOVELA ???
P.S.: Hoy me ha gustado más TU comment k el post 🙂
P.S.2: 369 de código de seguridad ??? K caxondo !!!
13 noviembre 2014 | 12:47
Ve usted al sur d gomaranto! Yo ninca lo imagine feo! Al contrario! Me alegro mucho por su merecida buena suerte que se que ademas la disfruta y le deseo que por muchos años! Estoy segura que el hecho de que usted mismo no se viese feo le ha dado el valor para no acobardarse y labrarse muchas buenas cualidades!
le deseo de corazon que le continue la buena suerte siempre!
Manuel su redacciom de ayer no me parecio a la altura de como usted escribe, no asi el poema q como siempre fue iejorable! …no creo que la chica le viese mayor! Mi marido tiene justo diez años mas que yo! Y es un chaval ja ja umo realmente es como se ve, o sea como se siente consigo mismo! N
Carpe guapa te doy la razon el post sipera el texto! Ppr mucho! Tia que buen ojo tienes!!!
Bona tarda a tots! Y excusenme escribo fatal en el movil con el teclado tactil
13 noviembre 2014 | 15:33
@Nekane: Tampoco yo imagino a Gomaranto feo, ni mucho menos, sino todo lo contrario. Y a ti te imagino muy hermosa, si me lo permites. Respecto a mi, mi estimada e implacable justiciera, has acertado plenamente, ayer no estaba para nada. De todas formas no es normal acercarse a una chica y darle un beso, así por las buenas… creo que tembló toda… ella 23, yo 33,… no era demasiada la diferencia según pensaba yo entonces….también en eso tienes razón…pero ella pensaba de otra forma diferente…y yo le agradezco todavía hoy el regalo de su amor , aunque fuese sólo el amor de una noche. A veces lo poco es mucho y lo mucho puede ser poco…
13 noviembre 2014 | 18:08
Algún día insertaré una foto,
cuando sepa cómo hacerlo,
en esto del ordenador
yo seré siempre un negado.
No soy mucho de… retratos,
ninguna antigua yo tengo
de cuando era pequeño
y no, porque fuese feo.
Cómo me la iban hacer
si en aquellos tiempos de penurias
no había ni para, medio comer.
Mi físico es parecido
al del Honorable… pujol
sólo que algo más gordito,
un poco menos de pelo
pero, un poquitín más feo.
Se dice por estas tierras,
que feo soy con…avaricia.
Hace años para renovar
el carnet de identidad
subí yo a Gomaranto
”acompañóme” por entonces
mi buen amigo Abelardo,
que Dios lo tenga en su gloria.
Antes de entrar al retratista
para hacerme los retratos
me hizo una proposición,
que el dinero de la foto
lo podíamos gastar
en una botella de Anís del Mono,
que nos la bebiéramos a media,
y que como foto para el carnet
que entregara… la etiqueta.
Menos mal que no le hice caso
el mono habría salido perdiendo
y me habría denunciado.
Un ”poquitirín” de humor,
a pesar de los pesares,
viene bien de vez en cuando.
Para vosotros amigos,
mi respeto y saludos
desde, el Sur de Gomaranto.
13 noviembre 2014 | 19:34
No me parece justo el reparto de nombres ficticios para los personajes de este chismorreo, Simp. Si a él le haces llamar Braulio, lo suyo sería Bernarda, para ella.
13 noviembre 2014 | 19:37
Él por desamor o rutina, ella por venganza. Pero a final de mes que caigan.
Lo mismo que el monitor y la mujer, ¿No? Van haciendo pero a final de mes… pasta.
Me ha gustado mucho este post, siempre he querido saber en qué puñetas piensan los que tienen pareja y se lían con más gente. Lo que no me cuadra es la boba de la mujer, con lo del monitor, porque no se está vengando de él, y está perdiendo el tiempo con el marido de la amante. Cuando ella no lo usa es por algo.
Seguro que la boba del pilates no trabaja y con este memo llega bien a fin de mes.
16 noviembre 2014 | 13:09