Anoche sufrí un accidente. Más bien atropellé algo, no sé exactamente qué o a quién, tal vez fuera un perro, o un jabalí o un niño obeso. Había mucha niebla y yo circulaba con tres usuarios a no más de 110 kms/h por el carril izquierdo de la autopista cuando, de repente, algo se cruzó en una fracción de segundo, como un flashazo. No dio tiempo a distinguirlo con precisión, ni mucho menos a esquivarlo. El caso es que ese algo con cuerpo y piernas, o patas y tal vez pelo (un ser vivo, sin duda) impactó contra el paragolpes de mi taxi, sonó un fuerte impacto ¡PUM! y al instante tuve que controlar el taxi, sujetar bien el volante para evitar chocar después contra la mediana de hormigón.
Cuando al fin conseguí mantener la situación bajo control, reducir la marcha y echarme poco a poco al arcén (venían coches) ya habían transcurrido más de 700 metros desde el impacto. No pude dar marcha atrás (demasiada distancia) ni conseguí distinguir desde ahí cuerpo alguno sobre el asfalto. Los usuarios, por su parte, palidecieron del susto. Yo no tanto: nací pálido.
Dejé a los tres en su destino (muy cerca de allí) y luego volví raudo al lugar de los hechos. Mi sorpresa llegó al no encontrar ni rastro de lo sucedido. La violencia del impacto había sido, sin ninguna duda, mortal de necesidad, pero no había cuerpo. Ni en el arcén, ni en la autopista. Tal vez otro coche lo embistiera también, arrastrándolo lejos, o alguien se detuvo a recogerlo y asistirlo. Ojalá.
La cuestión es que esta noche he dormido como un lirón. Y ahora, tras pensar en ello, entiendo por qué: no conseguí ponerle cara a la víctima, ni vi su cuerpo inerte en el suelo, ni pude distinguir, de ser un perro, su raza o cuidados, o si llevaba un collar con un nombre grabado en la chapa (tal vez «Frosky», o «Toby», los diminutivos duelen más, son más cercanos). De haber conocido tal dato, sin duda, me habría sentido mal, o al menos incómodo pese a no haber podido evitar el impacto. Un atropello siempre genera cierto cargo de conciencia en grado exponencial si se trata de un animal pequeño, o más grande, o doméstico, o peor: una persona. No es lo mismo atropellar a no sabes qué, que a una rata, que a un jabalí, que a un ciervo, que a un gato o perro callejero, que a un gato o perro doméstico, que a un enemigo, que a un hombre anónimo, que a un conocido. Resulta, en cierto modo, absurdo que así suceda (todos ellos son seres vivos, en cualquier caso), pero no podemos evitar tener en cuenta el peso relativo de su alma.
La foto del impacto resultante es real (de esta mañana), y el parte de accidentes sin contrario (a Todo Riesgo con franquicia de 180€), también.
Post dedicado a lo que sea que haya atropellado. Descanse en paz.
17 enero 2012 | 00:02
sería una musa sin depilar lo que aparentemente atropellaste, en realidad un suicidio anunciado, descanse en paz tu pobre musa
17 enero 2012 | 00:10
A ver si va a ser verdad aquello que escribiste hace poco sobre que ahora que eras libre atropellabas «personas, animales y cosas» (La libertad no era esto).
*nota: fotaca.
17 enero 2012 | 00:16
A mi tb me ocurrio algo similar, pero con una diferencia: vi lo que era (una jineta, en este caso).
17 enero 2012 | 00:18
Mira, sin que sirva de precedente, voy a intentar que no te sientas culpable.
Ha sido un jabalí. Seguro, ya te digo que tal y como tú lo has relatado me lo contó mi hija hace unos días que le pasó a una compañera suya en el tramo desde Benavente. Pero aquí la muchacha tiene unas cuantas secuelas y está de baja con un susto tremendo y de los nervios además de los desperfectos del coche, que para el desguace quedó pues con la niebla, el golpetazo hacia la derecha y tal…..
Bueno, que tu tranquilo que mira que ahora te nos traumatizas a lo tonto y a lo bobo y no es plan, jomío, peor hubiese sido si alguno de los ocupantes hubiese sufrido algún daño. Que no ha sido así, que la niebla es muy traicionera,….. dímelo a mí, que en mi zona las nieblas en esta época duran desde el anochecer hasta mediodía siguiente y mi hija con su novio, cuando salen de aquí hacia Ponferrada una vez a la semana (más o menos)hasta que no pegan el toque de llegada no estoy tranquila.
Repito, un bicho, pudiérase un jabalí, pero otro también es posible que se metió en la autopista y ya está. Estos casos están a la orden del día, que lo sepas.
Supongooooo que hoy el post es real, no una invención a la que nos acostumbras. Lo digo porque todo lo que he puesto era en serio. Que hace muchos años yo creí atropellar un perro, en realidad fue un conejo, pero lo pasé fatal de todas las maneras.
Mondaaaaaa, que aquí nos tienes, que tu blandita me ha vuelto a dar el tfn, que de momento lo olvidé, es que mira que no apuntarlo y fiarme siempre de las asociaciones memorísticas!!!!
17 enero 2012 | 00:33
Y te parece poca velocidad a 110 kms/h con MUCHA NIEBLA ??? Si vas sólo pase pero encima «ocupado»…es una temeridad…hay k moderar -todavía más- la velocidad…
Por el golpe del parachoques des de luego k una liebre no era…Y si había tanta niebla NO me creo k al dejar a tus clientes supieras al volver el sitio exacto del » impacto » …Muy mal…no socorrer al bicho «in situ»…pones el triangulo, las luces de emergencia ( o warnigs k le dices tu ) te pones el chaleco fosforito te hubieras pateado los 700m. encima les cobrarías la carrera a tus clientes, no ??? Pesetillo k eres…
P.S.: Todavía tienes ese trasto con franquicia ???
17 enero 2012 | 00:42
Joer taxista de la pista con lo de niño obeso te has pasao bacalao.
Lo de hacer chistes con niños no te pega chato.
Saluditos & a Parla, me se tu cara de memoria por si un día subo
contigo en el taxi no rajar qlogo vas & lo cascas…
17 enero 2012 | 00:43
Opino como Marisa, un jabalí. Y también confirmo lo de las nieblas por nuestra zona…es un horror, ¿verdad Marisa? que hay días que no vemos el sol…y te llevas lo que sea por delante sin quererlo. Aunque ayer nos tocó nieve, y hoy todo el frío del mundo.
En fin, buenas noches y cuidadito a los que vais en carretera todo el día.
17 enero 2012 | 00:55
A mi me atropellaron con 7 años. Casi no lo cuento. Un panda. Estuve 6 meses en la cama. Engordé casi 15 kilos.
17 enero 2012 | 01:09
Definitivamente… el peso de tu alma (relativo o no) es muy diferente del mío.
¿Te quedaste dormido como un lirón? — ¡Diossss, me asustas!
Como pudiste dormir sin saber si era una persona, un jabalí, un fantasma, o lo que fueraaa…algo mandaste por los aires!!! Ayyyy… yo tendría una interminable noche de insomnio con pesadilla incluida.
PD: Lo del niño obeso…de muy mal gusto!
17 enero 2012 | 01:16
Pues según como lo mires Danielin; en mi modesta opinión el alma de un perro, si hubiera o hubiese sido uno, su peso relativo es mucho mayor que el de la tuya y la mía juntas…. (ya sabeis como soy para esto)… y las de todos los ocupantes del taxi en ese momento. Esos si… si fue un perro date por perdonado, has hecho bien en dormir tranquilo. Lo cual no significa que espero que algún día alguien lo pague caro.
17 enero 2012 | 07:45
Un animal pequeño no hubiera ocasionado esos daños en el coche. Coincido en que fue un jabalí,es más, date por satisfecho de haber sobrevivido con tus pasajeros al impacto, pues en mi zona ha habido muchos accidentes mortales a causa de jabalís que se cruzan en la carretera.
Que el peso relativo de su alma es diferente a la de un animal doméstico, no sé decirte. Yo no hubiera podido dormir después de un accidente así. Nunca le he hecho daño a un animal en mi vida (descontando determinados insectos) y me dolería en el alma haber matado a uno, pero me repetiría una y mil veces que la seguridad de los humanos debe considerarse en primer lugar, hasta acallar mis penas.
Buen martes a todo el mundo, fresquito, como debe ser, y por cierto, hoy es San Antonio Abad, patrón de los animales. Que se enciendan las hogueras, a ver si se calienta el ambiente.
17 enero 2012 | 08:08
No miraste dentro del maletero?? Ultimamente te salen cadaveres o suicidas por ahí!!
Si fuera una rata……daria marcha atrás y adelante unas cuantas veces.
Pues si, el alma pesa menos cuando no sabes cuanto pesa su masa corporal. De hecho creo que son directamente proporcionales. Prueba a contar los mosquitos que tienes empotrados en el cristal y acuérdate de alguna noche que dormiste mal por ello.
17 enero 2012 | 08:12
Hay cosas que yo no entiendo,
después de mucho leerte
la verdad que no comprendo
que después de un accidente,
mejor dicho un atropello,
pudieras seguir la marcha
para llevar a tus clientes
con tanta urgencia a, destino.
No es posible, no es verdad,
circular a ciento diez,
unas, ciento ochenta millas por hora,
con niebla, de noche en la obscuridad.
No es posible, no es verdad
que continúes el camino,
sin que auxilio le prestes,
sea perro, gato, jabalís,
o quizás que un niño fuese.
¿Lo de obeso a qué viene??
Y no puede ser verdad
que duermes como un lirón,
porque dices que a la víctima,
cara no puedes ponerle.
Un profesional del taxi,
profesional del volante,
esas cosas no las hace.
O eso ha sido otro mal sueño,
O en este relato nos mientes.
17 enero 2012 | 08:23
¿Alma?
17 enero 2012 | 08:32
Lo del niño obeso ronda el delito, majete.
17 enero 2012 | 09:06
Yo recuerdo ir por la M-45 hace varios años, era por la tarde y había luz de sobra y de repente, apareció un galgo en la carretera. Di un volantazo y casi golpeo al coche que iba en el carril de mi derecha. La persona que iba conmigo me pegó la bronca del siglo, me dijo que ante esas situaciones lo que tenía que hacer era agarrar fuerte el volante y no tratar de esquivar nada….sinceramente no pude ni creo que pudiera a día de hoy dejar de esquivar lo que fuera que estuviera en la carretera (obviamente algo que se viera con vida)…..Da igual si el animal es domestico o no, si tiene nombre o alguien le ha despojado de él….
P.D.: Ni que nos pusieramos de acuerdo para escribir acerca de temas parecidos…
Kazak, el akita inu en Alma de Pollo (a partir de las 10:30)
http://almadepollo.wordpress.com
17 enero 2012 | 09:37
Este post es repetido, gracias por tu esfuerzo.
17 enero 2012 | 10:25
¿Es repetido? @Gema no tenía ni idea….y ¿dónde está el post original?
Казaк, el akita inu en Alma de Pollo
http://almadepollo.wordpress.com/2012/01/17/казак-el-akita-inu/
17 enero 2012 | 10:37
Lo del niño obeso, ha sido de muy muy mal gusto, Dani…
http://cynsalvador.blogspot.com/
17 enero 2012 | 10:37
Se fue con vida, se agazapo en el arcen, o quizas en la cuneta. Quizas era nada mas que un objeto que apartaste de la carretera al darle un golpe.
Mirate el golpe en el taxi, ¿Hay rastro de sangre, de pelo? ¿Algun color diferente?
17 enero 2012 | 10:42
Si hubiera sido un jabalí o un niño obeso habría SANGRE en el parachoques…
Si esperas k te lo cubra el seguro tendrás k hacer denuncia y es una imprudencia seguir la marcha sin comprobar y retirar el supuesto obstáculo por el riesgo k conlleva a crear otro posible accidente…en el taller k te indique el seguro te habran hecho fotos y si no hay sangre lo mismo te dicen k NO te lo cubren por k :
» Fingir la irrupción súbita de un animal en la calzada, que provoca una maniobra brusca del conductor para evitar el atropello, produciéndose una salida de vía, cuando la causa real ha sido un exceso de velocidad, distracción en la conducción, impericia del conductor, encontrarse bajo la influencia del alcohol, u otras causas »
.
…si la foto del post la hiciste después del atropello es MUY RARO k no se vea sangre…claro k lo mismo ya venias del taller y ya lo habías limpiado para no parecer un taxista-gore ( ya lo k te faltaba ) 🙂 🙂 🙂
P.S.: Si no topaste con ningún ser vivo pues RECLAMA a la concesionaria de la autopista k son ellos los k deben pagarte ENTERA la reparación…
P.S.1: AHORA ME CORROE LA CURIOSIDAD DE SABER CUÁNDO HICISTE LA FOTO…
17 enero 2012 | 10:55
Joder k pesados con lo del NIÑO OBESO…se nota k lo pone de » caxondeo » 🙂 🙂 🙂
P.S.: Eso sí no ha habido huevos de poner un niño obeso GITANO…por k ahyyy payyoooo…no lo cuentas…
17 enero 2012 | 10:58
Qué cosas tiene la mente humana, nos preocupamos de cosas de las que no tenemos culpa, pero contradictoriamente podemos seguir tranquilamente con nuestra existencia, aun cometiendo actos hechos con nocturnidad y alevosía. Nos acecha la culpa por atropellar accidentalmente a un zorro, un perro o una ardilla en cualquier carretera secundaria, pero no nos preocupa en absoluto, es mas, en algunos casos nos causa un placer enfermizo, hacer daño a personas a las que queremos causar daño y repito, lo hacemos a sabiendas y teniendo muy claro que es lo que hacemos y porque lo hacemos. Tal vez simplemente sea esa hipocresía que todos destilamos sin pudor, yo desde luego no me preocuparia por atropellar a un animal accidentalmente, tampoco me jactaria de ello en plan sorna, pero estaría agradecido por no haber sufrido yo daños colaterales en mi cuerpecito físico. Queda muy bonito y autentico decir «ayyy…que pena que he atropellado a un ser vivo, que pena de Jabalí, de conejo o de vaca», pero la realidad es que yo pensaría «maldito animal suelto….anda que si me pego el ostión padre y salgo mal parado o no no salgo directamente….me «caguen» en los animalitos del bosque que cruzan las carreteras»….ya ya…soy muy malo…malisimo de la muerte, pero por lo menos no soy hipócrita y desde luego no soy de los que al día siguiente de llorar por el animalito atropellado, intento partir el alma de mi vecino, de mi amante o del tio que esta esperando el autobus.
17 enero 2012 | 11:16
Me alegra muchísimo que el asunto quedase en susto y que tú estés bien, Daniel, que eso es lo principal. Entiendo que te sientas así si no sabes qué te llevaste por delante, pero a mí que soy así de insoportable, me quitaría el sueño saber qué es lo que se me cruzó y atropellé. El desconcierto no me dejaría descansar tranquilo. Es que si no controlo todo me pongo mu nervioso, inaguantable que me parió mi santa madre. Si algo se me escapa, lo llevo fatal. Con todo bajo control respiro mejor.
Afortunadamente nunca pillé a nada ni a nadie, pero es que salvo un rayón en el coche, nunca tuve mayor percance sobre 4 ruedas. La moto ya es harina de otro costal. Algún mojón bueno ya me he metido. El último hace ná y por no despanzurrar a mi gato, que tié narices. Odio los gatos -bueno les odiaba- que a este le tengo aprecio. Muchísimo. Lo recogimos de la calle enano del todo, abandonadito que estaba por las calles de una gran ciudad y ahora es el rey de la casa.
En un principio me hice el duro eh? No te vayas a creer y dije que nanai, que a casa no me lo llevaba ni de coña, pero bueno, qué te voy a contar… Tiran más dos tetas que dos carretas. Cuatro pucheros, un no tienes corazón, cómo vamos a dejarlo aquíiiii?! Nene por favor te lo pidooooo, dos lagrimitas más falsas que en duro de madera y yaaaaa, Lobo derretido y el gatuco pa casa por la puerta grande.
Pues llegaba yo a mi casa en la Infinita una tarde y mis locos bajitos que estaban en el jardín, se pusieron a gritar como posesos al verme llegar a lomos de mi Yamaha. El gatito que está algo agilipollao entre tanta hembra, niño y demás animalejos que tengo en casa -tó hay que decirlo- salió escopeteao y se me cruzó en el caminito que lleva a mi cochera. No iba muy fuerte, pero me tocó hacer un giro brusco para esquivarlo. Resultado: Lobo al suelo después de rodar unos cuantos metros sobre el culitoooooo! Me duele de recordarlo. Menos mal que además de asfalto pillé algo de verde en el rodamiento por er puto suelo, pero vamos que tuve el coxis perjudicao más de un mes. Y el codo todo con una costra de 3 centímetros de projundidad! Cada vez que hacía un esfuerzo con el glúteo -cualquier esfuerzooooo- me pegaba un pinchazo que se me cortaba hasta el ménstruo que no tengo.
La Yamaha, bien gracias, pero a mí me tocó ir a urgencias, porque la doctora que tengo en casa se puso del tripi con toda la sangre que me salía del codooooo y me tocó revisión e ITV de propina, por el gatito de las pelotas. Aún le quiero con locura. Y estoy deseando volver a verlo, que me ha contado mi mamá, que está viviendo el muy cachorrito su primer celo y que tiene a las gatitas de los vecinos entusiasmás! Eso tengo que verlo yoooo con estos ojos. Dos!
Espero que no me venga ningún vecino a reclamarme paternidades gatunas, que con 3 perras, 1 gato, 1 tortuga de kilo y medio loca perdida y guarrísima que se lo come tó, decenas de pececitos tropicales y tres locos bajitos, tengo seres vivos de sobraaaaa!
Un poco de ritmo y a por el martes!
https://www.youtube.com/watch?v=5n9IzlmD58o
17 enero 2012 | 12:22
Seguro que se fue derechito al cielo, con cuerpo y todo.
http://esgarracolchas.blogspot.com/
17 enero 2012 | 13:29
En el Antiguo Egipto, se decia que el ser humana tenia 7 grados de personalidad y entre ellos estaba el «Ba», lo que hace de un ser individual lo que es. Es el concepto más cercano a la actual denominación occidental de alma.
Según Platón el cuerpo es un cadáver que sostiene el alma y la dimensión más importante del ser humano.
Según Aristóteles la mente estaba en el alma y esta muere cuando muere el cuerpo.
Segun la doctrina oficial de la Iglesia católica el alma-energía vital que se va del cuerpo cuando este muere y asciende al cielo o baja al infierno dependiendo de lo que hayas hecho en vida.
Para Leibniz al alma la llama mónada cerrada en sí misma.
Según René Descartes el alma como cosa pensante opuesta a cosa extensa.
Para Inmanuel Kant califica el alma de imposibilidad de aprehender lo absoluto.
En 1908 un médico forense dijo que el alma pesaba 21 gramos.
Para Sigmund Freud el alma existe como la diferencia entre el «yo» y el «super-yo».
Karl Jaspers define el alma como existencialidad.
Actualmente la doctrina oficial científica es que el alma no existe como energía vital y sus funciones las registra el cerebro.
17 enero 2012 | 13:48
igual era un microondas o una bicicleta estática, la conciencia es caprichosa…
17 enero 2012 | 14:13
Buenas tardes a tod@s
Pues,,, viendo la foto yo creo q minimo te cargaste a una cria de hipopotamo,, cacho ostia.
Dormiste bien?? eso es lo q importa q tu conciencia esté trankila…q ya te comes la cabeza bastante con unas cosas y otras,,, q más da lo q te cargases, si somos muchos,,,
Lobo mientras q las paternidades te las pidan los de su especie, vamos bien, malo sería q papa tortuga venga diciendo q su hija tortuguita está preñá de un gato….
Blandito un besazo y mira hoy ha dejado de nevar, tenemos sol.
17 enero 2012 | 15:52
En este video se ve a un perro intentando ayudar a otro perro que es atropellado en al carretera.
https://www.youtube.com/watch?v=3j2L1VonBwM&feature=related
Ya tienes experiencia en el tema, de ti depende tu reacción en el caso de que haya una proxima vez.
La pena que te causa atropellar a un animal u otro, persona, etc, será igual al motivo por ejemplo que nos lleva a querer más a unas personas que a otras, todos tenemos nuestras prioridades, no es que el peso del alma varie, varia en nosotros, habrá quien sienta que los perros, animales, son más infefensos y les produzca mayor pena verles sufrir a ellos que a las personas, esto es así. Cada uno estableze sus prioridades a razón de la educación, experiencias…
17 enero 2012 | 17:08
Yo creo que te has atropellado a ti mismo.. O lo que es peor, atropellaste tu alma.
17 enero 2012 | 17:39
emmmmmmmmmmmm… este post me resulta familiar…..
17 enero 2012 | 17:40
http://youtu.be/deC2uxu0XA4
17 enero 2012 | 18:24
@yonomebajo
me gusta…tu sentido del humor, je, je
17 enero 2012 | 20:00
Llevo unos días que me apetece más comentar las historietas de algunos asiduos de por aquí que las propias del señor blogero. Este hombre esta de un espeso que aburre a las vacas.
De momento no comento nada que tampoco es tanto lo que se pierde.
Saludos.
17 enero 2012 | 20:18
Por las características del impacto, Simp, juraría que atropellaste a algún ejemplar del Pleistoceno.
PD: ¿De qué murió Fraga (que en paz descanse)?
17 enero 2012 | 20:50
Creo que hubieras dormido bien de todas formas.
17 enero 2012 | 21:33
…así te deja hecho polvo. Como para no dormir!
17 enero 2012 | 21:36
Confiesa la verdad,Simpulso.Lo que cuentas de jabalíes o perros atropellados no es creíble.Los atropellos dejas rastro de pelo y sangre.
Te has dado una leche aparcando???
Le-Colère, ¿Mola, ehhhh? guárdala para algún «sabadete». 😉
17 enero 2012 | 22:06
Vaya racha… ¿tu sales a ganar dinero o a perderlo en los talleres?.
Lo del peso relativo del alma, tal cual lo cuentas, cuanto más cercano más duele. Cuanto más lejano menos afecta. Un muerto en El Congo, o diez, dan menos que pensar que un taxista, por ejemplo, que con mala suerte podrías haber sido tu.
18 enero 2012 | 08:18
«Había mucha niebla.»
«`[…]circulaba con tres usuarios a no más de 110 kms/h.»
[…] tralará, vamos aaaa contaaar mentiiiraaas.
24 enero 2012 | 07:21