Casi enteros Casi enteros

Casi enteros: un blog sobre los medios de comunicación, la publicidad, su papel en la financiación de los medios, la investigación y otros temas relacionados con todo esto

Entradas etiquetadas como ‘Samsung’

El mejor resumen del año está en Twitter

Cuando se acerca el final de cada año parece llegado el momento de hacer balance. ¿Cuáles han sido los acontecimientos más relevantes de 2014?

Hasta hace pocos años habríamos tenido que echar mano de la hemeroteca o de aquel amigo que tiene una memoria de elefante (y que, a pesar de todo, siempre olvidaba alguno de los acontecimientos clave).

Ahora no. Ahora Twitter nos lo da hecho: basta mirar qué temas han sido los más citados, los que han sido objeto de más tuits o los más retuiteados. Es más: hay quién dice que nos ofrece su tradicional resumen del año. Ahora ya no se necesitan ni diez años para crear tradiciones.

Si hacemos caso de Twitter, el evento que ha generado más conversación (no ya este año, ¡en toda la historia!) es el Campeonato Mundial de Fútbol de Brasil. Nada menos que 672 millones de tuits. No quiero ni pensar lo que sería esto si el fútbol llegara algún día a interesar en Estados Unidos, el país más tuitero.

En España también han sido eventos relacionados con el fútbol los que han generado más conversaciones en Twitter. ¡Y eso que se perdió la oportunidad de que la Roja fuera avanzando fases en el Mundial!

Después de seis acontecimientos futbolísticos, el evento más importante en España fue la proclamación del Rey Felipe VI. A continuación la entrega de los Premios Goya.

Ni la crisis, ni la eclosión de Podemos, ni las dimisiones del Rey Juan Carlos, Rubalcaba, Gallardón o Mato, ni las elecciones europeas…nada de esto tiene la suficiente fuerza para meterse entre los diez acontecimientos más importantes. El fútbol copa ocho de los diez primeros lugares.

En televisión, además del fútbol, los programas que tienen más repercusión en Twitter son los realities: Mujeres y hombres y viceversa, Tu cara me suena, La Voz Kids, Gran Hermano o Top Chefs.

El tuit más retuiteado, con casi tres millones y medio de retuits, fue el selfie (patrocinado por Samsung) de Ellen Degeneres rodeada de famosos en la entrega de los Oscars.

El ébola, el rapto de las niñas nigerianas, el Nobel a la joven Malala, el reto del cubo de agua helada, el 25 aniversario de la caída del Muro de Berlín, la desaparición del vuelo  MH17 de Malaysian Airlines son también temas que han sido tratados con asiduidad en la red social de las conversaciones.

Si yo tuviera que hacer mi propio resumen, o si echara mano de mi amigo de memoria de elefante, creo que destacaría algunos acontecimientos muy diferentes. Pero esto es, dicen lo más importante porque es de lo que más se ha hablado en el mundo, o en España en su caso.

Quizá otro día.

Un libro lleno de marcas

Hace un par de semanas acabé de leer El mapa y el territorio, la última novel de Michel Houllebecq. Me encantó; especialmente, como me había anunciado Eduardo Vázquez en un tuit, por el giro que da en la segunda mitad.

He leído hace poco que la autorreferencia es postmoderna. Si fuera así esta novela es postmoderna. Al menos tan postmoderna como la segunda parte de El Quijote.

Pero no es de eso de lo que quería hablar hoy, sino de algo mucho más próximo a la temática de este blog: El mapa y el territorio es un libro lleno de marcas. Desde los propios mapas a los que se hace referencia en el título que son, por supuesto, mapas Michelin. El protagonista se mueve casi siempre en un Mercedes.

Al comienzo del libro bebe una Budweisser, pero en otros momentos toma una cerveza más cercana, una Stella Artois, aunque también personajes secundarios en el pueblo, pueden beber una Picon. Compra en el supermercado Casino, echa gasolina en Shell. Cuando viaja en avión sufre las incomodidades de Ryanair y reflexiona sobre la importancia que esta línea aérea ha tenido para generar el atractivo turístico de algunas ciudades con pequeños aeropuertos. (Quizá los de Castellón y Ciudad Real se construyeron con ese fin, pero Ryanair no se fijó en ellas). Uno de los últimos cuadros del protagonista pone frente a frente a los fundadores de Microsoft y Apple. El televisor puede ser un Panasonic o el móvil un Samsung. Y así. Las marcas aparecen con total naturalidad.

Recuerdo que en los primeros años de este siglo tuvo bastante repercusión en los medios relacionados con la publicidad la publicación de una novela de Fay Weldon que se desarrollaba en la joyería Bulgari. Parecía no sólo una novedad sino todo un descubrimiento para las marcas. Yo recordaba entonces que la mayor parte de los personajes de Graham Green bebían JB.

En la última  Directiva Europea de Televisión si Fronteras se ha suavizado la prohibición del product placement en televisión, algo a lo que en España no se hizo mucho caso y que además tenía poco sentido. Las marcas están presentes en nuestras vidas y evitarlas produce una sensación muy artificial.

Hace ya más de quince años, cuando trabajábamos para Renault, ayudamos a que el lanzamiento del Renault Scenic fuera brillante introduciendo el coche en la serie Médico de familia. Para ello hubo que negociar con Supernovelty, de la productora Globomedia. La aportación de Renault tenía que considerarse apoyo a la producción. Lo curioso era que el anterior coche de Nacho Martín (el personaje que interpretaba Emilio Aragón en la serie) también era un Renault, un coche de producción, y hubo que ingeniárselas con los guionistas para que desapareciera sin averiarse. Todo este caso está recogido en el libro de la doctora Cristina del Pino sobre product placement.

Para cumplir la ley habría sido necesario utilizar un coche sin marca, poner en la mesa del desayuno una leche o unas magdalenas sin marca, que la marca del frigorífico o el móvil no fueran reconocibles y así sucesivamente. Nada podría ser más artificial.

Recientemente Asunción Escribano ha publicado un libro sobre las relaciones entre Literatura y publicidad. pero esa es otra historia.