O las campanadas.
Una vez más, la mayoría de los telespectadores españoles eligió terminar el año viendo las campanadas de la Puerta del Sol de Madrid en La Primera.
Como casi cada año, La Primera se convirtió en la líder de la semana que incluye el 31 de diciembre. Hace unos años esto no era excepcional. Ahora lo es cualquier cosa que se separe del liderazgo de Tele 5. A lo largo de 2007 la más italiana de nuestras cadenas (la de Berlusconi, Vasile, Carullo…) sólo lo cedió en tres ocasiones, y sólo en una a La Primera.
Bueno, pues la primera semana del año La Primera fue líder con un 18,6% de share, siete décimas por encima del resultado de Tele 5.
En este blog vamos a ver muchas veces análisis semanales de la audiencia de televisión. Este año toca seguir la pista a los líderes, para ver en cuántas ocasiones son capaces de superar el 20% de share (el porcentaje de todos los minutos de consumo de televisión que los espectadores dedican a una cadena).
Al haber cada vez más cadenas de televisión compitiendo por el tiempo de los espectadores, cada vez será más difícil que una de ellas consiga una parte importante. Se trata del fenómeno de la fragmentación, que avanza poco a poco, muy poco a poco, en nuestro mercado televisivo.
En 2006 entre las tres grandes cadenas solían conseguir un share del orden del 56/57%; en 2007 las cifras se fueron reordenando para terminar en el entorno del 53/54%. Nada grave todavía, pero sí todo un síntoma de la dirección del mercado de las audiencias. A cambio el conjunto de los canales temáticos (muchos y muy diversos) han ido subiendo a lo largo del año desde un 9% hasta un 11%, que en ocasiones especiales llegó a superar el 12%.
Volvamos a las campanadas de fin de año, que en algún sentido son también las “campañadas”, los spots de los que más se habla, que el público espera y comenta y uno de los pocos momentos del año que conservan el sabor tradicional de hace tiempo. Aquí es curioso que en esos momentos que tienen un cierto carácter institucional, los espectadores vuelven la vista a La Primera, su vieja televisión de toda la vida.
Y esos, los de La Primera, son los spots que la gente espera y comenta. Este año tuvimos el de La Caixa, el de Coca Cola… pero también unas sobreimpresiones (de Sanitas y de…) un formato innovador que compartía pantalla con el reloj de la Puerta del Sol de Madrid. Un formato que seguro que se discutirá en el mercado publicitario: la audiencia nominal registrada por TNS, una de las más elevadas del año, ¿no estaría en ese momento pensando en otra cosa, atareada en la ingestión de las tradicionales uvas? En cualquier caso, la repercusión de cualquier cosa que se haga alrededor de las campanadas de La Primera siempre es mayor que la mera audiencia medida por TNS.
La prueba, este post y otros muchos artículos en diversos medios.
