La guerra fría que ganan los violentos

Por Maribel Maseda Maribel Maseda 2

Naciones Unidas asienta la definición de violencia de género sobre la necesidad de diferenciar otro tipo de violencia de aquella que se ejerce sobre individuos o grupos en base a su género. Partiendo de esta premisa, es innegable que la violencia que se ejerce sobre la mujer por el hecho de serlo es abrumadoramente mayor que la que se ejerce sobre el hombre por el hecho de serlo.

La violencia no sólo afecta a las mujeres, sino a toda la sociedad. Imagen de TrasTando.

La violencia no sólo afecta a las mujeres, sino a toda la sociedad. Imagen de TrasTando.

 

Pero cualquier tipo de violencia es condenable y aquellos que se mantienen en silencio ante ella es evidente que no comprenden la magnitud del problema y la implicación que tiene su silencio o  negación de la realidad . Establecida esta, al igual que ocurre con otros acontecimientos relevantes para la sociedad en general y para determinados grupos de riesgo en particular, afortunadamente se crearon asociaciones que valorando el nivel de injusticia o impunidad, el daño causado y sus propios recursos, a veces solo morales, deciden aportar, ayudar, defender, en la medida de sus posibilidades, a quienes consideran en situación de riesgo. De este modo, se pretende que ningún individuo se sienta apartado de la sociedad y amparado en los derechos humanos, no se sienta desprotegido por ella. Las ssociaciones no nacieron para atacarse ni para separarse del resto de la sociedad. Porque la violencia de género no se crea exclusivamente por el daño del violento, en este caso, hacia la mujer, sino también por otras personas que ejercen otro tipo de agresión: la de la injuria, la de la negación, la del silencio, que se extiende también al hombre.

Negar la realidad contundente de la violencia contra la mujer aduciendo que estas también atacan al hombre abusando de su situación en los divorcios, no solo es mezclar situaciones que siendo reales, no tienen nada que ver la una con la otra; es dejar constancia de que para trabajar a favor de los derechos humanos, hay que ser altruista, objetivo, carecer de prejuicios y ser capaz de dejar a un lado sus propias experiencias personales.  Teniendo en cuenta que el almacén de experiencias se incrementa según se va viviendo, esto último requiere una dosis elevada de altruismo y sentido de la justicia. Por otra parte, aprovechar un delito contra los derechos humanos para sacar a relucir la propia ira, el rencor, la necesidad de revancha, etc., pone en evidencia una vez más que no todas las personas son capaces de vivir su vida y atender además, las necesidades de otros que ni tan siquiera conoce. Eso se llama generosidad.

Acusar y denunciar falsamente a los hombres de malos tratos, abusos y violaciones debe considerarse también como agresión. Estas mujeres lejos de comprender el problema vergonzoso que resulta el maltrato y la violación para la sociedad, no para la víctima del abuso, se creen en el derecho de usar del amparo de la ley por ser mujer, como si por ser mujer ese derecho naciera con ellas. La ley ampara o debe hacerlo, al conjunto de la sociedad y ampara en el caso del que estamos hablando a la mujer víctima de malos tratos o abusos. No a la mujer por serlo. Esto desequilibraría las relaciones humanas al igual que las desequilibra la violencia de género. Por otro lado, cada vez que una mujer miente sobre un tema tan denigrante para la sociedad, asienta el precedente de que ‘la mujer’ es capaz de mentir. Y esto repercutirá muy nocivamente en la mujer que realmente ha sido agredida y que deberá pasar un filtro de preguntas y cuestionamientos dolorosos para esclarecer la veracidad o no de su agresión. Igualmente, asienta el precedente de que ‘el hombre’ es un violador.  Y las relaciones entre ambos podrían verse afectadas por la desconfianza en lo que todos entendemos muy bien hablando de ‘pagar justos por pecadores’.

La verdad es que hay muchas mujeres que sufren y han sufrido malos tratos y abusos. Que hay muchos hombres que han maltratado y violado. Pero hay muchas más mujeres que no han sido víctimas y muchos más hombres que no son verdugos. Y todos los que no han sido ni una cosa ni otra, no deberían por ello, sentir que las agresiones no tienen que ver con ellos. Porque no lo olvidemos, ajenos a esta guerra fría que poco a poco se van asentando entre hombres y mujeres, el maltratador continua integrado en la sociedad relacionándose sin una marca que le identifique como tal.  Entre la guerra fría que se provoca injustificadamente, acaba por olvidarse al verdadero  causante de tanto desorden: el maltratador, que asume, además, en el silencio de muchos y muchas, un permiso oculto para ejercer su violencia.

Violencia de género no es una guerra entre hombres y mujeres. Y el maltratador, el violador, el abusador, no debe poseer tal poder y protagonismo que acabe por sentirse un héroe que goza de impunidad moral.

No nos dejemos manipular por la persona violenta, no le concedamos poder o razón en base a las propias experiencias que aún siendo injustas, no por ello se igualan a lo que sufre una persona violada, golpeada, secuestrada y que mayoritariamente, es mujer. No permitamos que la persona violenta sienta que cada vez que se pone de manifiesto las diferencias entre hombres y mujeres se le concede el permiso para agredir. El agresor, el violento, nada tiene que ver con los hombres y mujeres que se relacionan sanamente, tengan mejor o peor suerte con sus relaciones. No lo olvidemos: por las diferencias crecemos, no rivalizamos, somos capaces de convivir de manera justa.

 

7 comentarios

  1. Dice ser Jorogete

    «es innegable que la violencia que se ejerce sobre la mujer por el hecho de serlo es abrumadoramente mayor que la que se ejerce sobre el hombre por el hecho de serlo.»
    Eso no deja de ser una opinion mas que discutible.

    «Violencia de género no es una guerra entre hombres y mujeres.»
    Cierto. Asi deberia ser.
    Ahora vete y explicaselo a todo el lobby feminazi. A todo ese conjunto de organismos oficiales y asociaciones apesebradas que luchan para conseguir normas, usos y leyes que beneficien exlusivamente a la mujer y marginen sistematicamente al hombre.
    Explicaselo tambien a los legisladores que crean y jueces que aplican, leyes por las cuales el mismo acto se castiga de forma diferente segun el sexo del autor y victima.
    etc.
    etc.

    08 octubre 2014 | 13:05

  2. Dice ser panchenko

    jorojete eres un verdadero cerdo fachista, y lo que hay que combatir estimado oinc… oinc… es la violencia que es estado fachista ejerce contra la mujer empezando por quitarle el derecho que tiene la mujer sobre su propio cuerpo. pero que se podia esperar de quienes te representan a ti tan perfectamente… algo que el presidente zapatero no lo hubiese permitido jamas…

    08 octubre 2014 | 16:43

  3. Dice ser elnotas

    Porque cuando una mujer pega a un hombre no es violencia de genero?
    Porque la presuncion de inocencia no sirve para un hombre?
    Porque hay cuotas para mujeres en sectores de mayor presencia masculina?
    Porque NO hay cuotas para hombres en sectores de mayor presencia femenina?
    Porque las mujeres quieren cuotas de jefes pero no de mineria, fontaneria, electricistas…

    Lo llaman igualdad y no lo es.

    08 octubre 2014 | 23:24

  4. Dice ser Radagast

    Sinceramente, no hay por donde coger lo que has escrito. En este artículo reflejas que hay violencia en ambos sentidos, pero luego sin embargo señalas que al haber más casos de violencia desde el hombre hacia la mujer (debes informarte mejor y procurar no manipular ni mentir). También te dedicas a despotricar poniendo al género masculino como maltratador, acosador, manipulador y violador y olvidas que también hay muchas mujeres maltratadoras, acosadoras, manipuladoras y violadoras.

    Al medir los mismos hechos con distinto rasero cometes el mismo error que han hecho los legisladores al promover una aberración legal contra el hombre por el mero hecho de serlo, una aberración que se llama Ley Integral de Violencia de Género, claramente inconstitucional y que prejuzga a todos los hombres por el mero hecho de ser hombres. Si en vez de la búsqueda del voto fácil interesase resolver el asunto de los malos tratos se habría hecho una ley en condiciones, que básicamente sería la actual con más medios y obviamente eliminando el papel de víctima y de presunción de veracidad que se le concede a la mujer y el papel de maltratador y presunción de culpabilidad que se le otorga al hombre.

    Por último, señalar que la «guerra fría» a la que te refieres no se está implantando ella solita son causa alguna. Tal vez la injusticia de las leyes, la desigualdad que crean las leyes «de igualdad», los cupos para mandar, los beneficios, las ayudas sólo para una parte…hayan contribuído a esta guerra fría.

    09 octubre 2014 | 08:25

  5. Dice ser kamar

    panchenko, en el momento en que descalificas a una persona por su opinión, estás demostrando ser una persona inculta (además de por tu ortografía). Por cierto, no hay nada más fascista que no respetar las opiniones de los demás. No se puede exigir respeto faltándolo.

    09 octubre 2014 | 08:41

  6. Dice ser Radagast

    Parece que mi comentario incomoda. Pues nada, nos saltamos a la torera la Constitución y tragamos con lo que sea. Digamos lo que la autora quiere oír:

    ¡¡Viva el feminismo, viva la «igualdad», los hombres son los culpables de todo, discriminación para el hombre!!

    09 octubre 2014 | 11:02

  7. Dice ser Talcual

    Radagast…No tienes ni idea,sólo mucha mala leche…pareces algo frustrado…
    No sé si los escritos tienen nivel en este blog, lo que está claro es que no hay un
    foro interesante ni parece que pueda haberlo.

    09 octubre 2014 | 23:28

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