Se nos ve el plumero Se nos ve el plumero

"La libertad produce monstruos, pero la falta de libertad produce infinitamente más monstruos"

Por Machado nos molieron a palos

En plena dictadura (el 20-F-1966), el homenaje a Machado en Baeza se convirtió en una batalla campal. El historiador Gabriel Jackson me ha inspirado para que, aunque sea algo anecdótico, les cuente lo que nos pasó, hace hoy 45 años, por querer rendir homenaje a don Antonio Machado.

Busto de Machado, obra de Pablo Serrano en 1966, que viajó a Baeza escondido en un Citroen "dos caballos" del arquitecto Fernando Ramón.

En Navidad de 1965, no había cumplido yo los 19 años, era delegado de curso en Arquitectura, proclive a meterme en lios y posiblemente aún no estaba «fichado» por la Policía. Quizás por esto último, fui captado por unos colegas del Colegio Mayor Santa María de Europa (del SEU, aunque ellos eran bastante rojos) quienes me entregaron un montón de papeletas para una rifa, que yo debía vender con mucha cautela a «gente de confianza» por un módico precio.

El dinero obtenido iba destinado a una causa benéfica  y, como más tarde supe, bastante arriesgada. Tratábamos de erosionar a la Dictadura (que «estaba a punto de caer», me decían) reivindicando pacíficamente a un gran poeta que no era precisamente del gusto del dictador.

Manuel Fraga Iribarne (fundador y presidente de honor del PP) era entonces ministro de Información y Turismo de Franco, preparaba una Ley de Prensa aperturista y presumía de que el Régimen prometía ciera manga ancha en materia de libertad de expresión para quedar bien con el extranjero.

Era el momento de «poner a la Dictadura de Franco frente a sus contradicciones internas», me decían quienes me prestaban esos libros prohibidos que jamás había visto yo en la biblioteca de La Salle de AlmeríaFundamentos de Filosofía» de Politzer, «Qué hacer» de Lenin, «El 18 de Brumario» de Carlos Marx, etc.).

El historiador Gabriel Jackson y un servidor sujetando el poster de Miró (1966) para hacerle una foto esta tarde en el jardín de mi casa.

Los jugadores de la rifa optaban a una reproducción bastante pobre del Guernica de Picasso, a un libro titulado «La segunda resistencia» (no recuerdo el autor, aunque sería un seudónimo de los de Ruedo Ibérico) y, lo más importante para mí, un disco maravilloso (un LP o Long Play) con el poster de Miró en la cubierta y con los mejores poemas de Machado grabados (gratis, claro) nada menos que por Fernando Fernán Gómez, Fernando Rey y Paco Rabal, quienes le echaron valor para hacerlo porque sus voces eran facilmente reconocibles.

Yo no gané ningún premio en la rifa pero, por los servicios prestados, Jesús Vicente Chamorro, miembro del Comité organizador de lo que llamábamos pacíficamente «Paseos con Antonio Machado» (y que era cuñado de Enrique Carbajosa, mi vecino de cuarto), me regaló el disco.

Casi me lo aprendí de memoria y lo guardé como oro en paño hasta que desapareció en alguna de las multiples mudanzas que hice a la Universidad de Barcelona, a la Universidad de Harvard o a Nueva York.

Ojalá pudiera encontrar una copia para que mis hijos pudieran oir con fruición aquellos poemas que me ponían la carne de gallina y humedecían mis ojos. (Si alguien lo encuentra que me avise, por favor).

En la portada del LP está la obra que Joan Miró hizo (también gratis) para contribuir al Homenaje a Machado.


Poster de Joan Miró para el Homenaje a Machado en Baeza (Jaen) el 20 de febrero de 1966.

Encontré este poster recientemente, cuando me atreví a ordenar los papeles de mi hermana, que falleció en trágico accidente hace ya tres años. Me emocionó tanto el recuerdo de aquel poster que planché sus arrugas de 45 años, le puse un marco y lo colgué, en lugar de honor, en la entrada de mi casa.

Gabriel Jackson, que está pasando unos días en casa con nosotros (gracias a un Congreso sobre Joaquín Costa y al documental que ha hecho con Angel Viñas titulado «Ciudadano Negrín», que fue candidato a un Goya) reparó ayer en el poster de Miró y me preguntó por su significado. Ante tamaña provocación, no tuve más remedio que contarle esta historia, con pelos y señales, durante todo el desayuno.

El maestro me halagó con su atención y, con su vicio por los documentos escritos, el autor de «La República Española y la Guerra Civil» (1965), «Civilización y Barbarie», «Mozart«, «La España Medieval«, «Juan Negrín», etc., etc., me dijo que estas cosas hay que contarlas y dejar constancia de ellas para que no se olvide lo que fue la Dictadura de Franco. Sobretodo ahora que una parte de la derecha trata de reinvindicar la figura del dictador, que fue un asesino cruel y despiadado, y lo quieren presentar casi como una hermanita de la caridad.

Manifestaciones pacíficas como las recientes de los egipcios en El Cairo (que vemos hoy con envidia retrospectiva) eran impensables en la España de Franco. No había libertad de expresión ni de reunión ni de manifestación.

Naturalmente, en aquellos años sesenta había bastantes manifestaciones (sobredoto de estudiantes) pero se disolvían violentamente (con un montón de heridos y detenidos) y sin contemplaciones. La de Baeza fue una de ellas. Los «grisis» de Franco, porra en mano, y procedentes de varias provincias andaluzas, nos impidieron depositar la cabeza en bronce del poeta andaluz/soriano en el monumento que habíamos previsto para ello, en un lugar alto y precioso de Baeza (Jaen) con vistas al valle.

Admiradores de Machado (un "santo laico", dice hoy El País en su pag. 34) siguen preregrinando a su tumba en Francia. (Foto de Consuelo Bautista)

Yo era entonces un mindundi (más que ahora) y solo tenía información parcial de lo que estábamos tramando, con bastante secretismo, en visperas ya del 27 anuiversario de la muerte del poeta en el exilio. Por eso, quizás, me sorprendió tanto cómo se desarrollaron los hechos que cuento ahora, según lo permite mi memoria, tan selectiva como todas.

Todo se hizo tan clandestino como si se tratara del soñado sindicato democrático de estudiantes (que luego llamamos el SDEUM).

Los mayores me destinaron, como encargado, enlace o algo así, a uno de los autobuses que debía llevarnos desde Madrid hasta Baeza por las carreteras de entonces. Fue el premio por haber vendido tantas papeletas de la rifa, creo yo.

Salimos de Madrid, bien abrigados y con un pelín de miedo en el cuerpo, el 19 de febrero por la noche. Poco antes del amanecer del 20 de febrero de 1966, estábamos ya entrando en el valle desde el que se atisbaba, allá arriba, en todo lo alto, lo que podría ser la silueta borrosa y aún oscura de la imponente ciudad de Baeza, que acogió a don Antonio Machado como profesor de francés.

Ibamos contentos como unas pascuas, después de haber dado algunas cabezadas, y nos despertamos con un cosquilleo de emoción, al acercanos al lugar del homenaje sin haber sufrido ningún percance político ni policial. Nos dábamos ánimos y/o espantábamos el miedo -¡cómo no!- cantando. Entonces se decía:

«Cuando el español canta, está jodido o algo le pasa»

Las canciones republicanas de rigor («¡Ay Carmela!», «Si los curas y monjas supieran…», «Cuando canta el gallo negro…», etc, etc.) sonaban, sin orden ni concierto, en aquel oasis de libertad rodante, en aquel autobús cargado de hombres y mujeres, unos demócratas, otros aún partidarios de la dictadura del proletariado, todos antifranquistas ilusionados, arrobados por la adrenalina del peligro, de todas las edades y clases sociales, con trencas gruesas, barbas descuidadas y pelos largos, pero también con respetables calvas de doctos intelectuales y artistas, armados con largas bufandas y abrigos de postín.

Me recordaba las excursiones del colegio La Salle, claro que con otras canciones más pías («Vamos a contar mentiras», «¡Oh! buen Jesús», «Montañas nevadas». «Para ser conductor de primera«, etc.) y … naturalmente autorizadas por el «bando franquista«.

Nuestro conductor también debía estar en el ajo, pero no las tenía todas consigo pues, cuando arreciaban las canciones del «bando republicano», me miraba de reojo y movía la cabeza como diciendo: «Esta gente no sabe donde se mete«.

Lo supimos, en efecto, (¡vaya si lo supimos!) al tomar una curva con cambio de rasante. Allí nos esperaba, al alba, un coche de la Guardia Civil (podría ser un Jeep o algo así). Los números, con tricornio, subfusil y largo capote de monte, no eran precisamente los de Tráfico. Nos dieron el alto y, como está mandado, paramos en autobús en seco y abrimos la puerta. Preguntaron quién era el jefe de la expedición. Instintivamente, sin querer, el conductor me delató al mirarme.

Yo iba sentado en primera fila, cerca del conductor. Les dije a los guardias -con mi mejor vocecita de ex congregante mariano o de Caperucita Roja, eso sí, Roja- que allí no había ningún jefe y que simplemente íbamos de excursión a Baeza.

«Con que a Baeza, ¿eh?», me espetó, con tono algo sarcástico, el que parecía ser jefe de los guardias. «Tenemos órdenes tajantes de que para ir a Baeza sólo puede pasar el vehículo con el conductor. Así es que ya pueden dar la vuelta y marcharse por donde han venido».

Les pedí un momento para hablar con los «pasajeros», me fui a la mitad de autobus y convinimos en que lo mejor sería bajarnos, que se marchara el autobús y esperar a los siguientes autobuses que venían de Madrid, y de otros lugares de España, para ver qué hacíamos. Así lo hicimos. El autobús se fue hacia Baeza con el conductor a bordo y nadie más.

¡Jo! ¡Qué frio hacía en ese valle, a pocos kilometros de Baeza, al amanecer del día, el 20 de febrero de 1966!

Sin que nadie dijera nada, ya sin la protección del autobús, comenzamos a caminar muy despacio, espontáneamente, como el que reparte migajas de pan a las palomas, por la cuneta de la carretera y por el campo a través cuando había curvas.  Los guardias civiles no nos dijeron nada. Cumplían órdenes precisas: Los vehículos pasan sólo con el conductor. Se ve que no tenían instrucciones claras para el caso de que los «pasajeros» del bus decidieran seguir el camino andando.

Cartas y objetos en el buzón de Antonio Machado. (Foto de C. Bautista en El País)

En medio del campo, un machadiano bromista nos hizo reir -con risa nerviosa, claro- cuando dijo:

-«Se hace camino al andar…»

Tardamos un par de horas en llegar a pie a la plaza de Baeza. Nunca olvidaré la emoción que me produjo divisar, al subir una cuesta y mirar hacia atrás, a cientos de personas, en grupos de «autobús», y en fila india, caminando hacia Baeza desde el Norte, el Este y el Oeste. El Sur estaba detrás de la ciudad y, por el Este, ya nos calentaba el Sol.

Nos abrazamos. No estábamos solos ni perdidos en aquella aventura política/poética. «Caminante no hay camino«, ya, pero ahí se les ve haciendo su camino hacia el mañana. «Ya es hoy aquel mañana de ayer», pensé recordando unos versos del bueno de don Antonio. No puedo expresar la emoción que sentí al ver que, sin teléfonos móviles ni palomas mensajeras, otros había decidido seguir a pie, como nosotros.

Al llegar a la plaza nos encontramos con un centenar o dos de personas (no se calcular muy bien a ojo). Allí encontramos, triunfantes, a varios miembros del Comité organizador de los «Paseos con Antonio Machado».

«Vienen más», nos dijeron, «muchos más; y aquí no hay ni rastro de la Policía ni de la Guardia Civil».

Uno me contó, con alegría, lo increíble que había sido la velada de la víspera en las escalinatas del Parador de Ubeda, donde pararon los más pudientes y que fueron en coche propio el día antes. Allí estuvo incluso Raimon cantando «Al vent, la cara al vent». Increible, sí, pero la Policía no es tonta. Ve colillas y dice: «Tate, aquí han fumado«.

Quizás, por esa fiesta previa, alguien de inquebrantable lealtad al Régimen dio el aviso al gobernador civil de Jaén, rompiendo  el presunto secreto de nuestro proyecto. Aunque yo creo que la Policía lo sabía todo desde el día antes de la rifa. Para captar paseantes con Machado habíamos organizado veladas poéticas en los colegios mayores universitarios con mesas redondas en las que intervenían personajes nada sospechosos de franquismo como Aurora de Albornoz, Félix Grande, etc.

Pero se ve que los franquistas no querían escándalos en la prensa extranjera e intentaron devaluar finamente el homenaje a Machado impidiendo que llegarán a Baeza los autobuses cargados de «rojos».  Les sorprendió, sin embargo, que llegará tanta gente a pie. No se lo esperaban.

A la media hora, y cuando ya habíamos comenzado a caminar tranquilamente por el que algún día se llamaría «Paseo de Antonio Machado«, nos avisaron de que estaban llegando a Baeza muchos autobuses tan grises como los abrigos recios de los policías de Franco.

Antes de llegar al monumento, donde debíamos depositar el busto de bronce del poeta, nos esperaba un capitán con megáfono casero, al mando de un montón de «grises». Nos dio el alto levantando la mano y gritando. Los más jóvenes, brazo con brazo, nos pusimos inmediatamente en primera línea y los ancianos detrás.

El jefe de los grises dio la orden de que nos disolvieramos al sonar por tres veces su silbato. Uno de los organizadores trató de parlamentar sin éxito con el capitán. Este insistió:

«A la de tres, si no se disuelven inmediatamente, daré la orden de cargar».

Y así fue. ¡Vaya si fue! Nos molieron a palos. Aguantamos un poco -no mucho- con nuestras espaldas y piernas doloridas pero, al fin, la procesión civica/poética se disolvió en carreras desordenas por las calles de Baeza. ¡Qué paliza!.

Hubos heridos y detenidos. A mi no me cogieron ni me ficharon porque un coche providencial paró en medio de la calle, abrieron la puerta y me tiré literalmente encima de las rodillas de los tres o cuatro pasajeros que iban apretados en los asientos de atrás. Luego me dijeron que, en ese mismo coche, iba alguien importante de la oposición clandestina al franquismo. Pero no recuerdo su nombre.

Si el conductor de aquel coche llegara a leer esto, quiero que sepa que le estoy eternamente agradecido. Mi expediente quedaba limpio para seguir la lucha contra la Dictadura con más eficacia que si me hubieran detenido y/o fichado.

Eso vendría años después, recién muerto el dictador, cuando me secuestraron y torturaron a punta de metralleta.  Y con peores modales, desde luego, que los de los grises. Ya lo creo.

—-

El País ha publicado hoy un reportaje interesante sobre los admiradores de don Antonio Machado que visitan su tumba en Collioure (Francia).

En el blog de Alberto Granados he encontrado el busto de Machado ya incorporado en el monumento de Baeza (1983) y una referencia interesante al Homenaje a Machado en Baeza tal dia como hoy hace 45 años.

28 comentarios

  1. Dice ser cuclillo

    Poesias de Antonio Machado en voces de Fernán Gómez y otros. 33 LP 12 euros

    http://anuncios.ebay.es/compraventa/vinilos-suelto-50-titulos-a-elegir/7758791

    20 febrero 2011 | 23:02

  2. Dice ser Juampa

    Recuerdo al» periodista» de musica Javier Luqui que se paso 40 anos hablando de Los Rolling y de Los Stones…mientras Los giliprogres se pasaron 30 anos hablando de un Mayo Frances que nunca llegaron a conocer ( Tuvo que abrir la boca Semprum)…

    Y ahora el Soler sigue contando batallitas…

    Sinceramente me importa una mierda Los Machado, Los Rosales, Miguel Hernandez, Lorca, Los Peman, Unamuno, Alberti, Hugh Tomas, Beevor, Jackson…

    Es bastante patetico que Los que tanto criticaban y defendian a este gobierno de inutiles, se pasen el dia hablando de lo que ocurrio hace setenta anos.

    Una pregunta muy sencilla, se esta cachondeando de Los 5 millones de parados?

    20 febrero 2011 | 23:14

  3. Dice ser Alberto Granados

    Me ha encantado leer su artículo, tan lleno de nostalgia.
    Mil gracias por su referencia a mi artículo en el blog.
    Saludos,

    AG

    21 febrero 2011 | 08:33

  4. Dice ser Jose

    Juampa, cateto.

    21 febrero 2011 | 09:28

  5. Dice ser tboinotbo

    Visión sesgada del franquismo. Parece como si Machado hubiera sido un poeta prohibido, como si los libros de Ruedo Ibérico no circularan como churros por cualquier parte desde los 60, como si dentro de las estructuras del régimen no hubiera gente demócrata que favorecía el buen funcionamiento de muchas cosas, a pesar de estar en peligro de topar con un colega, o un jefe fascista que le hiciera la vida imposible.

    No es verdad que la libertad viniera solamente de la lucha clandestina, más aún cuando esta lucha estaba liderada por una ideología totalitaria similar en muchos puntos a la que tenía el poder. Lo normal es que los jóvenes se apuntaran a la actividad subversiva en contra de la dictadura, pero luego evolucionaran en su ideología a medida que contrastaban sus opiniones con otras ajenas.

    La pena es que hoy, fracasadas las ideologías como tales, sea tan fácil de engañar a nacionalistas con falsedades históricas; a xenófobos con cuentos de invasiones; a parados con brotes verdes; a sociatas con que esta crisis pasa en todas partes; a retrógrados con que lo que falta es mano dura, etc. etc.

    Lo que falta es cultura, quizá incluso también leer y comprender a Machado. Falta entender al mundo actual y preocuparse por su futuro. Falta tener criterio y no ser una panda de ignorantes gobernada por unos individuos flor y nata de la ignorancia.

    21 febrero 2011 | 09:51

  6. Dice ser a

    Cuanto gañán suelto por aquí.

    21 febrero 2011 | 10:07

  7. Dice ser Elmyr

    Pues yo tengo una copia del LP marcado como Defectuoso y con número de serie 0000. Creo que mi padre contribuyó económicamente al acto, más por tocar lo cojones que por identificación política o poetica. Envieme su correo a elmyrzATgmailDOTcom y le hago llegar el enlace para que se lo descargue (como puede ver sigo la filosofía familiar).

    21 febrero 2011 | 10:13

  8. Dice ser cuclillo

    «Los grises que manda Franco
    dicen que tienen modales
    pero pegan unas hostias
    que parecen catedrales.

    «Viruta, viruta,
    que gris más hijoputa,
    la madre que lo parió;
    yo también tenía una cabra
    que se llamaba Asunción.

    (Del cancionero popular).

    21 febrero 2011 | 10:20

  9. Dice ser xavi

    uno solo de los antiguos grises vale mas que todos los policias de ahora que solo saben multar. en cuanto a los machado yo me quedo con manuel que es mas flamenco que antonio.

    21 febrero 2011 | 10:31

  10. Dice ser sicologo del castin de GH

    queda mas poetico asi:
    por Machado yo fuí Machacado.

    21 febrero 2011 | 11:25

  11. Dice ser CAFE

    Estimado José Antonio, la censura no es patrimonio de las dictaduras, pregúntale a Pedro Varela

    21 febrero 2011 | 11:29

  12. Dice ser Kalimero

    Mayor Oreja diría que fueron palos plácidos.

    21 febrero 2011 | 11:41

  13. Dice ser Maximo

    Hombre Granados… entre»hermanos» anda el juego…(sectarios)

    Tipico articulo de la ultraizquierda pijaprogre nostalgica…

    Tergiversan, mucha demagogia y victimismo…

    Machado nunca fue un poeta prohibido en España.

    Digais loq ue digais, la ultima etapa del franquismo le daba mil vueltas a toda la democracia, en prosperidad y justicia social.

    ALE! a seguir con las demagogias.

    21 febrero 2011 | 13:01

  14. Dice ser Clica aquí

    Ni pongo ni quito rey, solo defiendo a mi señor. buen articulo.

    21 febrero 2011 | 13:05

  15. Dice ser Alberto Granados

    Máximo, reconforta ver que alguien tan ecuánime y sobrado como usted, deshace mis torpes reflexiones, así, con esa modestia perdonavidas, tan ejemplar, y sin descalificar a nadie, que el respeto es el respeto.
    También me encanta esa corriente revisionista que vienen a decirnos que el régimen franquista fue maravilloso. Eso es una verdad axiomática: lo nuestro (quiero decir, lo de la «ultraizquierda pijaprogre nostálgica») es demagogia.
    Usted solo se retrata.
    Ay, la caverna!

    Alberto Granados

    21 febrero 2011 | 13:43

  16. Dice ser CAFE

    Don Alberto, desde el mayor de los respetos y coincidiendo en muchas cosas con D. Máximo, le remito partes del articulo de D. José Antonio para refirmar lo dicho por D. Máximo
    “Colegio Mayor Santa María de Europa (del SEU, aunque ellos eran bastante rojos)”

    “de las múltiples mudanzas que hice a la Universidad de Barcelona, a la Universidad de Harvard o a Nueva York.”
    “Me recordaba las excursiones del colegio La Salle, claro que con otras canciones más pías (“Vamos a contar mentiras”, “¡Oh! buen Jesús”, “Montañas nevadas”. “Para ser conductor de primera“, etc.)”
    “Para captar paseantes con Machado habíamos organizado veladas poéticas en los colegios mayores universitarios con mesas redondas en las que intervenían personajes nada sospechosos de franquismo como Aurora de Albornoz, Félix Grande, etc.”
    “autobús cargado de hombres y mujeres, unos demócratas, otros aún partidarios de la dictadura del proletariado, todos antifranquistas ilusionados, arrobados por la adrenalina del peligro, de todas las edades y clases sociales, con trencas gruesas, barbas descuidadas y pelos largos, pero también con respetables calvas de doctos intelectuales y artistas, armados con largas bufandas y abrigos de postín.”
    Uno me contó, con alegría, lo increíble que había sido la velada de la víspera en las escalinatas del Parador de Ubeda, donde pararon los más pudientes y que fueron en coche propio el día antes. Allí estuvo incluso Raimon
    Con todo esto querido amigo, si me lo permite, ustedes pertenecían a esa escasa elite de hijos de franquistas educados para darnos teoría, reciba un cordial saludo

    21 febrero 2011 | 14:01

  17. Dice ser franperales

    sr. soler, me alegra conocer su historia, no porque no la hubiese oido antes, ya que mi abuela me la contaba miles de veces, me alegra porque saber de alguien de fuera de mi pueblo pueda darme una situación de los hechos, así también siento que exista tanto negacionista en este país que no quiere reconocer la malicia del franquismo, a estos les digo que no es hacer demagogia es contar una historia tal y como se recuerda y biene al caso porque en estos días se celebra en Baeza la semana Machadiana en homenaje al poeta y por suerte sin represión gracias a personas anonimas como el señor soler. Yo por desgracia ahora me encuentro en Barcelona muy lejos de mi tierra y agradezco al Sr. Soler cuente su historia para poder decirle que ahora en Baeza no hay solo un busto en recuerdo del poeta sino tres esculturas y por suerte en el centro de la ciudad y no de forma clandestina.

    21 febrero 2011 | 14:24

  18. Dice ser ki against paletos

    juampa …macho no te enteras de ná…los rolling y los stones son lo mismo, colega…tienes menos educacion musical que un taliban en el creamfield festival….

    tu con tan poca cultura y mentalidad actual ..me temo que no encontraras trabajo nunca…pues si aun no has aprendido que ser facha hoy en dia es como ser gay en la epoca de franco….te van a dar por toos laos…

    No more paletos in spain…

    21 febrero 2011 | 14:35

  19. Dice ser CAFE

    ki against paletos , se os ve el plumero, prefiero un “paleto” claro que un tonto dinámico

    21 febrero 2011 | 14:56

  20. Dice ser antonio larrosa

    Cada cosa es de su época. Ahora le preguntas a los de veinte años quien es Antonio Machado y te dicen que no conocen a ese futbolista. Mi tocayo hoy está muy olvidado al igual que en los años sesenta del siglo XX estaba olvidado el cinturón de castidad. Tiempos !

    clica sobre mi nombre

    21 febrero 2011 | 15:30

  21. Dice ser CAFE

    Y olvido de D.Manuel Machado

    21 febrero 2011 | 15:51

  22. Dice ser Erik

    ¡Fenomenal!
    Gran historia. Más de estas, por favor.

    21 febrero 2011 | 20:51

  23. Dice ser Brizna

    Joer: cómo se rebotan los neofranquistas que pululan por este blog cuando alguien cuenta algunas «lindezas» que se cometieron en tiempos que imperaba el saludo fascista en el país.

    21 febrero 2011 | 23:28

  24. Un saludo 😉 y clica 😉 mi nombre 😉

    22 febrero 2011 | 21:44

  25. Dice ser a

    Cuanto garrulo ignorante,en los tiempos del
    enano con voz de pito hasta te multaban por
    besar a la novia en un parque y los grises se
    dedicaban a asustar a las parejas de novios.

    05 marzo 2011 | 19:54

  26. Dice ser irene

    Hola Jams! Fui alumna tuya de la UAL. He oido que ya no das clases, es cierto? tengo que decir que me fascinaban tus clases, no faltaba ni un solo día, me resultaban muy interesantes y por qué no decirlo, tus anéctodas eran muy divertidas. Mucha suerte y un saludo!

    13 marzo 2011 | 22:39

  27. 6 años tenia yo entonces… incosciente de la triste realidad que nos rodeaba a los españoles…
    Hay un documental casi desaparecido que cuenta los fusilamientos Franquistas:

    Rejas en la Memoria» se estrenó en España el 5 de noviembre del año 2004. Bajo la dirección de Manuel Palacios, este largometraje documental de 80 minutos, contaba con la narración de Rosa María Mateo y tenía por guionistas a Pete Piñas y Manuel Palacios. La producción ejecutiva fue de Macarena Rey y la composición musical de Álvaro de Cárdenas. La fotografía estuvo a cargo de Eduardo Mangada y el montaje lo realizó PetePiñas. Por algun motivo desapareció.
    Se puede ver en :
    http://avialio.blogspot.com/2011/03/rejas-en-la-memoria.html

    16 marzo 2011 | 10:06

  28. Dice ser conmemoria

    En 1949 se adquirian en las librerias deSalamanca las obras de A.Machado.En1957 o 58 se estreno en
    Madrid la Zapatera=Prodigiosa de Federico,fui al estreno,tnia entonce 23=24años.Hay mucho ingnorante e h…p.

    19 marzo 2011 | 12:12

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