Se nos ve el plumero Se nos ve el plumero

"La libertad produce monstruos, pero la falta de libertad produce infinitamente más monstruos"

Y la Justicia parió un ratón…
Etarras y 11-M, en El Mundo; Guantánamo, en El País

Los diarios on line se comen a los que imprimen las noticias de ayer. Tal es mi caso cuando voy a comentar las portadas impresas de hoy, envejecidas por dos decisiones importantes, aunque tardías, de los jueces.

La que han armado con el sanguinario etarra De Juana Chaos los del Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, saltándose a la torera algunos procedimientos, para ser arrojados hoy al ridículo por el propio Tribunal Supremo. En menos de un año, el etarra estará seguramente en la calle después de haber cumplido sus condenas.

¿En qué cabeza de juez cabe condenar a un etarra a más años de cárcel por escribir un artículo que por cometer asesinatos?

Y el otro juez, que también baila, es el de Tenerife. Prohibe el carnaval en la calle, en lugar de prohibir ciertos niveles de ruido insoportable en la calle. Menos mal que ha entrado en razón y donde dijo digo -a la vista del follón que ha organizado- ahora dice Diego.

De sabios es rectificar. Pero, con algo de prudencia y sosiego, nuestros politizados jueces podían habernos evitado tanto ruido innecesario.

….

No se pierdan este artículo de Félix de Azúa en El País. Es largo, pero creo que vale la pena:

Longevidad del resentimiento

FÉLIX DE AZÚA

en El País 12/02/2007

Recuerdo perfectamente con qué ferocidad despreciábamos a Adolfo Suárez. El plural se refiere a la izquierda de aquellos años. Ni siquiera le odiábamos, era demasiado insignificante. Un burócrata que sólo suscitaba el sarcasmo, un trepador cuyas contradicciones podían facilitar la insurrección proletaria. Es cierto que le había votado una mayoría de la población, pero ya se sabe: los españoles son franquistas, borregos, rancios. Supongo que eso es lo que piensan de Zapatero muchos nacionalistas.

Luego pasamos a despreciar a González. Algunos habían sido compañeros suyos en la Universidad de Sevilla: un chisgarabís, un pelmazo del que huía la gente. Los sarcasmos contra Suárez se hicieron más virulentos contra González. Basta con releer lo que escribían las grandes plumas de la izquierda sobre la entrada de España en la OTAN.

Ahora, cuando el país va regresando inexorablemente al Ruedo Ibérico, nos percatamos de que Suárez y González fueron una bendición inmerecida para una casta intelectual fatua y microcéfala. Un par de políticos inteligentes, prudentes, hábiles, que nos libraron de nosotros mismos. Si hubieran triunfado los míos, por ejemplo, Cataluña habría sido una república popular maoísta. Nunca se lo agradeceré suficientemente a Suárez y González.

Éramos jóvenes y en ese periodo amorfo llamado «juventud», que en España dura hasta los cuarenta años, está permitido ser un majadero y que sin embargo te haga caso la prensa. Pero ahora, cuando se reproduce el viejo estilo del rencor y el resentimiento, ya nadie es joven, ni siquiera los jóvenes son jóvenes. Los «jóvenes» nacionalistas vascos patean las tumbas de los asesinados por sus padres. Han nacido viejos.

El mes pasado, escribía Muñoz Molina en estas mismas páginas su desaliento ante el delirio en el que ha caído la casta dirigente. Era el grito espantado de alguien que, por vivir fuera, se percata de lo asombrosamente inútil que llega a ser la elite española. El delirio de la oposición, perpetuamente encadenada a sus tráficos vaticanos, a su ética momificada, ese espíritu de bronca tan compatible con la codicia. El delirio de los periféricos, reduciendo sus fortalezas regionales a siniestras aldeas endogámicas cada vez más hormigonadas. El delirio del actual gobierno, convencido de poder dialogar con los nacionalistas, desde los más presentables hasta ETA, y proponiendo alianzas con el Islam. Vaya panorama.

Hace unos días tuve ocasión de hablar con una persona excepcional. Ha conocido la esclavitud verdadera, la de las mujeres que se pudren en los países islámicos. Ha vivido en Somalia, Etiopía, Arabia Saudita, Kenya… Sabe que en este momento no hay mayor injusticia que el islamismo explotador de una mitad de la población condenada por su sexo. La miseria del proletariado en la época de Marx era un privilegio comparada con la miseria de millones de esclavas (laborales, familiares, sexuales) que se ocupan de la totalidad del trabajo de la aldea mientras los hombres se dedican a pavonearse rifle en mano y a rezar. No podía concebir que alguien como Zapatero, con mando en un país europeo, hablara de «alianza de civilizaciones». ¿Qué civilizaciones? Si a sus hijas les hubieran cortado el clítoris y cosido los labios externos quizás no fuera tan frívolo.

Suárez dialogó con gente que le despreciaba, pero que estaba deseando salir de la cloaca. Es cierto que los comunistas seguían persuadidos de que no había nación en la tierra que pudiera compararse con la URSS (¡la de Breznev!), y que nuestros jefes hablaban en verso sobre Rumania y sobre la portentosa inteligencia de Ceacescu. Estos majaderos, sin embargo, ya no creían en sus propias mentiras y por lo tanto se podía dialogar con ellos. Suárez lo hizo y consiguió que entraran en el orden democrático al que juzgaban un modo de explotación más peligroso que el fascismo. Suárez dialogó porque lo que tenía delante era un fantasma que al oír el primer ring de monedas se esfumó como Drácula y se dedicó a proteger a las focas.

No es ese el caso de ETA, ni el de los islamistas que con tanta precisión describe una y otra vez Antonio ElorzaNi siquiera es el caso del PNV. Quizás Esquerra Republicana esté más cerca de la lucidez: por lo menos ya se les ha producido una escisión y eso indica que puede haber pensamiento incluso en una nevera. Ley de oro desde Maquiavelo es que no puedes dialogar con quien está persuadido de que tú eres débil y él es fuerte. Que Alá está de tu parte, o que están contigo Dios y las cajas de ahorro vascongadas más algún sindicato para que el amo no esté solo.

Nuestro presidente dice que hay que dialogar con los opresores. Parece que no haya dialogado en su vida con alguien que le toma por bobo. La quiebra de esos diálogos imposibles conduce a callejones sin salida. Los callejones sin salida generan frustración. La frustración es la madre del resentimiento. Hemos regresado a la política del resentimiento, la continuación del franquismo. El gobierno no piensa en los ciudadanos, el gobierno sólo piensa contra la oposición. Un gobierno que le tiene tal pavor a la oposición como para no abrir la boca sin mencionarla (¡mamá, mamá, mira lo que ha hecho Rajoy!), es un gobierno de una debilidad incompatible con cualquier diálogo. La consecuencia ha sido el fracaso del «proceso de paz», mal planteado desde su bautismo con esos términos episcopales.

¡Qué nostalgia de Suárez y González! El uno y el otro hubieron de vérselas con enemigos mucho más peligrosos que los que lidia Zapatero. Suárez con los franquistas, es decir, con la totalidad del poder económico, o sea el poder madrileño, vasco y catalán que era el único que había. González, con sus propias huestes, cabras locas, conspiradores del ochocientos. Ambos, con una ETA que en aquel momento no sólo era infinitamente más fuerte, sino que recibía el apoyo de toda la izquierda del país. Y sin embargo pudieron imponer su diálogo, es decir, meter en vereda a los inválidos morales en menos que canta un gallo.

¿Por qué entonces Zapatero no puede con unos adversarios desdentados como los del PP, y una ETA a la que ya sólo apoyan los caseríos y ni siquiera todo el PNV? Porque no logra convencer de su poder, es decir, el poder del Estado. Y cuando el Estado muestra su debilidad, el rencor, el resentimiento y el oportunismo ocupan la escena.

Si alguien desea conocer el desarrollo de una conciencia política racional y no visceral, lea la estremecedora autobiografía de Ayaan Hirsi Ali (Mi vida, mi libertad). Verá cómo la inteligencia unida al coraje puede vencer a la esclavitud en las condiciones más opresoras. Ayaan Hirsi es en verdad una revolución viviente porque dice aquello que todo el mundo sabe, lo evidente. Aquello que los islamistas ocultan, niegan, disimulan, disfrazan, porque amenaza el dominio que ejercen sobre la mitad de la población. Y lo dice sin rencor, sin odio, sin resentimiento hacia sus torturadores. Sabe que no hay posibilidad de diálogo, ni alianza que valga, hasta que millones de mujeres se persuadan de su poder. Por eso dialoga con las oprimidas, no con sus opresores. Será lento, pero no hay otro camino.

Aplíquese el cuento aquel que desee dialogar. Haga como Ayaan Hirsi, apueste por lo evidente sin rencor ni resentimiento. Utilice el poder del Estado para ayudar a los ciudadanos oprimidos, no para sumirlos en una mayor opresión dialogando con sus opresores. Y olvídese de la oposición. Está ahí para evitar el monólogo gubernamental.

Félix de Azúa es escritor.

FIN

Hoy estamos de doble enhorabuena.

1.- Arsenio Escolar, director fundador de 20 minutos, de www.20minutos.es y de Calle 20, ha sido nombrado «mejor periodista del año» por la Asociación de la Prensa de Madrid que le ha otorgado el Premio Victor de la Serna. Podrán leer esta noticia, que nos ha llenado de satisfacción, en un modesto rinconcito de la página 10 de 20 minutos, que reproduzco a continuación, o en su blog.

2.- El diario on line www.20minutos.es ya es, según la OJD, el nº 2 de los de información general de España.

6 comentarios

  1. Dice ser pericles

    Uff, muy bueno el artículo de Felix de Azúa. Se puede no estar de acuerdo con él en algunos aspectos, pero no se puede decir que no invite a reflexionar sobre la actual vida política de enfrentamientos fatuos para la galería y de división y rencor sectario. Siempre habrá algunos que les echarán la culpa a los otros y viceversa. Nadie parece pararse a pensar un poco en que se pueden estar equivocando. Sólo importa el poder, conservarlo o conquistarlo. Todo vale. Si nos cargamos el Estado de derecho en el camino y sembramos otra vez el odio cainita, no importa, Maquiavelo ha vuelto ha triunfar.Siempre es triste pensar que el pasado ha sido mejor. Realmente tampoco fue así, también hubo discusiones sin fin sobre el sexo de los ángeles, insultos entrecruzados, desprecios varios e irresponsabilidades diversas. Pero desde luego que, desde la perspectiva, tanto Suárez como González pueden aparecer ahora como dos gigantes de la política, que tuvieron que lidiar con toros muy bravíos y que realizaron una faena más que apañada. Uno desde el gobierno y el otro desde la oposición ayudaron a consolidar nuestra democracia. Y después, el segundo nos introdujo en Europa y en un estado moderno. Ambos con sus luces y sus sombras, sí, pero haciéndonos sentir, salvo a los extremistas de siempre, orgullosos de nuestra recién nacida democracia. El sueño terminó a principios de los noventa, quizá un poco antes, con la última mayoría absoluta del PSOE en 1989. Desde ese entonces, la crispación nos ha invadido y no ha dejado un sólo resquicio para el aire puro y la reflexión tranquila para analizar con perspectica de dónde partíamos y donde nos encontramos ahora.Es normal discrepar, tener sensibilidades diferentes y encontradas. Pero creo que es más inteligente hacer las críticas de forma templada y presentando alternativas y llegando a acuerdos en los asuntos importantes que estar todo el día chillando y pataleando.Difiero en algunos aspectos con Azúa. Siempre hay que estar dispuesto al diálogo con cualquiera, incluso con el diablo. Otra cosa es que haya que ceder en nuestros valores y principios democráticos y de respeto a los derechos humanos. Con los etarras o con los islamistas se puede dialogar cómo pueden integrarse en nuestra sociedad liberal, laica y democrática. Y también hay que estar preparados, tanto para no ceder en ninguno de estos principios como para defendernos en caso de posibles agresiones. Pero defenderse no es lo mismo que el ataque preventivo. Contestar a una agresión no es lo mismo que dar la primera patada. La Justicia no es lo mismo que la Venganza. Todos tienen que tener muy claro que el respeto a la Carta de Derechos Humanos es irrenunciable, y que todos somos iguales ante la ley, y que en caso de conflicto entre las leyes civiles y las creencias y tradiciones, prevalecen los primeros. Con la excusa de la libertad de elección no se puede restringir ninguna libertad civil ni se puede vulnerar ningún derecho de las personas. Diálogo entre civilizaciones así, sí. Rendiciones, no.Saludos.

    12 febrero 2007 | 21:19

  2. Dice ser cc

    Es decir, que el ex maoista Azúa viene a dar lecciones. Todo un artículo para demostrar que su respeto por las ideas ajenas y por el resultado de las elecciones es tan escaso como el que tenía hace 25 años.Francamente estoy harto del club de los equidistantes, los Elorza, Azúa, Muñoz Molina.

    12 febrero 2007 | 21:59

  3. Dice ser Esteban Rosador

    Durante 40 años, la dictadura asesina franquista, apoyada por la jerarquía católica, impuso como obligatoria la catequesis y el adoctrinamiento católico en las escuelas. Ni por esta ni por otras barbaridades aún peores se ha oído a los obispos pedir perdón a sus fieles, que lo eran a la fuerza. Aún hoy disfrutan del privilegio, gracias a acuerdos preconstitucionales entre el ridículo estado vaticano y los herederos del franquismo asesino, de poder adoctrinar a los niños en las escuelas desde su más tierna edad, y pagado con el dinero de todos los españoles. Probablemente se aferran a esta asignatura de adoctrinamiento religioso porque saben que es una de las pocas posibilidades que tiene de mantener algunos fieles. Son conscientes de que, a pesar de todas estas ventajas, el número de católicos practicantes se reduce vertiginosamente en España (sólo el 10% de jóvenes católicos practicantes según los sondeos del CIS). Por esos ahora se les ve muy quisquillosos con cualquier otra asignatura que pueda hacer pensar a los niños en la escuela que la única moral posible no es la que les enseñan ellos en la clase de adoctrinamiento, sino que existen otras posibilidades, incluso muchas veces mejores.

    12 febrero 2007 | 23:04

  4. Dice ser irene

    Esteban:es porque se les acaba la mentira patentada de que la religion te hace moralmente superior al resto de religiosos o ateos…tambien de acuerdo con pericles, este escritor nos invita a reflexionar, pero creo que se pasa en algunos casos, generaliza demasiado …en cuanto a la cope, pues ya me lo imaginaba ¿o se creen que sus fieles quieren la comunion escuchando la cope?? no, lo que quieren es el Tomate de la politica que hace losantos, chabacano, ordinario, racista, amenazante y fascista se mire por donde se mire..pero que podia esperarse de una empresa basada en la mayor mentira de todos los tiempos (el templo cojido por los mercaderes)saludos

    13 febrero 2007 | 11:58

  5. Dice ser gretel

    Solo me paso para saludar a Pericles e Imagina, besos besos, no tengo tiempo de parrafadas… aunque empezar

    13 febrero 2007 | 16:19

  6. Dice ser gg

    y no obligues a dar a los dem

    13 febrero 2007 | 16:27

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