De todo corazón

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La ruta Rocío Jurado

Ya se hizo una ruta de la Operación Malaya en tierras marbellíes, pero ésta es más interesante, al menos desde el punto de vista cultural. Comprende el Santuario de Regla, el domicilio de Rocío Jurado y la casa que la vio nacer. Rociito, que no ha estado presente en los actos de homenaje a su madre, va a donar, según la revista Diez Minutos, diversos objetos que servirán para que los admiradores de la más grande puedan contemplarlos en un centro cultural de la localidad .

La matriarca de los March

El pasado día 7 recibió sepultura Carmen Delgado Roses, la matriarca de la familia March. La nuera de El último pirata del Mediterráneo odiaba la notoriedad y era una mujer de una pieza. Especialmente interesante es el libro que sobre esta familia ha escrito Esteban Urreiztieta para La Esfera de los Libros. No sólo por su rigor y amenidad, sino por algunas recetas que el marido de la fallecida, excelente gastrónomo, degustaba en su bien resguardada intimidad. Llegó a contratar a una cocinera a la que envió a París para que trabajara como pinche en los mejores restaurantes, donde también se sentaba a la mesa. Sin embargo, la mejor receta de todas las que se detallan en el libro de forma anecdótica es la de las sopas mallorquinas que degustaba el magnate. He probado a hacerla y hasta me ha salido bien.

La familia real y los toros

La Reina no va a los toros porque le horrorizan, es vegetariana y podría vomitar ante la visión de la primera banderilla. Según cuentan las malas lenguas, su suegra, la Condesa de Barcelona no sólo asistía a las corridas por ser una gran aficionada, sino para dejar en evidencia a la nuera. No me lo creo. La Condesa de Barcelona, como la duquesa de Alba, sentía devoción por Antonio Ordóñez, e incluso visitó su casa en varias ocasiones. Las imágenes de una comida campestre de ambas con el diestro, Cayetana, Fran Rivera y Eugenia fue publicada en el¡ Hola!, y a la madre dey Rey no le importó. La que no pudo ser reina estaba comiendo con el emperador.

Al Rey Juan Carlos le gustan los toros, pero no tanto como a la Infanta Elena. Su hijo, Froilán, estuvo durante las fallas en Valencia y le brindaron un toro. El hecho de que llevaran al pequeño a la corrida fue muy criticado por los antitaurinos. En Valencia, Marichalar hizo lo que le vino en gana con sus niños, que para eso son sus hijos, sin consultar demasiado con la familia real.

Al príncipe Felipe los toros no le hacen mucha gracia, y Letizia, antes de casarse con él, ni fu ni fa. Tampoco le gustaba la caza y ha terminado cazando. El pasado 27 de mayo acudieron a la corrida de la Prensa, y estaban, como se dice,en el tendido, más pendientes el uno del otro de aquello que ocurría en la arena. Los príncipes ya se dejaron ver en los toros en el año 2004, días antes de su boda. Desde entonces no hemos vuelto a saber nada. Da la impresión de que la Familia Real quiere dar un empujoncito a la fiesta nacional. No pueden resucitar a La Chata, la hermana de Alfonso XII a quien Rafael Duyos dedicó este poema:

-¡Deprisa que no llegamos!

¡Quiero la mantilla blanca!

Que run-run por los salones

del palacio de Quintana,

Mayo y tarde de domingo.

En el piano una sonata.

Se le deshacen los dedos

Gordezuelos a la Infanta

-Maestro Saco del Valle,

tanto Bethoveen, me carga.

Os lo digo sin rodeos,

Chopin si me llega al alma;

Mientras me visto

Tocad este nocturno

¡Caramba! ¡Son las Cuatro menos cuarto!

¡No llegamos a la plaza!

-Las damas transmiten órdenes.

El coche a las cuatro.

Pasan las doncellas,

con el traje de su alteza

lila y grana con encajes de Bruselas,

apretando cuello y mangas,

y rematando la orilla manola

de la gran falda,

mientras la visten,

no cesa de hablar la señora Infanta,

-Dame el abanico verde

de Mercedes mi cuñada,

el que ella llevo a los toros

cuando era reina de España.

No, no quiero ese collar

ni esos pendientes, no, no, ¡nada!

Unos claveles prendidos en el pelo ¡Y a la plaza!

¡Vamos! ¡Deprisa! ¡Ligeras!

Que las cuadrillas no aguardan

Ah! Recuerda que Romanones

viene a merendar mañana

-¡Armas! ¡Armas a su alteza!

Grita el teniente de guardia

Flecha de seda y charol

Sale el landó de la Infanta,

Y a ritmo de pasodoble

Van la yeguas salazanas,

Llevando a Doña Isabel de Borbón

Casi en volandas,

-Princesa, Bailén, Mayor, Alcalá.

Dame el programa,

¡Ajá! ¡Hoy torea mi torero!

-¿Cuál es tu torero Juana?

-El mío es «El Gallo» Alteza.

-¡Uy! ¡»El Gallo»! ¡Quien lo pensara!

Torero gracioso pero

No te arriendo la ganancia,

Yo, de Vicente Pastor

Uy Qué raro…Antonio Maura

– Adiós, adiós… ¡Cuánta gente!

La reina se queda en casa

Pretextando una Jaqueca,

Los toros la asustan ¡Vaya!

Ya estamos, ¿Y mi abanico?

Junto al coche de la Infanta

La gente se arremolina

Buenas tardes, muchas gracias

Que tal Arbos, ¿a los toros?

No faltaré esta semana

Quiero asistir al estreno

Que anuncian de ese tal… ¿Falla?

Que hay Benlliure, hola Tamames

Con Dios Duque de Veragua

Ya, ya se que los toros que hoy se lidian

Son de tu casa

Abren paso como pueden

Los de la guardia montada

¡Quitasoles!, ¡abanicos!,

¡almohadillas!, ¡naranjadas!

¡Qué hay empresario! ¿contento?,

Vengo yo sola, más ancha…

Sí sí, que me brinden toros,

No, no, al contrario, me agrada…

Ya traía en previsión tres pitilleras de plata,

La infanta llega a su palco y al entrar

Toda la plaza puesta en pie se arremolina

Batiendo alegre las palmas,

Mientras la marcha de infantes

Resuena en las altas gradas,

Y el sol pone al rojo vivo

Las barreras encarnadas

En la andanada de sol con popular algazara

Lo morenos se alborotan y gritan ¡Viva la Chata!….

Si queréis leer más podéis pinchar en este enlace, el poema es eterno, pero no tiene desperdicio.

P.D

Vaya por delante que me gustan mucho los toros y que me hubiera encantado ver ayer a Cayetano toreando en Las Ventas. De pequeña era antitaurina, pero alguien me llevó un día a ver una corrida en tendido bajo y desaparecieron todos mis prejuicios. No me he comprado el Cossío porque no me cabe en casa.Voy a la biblioteca a consultarlo. De hecho acabé en la peña taurina de la facultad, y Andrés Aberasturi nos invitaba todos los jueves para hacer unas tertulias gratuitas de novatos muy divertidas en RNE.

Mi progenie me ha salido antitaurina, como la mayoría de los lectores de este periódicos. Ni aunque la sentara en el palco con el Presidente de la corrida conseguiría hacer cambiar su opinión. Al hilo de la polémica de la emisión en horario infantil de una corrida de toros en Portugal,

se me ha ocurrido formular la siguiente pregunta:¿Le perjudica o le beneficia a la Familia Real acudir a los toros?

El Rey en los toros. Foto:Korpa

Los príncipes en los toros hace cuatro años.(Foto:KORPA)

Los príncipes en los toros hace unos días

(FOTO:EFE)

El rey y sus parientes

Ayer hice una receta tan sencilla como exquisita: suprema de pollo a las uvas. La encontré en el libro de cocina Vogue de Giovanni de Borbón dos Sicilias. Me pregunto que opinaría el distinguido gourmet y gentleman, ya fallecido, de la ausencia de la Familia Real en el entierro de Don Pedro de Orleáns y Braganza, heredero al trono de Brasil y tío del Rey. La receta de pollo de Don Giovanni era baratísima, como económico hubiera resultado el gesto de asistir al entierro en Villamanrique de la Condesa, cuyo palacio y finca utilizaron los Reyes y sus hijos como si fuera su propia casa en varias ocasiones..La esencia de la monarquía es terriblemente frágil. Es casi como la funda de un vetusto almohadón de hilo bordada al realce, amarillenta y quebradiza. Hay que zurcir con primorosas puntadas de vez en cuando. Sus propietarios son las testas coronadas de todo el orbe y han de prestar atención no sólo el bordado que les atañe, sino también los adyacentes para que no se vayan todos los hilos. Si no se cuidan, se defienden y se prestan atención entre ellos…¿Quién les va a cuidar? El rey, a sus setenta añazos, ya debería haber comprendido la importancia de ciertos gestos, si no quiere perder a puñados a los monárquicos que aún quedan en España, especialmente en Sevilla. Hasta los brasileños, que convocaron un referéndum sobre la monarquía en 1993 se tomaron más en serio todo lo que encarnaba el al tío Pedrinho, como gustaba de llamar Juan Carlos I a su tío, príncipe Imperial de Brasil y esposo de Esperanza de Borbón- Dos Sicilias y Orleans, hermana de Doña María de las Mercedes, madre de Juan Carlos I.

La infanta Sofía

Sorprende la escasa atención que están prestando los medios de comunicación a Sofía, la hija menor de los príncipes de Asturias.

A la pequeña, que fue presentada ante la Virgen de Atocha por su padres, no se le concede protagonismo si no va acompañada por la infanta Leonor, a pesar de que incluso en China se han hecho eco del acto.

Algunos programas de corazón dieron casi más importncia a las últimas andanzas de Paquirrín y su novia, Tamara, que del acto en sí. Para colmo, cada vez que Leonor, con el empuje arrollador de sus rizos, hace su aparición con la pequeña, anula por completo a su hermana menor.

Y parece que los padres lo prefieren así. Dedicaron mucho menos tiempo que con Leonor a la pensa cuando salieron del Ruber con Sofía. Los borbones nunca se han distinguido como dinastía por ser previsores. ¿Y si a Leonor no le da la gana calzarse la corona? ¿Recibirá Sofía una educación tan deficiente como la que han recibido todas las hermanas de los Príncipes de Asturias a lo largo de la historia? Ni Doña Pilar ni Doña Margarita fueron educadas para poder asumir destinos más regios que el de amas de casa. Y tampoco Doña Cristina y Doña Elena.

Un palacio refrigerado al borde del cierre

Corre un rumor por Segovia. El gigantesco Palacio de Riofrío , construido por Isabel de Farnesio, por sugerencia de su hijo Fernando VI, que no la aguantaba en La Granja y donde la reina no pernoctó ni una sola noche, como tampoco lo hicieron la inmensa mayoría de sus ilustres descendientes, podría cerrar sus puertas, supuestamente ante la escasez de visitas.

El enorme edificio, situado en una finca plagada de gamos y ciervos, alberga un museo de caza único en el mundo. En él se muestran joyas de la taxidermia instaladas en magníficos dioramas, valiosas colecciones de armas y decenas de fotos, láminas y cuadros de los antepasados de Don Juan Carlos cazando a diestro y siniestro. La visita, muy interesante, no sólo para los aficionados a la caza, sino también a la historia, puede resultar vomitiva para pusilánimes amantes de lo políticamente correcto. Y tal vez por ahí vayan los tiros, y nunca tan bien dicho, en cuanto al posible cierre del Palacio a las visitas.

Resultan muy ilustrativas las curiosas fotos de las hermanas de Alfonso XII entre las zarzas pertrechadas con sus largas faldas negras y sus luengas escopetas; o Alfonso XIII rodeado de su corte de aláteres ante decenas de cadáveres de jabalíes.

O mejor aún, la colección de trofeos de caza del padre del actual Duque de Calabria, con al menos media docena de cabezas de lince y la piel de un gigantesco oso. Mejor que algunos libros de historia, el palacio permite comprender in situ la historia de la dinastía borbónica en España y su herencia genética transmitida hasta nuestros días en sus aficiones. Una solución demagogia sería una estupidez, aunque me temo lo peor ahora que tenemos nueva ministra de vivienda.

Lo más sensato sería que los reyes y los príncipes lo aprovecharan para sus vacaciones estivales y recuperaran sus raíces. Cierto es que en el Palacio hace mucho frío, pero Isabel II también se congela en Buckingham y Balmoral y se aguanta.

Menos aficiones marineras de tradición helénica y más caminatas por el monte. Saldría más barato y los habitantes de esta bellísima zona segoviana se lo agradecerían. Todos los financieros y famosos que siguen la estela de los Reyes se trasladarían a Segovia. Se imaginan a Ana Obregón, toda cinegética ella., posando bajo una encina a lomos de un gamo con un bikini de guepardo. !Qué bonito!