Cada vez creo en menos cosas Un foro para pensar en lo divino y en lo humano

Los acentos prosódicos de los políticos

En el último debate en el Congreso tuvimos ocasión de escuchar muchos discursos y algunos ladridos en la bancada de la derecha. De los perros que he tenido en mi casa he aprendido que hay ladridos de súplica, los hay de cariño y los hay de agresividad. Pero los ladridos apenas tienen mayores matices: cuando mis perros querían contarme algún pensamiento abstracto yo sufría mucho por culpa de esa barrera infranqueable del lenguaje. Esa es la gran diferencia entre el lenguaje humano y el de los animales, incluidos los animales de la extrema derecha.

Pero lo cierto es que a los que no ladran, a los humanos que allí hablan generalmente, cada día me cuesta más seguirles el discurso. Así, a simple vista, parece castellano, pero raro. Desde el presidente del gobierno hasta el último monaguillo del hemiciclo tienen graves problemas con los acentos. Y no me refiero al acento extremeño, catalán o andaluz, sino a los acentos prosódicos, que se colocan al buen tuntún, como si sus autores consideraran que su discurso queda así más fino. Las palabras llanas se pronuncian como esdrújulas y éstas se convierten inexplicablemente en sobresdrújulas. El adverbio solamente es en sus labios sólamente, compromiso es cómpromiso, fantasía es fántasia, precariedad es précariedad, solidaridad es sólidaridad, y así súcesivamente.

Si además escucho la retransmisión por boca de mis colegas de la radio o la televisión, entonces me pierdo definitivamente (définitivamente). En la radio y la televisión, como el tiempo es oro, los locutores se han convertido en unos avaros del idioma, se comen los preceptivos silencios que marcan las comas y los puntos, de tal manera que las frases se unen sin solución de continuidad en un maremágnum incomprensible, y la entonación de final de frase es idéntica al comienzo de la otra.

Esto me recuerda que cuando la burguesía gallega de principios del siglo pasado iba a tomar las aguas al famoso balneario de Mondariz, los petimetres se referían al lugar como Mondáriz, porque les sonaba más distinguido, supongo que por analogía con Ferrari. El pueblo llano se mofaba de ellos con un dicho que hizo fortuna: “Mondariz será Mondáriz cuando nariz sea náriz”.

5 comentarios

  1. Dice ser Johannes Paulus

    Hecho de menos a Lluis Carandell…

    05 noviembre 2005 | 12:33

  2. Dice ser codorniu

    Debe ser que nuestros políticos no contentos con la hinprova lavor de moldear nuestra realidad a su imagen y se méjanza, tanbien quieren modernizar el lenguage y sus husos.Aunque heso de dezir una reta y la de palavrejas hesdrújulas para hacavar no diziendo nada hace lla tiempo que ésta in véntado.

    05 noviembre 2005 | 20:01

  3. Dice ser marzully

    q todas las paginas q se abran sean consideradas y aprobadas abiertas algunas pagunas estan cerradas y no se abren asi q como la hija del jefe de rctv quiero q me digan la direcciòn de rctv y q me presenten todos los artistas ok?????¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡……punto.con cariño la hija de la directora de rctv ok… y punto ….

    09 marzo 2006 | 20:06

  4. Dice ser yahel alejandro

    pongan mas informasion

    09 junio 2006 | 05:11

  5. Dice ser tg

    klllllll

    05 marzo 2007 | 19:56

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