El ministerio de Sanidad y Consumo financia una campaña, destinada específicamente al público joven, en la que, sobre una imagen de una silla de ruedas, se lee: “El alcohol puede llevarte lejos”. Me gusta porque encierra una imagen de doble sentido, cargada de ironía. Una imagen mental para un público inteligente, digamos que joven pero suficientemente adulto (la comprensión de la ironía necesita una edad mental desarrollada; por eso es ininteligible para los niños muy pequeños o para un cretino clínico). Y a continuación, cuando para todos había quedado claro a dónde nos puede llevar el exceso de alcohol, el “horror vacui”, el miedo al vacío que siempre acecha al publicista, le empuja a descender desde la altura del mensaje para reclamar la atención de aquellos que no hubieran entendido la moraleja a la primera, con una frase para tontos: “Tu verás lo que te mola”.
Parafraseando al genio de Sanidad, se me ocurre el Quijote en dos niveles de comprensión:
Versión 1: “En un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, vivía un hidalgo… ”
Versión 2: “En un lugar de La Mancha, no me refiero a esas que hay que lavar, sino a una vasta región castellana, de cuyo nombre me acuerdo perfectamente pero prefiero no señalar para que la historia se desarrolle en un lugar inconcreto, vivía un hidalgo, noble de sangre, de los de la baja nobleza, y no un noble de bragueta como se conocía por entonces a los padres que tenían más de siete hijos varones consecutivos… ”
No es sólo preocupante que ciertos jóvenes empleen cada día un vocabulario más empobrecido y simplificador, debido sin duda a los bajísimos niveles de lectura, sino que además los adultos nos dirijamos a ellos como a idiotas de comprensión restringida.
Recuerdo que en la última edición de Operación Triunfo, los triunfitos se pasaban el día diciendo ¡qué guay! Si les regalaban una cámara, ¡qué guay! Si les obsequiaban con un coche, ¡qué guay! Si acertaban con un paso de baile complicado, ¡qué guay! Si les salía bien el gorgorito, ¡qué guay! Si estrenaban un nuevo peinado, ¡qué guay! Todo era guay. Ni estupendo, ni maravilloso, ni fantástico, ni impresionante, ni fabuloso, ni qué bueno, ni qué suerte. Nada: ¡qué guay! Ni cojonudo siquiera.
Ahora, según los mensajeros de Sanidad, si a los chicos españoles les dijésemos “tu verás lo que te conviene” en lugar de “tu verás lo que te mola”, resultaría un mensaje incomprensible para ellos, porque, como es notorio, el verbo convenir es igual de raro e inusitado que el sustantivo esternocleidomastoideo, y no lo entenderían sus pequeñas mentes. Menos mal que de la salud de nuestra lengua no se ocupa Sanidad.
Totalmente de acuerdo con el autor. Cada vez hay menos cultura, y lo peor del caso es que parece que a los jovenes (no a todos, por supuesto) les da exactamente igual.Escribi algo sobre el tema hace un tiempo:http://aboreh.bitacoras.com/archivos/2004/11/30/preocupado_me_teneishttp://aboreh.bitacoras.com/archivos/2005/10/05/diccionario_smsUn saludo.
30 noviembre -0001 | 00:00
Vamos camino de convertirnos en frikis de los comentarios. Cuidado.
30 noviembre -0001 | 00:00
Manolo, tu post es guay!
02 noviembre 2005 | 01:15
¿Cómo que guay?Superguay
02 noviembre 2005 | 06:32
Yo creo que para que el público joven lo entienda, habría que escribir los mensajes en sms, ej.: «el alkol t llvra ljs ;), t vras lqt mola XD»La madre que los parió…
02 noviembre 2005 | 08:28
No, muy mal Manolito. No puedes decir esas cosas tan tan malas de nuestros sufridos mandamases que se preocupan, sacrifican y se ponen a la altura, para que el pueblo llano les comprenda. Y es que su tarea ¡Es tan difícil!
02 noviembre 2005 | 09:02
Esto son las consecuencias de unas leyes educativas dirigidas a quitar al pueblo el vocabulario y el pensamiento.
02 noviembre 2005 | 09:25
Como casi siempre, genial.
02 noviembre 2005 | 10:12
Manolo,tu post siempre me mola mazo!gracias
02 noviembre 2005 | 13:21
Qué buen post carajo!
02 noviembre 2005 | 14:18
Jajajajajajaja joder, me he descojonado con la versión 2 del Quijote…Felicidades por el post Saco
02 noviembre 2005 | 15:23
Esto es la pescadilla que se muerde la cola: los chicos tienen poco lenguaje, para que les resulte medianamente comprensible cualquier mensaje se adapta a su nivel y por consiguiente nunca se molestarán en buscar en un diccionario una palabra dudosa y seguirán tirando con las trescientas que traen de fábrica.
02 noviembre 2005 | 16:48
Es guay tu post, Saco, tanto que a mis amigos les mola un montón, según me dijeron el «finde». Y «finde» ¿qué te parece? Podrías aconsejar a los amigos del 20 Minutos papel que lo quiten de sus titulares. Es un horror.
02 noviembre 2005 | 22:05
Lázaro, traslado tu petición. Porsiaca mola.
02 noviembre 2005 | 22:10
Creo que aunque en mi lenguaje existen palabras como maravilloso, increible, fantastico, divino, estupendo, cojonudo, bueno, sobervio, magnifico, portentoso,fenomenal, fascinante, extraordinario, increible y seguro que alguna que otra que no consigo recordar, he de admitir que soy una de esas jovenes que en ocasiones dice que guay. Y me parece realmente injusto ser juzgada, como una ignorante, o como alguien que no lee, solo por decir esa frase.¡Que guay! No creo que el hecho de pronnciar esa frase sea sinonimo de estupidez o incultura, sino que no es mas que una expresion de moda como las que supongo utilizarias en tu 6epoca. ¿O acaso en tu epoca de juventud (mas temprana, por supuesto)todo el mundo hablaba utilizando todas las palabras del diccionario?Mas alla de eso lo cierto es que lo del anuncio es vergonzoso, no mola nada y sobre todo no es guay.
03 noviembre 2005 | 14:09
En el “El Arcipreste de Talavera. Reprobación del amor mundano”, más conocido por el “Corbacho”, un libro terriblemente misógino en el que se pasa revista a las mujeres avariciosas, murmuradoras, codiciosas, envidiosas, inconstantes, falsas, desobedientes, soberbias, fatuas, perjuras, borrachas, criticonas, lujuriosas… (las virtuosas parece ser que no existían en el siglo XV), termina su autor, Alfonso Martínez de Toledo, Arcipreste de Talavera, con esta cínica sentencia: “Guay del que duerme solo”.Por si no quedara bien claro, explica después:«En el año octavo a diez de setiembre fue la presente escriptura, reynando Júpiter en la casa de Venus, estando mal Saturno de mal de costado. Pero, ¡guay del cuytado que siempre solo duerme con dolor de axaqueca, o en su casa rueca nunca entra en todo el año! Este es el peor daño. Deo gratias.Guay de los que sólo saben decir guay!, que diría el Arcipreste.
04 noviembre 2005 | 17:57
Preciosa cita, niNunca.
04 noviembre 2005 | 18:00
komo se llama la cancion???mola mazo tronkoxD
15 diciembre 2006 | 17:02