Cada vez creo en menos cosas Un foro para pensar en lo divino y en lo humano

La autoridad del profesor

José Saramago, en unas jornadas celebradas en Buenos Aires, acaba de alertarnos sobre la situación alarmante que se está viviendo en la enseñanza española. Profesores maltratados, cuando no aterrorizados por sus alumnos, en estado de depresión permanente, padres que se suman a las amenazas, alumnos que no tienen la menor intención de aprender ni de dejar estudiar a los compañeros…

Soy hermano, tío y amigo de profesores. Y todos ellos, sin excepción, describen su labor diaria como una pesadilla, donde se discute incluso si el docente debe enseñar subido o no a una tarima (parece ser una amenaza terrible para la sensibilidad de los adolescentes), donde todos los alumnos se saben de memoria sus derechos pero parecen olvidar sus deberes.

Al alumno no se le puede levantar la voz, ni expulsar de clase, a no ser que haya incurrido en delito flagrante, y si después de una especie de tribunal de profesores se decide su expulsión, ésta no puede exceder de 29 días. Al término de esa vacación forzosa vuelve como un héroe a ojos de sus compañeros.

No importa que el alumno sea un cafre, un vago o un imbécil clínico, él sabe que aunque suspenda pasará curso, en una especie de promoción automática “por imperativo legal”. Mediante tan ingenioso sistema, el resto del alumnado debe ponerse a la altura que le corresponde, o sea, al ritmo de los mediocres e indeseables, para que estos no se sientan abandonados en su inmensa necedad. Así, todos iguales. Como resultado, pueden llegar a las puertas mismas de la universidad después de acumular una vastísima ignorancia, tras haber rebajado la calidad general de la enseñanza en todas las aulas por las que han vegetado.

Todo ello es el fruto de una de las reformas educativas más incomprensibles del PSOE, alimentada por un mal entendido sentido del principio de autoridad. Hay una izquierda de manual que considera que el ejercicio de la autoridad es el reflejo de la represión, y que la represión es castrante para la inteligencia del alumno. Fueron tantos años de represión política que acabamos confundiendo el culo con las témporas. Olvidar que el profesor necesita estar investido de la “auctoritas” ante sus alumnos es no comprender el mecanismo de la enseñanza y del aprendizaje.

Creo que es urgente un gran pacto en la enseñanza, con todos los partidos sentados a una mesa. De lo contrario, en tan solo una generación más, la universidad podría ser asaltada por hordas de cafres titulados que exigirán ser médicos, ingenieros, abogados, arquitectos o informáticos por la cara, por el curioso método de la promoción automática.

43 comentarios

  1. Dice ser Fuego!!

    Vaya vaya manolito, así que el psoe no ha sido tan estupendo, no? Vamos, que el tema de la educación como que no ha sido muy acertado, más bien un desastre. Pues así vamos, porque gracias al estupendo de zetapé ahora estos necios de los que hablas, o sea, mucha pero que mucha chusma, no van a cambiar de rumbo y van a poder sumarse al invento de la huelga y avanzar en la carrera de analfabestias en que se están convirtiendo. Y eso, manolito, no ocurriría con otro tipo de educación con la que parece que te sale urticaria o algo así…

    30 noviembre -0001 | 00:00

  2. Dice ser Fernando*

    Susana, no creo que lo haya metido en el mismo saco.Mire, yo no creo que la culpa sea de que no hay respeto a los profesores, sino que los padres no han sabido enseñarle a comportarse.Yo tengo 29 años y cuando iba a EGB nunca jamas se me habría ocurrido meterme con un profesor. ¿por respeto a el? ¡Que va!! ¡si todos tenian su mote!POR respeto a MIS padres. Sabia que el castigo que me pudieran poner en clase no sería nada en comparacion con lo que me podía esperar en casa.

    30 noviembre -0001 | 00:00

  3. Dice ser Manuel Saco

    Para SusanaComo padre que soy de un hijo muy educado y razonablemente estudioso, podrás imaginarte que no estaba generalizando. Verás que me refiero a los cafres que no dejan estudiar a los demás compañeros, ralentizan la marcha del aprendizaje y empobrecen la calidad de la enseñanza. Mis hermanos, sobrinos y amigos enseñantes se quejan precisamente de esos cafres (entre los que afortunadamente no están ni tu hijo ni el mío) que reducen a la mediocridad a los integrantes de una aula entera.Y si tu hijo ha sido agredido verbalmente por un profesor, el cafre es el profesor. Pero no quieras matar al mensajero que soy yo.

    30 noviembre -0001 | 00:00

  4. Dice ser maria

    yo esto de la violencia escolar de los chicos estos cafres que se meten con los porfesores no lo beo bien pienso que son los padres que pasan mucho de sus hijos o que los niños aprenden lo que ven en casa esto deberia acabarse.pero yo recuerdo cuando no me sabia la leccion me daban en la palma de la mano con una bara de olivo o un capon en la cabeza con la mano de la seño que tenia por anillo un pedruzco que aquello dolia ni se sabe y si llorabas la misma maestra incitaba a los demas a que nos llemase llorona muchas veces repetidas eso les digo que crea un trauma lo se por experiencia ni tanto como antes ni tan poco como ahora aunque siempre hay que haber un respeto hacia el docente y darse a respeter el docente que hay profesores que tontean mucho con los alumnos y sobre todo con las niñas y se tienen que dar a respetar que yo cuando beia a mi maestra por el pueblo despues de clase le seguia teniendo respeto y hasta miedo ojala los gobernantes y entre todos arreglemos esto.

    30 noviembre -0001 | 00:00

  5. Dice ser Ma.Isabel

    Aquí, en Argentina, pasan cosas similares. Ya desde el Jardín de Infantes, los niños hacen y dicen lo que quieren, y ni hablar de poner un dedo encima, porque entonces los padres te denuncian por el Código Penal, llaman a los medios y se arma una que ni te cuento. En el colegio primario, así el niño sea un idiota total no puede repetir el curso, los maestros ya lo saben por directivas del Ministerio, parece una broma, pero no lo es. En el colegio secundario ocurre otro tanto. Todo este tema se fué dando al cambiar la ley Federal de Educación en la década de los 90, en donde se cambió «calidad» por «cantidad» entre otras cosas. Al llegar a la Universidad, el 90% reprueba el curso de ingreso. Además, el presupuesto votado por el Congreso para el 2006 otorga para educación el 13% (glup). Están formando generaciones ignorantes. Cuanto más ignorante es un pueblo, más se lo manipula. Desde que tengo uso de razón escucho a los políticos hablar sobre el tema en cuestión, y lo toman como caballito de batalla para las elecciones. El domingo pasado hemos elegido nuevos representantes para ambas Cámaras. Cumplirán con la promesa de estudiar a fondo el asunto entre todos?

    27 octubre 2005 | 01:02

  6. Dice ser Txema

    Ya han llegado, ya estan en la universidad.La universidad de Murcia esta montando una semana festiva de bienvenida con multiples actos culturales y algunos de esos cafres estan mandando un e-mail incendiario contra el rectorado porque les ha quitado la unica actividad al aire libre, la unica en la que,subrepticiamente, podian emborracharse como cosacos. El año pasado ya destrozaron puertas, ventanas, aseos y lo que es mas grave, experimentos internacionales del CSIC. Actos realizados por universitarios y no universitarios invitados por los amigos. Esos dias se registro un gran descenso en la asistencia a los institutos, curioso cuando menos.Pero la universidad todavia resiste contra la «promocion automatica» y por suerte, esos cafres que no quieren estudiar apenas llegan a la universidad.

    27 octubre 2005 | 01:41

  7. Dice ser F.J.

    Manolo, cada día me tienes más enganchado a tu blog.Suscribo lo que dices palabra por palabra. Punto por punto. Algunos confunden libertad con libertinaje, y otros, como bien comentas, confunden represión con autoridad, progresismo con ausencia de disciplina.Yo no sé qué será de esta juventud, pero sí que no me gustaría que mis futuros hijos sean «unos de ellos».En mis tiempos de colegio pasé por centros religiosos, concertados laicos y públicos. En todos ellos, por encima de cualquier temario de cualquier asignatura, me enseñaron a respetar, a convivir con los demás y cultivaron mis ansias de conocimiento. Pero no sólo en el colegio, sino también en casa. ¿No será que los padres actuales obvian su responsabilidad, no ya de enseñar, sino de educar?

    27 octubre 2005 | 02:01

  8. Dice ser LectorX

    Creo que aquí se efectúa una visión parcial del problema. La educación ha de ser integral, coincido en que los padres deben ser un elemento fundamental en el proceso de la formación vital de sus hijos. Ahora bien, a los profesores hay que garantizarles que los alumnos les respeten, pero no necesariamente imbulléndoles de una autoridad que se confunda con el autoritarismo. Si quizás se produjese el apoyo paterno a este respecto se facilitarían las cosas; esa visión por los infantes, de que los padres están de su lado, puede resultar muy perniciosa.Deberían de proveerse los mecanismos pertinentes para ello, sea mediante reformas legales o mediante otras vías, de forma que se garantice el susodicho respeto. Se debe crear también una concienciación social, que haga recapacitar a los padres sobre ciertas actitudes, sobreprotectoras para con sus descendientes, a la vez que menospreciativas hacia la ardua y compleja labor del profesorado. Amigos del gremio me comentan que se ha pasado de un extremo a otro.Como sistema educativo me parece lo que están demostrando los diversos estudios realizados: la calidad brilla por su ausencia, estamos a la cola de Europa. La desmotivación provocada por la «promoción automática» que Manuel menciona, unido a la influencia televisiva y social, que provoca una percepción que minusvalora el conocimiento y la cultura frente a la facilidad para acceder a la fama, dinero, etc a cualquier precio y sin necesidad de estas cualidades está revirtiendo en el gran desinterés por la formación de los jóvenes. La percepción de esta realidad en que ciertos personajes alcanzan un «reconocimiento social» mal entendido no puede ser en absoluto positiva, sobre todo por las vías empleadas para ello.Esta idiotización de los jóvenes nos va a llevar a una generación de analfabetismo funcional. Personas que no tendrán más que los mínimos conocimientos sin ninguna solidez. Por supuesto como masa serán mucho más fáciles de manipular por los políticos: la cultura es el mejor medio para poder opinar y participar en la vida pública a todos los niveles .Hay que actuar, cuanto antes mejor, pues el derecho y en mi opinión el deber de formarse, es ineludible.

    27 octubre 2005 | 02:53

  9. Dice ser morituri

    La verdad, Manolo, no me esperaba esto de tí. Dices unas cosas tan reaccionarias, absurdas e inconsecuentes que me hacen pensar que tu condición de hijo, hermano y tío de maestros –sufridos maestros, por lo visto– ha pesado más en tu razonamiento que la capacidad crítica y el pensamiento libre al que nos tienes acostumbrados.Elevas a categoría unas anécdotas seguramente magnificadas (soy testigo de alguna de esas magnificaciones), y juzgas irremisiblemente culpables, sin atenuantes, a los eslabones más débiles de la cadena. Joder, tío, vaya papelón.Lo siento, amigo, pero no estoy de acuerdo en absoluto. Para mí, los «malos» (ya que parece que tiene que haber alguno) son ellos, los profesores y maestros, los directores y catedráticos, los inspectores y censores. La autoridad se gana, no se impone (eso es autoritarismo). Igual que el respeto. Y si no se la saben ganar, que aprendan ellos también, que nunca es tarde. Pero que dejen de llorar y acusar a los débiles, porque es un mal ejemplo.El sistema educativo occidental se está derrumbando, como dices que dice Saramago, pero te aseguro que no es por causa de los «malos» alumnos que desafían a la autoridad (competente, supongo, como la que debía llegar al Congreso el 23 F, ¿no?), critican lo establecido y buscan nuevos caminos. No va por ahí la cosa, no. No son la enfermedad, son el síntoma.A los culpables hay que buscarlos por arriba, como siempre. Hay que buscarlos entre los políticos que diseñan los absurdos e interesados planes de educación; entre los editores de libros de texto que hacen inmensos negocios con algo tan básico;o entre los profesores y maestros, que no son capaces de ganarse la confianza, el respeto y la autoridad que necesitan. No son capaces. No saben. Culpar a los estudiantes del desastre de la educación es como culpar a los inmigrantes por querer entrar en Europa sin tener en cuenta que durante más de un siglo les hemos estado robando la riqueza de sus paises con absoluto descaro e impunidad.Es más, para radicalizar un poco más mi postura –cuanto mayor me hago me radicalizo más, ya ves– te diría que confío más en esos «malos» alumnos, rebeldes, insumisos, críticos y broncas, para encontrar una solución a los problemas de este mundo que en los «buenos» y estudiosos, que posiblemente se sepan, cuando acaben su «formación» (¿nacional?), de memoria sus deberes, pero tal vez hayan olvidado sus derechos.Hay otras muchas cosas de tu columna que me gustaría cometar (lo de «olvidar que el profesor necesita estar investido de la “auctoritas” ante sus alumnos es no comprender el mecanismo de la enseñanza y del aprendizaje» es apoteósico; y eso de que «en tan solo una generación más, la universidad podría ser asaltada por hordas de cafres titulados que exigirán ser médicos, ingenieros, abogados, arquitectos o informáticos por la cara, por el curioso método de la promoción automática» es digno del «España corre el peligro de romperse» de Rajoy y Aznar) pero estoy cansado y lo dejo, tal vez, para otro día. Repito, no me lo esperaba de tí. Ojalá recapacites.Un cordial saludo.

    27 octubre 2005 | 03:57

  10. Dice ser Manuel Saco

    Para morituriVeo que me conoces por mis anteriores escritos y que por eso te extraña mi posición en este asunto. Ni te imaginas cuántas veces medité sobre ello. Sólo quisiera que nos dieses la fórmula para que profesores y maestros puedan “ganarse la confianza, el respeto y la autoridad que necesitan”. Por qué hoy “no saben” ni “son capaces” y antes sí.Mira, ya avisé de que una postura como la tuya es la clásica de la izquierda “de manual”. También nosotros en la izquierda (en la que me incluyo) tenemos los tabúes de lo políticamente correcto. No sé qué edad tendrás, pero cuando yo era joven, obligados por ese manual, también creíamos que Polonia y la Unión Soviética eran nuestros paraísos en la Tierra. Tuve que liberarme de todos mis dioses, religiosos y políticos, para poder desarrollar mi ideario al margen de manuales de lo políticamente correcto. Sólo te pido ahora el mismo esfuerzo. Sólo te pido que te acerques a profesores y maestros, cuanto más ácratas y de izquierdas mejor (todavía necesitamos en nuestro fuero interno esa “auctoritas”) y les hagas las misma preguntas que yo me hacía sobre la calidad de la enseñanza y cuáles son las causas de su deterioro. Y toma nota de lo que te cuenten. Porque te puedo asegurar que mis amistades y mis fuentes, como te puedes imaginar, no militan precisamente en el PP.

    27 octubre 2005 | 07:47

  11. Dice ser Tom

    Para Morituri: Yo como testigo en un tren de cercanias:Un joven de unos diecisiete años, acompañado de otro se sienta junto a un hombre de unos cincuenta años. Mueve las piernas y el cuerpo todo el tiempo, molestando y tocando a este hombre que en un momento dado le pide que se esté quieto. Respuesta del joven: si te molesto cambiate de sitio. El hombre se levanta le coge por las solapas (de la cazadora) y le dice: No soy ni tu padre, ni tu profesor, asi que si me sigues molestando te daré con toda tranquilidad tal paliza que saldrás en silla de ruedas del vagón. Le dejó helado y su amigo le dijo: vamonos, este tio está loco. Se fueron. El hombre se volvió a sentar. Me encantó la escena.

    27 octubre 2005 | 08:45

  12. Dice ser Gómez

    Amigo Tom: Tú has visto muchas pelis de suecenaguer y toda la serie de Rambo

    27 octubre 2005 | 09:24

  13. Dice ser olalla

    menos mal que alguien dice de una vez que el psoe la cago con la logse, ya era hora, haber si provocamos una reforma de la educacion, para bien, porque ni el psoe ni el pp han sabido hacer nada bueno en temas de educacion.yo quiero comentaros que todo esto empezo en esa epoca cuando ibas al colegio y en vez de llamar al profesor sr. tal o sr. cual te decian llamame juan o pedro, no me llames de ud. por favor, a mi eso me paso con mis hijos, les dije siempre que respetaran al profesor y le hablaran de ud. pero ellos mismos no lo permitieron y se pusieron al nivel del alumno y con los chavales o estas por encima o te pisan, quieren ir de coleguitas para estar cerca del alumno y eso es un error, el profesor esta por encima, muy por encima.

    27 octubre 2005 | 09:33

  14. Dice ser Tom

    Para Gomez: Ni mucho menos. Ademas la cosa no fue violenta (fisicamente) y duró muy poco.Solo ponía este ejemplo para señalar que la educación y el respeto se deberían enseñar en el hogar. Y que cuando no se aprenden de pequeño, a veces de mayor te ponen en tu sitio y es peor.

    27 octubre 2005 | 09:42

  15. Dice ser Gómez

    Amigo Tom: tú has visto muchas pelis del suaceneguer y toda la serie del Rambo

    27 octubre 2005 | 09:43

  16. Dice ser olalla

    eso me decia mi madre: las tortas que no te de yo te las dara la vida.

    27 octubre 2005 | 09:45

  17. Dice ser Jesus

    Gomez: A mi me encantan esas peliculas. No se si será verdad lo que dice Tom pero me hubiera encantado ver esa escena.Los chulos me cargan mucho, sabes?

    27 octubre 2005 | 10:20

  18. Dice ser Transformer

    Querido Manolo:La autoridad (que, etimólógicamente, significa: aquello que sólo se basa en sí mismo)no es un derecho, es un don (¡como diría Ratzinger! jajaja). Quiero decir: no basta con querer ser respetado, hay que merecer respeto. Y eso implica, en el asunto que nos ocupa: tener dotes escénicas, capacidad de persuasión, cierto carisma y, por qué no, cierta habilidad seductora. Un profesor no puede pretender imponer orden y suscitar interés si su técnica docente se limita a repetir frases hechas, de manera cansina y recurrente. Ha de «currarse» al público. Por desgracia, demasiados licenciados se arrojaron a la enseñanza por motivos puramente alimenticios, y así les luce el pelo.La labor docente, como cualquier otra ocupación, merece el respeto que quien la desempeña sea capaz de suscitar. Un mal profesor no logrará la aquiescencia del alumnado sólo por imponer orden con el reglamento en la mano.¿Me he extendido mucho? Pues el tema da para más…http://blogia.com/transformer

    27 octubre 2005 | 11:35

  19. Dice ser Carlos

    Manolo, un apunte para tus reflexiones sobre educación, ¿no será que las escuelas en vez de enseñar se han convertido en guarderias?,quiero decir con esto, que los padres trabajadores lo que necesitan son sitios donde dejar a sus hijos porque ellos están muy ocupados y además, cuando llegan a casa están cansados, y que mejor que la video-consola para tenerlos ocupados.El buenos dias,no se enseña en el cole, a comer con cubiertos creo que no me lo enseño mi profe de mates…Saludos, Carlos.

    27 octubre 2005 | 11:47

  20. Dice ser codorniu

    Yo también tengo amigos y familiares trabajando en centros de enseñanza media y efectivamente las historias que se cuentan son de miedo.Es más, tengo 2 hijos en edad de asistir a esos centros, y todas mis expectativas sobre la rebeldía adolescente han sido superadas con creces.Creo que es algo que va mucho más allá de los colegios. En los últimos años hemos visto cómo algunas personas se hacían inmensamente ricas en este país (España), sin que su riqueza tuviera nada que ver ni con el esfuerzo ni con el estudio.El reduccionismo de todo valor moral a un precio de mercado ha calado en la sociedad, y estamos creando una juventud insensible a cualquier cosa que no se pueda medir en euros.Como decía el poeta: todo necio confunde valor y precio.

    27 octubre 2005 | 12:38

  21. Dice ser Rubén

    Fuego!, en la anterior legislatura, las mejoras que se hicieron beneficiaron más a la enseñanza privada que a la pública, y las reformas de calidad que se realizaron son ampliamente cuestionables…Así que no es un problema único de ZP.Por otro lado, yo creo que para abordar este tema, tenemos que analizar que ha habido un gran cambio social en nuestro país en estos últimos 20 años, y lo digo yo, con 22 años de edad. Creo que, debido al ritmo de vida, a la necesidad consumista, al precio de la vida, las cosas han cogido este rumbo, por que era natural. Me explico: Cuando yo estudiaba, mi madre nos cuidaba, a mi y a mi hermana. Me educó en el respeto a las personas, y demás cosas sobre la vida (creo que es lo que generalmente hacía una madre o un padre). Mi madre se encagraba de hacerme estudiar, de preocuparse por mi, de ayudarme… A su vez, mi madre me negaba muchas cosas innecesarias. Yo no tenía unas nike de 200 euros, no usaba la ropa más cara, y no me compraba todo lo que la pedía. Y sin embargo, nunca me faltó de nada.Actualmente, por el contrario, los padres, ambos, trabajan. Trabajan para poder afrontar el nivel de vida auto-impuesto, y trabajan para poder permitirselo. Ahora veo que muchos padres apenas conviven con sus hijos, y, es más, cuando llegan de trabajar no tienen ganas de tener problemas con ellos, ya sea un niño de 7 años, que un adolescente en la «edad del pavo». Los padres, en muchos casos, han tomado la determinación de «darle todo lo que piden» para no crearles traumas (yo no tuve ninguno). Les permiten todo, y no les niegan nada. Y sin embargo, lo más importante, la educación familiar, y la convivencia, es negada. ¿De que sirven esas deportivas de marca tan caras, si no tiene unos valores minimamente fundamentados?Por otro lado, la logse que inició Felipe Gonzalez, era y es obligatoria, para adecuarse a la UE, y por que, ¡caray! un niño tiene sus derechos. Lo que no es lógico es que un niño deje de estudiar a los 14 (cuando se terminaba 8º de EGB) y si no quiere estudiar, tiene dos años de no hacer nada, o de trabajar por económia sumergida (como ocurría en aquel entonces). Como esto es inadmisible, y por normativa europea, se produjo el aumento de edad. Ese aumento de edad ha llevado a chavales que antes no querian estudiar a estar ahí, en clase por narices.Otro punto social más a tener en cuenta: si se analiza la taxonomía de alumnos en una clase actual, la cosa ha cambiado una barbaridad. Cuando yo estudiaba, en un centro normal, lo típico era encontrarse a un par empolloncetes (no le quiero dar un tono peyorativo, unicamente clasificatorio), un típico marginadillo, un grupo central de chavales digamos de clase media (notas medias, comportamiento normal) y un par de «malos». Los únicos que trasgredían las normas eran esos malos, que eran reprendidos por los profesores. El resto de la clase seguía siendo respetuosa, y todo funcionaba, más o menos. Sin embargo, ahora, podemos encontrar una clasificación parecida: uno grupo reducido de chavales muy estudiosos, algunos chavales que sufren lo que ahora se llama acoso (los que antaño eran los marginados), un núcleo central, y el grupo de «malos». Y el problema es que ahora, como ser «malo» es guay, pues el núcleo central sigue el royo a los cuatro tontos, y eso conlleva a un descontrol muy muy grande. Como bien han dicho ya, han confundido la libertad con el libertinaje, y no hay ningún tipo de respeto. Pero, ¿es labor de los profesores educar en esos valores? Creo que un profesor de matemáticas debe enseñar matemáticas, y no tener que enfrentarse a cuatro o veinte adolescentes rebeldes. Creo que el respeto tiene que aprenderse en el ámbito familiar. Y si sus padres no son capaces o no quieren… (¿por qué traen hijos al mundo para eso?).Y ya como final para este cacho de royo que estoy largando… creo que algunos profesores no se mojan apenas nada. Si analizo mi vida de estudiante, puedo decir que a lo largo de ella he tenido a varios profesores muy malos, (númericamente, cerca de 5 ó 6) a profesores que han hecho su trabajo de manera normal, y digamos que a unos 3 profesores que realmente han sido muy buenos, y que les recuerdo con gran cariño. Y también recuerdo que algunos de los profesores, se han dejado llevar por la desidia en muchos casos. Pero claro está, si cada vez tienen menos autoridad, y tienen menos derechos como profesores, por otro lado es totalmente comprensible.Bueno, ahí dejo mi opinión, quien la quiera, que la coja.Saludos a todo@s, y Saco, muchas gracias por tener a diario tu blog 😉

    27 octubre 2005 | 13:07

  22. Dice ser genaro

    No puede ser ¡¡es imposible!!. Este no es mi Saco que me lo han cambiado. Tan stalinista él y por una vez hasta coincido y aplaudo. Creo que reflejas realmente lo que pasa en los Institutos. Mangantes que promocionan «porque así nos libramos de ellos». Padres Cafres que amenazan/chantajean a los profes y etc, etc. Hacia tiempo que no te leía por tus visceralidades y tu apoyo sectario y a «ultranza» del clan sociata. En fin, que hoy «chapeau». Un articulo profesional como la copa de un pino y que refleja lo que son los IES hoy en día.

    27 octubre 2005 | 13:35

  23. Dice ser Symad

    ¿para que estudiar durante años una carrera si luego te explotan y humillan por una miseria de sueldo?Y olvidate de trabajar en aquello para lo que has estudiado.No me extraña que los jovenes de ahora pasen de todo.Es mejor Operación Triunfo.

    27 octubre 2005 | 13:38

  24. Dice ser morituri

    Para manolo saco.»…lo que hace crecer el mundo no es el descubrir cómo está hecho,sino el esfuerzo de cada uno por descubrirlo.»(José Martí)Gracias, manolo, por tu atención y tu respuesta. No me convence mucho, es cierto, pero agradezco el esfuerzo. Te honra.Y ahora, a lo nuestro. Me has pillado, manolo. No tengo la fórmula para hacer que los maestros y profesores se ganen la autoridad y el respeto de sus alumnos (por cierto, yo no dije que antes sí se los ganaran, eso es cosecha tuya). Caray. Ya todo mi discurso se derrumba y mi pensamiento se diluye como el azucarillo en el café. Has sido muy perspicaz, lo reconozco. Me rindo. No me sabía la lección y merezco un cero. Suspendido. Que no pase de curso.Aunque bien pensado, tengo una fórmula que tal vez se podría utilizar: E=mc2. ¿Qué te parece? ¿Sabrías aplicarla? Es de un tipo que allá por los últimos años del siglo 19 fue tenazmente desacreditado en su colegio por mal estudiante. Sus maestros decían que era imposible hacer de él un alumno aplicado y, aunque logró a duras penas terminar su formación, pocos, de entre sus mayores, confiaban en sus escasas dotes intelectuales. Era un mal alumno. No debería haber pasado de curso tampoco él.Pero no, la verdad, no tengo una fórmula. Creo, eso sí, en las palabras de Martí con las que encabezo este escrito. Creo en el esfuerzo y en la libertad. Y huyo de los recursos fáciles y las etiquetas a la hora de debatir unas ideas. Desde mi punto de vista, desacreditan al que las utiliza y, además, le impiden desarrollar un discurso interior coherente. Si a tí te parece suficiente para invalidar mis opiniones el decir que mi postura es la de un izquierdista «de manual», lo siento, pero más por tí que por mí. Porque te pierdes lo más jugoso de mis disquisiciones, de las que, si no las etiquetaras –si no las encerraras en un recipiente que ya das por conocido– tal vez hubieras podido beneficiarte algo. Tal vez, sólo tal vez.En todo caso, te diré que mi manual no parece ser el mismo que el tuyo. Yo no entendí nunca como paraiso en la Tierra al régimen de Stalin y por lo tanto no necesité posteriormente desdecirme de lo que había dicho ni abrir los ojos o caerme del guindo. Por eso, tampoco puedo ahora confiar en que «un gran pacto en la enseñanza, con todos los partidos sentados a una mesa» resuelva este grave problema. ¿Realmente crees que estos representantes del sistema capitalista de mercado pueden poner sobre una mesa algún tipo de solución, auténtica solución, a los retos educativos que tenemos planteados? ¿No crees que te puedes estar subiendo a otro guindo del que en un futuro más o menos próximo te vayas a caer?Yo no creo en tu propuesta, amigo. El «manual» neoliberal que ahora se utiliza no lo consiente, no lo autoriza. Lo que tiene que llegar a la educación es un espíritu revolucionario que está lejos de ser ni siquiera planteado, no digamos ya entendido o aceptado. Incluso la propia palabra revolución está siendo desacreditada de una manera feroz, propia de los seres temerosos y pusilánimes. El camino a la solución no creo que vaya por ahí. Disiento.Yo creo que el esfuerzo lo tenemos que hacer todos los implicados en la educación, pero fundamentalkmente los elementos de base. Creo que maestros, profsores, padres, etc, debemos darnos a nosotros mismos y a nuestros educandos la oportunidad de expresar nuestras ideas y necesidades y organizarnos y luchar para hacernos oir. Creo que las soluciones siempre vienen de abajo y empujan hacia arriba. Apañados estamos si tenemos que esperar a que el puñado de … (pon tú lo que quieras) que manejan el poder nos ofrezcan respuestas competentes.(Por cierto, no creo que tengamos que temer el que en un futuro los habitantes de este país se conviertan en analfabetos funcionales, como alerta un contertulio. Ya lo son, gracias al sistema imperante).En fin, que el camino es arduo, y el esfuerzo, ingente. Ante nuestros ojos millones de jóvenes de todo el primer mundo exigen, con razón, soluciones acordes con el futuro que les espera, no simples apaños para perpetuar un sistema injusto. Ciegos y sordos, los que tenemos la responsabilidad y el deber de ofrecérselas, aceptamos las recomendaciones de la autoridad (competente, por supuesto) y les enfrentamos. Más orden, más control, más autoridad, más respeto, más mano dura. Qué se habrán creido.Pero si esto no pasaba antes, manolo, cómo es que estamos tu y yo aquí, diciéndonos estas cosas. El derecho a la protesta, la rebeldía y el desacuerdo que seguramente tú ejerciste, ¿acabó con nosotros? ¿Este es el mundo que los jóvenes deben aceptar? ¿Esta es la educación que hay que recibir? ¿Este es el orden que hay que respetar?Por último, una aclaración-resumen por si hiciera falta. No estoy dando por buenos comportamientos antisociales, irrespetuosos o agresivos por parte de los alumnos. Lo que digo es que esos comportamientos son el síntoma de una enfermedad que no está en ellos, sino en el sistema que los engloba. Mientras no se reforme el sistema, el descontento que activa esos comportamientos podrá reprimirse, tal vez ocultarse, pero nunca resolverse. Por bajar la fiebre no se cura la infección. Que quede claro.Te agradezco, de nuevo, la posibilidad de colocar aquí estas reflexiones. Hasta la próxima. Un cordial saludo.

    27 octubre 2005 | 13:39

  25. Dice ser Fernando*

    ¿Se sorprenden de este ultimo articulo? ¿les parece que no está en linea con «la forma de pensar izquierdista»?Caramba!! Lo que pasa es que los progresistas de verdad no aceptamos dogmas ni seguimos consignas!!!!!!!!!!!!!!!

    27 octubre 2005 | 14:08

  26. Dice ser otro saco

    me alegro,que vuelvas con la familia.Felicidades

    27 octubre 2005 | 16:15

  27. Dice ser DeLaDeuda

    Si el sistema de educación exige menos lo más normal es q la gente salga menos preparada.Quizá no solo haya q reformar el sistema educativo para exigir más, sino también preparar al profesorado ante situaciones en las q se socave su respeto y autoridad.Cuando pienso en buenos profesores recuerdo aquellos q sabían «vender» su asignatura, y no eran los mas blandos, ni simpaticos , ni más carismáticos necesariamente. Creo q eran los q disfrutaban enseñando su asignatura y eso se contagiaba en forma de interés en los alumnos. También recuerdo q ninguno de ellos se dió de baja por depresión nunca.

    27 octubre 2005 | 17:38

  28. Dice ser Observador

    Suscribo punto por punto lo que ha dicho Saco y yo ya he dado mi opinión sobre éste tema en otros foros.A quien yo descargo la mayor responsabilidad es a los padres: como ellos sufrieron tanta autoridad depostica en el pasado ahora quieren que sus hijos no la sufran pero confunden autoridad con disciplina. La disciplina es fundamental en el tema de la enseñanza. Como dijo Calixto Sánchez (un maestro y cantaor flamenco) en una conferencia: «cuando el niño sale bueno se parece al padre, cuando sale malo la culpa es del maestro». La enseñanza corresponde a la escuela pero la educación es responsabilidad de los padres.Otra gran responsable de la carencia de valores éticos y cívicos entre los estudiantes y la juventud es la caja tonta. Entre Crónicas Marranas, Grandes Marranos, Hoteles glamourosos, Salsas rosas más parecidas a marrones y tantos vividores del cuentos y vividoras de la entrepierna están haciendo que cada día se encuentre uno más maharetas por el mundo, con una diarrea mental tal que dá asco. Cualquiera que sea un poco observador lo podrá comprobar.En fín, así no mes extraña que haya cada día más acosos psicológicos a los profesores y entre los mismos compañeros de estudios en los cuales ya ha habido hasta algunos suicidios. Justo en mi barrio hay un grupito de ellos que tienen atemorizado a los comerciantes y a todos los vecinos. Y a ver quién tiene cojones de decirles algo, vienen sus papas y son capaces de denunciarte encima.

    27 octubre 2005 | 18:43

  29. Dice ser Universitario

    basicamente me parece que,aunque esta muy bien el articulo,como siempre,no creo que haya mucho de que preocuparse por el hecho de que vayan a asaltar las universidades:estarán un año o dos como mucho,pero a un burro lo acaban echando.Lo de la promocion automatica no funciona en la uni, y lo digo yo que soy «ingeniero» que las normas de permanencia en ciertas universidades son muy estrictas.En cuanto al ambiente en las aulas estoy totalmente deacuerdo contigo,es mas, en mi clase mas de un profesor se tuvo que marchar debido a las «maravillas» que les decian mis compañeros, pero no creo que eso sea debido a que traten de hacerse los «compañeros»:yo tuve 1 par de profesores excelentes con los que se podia hablar de todo y hasta los mas malotes les respeteban,supongo que todo esta en saber manejarse…Bueno lo dicho,felicidades con el articulo y a esperar el proximo

    27 octubre 2005 | 18:50

  30. Dice ser luis

    Señor Saco, por fin ha escrito ud. un artículo que merezca la pena.

    27 octubre 2005 | 18:53

  31. Dice ser pepa

    Ahora resulta que los profesores «tienen» que ganarse el respeto. Yo creía que todas las personas, por el hecho de serlo, nos lo merecemos. Yo, al menos, con los jovencitos que trato pido el mismo respeto que les muestro ¿y de que sirve? Siempre hay un grupito de niñatos mas cerca del gorila que del homo sapiens que piensan que su manera de ganarse el respeto de sus semejantes es hacerse los gallitos.Creo que el deber de los docentes es enseñar matemáticas, lengua o cualquiera que sea su asignatura. La educación se aprende en casa como muy bien ha dicho Carlos y cuando en casa ni se molestan en preparar a sus propios hijos no sé por qué los profesores tienen que sufrirlo.Curiosamente los jovencitos peor educados suelen ser maltratados en su casa, de modo que no hay que confundir autoridad con violencia. La violencia solamente genera mas violencia.

    27 octubre 2005 | 19:04

  32. Dice ser Daniel

    Me sorprende ser el único, o de los pocos maestros que han escrito aqui. Por tanto me siento en cierto modo apoyado por el autor y realmente menospreciado por alguno de vosotros.Doy clase en primer ciclo de primaria (6-7 años) y la verdad es que el profesor, el sistema, los compañeros… tienen una minúscula importancia e influencia en el carácter de los niños. Cuando entran en el colegio (¡¡con sólo 3 años!!) os sorprenderá saber que ya es tarde para cambiar hábitos, respeto a la autoridad (sea la que sea), valores y contravalores… 3 años y ya hemos llegado tarde!!! Lo único a lo que podemos limitarnos es a inducirle ciertas normas de convivencia social con sus iguales, adoctrinarlo con conocimientos (los que se puede) e intentar que se de cuenta de que existen otras personas adultas con otro sistema de valores.Pero ya aviso que es tarde.Los compañeros, las notas, el profesor, puede influir para mal (y para bien) a nivel profundo de personalidad y valores, sólo en unos poquitos casos. El sistema escolar cambia poco, pero necesita dinero para aplicarlo bien (la LOGSE no es tan mala, de verdad).¿Culpar al niño? Para nada. Con 3 años es culpable de muy muy muy poco. El problema es la falta de criterio educativo de los padres, la poca formación al respecto que han recibido los pobres. Llegan y preguntan ¿qué hago? cuando lo fundamental o lo han hecho ya, o no lo han hecho.Si no me creen, piensen desde cuando tienen conciencia de un código moral propio. Se lo adelanto: ya lo tenían antes de tener conciencia de sí mismos, y eso solo se aprende de lo que se vivió en casa.¡¡¡Gracias por los ánimos a esta gran mayoría racional!!!

    27 octubre 2005 | 19:45

  33. Dice ser Susana

    Vamos a situarnos, yo soy de izquierdas (no de manual pues no me he leído ni el de el DVD), tengo 40 años, por lo que no se me puede acusar de joven ingenua. También soy madre de un adolescente mal estudiante (un «cafre» según he podido leer), pues bien, mi hijo no es un cafre, cede su asiento en el autobús, trata con respeto a sus mayores y a sus menores y, sobre todo, no generaliza ni engloba como se esta hanciendo aquí.Desde que empezó a estudiar nunca le han tenido que reprender, ni expedientar por mal comportamiento o falta de respeto a los profesores, pero sí que ha tenido que aguantar la falta de respeto de algunos de ellos que le han agredido verbalmente en infinidad de ocasiones. Y ahora resulta que Manuel Saco, hombre aparentemente progresista, generaliza también y mete a todos los chavales en el mismo saco. Bien, mi frustración como madre que ha intentado por todos los medios que su hijo contínue estudiando ha alcanzado gracias a usted el nivel máximo. Yo he educado a mi hijo en el respeto y la tolerancia, pero he fracasado estrepitosamente, al final resulta que solo es un cafre.Gracias.

    28 octubre 2005 | 10:05

  34. Dice ser susana

    No quiero matar al mensajero, es más me identifico con tus mensajes bastante a menudo, quizá te has excedido en el tono y quizá yo esté muy sensibilizada con el tema. Llevo muchos años batallando con el sistema educativo y con un hijo sin demasiado ánimo para el estudio y, por mi experiencia te puedo contar que es cierto que ante determinados bestias los profesores están desprotegidos. También sé que se tienen que pegar con falta de medios, padres superprotectores, padres sin interés y alumnos sin respeto. Pero no se nos puede olvidar una cosa, son niños y al igual que a un niño asesino o ladrón se le da un trato especial potenciando su reinserción a un mal estudiante se le deben dar muchas oportunidades y comprensión. Por eso creo en un sistema flexible pero a veces lo que falla no es el sistema, ni el alumno, ni los padres, falla el profesor que no tiene amor por su trabajo ni respeto por sus alumnos. El respeto es de ida y vuelta y los niños son esponjas que notan si un profesor sólo quiere cubrir el expediente.Creo que los buenos profesores deberían protegerse como oro en paño, años sabáticos, formación continua, reconocimiento económico, largas vacaciones, y por supuesto el reconocimiento y el respeto de sus alumnos, pero esto último, los buenos profesores lo tienen del 90% de sus chicos.

    28 octubre 2005 | 14:00

  35. Dice ser susana

    No quiero matar al mensajero, es más me identifico con tus mensajes bastante a menudo, quizá te has excedido en el tono y quizá yo esté muy sensibilizada con el tema. Llevo muchos años batallando con el sistema educativo y con un hijo sin demasiado ánimo para el estudio y, por mi experiencia te puedo contar que es cierto que ante determinados bestias los profesores están desprotegidos. También sé que se tienen que pegar con falta de medios, padres superprotectores, padres sin interés y alumnos sin respeto. Pero no se nos puede olvidar una cosa, son niños y al igual que a un niño asesino o ladrón se le da un trato especial potenciando su reinserción a un mal estudiante se le deben dar muchas oportunidades y comprensión. Por eso creo en un sistema flexible pero a veces lo que falla no es el sistema, ni el alumno, ni los padres, falla el profesor que no tiene amor por su trabajo ni respeto por sus alumnos. El respeto es de ida y vuelta y los niños son esponjas que notan si un profesor sólo quiere cubrir el expediente.Creo que los buenos profesores deberían protegerse como oro en paño, años sabáticos, formación continua, reconocimiento económico, largas vacaciones, y por supuesto el reconocimiento y el respeto de sus alumnos, pero esto último, los buenos profesores lo tienen del 90% de sus chicos.

    28 octubre 2005 | 14:00

  36. Dice ser pepa

    Para Susana.Tal vez tu hijo no está dotado para el estudio. Simplemente. Pero la vida no se reduce a eso. Seguramente hay un montón de cosas que tu hijo hará con gusto y que le hacen felíz. No entieno la obsesión de muchos padres para que sus hijos estudien una carrera universitaria cuando lo que verdaderamente les gusta es tocar el saxofón o dedicarse a la ebanistería.No te desesperes con tu hijo. Verás como él mismo es capaz de encontrar su camino sino le ponen demasiadas barreras delante.

    28 octubre 2005 | 20:56

  37. Dice ser perrosuelto

    Paso talvez un rato por este blog de Manolo pq me gusta, pero esta vez Saco està totalmente equivocado. Ya Morituri ha hecho alguna referencia muy buena, yo puedo anadir de que no se puede analizar la escuela sin poner en tela de juicio el «sistema», siempre ha sido asì y tb los he ahora. Porgo algunos exemplos: si vamos por algunos profesionales, quièn es hoy un medico: nada meno y nada màs que un burocrata a sueldo de la Gran Pharma Internaciònal; un notario: uno rentièr; un abogado: al sueldo de mafiosos; un chimico y investigador, al sueldo de la industria de la salud. A caso, la Universidad, senor manolo Saco, tiene un curso especifico para ser ejecutivo de 2/5 miliones de dolares, màs option? O tiene, al revès, curso para trabajadores temporales de supermercado ganando una miseria? De que se ocupa, en concreto, el professorado? Se cree en la pura verdad de la ciencia, la abstracta verdad que nunca existiò u existe? Puede ser que la rebeldia de los jovenes sea infructifera, pero es sintomatica. Hay clases de como hacer dinero facil y rapido? No verdad. Pero esto es lo que sirve en la vida hoy.No hace falta tener nostalgia de URSS o Polonia, para aceptar esto «sistema» y con esto tema Saco tute pone DENTRO del sistema neoliberal y, se nota, los jovenès no son tan estupidos como para estudiar de informaticos y terminar cargando camiones. No hay màs que convertir en retorica fascistas contra isquierda. Yo soy comunista, probablemente NO el ultimo, y por ende de isquierda. A los universitarios simplemente NO LE GUSTA esta societad que es INJUSTA y punto. Los profesores han de tomar nota de que sentido tiene lo que hacen, eso si. Si Usted tiene buena capacidad intelectual, y no lo dudo, seguramente entiende el problema. El SABER no es algo saber y ganar de la tele, el saber esta DENTRO de un contexto social y economico que hay que analizar ante de quejarse de lo «poli uncorrect» de los que quièren aprender. Te lo dice un ex prof. de 70 de edad. Un abrazo.

    30 octubre 2005 | 02:13

  38. Dice ser isa

    Para Susana, me parece que tu hijo te tiene un poco engañada. Como profesora me resulta muy dificil de creer que a tu hijo, tan educado según tú, le haya insultado algún profesor. Eso se hace cuando verdaderamente el alumno te obliga a ello y por que ya no puedes soportar más su mal comportamiento en el aula. ..

    30 octubre 2005 | 19:23

  39. Dice ser Asid

    Bueno tengo 18 años y pertenecí a el sistema educativo que aquí se discute. Deje de estudiar a los 16 años por que no era lo que se dice un buen estudiante sin embargo era un chico tranquilo al que le gustaba leer ( y digo LEER no repasar los cutre-libros que nos hacían comprar en clase) el buen cine y nunca en mi vida me tuvieron que llamar la atención. Pues bien en mi clase había 4 o 6 «Malotes» que iban de mafiosetes por la vida. A mi ya solo por mis notas me tomaban como a uno de ellos y yo no era como uno de ellos! Estoy de acuerdo en que a una persona se le exija cultura pero estamos tan acostumbrados a el topico:-Mal estudiante-niñato estupido rebelde y futuro albañil.-Buen estudiante- Tranquilo modosito y futuro perito agronomo.Y si surge una excepción como yo lo fui? Caigo en desgracia? me lo merezco? Creo que en vez de fiarnos por titulos deberiamos analizar a las personas una por una y decidir a base de su personalidad-aspiraciones y conocimientos (no incluidos en el intinerario escolar)

    30 octubre 2005 | 21:10

  40. Dice ser Mequetrefe

    Mi maestra de párvulos es el mejor referente que he tenido en mi vida de estudiante, mi maestro de primero tenía su grupo de enchufados y al resto que le diesen morcilla, el de segundo debía ser ministro del Movimiento en excedencia, porque lo único que recuerdo de ese curso es que aprendimos a cantar el himno nacional (con la letra de Pemán, el Cara al Sol y Montañas Nevadas, además de una buena cantidad de relatos sobre los heroes de la Patria ( José Antonio, Girón, Ramiro Ledesma y por supuesto Don Paco), vamos, lo que se dice una educación neutra y basada en la realidad histórica; de mi maestro de tercero recuerdo que era bastante bonachón, pero ya mayor para dirigir una clase; en cuarto cambié dos veces de maestro por otros tantos cambios de ciudad y residencia, con lo que me descentré; en quinto, mi maestro pegaba con regla y le tenía miedo; el de sexto pegaba con la mano y aún más fuerte, además se ponía a leer el Interviu en clase, mientras a nosotros (en el colmo de la hipocresía)nos obligaba a leer una revista de Misiones; el de séptimo no parecía mala persona, pero estaba senil y gran parte de la clase se cachondeaba de él; por último, el de octavo era un tipo con muy mala baba y que también atizaba con la mano abierta, por lo que todos le teníamos bastante miedo.En el transcurso de toda esa época de estudiane, yo padecí una situación familiar que no procede relatar aquí. No recuerdo que ningún maestro, salvo la primera que tuve, se preocupara lo más mínimo de la situación por la que yo atravesaba y que irremediablemente condicionaba mis estudios (por suerte, nunca destaqué por ser uno de los «guerreros»). Más bien, como no destacaba por lo bueno, pero tampoco por lo malo, sencillamente no existía.Ese es mi legado de estudiante en la escuela (pública en este caso, porque no he conocido otra).

    31 octubre 2005 | 08:55

  41. Dice ser decepcionada

    Hola.Solo queria comentar que desde luego no creo que la culpa la tenga el profesorado, donde me incluyo desde hace poco. Como creo que es normal, empeze con ganas de ser dinamica, cercana, respetuosa y tratar de que aprendieran lo maximo posible.Es un colegio concertado religioso, y la verdad, los alumnos me ponen los nervios de punta, no se les puede decir nada porque no respetan nada, no se callan, no escuchan,contestan cada vez que se les llama la atencion por sus actitudes pasotas…. y luego me dicen que no se van a disculpar conmigo porque ni siquiera lo hacen con sus padres…asi que ¿alguno de los que dicen que la culpa es del profesor porque no sabe ….me podria decir que puedo hacer para que me respeten?creo que es mision imposible…y yo a este paso, me pongo a opositar para la diputacion y adios a la enseñanza! una pena, porque creo que seria buena profesora

    08 febrero 2006 | 21:23

  42. Dice ser yo

    para isaEs increible que puedas opinar tan libremente sobre los actos de un profesor y la actitud de un estudiante sin conocerlos.No puedo por menos que ponerme del lado de ésta señora, puesto que yo, como madre de una nena de 6 años vivo un dia a dia angustioso con la profe de mi niña, que la esta avocando a la aversión por el estudio. Menos mal, que el año que viene la cambio de cole y veremos si me toca arar con «otra profesional» como ésta. Y ojo, el problema de no es mi hija, como ella trata de hacerme ver. En el aula de mi hija, hay al menos 15 niños en la misma situacion que mi hija, el problema o condicionamiento es que para el resto de los papis es un mal trago que hay que pasar. Alguno que trato de decir algo al director, éste le invito muy suave a dejar el centro. Yo desde luego, decir se lo dire cuando me vaya.Un Saludo.

    20 febrero 2007 | 01:30

  43. Dice ser tu

    tengo la suerte de conocer el mundo del profesorado de colegio muy muy de cerca, desde dentro, con la imparcialidad que me da no ser ni profesor ni padre. Y puedo asegurarle al último comentario y al resto que si bien hay excepciones, confirman la regla. La aburmadora e inmensa mayoría de las veces, la culpa del mal comportamiento y resultado de los niños en el cole es de los padres. Empezando por que desautorizan al profesor, siguiendo por que consienten a los niños y continuando por que vuelven a desautorizar al profesor…Esa es la situación. Es realidad, es un hecho. Y de nada servirá a esos padres presionar y vociferar a los profesores, echando la culpa al sistema. La educación es cosa suya, y los profesores son un apoyo en eso, con un cometido principal que es la enseñanza. Ya pueden protestar, al final los borriquitos serán sus hijos y lo pagarán ellos y sus nietos…

    24 febrero 2007 | 17:29

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