La enfermedad y posterior muerte de Haro-Tecglen ha desencadenado en la web de 20 Minutos comentarios para todos los gustos, incluido el mal gusto. Algunos post tuvimos que eliminarlos, pues a la vista estaba que habían sido escritos en un despiste de sus cuidadores de enfermería (cada día está más saturada esta profesión), pero hemos dejado algunas muestras para que todos podamos medir la estatura moral de Haro-Tecglen gracias a la catadura moral de algunos de sus detractores. Por sus argumentos deduzco que son, en su mayoría, buenos cristianos, todos ellos muy satisfechos de que Satanás lo haya acogido en su seno (¿para qué coño querrá Satanás un alma como la de Haro o como la mía).
Es en momentos como éste cuando comprendo en toda su extensión aquel acto de sinceridad por parte de su dios en el Génesis: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”.
Si estos buenos cristianos son la imagen de su dios, no me extraña que vivan tan acojonados.
Le recomiendo “Cruzando el umbral de la esperanza”, de Juan Pablo II. En el expone que si Dios es puro amor e infinita misericordia, es muy probable que nadie vaya al infierno (allí sólo estaría Satanás y sus ángeles), ya que no casa con esa infinita misericordia. Yo, personalmente (y muchos exégetas de la Biblia y teólogos y el anterior Papa), creo que bastantes sufrimientos padecemos en la corta travesía por este valle lágrimas como para empalmar con más sufrimiento después.Una cosa es segura, el sr. Haro-Tecglen descansa en paz.
30 noviembre -0001 | 00:00
Si Dios nos hizo a todos a imagen y semejanza suya el cielo debe de estar plagado de multitud de diosecillos a cada cual más hijoputa.
30 noviembre -0001 | 00:00
Semejante en lo bueno, no en lo malo. Semejante es parecido no idéntico.
30 noviembre -0001 | 00:00
Para DomingoTienes razón, no puedo evitarlo, ni quiero, ni debo. Sobre todo, ni debo. Porque los comentarios a los que me refería no eran tuyos, supongo, sino de esos buenos cristianos que se alegran de la muerte de los infieles. Y debemos callarlos y hacer ver que no son una tropa inocente que va a misa y se vuelve buena después de comulgar. Tras ellos hay una estructura de poder inmensa que pretende, y lo consigue a menudo, gobernar nuestras vidas, modelar el espíritu de generaciones enteras con su moral dudosa. Mi lucha, por si no te has dado cuenta, es contra una industria multinacional muy poderosa, la industria de dios, de la que siempre saldré perdedor, por supuesto.Son ellos los que aprovecharon “la muerte de un señor” para hacer exhibición de la esencia más pura de su moral católica. Disiento contigo en otro aspecto: mi obsesión no es con dios (porque no existe, no sé si ya lo sabías), mi obsesión es con quienes están obsesionados con nosotros, sus infieles.Por último, mi presunto trauma anticlerical ya lo consulté hace tiempo con un psiquiatra. Me regañó por no haber acudido antes a él, por haberme pasado tanto tiempo yendo a la consulta del confesionario de incompetentes sanadores de almas, poniendo en peligro mi salud mental.Quizá él también estaba traumatizado por tanto intrusismo.
30 noviembre -0001 | 00:00
Hay gente que pierde el norte con una facilidad pasmosa. El aluvión de comentarios que no pueden ser calificados por menos que repugnantes demuestran cómo para algunos la libertad tiene poco significado. Gracias Manolo por llmar a las cosas por su nombre y gracias a Eduardo por el legado que nos ha dejado.
20 octubre 2005 | 08:15
Esta noche se me ha aparecido en sueños Haro-Tecglen y me ha dicho que el infierno esta lleno de tías cachondísimas, todo natural, y siempre con ganas de marcha.Que en la comida ponen reserva de Ribera del Duero y en la cena Rioja, pero que como son todos muy pecadores siempre falta.
20 octubre 2005 | 10:39
Es cierto, que comentarios más desagradables, pero no nos olvidemos, hay gente que desayuna resentimineto, come desprecio y cena odio.Me importa muy poquito la trayectoria personal de este señor, cada uno hace con y de su vida lo que quiere, pero eso no le resta un milímetro de calidad y claridad expositiva en sus artículos.Se perfectamente lo que costaría dejar su columna en-blanco-, pero no seria malo que empezaramos a dejar de pensar en -euritos-de vez en cuando. Era un deseo, nada más.
20 octubre 2005 | 11:05
Que obsesión con Dios, los cristianos y la Iglesia. ¿De verdad tienes que aprovechar la muerte de un señor para meterte con la Iglesia? Que no te gustan los comentarios de esos tipos, pues lo dices, los borras o los mandas a donde quieras. Me pregunto que culpa tendrá Dios de que alguien insulte.Corrígeme si me equivoco, pero creo que tienes algún tipo de trauma que te ha dejado secuelas que se manifiestan en tu anticlericalismo. No puedes evitarlo.
20 octubre 2005 | 11:54
Disculpe, sr. Saco, pero está equivocado en todo lo que ha expuesto. Mire lo que dice el documento conciliar Gaudium et Spes sobre los ateos (como ud dice que es): «aunque rechaza en forma absoluta el ateísmo, reconoce sinceramente que todos los hombres, creyentes y no creyentes, deben colaborar en la edificación de este mundo, en el que viven en común. Esto no puede hacerse sin un prudente y sincero diálogo» (Gaudium et Spes, 21).Se equivoca en su objetivo de lucha: imagínese que viene un «extraterrestre» a la tierra: quedaría escandalizado y asustado de la opulencia, boato e insolidaridad del 2 % de la Humanidad que goza de agua corriente, electricidad, educación y sanidad (ud y yo estamos en ese 2 %), mientras que el resto de los seres humanos (el 98%) tiene una esperanza de vida que a veces no sobre pasa de los 30 años, con mortalidad infantil del nivel de la edad media y enfermedades mortales que para nosotros son la mar de simples.Don Manuel, creo que alguien le ha engañado sobre quién es el malo de la película: busquemos juntos (ateos y creyentes e incluyo cualquier confesión) como mejorar esa desigualdad, con gobernantes que se preocupen de verdad de los hombres y de los más desfavorecidos. Ud lo puede hacer, es escritor, no malo, con su pluma puede hacer muchísimo más por el hombre.
20 octubre 2005 | 13:57
Johannes Paulus, no sabes cuánto valoro la elegancia de tu discrepancia. Puedes estar seguro de que cuando hablo de la intolerancia religiosa no me refiero ni a gente como tú, o como mis hermanos (todos católicos), o como mis primos (cinco curas y tres monjas en la misma familia, y casi todos en misiones en América) ni, por supuesto, como mis padres, ambos de misa diaria. Reconocerás que ambos, tu y yo, como mucha gente que nos acompaña en este blog, tenemos un enemigo común: la intolerancia, la utilización de los principios para ofender, maltratar, y hasta matar (o desearle una muerte torturante en el infierno) al adversario.Convendrás conmigo en que la batalla es desigual. Los no creyentes lo hacemos sin red, no vamos a disfrutar de ningún premio en el más allá, sólo la satisfacción íntima de ser solidarios con nuestros semejantes en esta corta vida. Por eso soy tan exigente con los que tienen la suerte de creer ciegamente, porque creo que ellos deberían ser ejemplo de honestidad moral y tolerancia, porque además de un premio desproporcionado para sus méritos (al igual que una condena eterna es un castigo desproporcionado incluso para los hombres más abyectos, desde Stalin a Hitler, pasando por Sadam Hussein, Franco, Hitler, Pinochet, y demás creyentes) quieren negarnos el pan y la sal a los demás.El diálogo entre ateos y creyentes resulta muy difícil, porque los creyentes habláis desde una verdad revelada, por tanto incontrovertible, y los ateos, desde el análisis, cuando no desde el simple sentido común.En cualquier caso, sigamos dialogando.
20 octubre 2005 | 15:52
vaya manuel, estás algo molesto porque no se han dicho cosas bonitas de un amigo tuyo, no? se te nota un poquito de rabia…
20 octubre 2005 | 17:58
Si al crápula aquel de Constantino se le hubiese ocurrido proclamar a cualquier otra religión como «oficial», para servirse de ella en sus mangoneos, ¿hablariamos hoy de Cristo y de la Santísima Trinidad o de los profundos secretos de Isis y los indescifrables designios de Cibeles?
20 octubre 2005 | 18:21
Manuel,Me alegro que hayas consultado esa obsesión con tu psiquiatra. Seguro que te ayudará. Has tenido mala suerte. Conozco a muchos sacerdotes que, entre otras cosas, intentan «sanar almas» en los confesonarios. Te puedo presentar a muchos que son muy competentes. Puede que eso te ayude.Has sacado el tema de la salvación eterna para los creyentes. Lo más importante para conseguir esto es, como bien se recoje en la Biblia, amar al prójimo como a uno mismo. Si no se intenta seguir esa máxima, cualquiera lo tiene dificil para salvarse. Pienso que esa es una buena definición de solidaridad, y no es precisamente egoista, como tu sostienes.Ten esperanza, hasta los ateos pueden salvarse.
20 octubre 2005 | 18:23
Manuel,Me alegro que hayas consultado esa obsesión con tu psiquiatra. Seguro que te ayudará. Has tenido mala suerte. Conozco a muchos sacerdotes que, entre otras cosas, intentan «sanar almas» en los confesonarios. Te puedo presentar a muchos que son muy competentes. Puede que eso te ayude.Has sacado el tema de la salvación eterna para los creyentes. Lo más importante para conseguir esto es, como bien se recoje en la Biblia, amar al prójimo como a uno mismo. Si no se intenta seguir esa máxima, cualquiera lo tiene dificil para salvarse. Pienso que esa es una buena definición de solidaridad, y no es precisamente egoista, como tu sostienes.Ten esperanza, hasta los ateos pueden salvarse.
20 octubre 2005 | 18:23
Manolo, cuida la sintaxis, los que posteamos escribimos deprisa y sin posibilidad posterior de corrección, pero tú debes dar mejor ejemplo:(¿para qué coño querrá Satanás un alma como la de Haro o como la mía).Cierra la interrogación, porfa.Por lo demás, enhorabuena por tus comentarios, que suscribo.Un saludo
21 octubre 2005 | 10:44
Sí sr. saco, efectivamente como dice en su comentario, siempre saldrá perdedor. En esta vida, pero más en la otra.
21 octubre 2005 | 11:30
Sr. Sinnombre, por su comentario deduzco que está amenazando con represalias en la otra vida. ¿Es eso correcto? ¿Cree de veras en un dios así, con un rencor eterno?
21 octubre 2005 | 13:45
JAJJAJAJAAJJAAJAJAJEste blog es pura dinamita!Así que se puede amenazar con el más allá siendo un simple feligrés de una religión basada en la supuesta libertad humana(concedida por su Dios, of course, por los siglos de los siglos)…Y yo que creía que lo de comulgar discretamente(no sé muy bien a qué se refieren)para los re-casados sin relaciones impuras(ay, sex…grrrrrrrrr…) era lo más…ME MEO
25 octubre 2005 | 15:24
Estoy sorprendido con todos los comentarios que he leido en esta página. La Iglesia, como muchas cosas, por desgracia, tiene malas personas, que ensucian muchas labores buenas, de muchas personas que creen en un Dios, que no han visto pero en el que cren fielmente. Creo que es injusto tantos ataques se llevan día a día en muchos sitios y creo que muchas personas deberían antes de criticar por criticar, deberían informarse y dar ejemplo de la caridad cristiana, a la que tanto aborrecen. Hay curas malos, es verdad, pero tambien hay jueces malos (¿la justicia es mala?), tambien hay policias (¿todo lo que hace la policía es malo?), hay políticos (¿deberiamos renunciar a la democracia por eso?). Como humanos que somos tenemos fallos y deberiamos ser ante todos hermanos, tanto creyentes como no.
15 noviembre 2005 | 19:42