Eso es lo que he pensado entre risas al ver la siguiente noticia:

Barcelona vive un ‘baby boom’ a los nueve meses del gran apagón que duró tres días.

Barcelona empieza a ver nacer los primeros bebés concebidos durante los días del julio pasado en que un tercio de la ciudad se quedó sin luz. La Generación del gran apagón o la Generación off ya está aquí.

El Hospital de Vall de Hebrón, uno de los de referencia en el área que se quedó a oscuras, ha registrado las últimas dos semanas un incremento del 7% en el número de nacimientos, respecto a la media semanal de este año (77 bebés).

El bebé de la foto es Isabela, de la supuesta Generación off.

Pero va a ser que no me lo creo mucho. Dudo mucho que un apagón en el siglo XXI repita el éxito natalicio de los apagones del siglo pasado, con lo hiperplanificados que tenemos ahora los hijos y los métodos anticonceptivos que usamos.

Conozco muy poca gente que haya tenido un bebé por accidente o sin planificación.

Las parejas que conozco cuando se lanzan a la procreación lo hacen después de una larga digestión y de echar unas cuantas cuentas.

Nosotros fuimos de los que nos lo pensamos bastante.

¿Tú que opinas?