La mayoría de nosotros, hasta que no nos ponemos a empujar el carrito de un bebé no nos damos cuenta de todos los problemas de accesibilidad existentes en las ciudades. Durante dos o tres años nos hacemos muy conscientes de que hay pocos bordillos rebajados, que algunas aceras son ridículamente estrechas, que hay mucha gente incívica que deja coches encaramados en tu trayecto o disperas las terrazas de manera que es imposible pasar, que no cabes por el hueco de la caja del supermercado, que hay edificios en los que es imposible entrar, rutas y monumentos turísticos inalcanzables….
Podría seguir, la lista es larga por desgracia.
Y nosotros, los padres recientes, no podemos quejarnos. En caso de escalera insalvable, bordillo monumental o tramo de arena podemos sacar al bebé, que pesa poco, y plegar el carro. O pedir ayuda a cualquiera que pase por ahí para que nos ayude a sostener carrito y bebé para salvar obstáculos. Además, es una etapa que dura poco. Dos o tres años como os decía, y lo peor son los primeros meses en los que empujamos carritos mastodónticos. Muchos pasamos en cuanto podamos a sillas de paseo más livianas. De hecho muchos acabamos prefiriendo y usando más otros sistemas de porteo, como fulares o mochilas con los que llevamos al bebé pegado a nuestro cuerpo, claro que esa es otra historia.
Con una pesada silla de ruedas en la que va un adulto encima, la película es muy distinta, a veces un drama o directamente de terror. Yo he acompañado paseando a algún amigo en silla de ruedas e incluso lugares que creías accesibles en modo bípedo, descubres que no lo eran tanto, teniendo que dar enormes rodeos, pasando por superficies que hacen traquetear la silla que parece que se va a desmontar, haciéndote ver que aquel sitio que apreciabas y creías conocer bien se ha convertido en un lugar antipático y desconocido.
Un adulto en una silla de ruedas puede suponer doscientos kilos que difícilmente se van a poder mover a pulso, por mucho que haya a mano personas bienintencionadas, dispuestas a ayudar.
Ayer charlaba con Gema Hassen-Bey y me reconocía que miraba con complicidad a todos aquellos que empujaban un carrito de bebé con los que se cruzaba por la calle.
Gema Hassen Bey poniendo también a Barbie sobre ruedas (GTRES)
Gema es licenciada en Ciencias de la Información, deportista de élite, actriz, compositora, y presentadora. Y además es una persona estupenda, preocupada por las personas y por mejorar en lo que pueda la vida de los demás.
«A muchas mujeres nos cuesta subir a la cima (personal, laboral, vital…) y ella es un ejemplo. Su lema es,»Si te mueves tú, el mundo se mueve contigo»», me decía la amiga que me habló por primera vez de Gema y su reto.
Por eso, junto con el coreógrafo Rafa Méndez, fundó la asociación Bey proAction con la clara convicción de integrar a las personas discapacitadas en la sociedad a través de las disciplinas artísticas y deportivas.
Gente con causa, gente de la que a mí me gusta.
Gema, conocida por ser medallista y pionera de la esgrima paralímpica en nuestro país (tiene 12 títulos olímpicos) y representar a los deportistas paralímpicos españoles durante una década, se ha embarcado en un nuevo reto: ser la primera mujer en silla de ruedas que culmine la cima del Monte Kilimanjaro, 5.895 metros de altura nada menos.
¿Y por qué se ha metido Gema en este lío? Por muchos motivos: por el reto personal que supone, por la visibilidad para sus causas que conseguirá, para animar a otros a romper los lugares de confort en los que nos colocamos o nos colocan los demás, para pedir más accesibilidad, para clamar contra el cambio climático que está dejando al Kilimanjaro sin nieves, para testear tecnologías que beneficien a otros.
Esta mujer de voz dulce y espíritu de roca me explicaba que en el mercado no hay sillas adaptadas para entornos rurales, para disfrutar de la montaña… Su idea, su deseo, es que todo lo que se desarrolle para facilitar su aventura no se quede en un prototipo, que se genere una patente abierta, se fabrique y sea accesible unido a la reclamación de un mejor acceso de todos los que lo necesiten a buenas sillas de ruedas, que cuestan como un coche.
No será la única tecnología que testeará, también experimentarán con tejidos que protejan las piernas del frío, un problema frecuente para las personas que van sobre ruedas sin moverlas.
Este mismo miércoles podéis acompañar a Gema, estará en la Puerta del Sol a las 11:00 de la mañana acompañada de personas que andan sobre ruedas: desde patinadores, a ciclistas, a padres y abuelos que empujan carritos o a personas en sillas de ruedas. Los que no vayan sobre ruedas o empujándolas también serán bienvenidos. Gema no excluye a nadie. Habrá un flashmob a cargo del coreógrafo Rafa Méndez, y ya sabéis que un flashmob es garantía de pasarlo bien,
Desde el punto kilométrico cero arrancará hoy el viaje de Gema, que junto con los miembros de su equipo y las instituciones que apoyan el reto, montará con su handbike en metro/cercanías/bus con rumbo a El Escorial para subir el monte Abantos. Y también estado invitados a acompañarla en ese ascenso; habrá coches que subirán continuamente a cuatro personas a las tres etapas en las que se dividirá su subida.
En la página web de Gema y en sus redes sociales podéis seguir lo que pasé hoy y el desarrollo de su reto.
No sé vosotros, pero yo estaré atenta. No sobra en este mundo la gente que te inspire.
El Reto #CumbreBey #KilimanjaroChallenge es el medio, el fin es cambiar la vida de millones de personas que aman el #deporte y la naturaleza
— DIVERSCITY by Gema (@GemaHassenBey) junio 8, 2015
Los perros de asistencia @bocalanmadrid bailan mañana la Flasmob hecha por Rafa Mendez @GalaRobles y Quique Guijarro para la presentación del #RetoKilimanjaro en Sol a las 10:30h Os esperamos!!
Posted by Gema Hassen-Bey on Martes, 9 de junio de 2015
Gema es la muestra de que en el mundo personas con gran brillo y muy admirables por la gran contribución social que hacen.
10 junio 2015 | 10:17
Ciao,
Grazie per tutte le vostre proposte ennormement su questo sito. Le vostre azioni sono molto interessanti e molto gratificante. Congratulazioni.
Vi auguro una buona continuazione.
10 junio 2015 | 13:02
Yo creo que poco a poco las ciudades van mejorando ese aspecto, al menos la mía, tal vez por ser una ciudad pequeña, Burgos, tiene rebajados todos los bordillos así como amplias aceras (no todas las calles lógicamente), pero en general pudiera decirse que está bastante bien.
10 junio 2015 | 13:25
Efectivamente te haces consciente cuando eres madre o padre. Y no digamos si te vienen dos de golpe. Porque en ese caso no es tan fácil salvar los obstáculos si vas solo, y tampoco cabe portear. Bueno, hay quien es cápaz de portear a dos niños a la vez, pero no debe de ser fácil. Hay muchas barreras físicas en nuestras ciudades.
Pero creo que peores que las físicas son las mentales. Y esas son las que gente como Gema Hassen-Bey ayudan a derribar. En el colegio de mis hijos haya una niña con una discapacidad motórica importante, se mueve habitualmente en silla de ruedas o con andador en distancias pequeñas, que participa en las actividades extraescolares de teatro y baile. Y este domingo se ha apuntado a las jornadas de atletismo, ha podido correr con su triciclo. Sin problemas. Pero el profesor de ajedrez no la admitió en su clase porque… no puede mover las piezas. Lo dicho, barreras mentales.
10 junio 2015 | 14:05
pues si es difícil moverte con una silla de ruedas imaginaros aquellos que lo hacemos con muletas.
en este país parece que solo eres minusválido si vas en silla de ruedas y hay una gran mayoría que nos arrastramos con muletas intentando postergar el momento de usar una silla.
acabo de volver de unas vacaciones por Andalucía y ha sido patético,. la mitad de los sitios no están adaptados.
me encantan los sitios peatonales pero si tenemos que dejar el coche a unas distancias tan inverosímiles de lo que queremos visitar, cuando llegamos a los sitios estamos agotados y si pedimos una silla de ruedas, nos dicen que no tienen que las llevemos nosotros.
las ciudades puede que se adapten poco a poco, pero no así las personas. entre las bicicletas que van por las aceras, la gente que no mira porque solo va mirando su móvil y las obras, parece que nos están pidiendo a gritos que nos vayamos, o es que quizás eso es lo que quieren y así dejamos de molestar.
veréis como cuando lleguen las elecciones todos se hacen la foto y la lastima es que muchas personas y muchas asociaciones se adhieren a esto para recibir subvenciones. pero aquellos que lo que queremos es trabajar y ganarnos la vida y vivir normalmente, estos no aparecen.
10 junio 2015 | 14:40
Magnifica mujer luchadora como ella sola!!
Animo!!!
10 junio 2015 | 15:11