Hace ya tres meses que os quiero hablar de dos mujeres y no acabo de encontrar el momento. Pero ya es hora. Son María José Gimeno y María José Puerta y comparten mucho más que el nombre. Son dos ‘avanzadoras‘ en toda regla, el término que emplea Oxfam Intermón para referirse a aquellas mujeres que avanzan y hacen avanzar a los demás. Son mujeres con causa (¿os he dicho ya que me gusta la gente con causa?, juraría que sí), solidarias y comprometidas. Son madres preocupadas por mejorar la vida de muchos niños, no solo los suyos. Y, como decía en el titulo del post, ambas se merecen que se reconozca su labor.
Yo conocí su labor en marzo, cuando más de de cien mujeres se presentaron a un concurso con motivo del Día Internacional de la mujer. No ganaron, pero su labor se me quedó grabada.
Hay mucha gente a nuestro lado que son monstruos a dos patas, pero por suerte también hay muchos que se empeñan discretamente en hacer de contrapeso y que merecen todo el apoyo que puedan conseguir. Gracias a todos ellos. Gracias a María José Gimeno y a María José Puerta y a todos los que trabajan con ellas y como ellas para dotar de más luz a este mundo caótico en el que vivimos.
Y si alguno de los que me leéis por aquí estáis en disposición de echarles una mano, seguro que lo agradecen:
María José Puerta fue socia fundadora de la Asociación de Acogedores de Menores de la Comunidad de Madrid (ADAMCAM), una de las primeras asociaciones de acogedores de Menores en España.
Hace diez años, fue presidenta en un momento difícil en la vida de la Asociación y sigue colaborando activamente en la misma.Todo empezó cuando, once años antes, ella y su marido Francisco decidieron apostar por el acogimiento familiar y abrieron su familia a un niño.
En la asociación los padres y madres acogedoras se apoyan en los malos momentos, aprenden a acompañar a estos niños para construir su futuro, defenderles y dar una mayor visibilidad al acogimiento familiar. Puede que la acogida de estos niños «con la vida en carne viva» entrañe dificultades, pero también es necesario y supone grandes satisfacciones.
María José Gimeno es la fundadora de la reciente asociación Mamás en accion.
Hay muchos niños que crecen tutelados por los gobiernos autonómicos de cada Comunidad. Viven en orfanatos, residencias infantiles o pisos de acogida. En estos centros son tratados de la mejor manera posible, pero por falta de recursos no tienen cubiertas todas su necesidades afectivas básicas.
María José, consciente de esta situación, fundó hace aproximadamente un año Mamás en acción para ofrecerles «el tiempo y cariño que todo niño debería tener». En muy poco tiempo ya han colaborado con cuatro orfanatos, la Casa Ronald McDonald del Hospital La Fe de Valencia, diferentes asociaciones y parroquias, y han conseguido un impacto sobre 827 personas.
Son 70 mujeres, madres, que no pagan ninguna cuota pero que ofrecen su tiempo para que alguien «se quede con ellos en un hospital cuando están malitos, les ayuden a hacer los deberes, les celebren un cumpleaños o se acuerde de ellos en Navidad».
Pues sí, me gusta la gente con causa.
Tal y como dices es algo para ser reconocido. Cuando lo leo me encantaría participar de ello pero por desgracia la conciliación todavía está muy lejos de ser la que tiene que ser. Tengo dos hijos y a causa del trabajo muchos días tengo la sensación de no darles todo el tiempo que tanto ellos como yo necesitamos. Se me parte el alma al leer la última frase… Qué terrible que haya niños con esas carencias afectivas tan grandes.
Hay tantas cosas que tenemos que cambiar…
12 junio 2014 | 14:54
Yo creo que cuando los niños son algo mayores, se pueden volver a retomar inquietudes personales. Si la de alguno es esta, pues esta.
Cuando yo era adolescente, mi madre empezó a decir que por qué no adoptábamos un niño ruso…(la inquietud está ahí)…pero nunca se hizo.
Este tipo de actividades me parecen preciosas.
13 junio 2014 | 11:09