Ya llegó el momento de la verticalidad. Julia, a sus diez meses y medio, no quiere otra cosa más que estar de pie y avanzar pasito a pasito bien agarrada a nuestras manos.
Su universo se ha ampliado enormemente, ya puede recorrer la casa de juguete en juguete.
De hecho es ahora cuando parece estar animándose a gatear un poco.
Pero lo que realmente le gusta es caminar tambaleante sujeta a un adulto de confianza.
Es decir, que también llegó el momento de encorvarnos para facilitar las exploraciones de un bebé que no llega mucho más allá de nuestras rodillas. Todo un mico bípedo.
Claro que, como bien dice su abuela, puede estar así meses hasta que se decida a dar sus primeros pasos sin manos de seguridad.
Por cierto, con su hermano no sacamos mucho partido a un arnés pensado para tales fines. A ver si lo amortizamos con Julia.
Otra cosa: el día de la resonancia magnética llegó y pasó. Y como me habían dicho, no fue tan malo como parecía. El peque se ha portado como un campeón. Ha sido muy paciente y no ha protestado más que al final, cuando ya estaba harto y con razón de ayunos, túneles raros y vías en la mano.
Esta canción se la cantaba a mis hijos cuando eran bebés, qué recuerdos…Me alegro mucho que lo de Jaime saliera bien. Con la niña os quedan unos cuantos meses de «deslome», paciencia.
30 noviembre -0001 | 00:00
Me alegro de que todo fuera bien, MR. Al final una se va «acostumbrando» y todo parece un poco más normal.Y ¡enhorabuena por los primeros pasos de Julia!
27 enero 2010 | 16:07
Me alegro que el peke no lo haya pasado mal. Quizás una ventaja de ellos es que todo lo ven como nuevo y con ganas de investigar a ver que es.Un saludo
27 enero 2010 | 16:53
Cuando están así te los comercias :DMi madre cuentan que aprendió a andar cogida a una cuchara, así que el día menos pensado echa a correr.Y entonces si que correréis vosotros también ;)http://www.latentaciondeeva.es
27 enero 2010 | 16:57
No conozco a nadie que no hubiera aprendido a andar. A escribir si, yo mismo.Clica sobre mi nombre
27 enero 2010 | 17:15
mis hijas iban encantadas con el andador. seguro que a julia le encanta.respecto al peque, me alegro de que todo haya ido bien.
27 enero 2010 | 17:21
Que bonicos, pero no será mejor que primero gatee? Es mejor porque foratalece la espalda y los brazos, y para andar siempre hay tiempo
27 enero 2010 | 18:59
A mi me funcionó muy bien un andador, de los de empujar, y también el cubo de la ropa sucia, se agarraba a el y lo usaba como apoyo para explorar la casa….http://www.lamamavaca.blogspot.com/
27 enero 2010 | 20:40
Algunos niños gatean otros no, algunos niños andan antes de los 12 meses, otros no, cada niño es un mundo y si no quiere gatear no hay nada que hacer, y si sólo quiere gatear tampoco. A mi personalmente no me gusta nada el arnes, me recuerda a los perritos, pero reconozco que me deslomé con mis niños porque la pediatra me enseñó en la consulta cómo agarrarle mientras aprendían a andar, nunca el hombro del niño por encima, siempre que le quede el brazo lo más relajado porque les estiramos del brazo y se les cargan lo hombros.
27 enero 2010 | 21:37
Ahora viene la parte de los dolorcillos de espalda y de… ¿dónde está la niña? y la niña ha llegado al rollo de papel higiénico y le encanta desenrollarlo…Me alegra mucho lo del peque, al final todo pasa y, la verdad, se portan como campeones.
28 enero 2010 | 08:26
Me alegra que todo haya ido bien con la resonancia. Ánimo y fuerza!!Con respecto a Julia… carai con tu niña!! Qué lanzada!!!!! La mía (un mes más que Julia) acaba de aprender a sentarse solita… así que va leeenta, lenta. De ponerse de pie nada. Nos salio un poco perezosilla. Eso sí habla por los codos (bueno el «nago, nago», «goli-goli-goli» «mamamamapapapapatatatata» etc. También baila si le ponemos música y da palmitas… pero andar, no, eso no.
28 enero 2010 | 13:17
Bueno, espero que no tengas que repetir muchas veces estas sesiones médicas. Animo!Mi bebé tiene 9 meses y gatea como una locomotora. Desde hace poquito, todo hay que decirlo, pero es que avanza mucho de un día para otro. Yo alucino con él. Y lo que más le gusta es ponerse de pie e intentar sostenerse sobre sus piernecitas de chicle. En cualquier momento se lanzará a andar con apoyos.Una consulta: cuando lo acuesto, no hace más que ponerse de pie en la cuna hasta que cae rendido. Yo lo tumbo, él protesta, se pone de pie y vuelta a empezar. A alguien le pasa esto? Alguien tiene algún truco? Es que me da pena desbaratar su trabajo, con lo que le ha costado ponerse de pie.
29 enero 2010 | 11:50