Casi todo los niños, por lo que he visto, son bichos bastante acuáticos. Les encanta estar a remojo, ya sea en la playa o en la piscina. Se meten con alegría en aguas que para nosotros están poco acogedoras de puro frescas. Y aguantan allí hasta que están como pasistas azules.
El mío al menos es uno de esos, y este año ha tenido un buen verano de piscina, con clases de natación (matronatación) incluidas.
Y estos meses se ha soltado mucho, tanto que ya nada con su burbuja. No muy lejos, no mucho rato, con un estilo muy particular, pero él solito que es lo importante.
También le encanta saltar desde el borde de la piscina a nuestros brazos.
Tanto le gusta el agua que seguiremos acudiendo a clases este invierno en la piscina municipal un día por semana. Además, creemos que es importante que aprenda a nadar bien lo antes posible, aunque sin forzarse.
Los ahogamientos son una de las principales causas de accidentes mortales en la primera infancia, y precisamente una de las recomendaciones que se suele dar para evitarlo es enseñarles a nadar.
No es la única claro: nunca hay que dejarles en el agua, aunque sea en la bañera con 20 centímetros de profundidad, sin vigilancia. En las piscinas que cubren hay que estar metidos con ellos, aunque lleven churros, burbujas, flotadores o manguitos. Si tenemos piscina propia, debemos cercarla con una valla de al menos metro y medio para que no puedan colarse allí en un descuido…
En una página de pediatría chilena hay un artículo titulado Los niños se ahogan en silencio que os recomiendo leer para ampliar información.
Mis padres tienen unos conocidos cuya hija de tres años (edad de máximo riesgo) se ahogó hace ya muchos años en la piscina que unos amigos tenían en un chalé. Bastaron cinco minutos de despiste: lo que dura un chiste.
Y a mí casi me arrastra la corriente de un río extremeño que no parecía gran cosa cuando tenía cinco o seis. Afortunadamente pude gritar antes de tragar agua y mi padre era un excelente nadador y saltó con ropa y todo a por mí. Me habían dicho que me quedase en la orilla y yo era una niña bastante obediente, pero vete a saber por qué ese día desobedecí.
La fascinación de nuestros peques por el agua es estupenda, verles disfrutar como patitos aprendices es maravilloso para cualquier padre reciente, pero también puede ser muy peligrosa.
Para gustos colores y para tecnicas de ensenyar a nadar a los peques ( o matronatacion como parece que se llama ahora) tambien… A mi lo que me habian dicho es que lo mejor es ensenyarles directamente sin manguitos ni burbujas, porque se hacen muy dependientes de ellos y luego no los quieren soltar hasta bien mayores… Eso si, haciendolo asi hay que estar CONSTANTEMENTE con ellos.
30 noviembre -0001 | 00:00
QUe casualidad, he estado ayer haciendo cola a las 5,30 h de la mañana en la piscina municipal de mi pueblo para apuntar a mi hijo a un cursillo este invierno.Mi hijo cumple 2 años en octubre, pero este verano ha descubierto lo que es el agua, el mar, la playa, la piscina….le da igual. Es capaz de tirarse de cabeza sin ayuda, sin darme cuenta y mas rapido que un rayo, y eso me da muuuuucho miedo, asi que hemos decidido enseñarle a nadar, para que el verano que viene no nos de ningun susto.Le encanta el agua, y no ve el peligro. El sabado pasado disfrutó como un enano, con maguitos y flotador, y yo por supuesto con el, pero sin agarrarlo, solito, y no veas como disfrutaba, y me encanta verlo así, pero hay que tener mucho cuidado.Sobre ahogamientos, incluso hay que tener cuidado de tener el cubo de la fregona cerca, porque puede ahogarse sin darnos cuenta en menos de 1 minuto.Le tengo pánico
02 septiembre 2009 | 16:13
S eme olvidaba, me cuesta al trimestre 150€, 45 minutos, con los 2 papas, los sabados por la mañana. Cuanto os cuesta a vosotros????
02 septiembre 2009 | 16:14
Mi hija empezó con tres meses a ir a la piscina conmigo. Al principio todo fué muy bien, disfrutabamos las dos. Después llego la «crisis» de los 8 meses y no había manera de soltarla de mi cuello. Ahora tiene 11 meses y tiene días buenos y días malos. Pero yo también creo que tiene que familiarizarse con el agua. Lo que más le gusta es la piscina, el mar le da un poco de miedo, sobre todo las olas… Pero nos bañamos bien agarraditas y problema solucionado.http://www.lamamavaca.blogspot.com/
02 septiembre 2009 | 16:14
Mami feliz,yo pago 60€ x 2 días a la semana, media hora, con uno solo de los papas.http://www.lamamavaca.blogspot.com/
02 septiembre 2009 | 16:16
Pues mi hija ha salido «de secano», y la verdad es que yo lo veo como un problema.No le gusta el agua… bueno, le gusta de lejos, pero a la hora de meterse no hay manera, le da mucho miedo.Queremos apuntarla a un cursillo aprovechando que tambien iremos con su hermanito cuando cumpla 5 meses (ella tiene 3 añitos), pero me da miedo que sea contraproducente, que le aumente todavía más el miedo… no sé qué hacer, la verdad.(y tras leer lo que has escrito todavía me da más yuyu…)
02 septiembre 2009 | 17:12
Mi hija de tres años adora el agua, no le da nada de miedo, se tira, nada…..El año pasado estando de camping, estabamos en la piscina, mi marido y yo mirando unas cosas en la camara de fotos y ella estaba jugando con su abuelo cuando todavia no sabemos como empezo a correr y se tiro a la piscina sin flotador sin manguitos y sin nada, no paso nada porque mi padre que estaba con ella salio detras y se tuvo que tirar a la piscina con gafas y con zapatillas, pero a mi ahi me entro el miedo porque ese dia la estabamos vigilando pero si como muy bien decis una dia nos despistamos…. asi que la apunte este año a natacion por lo menos para que aprendiera a flotar y pudiera salir ella sola en el caso de que no nos dieramos cuenta y la verdad es que ha sido una maravilla, lo bueno es que no se si se lo han inculcado o que pero ahora no se acerca al agua sino se lleva el churro, este año la voy a apuntar otra vez para que ya la enseñen a nadar sin nada.Y es que este verano a aprendido las delicias de bucear, mete la cabeza en el agua y saca el aire cuando se le acaba vuelve a sacar la cabeza pero a mi es que me da un miedo…….
02 septiembre 2009 | 17:27
Ay! Los niños y el agua. Me da un miedo!!Yo a mi nena intentaré enseñarle a nadar cuanto antes. Pero debemos tener en mente que el que sepan nadar, no les priva del peligro!Un pequeñín se cansa enseguida y aunque sepa nadar se ahoga igual. Nos da un poco más de tiempo que el que no sabe nadar. Pero por nada del mundo debemos dejar un niño desatendido cerca del agua.Se me ponen los pelos de punta solo imaginándomelo!
02 septiembre 2009 | 17:46
A mi hija la apuntamos el año pasado, pero se pasaba más tiempo con catarro que sin él así que dejamos de llevarla.Este año volvemos a hacer la prueba, pero sólo un día a la semana, a ver si nos va un poco mejor.Para Mami Feliz, el precio son unos 33 euros el trimestre, un día a la semana, media hora.
02 septiembre 2009 | 18:04
Ajajajaja!!!Yo era la sirenita made in spain, aunque no cantaba… ¡Me encantaba el agua! No queria salir nunca… ni aunque llevara toooooodo el dia y estuviera más arrugada que mi bisabuela de 90 (que murió hace mil, jeje).También recuerdo que cuando los niños empiezan a aprender cosas en el agua se ponen en plan… MAMAAAA-MAMAAAA-MAMAAAAAA!!!!! como hacia una niña que venia a la piscina de mi padrino… pffpff… asi teniamos que aguantarla jajajajaja!!! Pero asi fuimos todos :)Qué recuerdos de cuando veia el agua e instantaneamente aparecía dentro jejeje… ahora me cuesta meterme, supongo que por la temperatura ^^.
02 septiembre 2009 | 18:28
Pues hoy estamos de casualidades entonces, esta mañana he apuntado al peque a natación pre-infantil en un Club de Natación próximo a mi municipio. Desafortunadamente, no he tenido suerte en la piscina municipal con la plaza este invierno y sí en verano, que ha podido disfrutar del mes de agosto, chapoteando con otros niños y aprendiendo a flotar (aún no lo ha conseguido). En la revisión de los 4 años nos preguntó la enfermera de pediatría: si tiro al niño en mitad de una piscina ¿flota?, ante nuestra perpleja mirada nos recomendó: trabajad eso, el ahogamiento es una de las primeras causas de muerte infantil en verano.Así que, queremos aprovechar el tirón del verano para que durante el invierno termine al menos, flotando. Además, es un deporte completo y a los niños les encanta, por lo menos al mío.
02 septiembre 2009 | 18:52
A mi me encantaba el agua (de hecho todavía me encanta estar en remojo) y me metía hasta que se me ponían los labios morados. Luego me salía hasta que recuperaba el color y otra vez, jeje.Yo he tenido dos sustos, los dos en la playa y los dos fueron por las corrientes. El primero, con 4 añitos (imagino que no sería más pequeña por que lo recuerdo) empezaron a sacar a la gente del agua por las corrientes tan fuertes que había. Mi tía a duras penas consiguió coger a mi primo y a mi hermana, yo empecé a flotar (llevaba un flotador) mar adentro… tengo el recuerdo de ver cada vez más lejos a mi tía con cara de susto y a un señor enooorme que vino corriendo que me cogió en brazos y me sacó.El segundo, con 8 años, intenté llegar a una parte de la playa en la que estaban mis primos (era un sitio que hacían pie a pesar de estar alejado de la orilla). Yo nadaba muy bien pero por la corriente cada vez me costaba más llegar, me empecé a cansar y dije, creo que será mejor descansar… y me agarró una chica que me dijo que saliera que estaban sacando a todo el mundo.Espero no haber metido miedo a nadie, solo quiero decir que hay que estar superpendiente de los niños en el agua aunque sepan nadar o lleven flotador, manguitos lo que sea.Ah, y he visto algún niño que no le gusta nada el agua, en mi urbanización había un niño de 3-4 años que daba unos gritos horribles cada vez que su padre quería meterle los hombros en el agua. La verdad que era una escena casi divertida, pero el pobre lo pasaba realmente mal
02 septiembre 2009 | 20:41
A mi niño esta primavera le dio por no querer ver la bañera ni en pintura. Asi que en cuanto pudimos y el tiempo lo permitio lo llevamos a la piscina y bueno, el primer dia fatal, no se soltaba de mi cuello. El segundo ya fue cogiendo mas confianza y le dejo de tener tanta mania y miedo a la bañera. A la tercera ya iba correteando por toda la piscina pequeña. Le encanta que lo metamos con nosotros en la piscina de los grandes y eso si, siempre siempre juntos, no le perdemos la vista ni un segundo. Que ya sabemos como son los niños de curiosos.Y bueno, ya aprendera a nadar, ya no este año porque se acaba ya el buen tiempo y no tengo pensando apuntarle a ningun cursillo aun, solo tiene 2 años. Ya veremos como le va el verano que viene.
02 septiembre 2009 | 22:33
La mía, con tres años, va despacito, pero disfruta del agua y ya va cogiendo confianza. Puede que la apunte a algún curso este invierno y como voy yo a la piscina cubierta de normal, me la lleve. Si que es importante que sepan nadar cuanto antes, pero más importante aún es no quitarles ojo, porque te la lian en cualquier circunstacia en un segundo, poniéndose incluso en grave peligro, (este fin de semana me llevé un buen susto, aunque no fue nada). Yo diría más bien la importancia de no quitarles ojo, mas que nada a estas edades, porque veo cantidad de padres que ni se fijan en lo que hacen sus hijos/as de corta edad, ¿o no lo observáis vosotros?.
02 septiembre 2009 | 23:20
Mis niños son dos pececitos y en su cole tienen natación en la escuela infantil con lo que me he ahorrado algunos sustos. Pero la pequeña, a esa que con 1 año ya la llamábamos Terminator, nos dio el gran susto con apenas 3 años (no había empezado la escuela). En una piscina olímpica según la sacamos para irnos y darnos la vuelta para coger la toalla, se tiró sin pensárselo, allá fuimos su padre (ya vestido), yo y un señor que paseaba por el borde. La sacamos de los pelos, la regañamos, etc… Pues en lo que su padre y yo dábamos las gracias al señor, ¡se volvió a tirar!… y así sigue, por lo menos ahora ya sabe nadar estupendamente y aunque nunca le quitamos el ojo de encima, es una tranquilidad que sepa defenderse.
03 septiembre 2009 | 10:01
No soy madre, tengo sólo 22 años, pero me gusta leer el blog pensando que algún día tendré que poner los consejos en práctica. Yo soy monitora de natación y doy clases a niños entre 3 y 12 años. Con los mayores es bastante sencillo porque ya saben nadar, el problema son los peques que no le tienen miedo al agua y se tiran sin manguitos ni nada, como ya he visto que han hecho algunos de vuestros hijos. Mi consejo es que les enseñeis lo peligroso que puede resultar que se tiren si no hay adultos a su lado; mi prima pequeña lo hacía y la solución fue meterme con ella y soltarla 10 segundos; en ese momento de agobio se debió dar cuenta de que no es capaz de nadar sola porque no volvió a tirarse nunca más. Sé que algunas direis q jamás hariais eso con vuestros hijos y q yo tampoco lo haría con los míos pero los niños no corren peligro porque estás a su lado y a lo mejor 10 segundos de susto viendose solos pueden salvarles la vida. Un saludo a todas y suerte con los cursillos.
03 septiembre 2009 | 11:15
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03 septiembre 2009 | 13:25
Hola yo no soy mami, pero aunque suene a risa soy prima de un bebe de 3 meses y de un niño maravilloso de 3 años. de los cuales el mayor se queda ya bastante en mi casa.Y este año ya el queria meterse mucho más en la piscina. y reconozco que a mi eso de aun no sepa nadar me daba cosa con lo cual incluso en la pequeña que le llega el agu por la cintura yo con el todo el día.por cierto me encanta tu blog un beso y gracias por el tiempo que dedicas
03 septiembre 2009 | 14:12
Mis padres siempre se opusieron a que usasemos manguitos o flotador o qualquier cosa. Des de muy pequeños a mi hermano y a mi nos enseñaron a nadar….con 10 meses yo ya me tiraba a la piscina..aunque seimrep estaba mi padre para recogerme. Ellso siempr enos explican que de esa manera han podido estar mas «tranquilos» porque sabian que flotabamos bien. Con lo de la natación, nunca fuí de pequeña, ya mayor con 10 años tube que ir por la espalda y no me emocionaba demasiado..aún asi me encanta el mar, la playa piscina y demás…Creo que es fundamental que los niños aprendan a flotar cuanto antes y tambien creo que siemdo una de las actvidades que más les gusta y les relaja, no se debe perder en invierno.
04 septiembre 2009 | 19:01