Archivo de la categoría ‘Gran Hermano 12’

Marceliano, en el plató

¡Y entramos en el plato gordo, Marcelo entra en el plató como si fuera un concursante!

Milá se le acerca como una fiera que acecha una presa.

¡¡Y ahí le tenemos!! ¡¡Tiembla, Belén Esteban!!

Milá es así, en lugar de recibirle de buen rollo, le recibe echándole la bronca. El hombre dice que está muy orgulloso de su hija.

Ahora le pregunta Milá por qué no dejó que nadie fuera a verle en navidad. El hombre no sabe ni que decir.

Milá y su técnica para entrevistar: yo pregunto y yo respondo.

El caso es que Marceliano dice que cuando salga Laura le va a recomendar que deje pasar un tiempo antes de seguir la relación, que aclare las ideas.

Y claro, Milá pregunta si no ha pasado vergüenza viendo a Laura mojando el churro. Marcelo dice que lo único que le preocupa es que su hija quiere mucho a Marcelo, pero que él no ha visto que Marcelo le corresponda.

Todo el mundo justifica el comportamiento de Laura y Marcelo diciendo que llevan mucho tiempo ahí dentro. Si eso fuera excusa, en las prisiones no sobrevivirían ni los barrotes.

Ahora nos ponen a Maya Hansen, que es la diseñadora consagrada que ha vestido hoy a la Milá de Reina Araña. Resulta que esta chica estuvo a punto de entrar en Gran Hermano.

Aprovecho para decir que Marceliano me ha decepcionado. Yo quería ver a un hombre de las cabernas con un basto. Es más, quería ver a Marceliano con un par de ametralladoras liándose a tiros. Es más, quería ver a Marceliano vestido con lencería fina.

Cambiamos de hilo.

La bronca de la última semana, a punto de ser definitiva

Milá dice que Laura y Marcelo estuvieron a punto de estropearlo todo con su bronca, y que Gh estuvo a punto de tomar medidas disciplinarias.

No se lo creen ni ellos. ¿Os imagináis que a tres días de la final hubieran echado a Laura y Marcelo y hubieran metido unos reservas? JA JA JA JA

Ahora les van a poner a Laura y Marcelo las imágenes de su bronca. Eso, y las astillas debajo de las uñas, son lo peor que le pueden hacer a alguien.

A Laura y al Pedos se les están poniendo los huevos de corbata. Ya se están preguntando por qué les ponen eso. Lo miran con cara de no haber cagado en un mes.

«Qué vergüenza», dice Marcelo. «Cómo me pasé», dice Laura.

Vamos, que si no ven las imágenes se piensan que estuvieron hablando sosegadamente sobre las teorías de los agujeros de gusano.

Yago dice que le están cortando el rollo. Laura se vuelve a preguntar por qué les ponen eso. Para mi que se ve en la puñetera calle.

«No me gusta nada ver ésto», dice Laura, como si no fuera ella la que sale berreando en el vídeo. «Que bochorno», dice Marcelo, como si nunca se hubiera tirado un pedo.

Les ha dado un bajón que no les suben el ánimo ni con una sobredosis de jalea real.

Sí, sí, ahora les da vergüenza, pero llevan cinco meses montándo pollos así.

La tía de Marcelo cierra los ojos cuando habla como Belén Esteban. No descarto que sea Belén Esteban.

Milá dice que estuvieron a punto de cancelar la final. Ja ja ja ja. Ni de coña.

Ahora vemos un vídeo de Laura fuera de sí, chillando con su mejor tono de voz. El Gobierno de Portugal llamó a su embajada en Madrid a preguntar qué eran esos gritos que venían de España.

Y después de la bronca, un montón de lloros y arrepentimientos, o sea, como las otras sesenta de éstas que han tenido.

Milá conecta con la casa.

Milá le da la enhorabuena a Yago por estar en medio del conflicto y por mediar bien.

¡¡POR FAVOR, QUE SE QUEDEN LOS TOTITOS SIN EL PREMIO!!

Milá dice que estuvieron a punto de declarar el premio desierto, pero que como habían estado ya 144 días pues no les iban a echar ya…

Y para compensar nos ponen el vídeo de siempre: Laura pidiendo perdón la primera y Marcelo haciéndole una flor de papel a Laura, para reconciliarse. Y los dos llorando como si les hubieran metido un saco de cebollas por el ojete.

Hala, y ya está todo arreglado… hasta la siguiente bronca, claro.

Laura llora al ver el vídeo, Marcelo llora al ver el vídeo. Creo que es porque al bajar de la garganta sus repectivos huevos (que se habían puesto de corbata al oír que se pudieron quedar sin la final) han tocado los lacrimales.

Yago no sabe dónde meterse. Ahora los tres se besan y se abrazan. Esto parece un grupo de autoayuda.

«Hola, me llamo Marcelo y llevo una semana sin gasear a mi novia».

Milá les dice que están totalmente perdonados. Toma ya. Y les pide que se dejen de malos rollos y que se vengan arriba.

¡¡BIEN, YA ESTÁ TODO OLVIDADO!! ¡¡YUJU!!

Joder, primer plano de las manos de Marcelo y Laura entrelazadas y no hay quien sepa de quién son las manos de uno y las de otra.

Cambiamos de hilo.

Comienza la final de Gran Hermano 12

Hola a todos.

El final ha llegado. Pero no el final del mundo, que sería algo asumible, sino la final de Gran Hermano 12, que nos va a dejar vacíos, como pollos sin cabeza.

O si no, no.

El caso es que estoy desolado y no porque se acabe GH12, ni porque los tres finalistas sean más insoportables que una bici sin sillín, sino porque Marceliano, el padre de Laura, el último bastión de la cordura, la numancia de los familiares, al final va a ir a la gala.

¡¡HA COMENZADO!!

Aún no entiendo a la gente que se va a Guadalix a esperar en las puertas. Te pelas el culo durante horas para ver pasar en unos segundos a unos canelos que no han hecho más que estar en un programa de tele…

Anda la leche. Yago se ha vestido de Ramón García y Laura de menstruación. El pedos va con la camiseta del Málaga. Si yo fuera del Málaga estaría muy ofendido.

La verdad es que Marcelo tiene mucha suerte porque se va a hacer todos los anuncios de Gas Natural de aquí a treinta años.

Milá dice que nada está decidido, vamos, que insinúa que hay finalistas igualados a votos. Yo creo que es para que nos pongamos a votar como locos. Yo si eso lo hago por Tam-Tam, que me sale más barato.

Toma ya, Milá va vestida de Reina araña.

Cambiamos de hilo.

Primero se maldicen y luego se quieren… en Gran Hermano 12

Milá y las carpeteras, quién sabe si serán la misma persona, les defienden diciendo que el que no lo entiende es que nunca ha amado, como si ella y las carpeteras fueran dueñas y señoras de los sentimientos de todos.

Me refiero a los totitos, Laura y Marcelo, que se han pasado unos cuatro meses insultándose y fornicando a partes iguales. Milá dice que eso es quererse.

No, amigas mías, no. Os lo creáis o no, yo también he amado y me han amado (mucho más se esto último, porque soy un tipo irresistible) y nunca le he faltado al respeto ni he permitido que me lo faltaran a mis parejas.

Pero es más, no se lo he permitido ni a amigos, ni a conocidos, ni a desconocidos.

Lo de los to(n)titos en una relación destructiva en toda regla, algo que podría corroborar la tía de Marcelo si no fuera porque es su tía y sería capaz de justificar a su sobrino aunque le pillaran montando a una cabra.

Sí, por si no ha quedado claro, los totitos han vuelto a quererse, vamos, que después de llamarse de todo por enésima vez y maldecir su relación, se han reconciliado.

Marcelo le hizo una flor de papel a Laura. Yo os juro que esto lo he visto en el patio de mi colegio, cuando íbamos a parvulitos. Sólo falta que Marcelo se ponga un babi.

Diréis algunos que os parece un detalle precioso… a mí me parece más cursi que una barbie disfrazada de Hello Kitty montando en un tiovivo de Tarta de Fresa.

La propia Milá dice en su blog sobre la bronca: «Anoche se me cayó la final de GH12 al suelo. Todos los preparativos hechos con tanta ilusión me parecieron un sin sentido. Escuchando y viendo su enésima pelea sentí que Laura y Marcelo no se merecían salir de la final de este programa como han hecho todos los demás concursantes».

Pero claro, que luego se lo pensó mejor y dijo que eso es el amor.

Si eso es el amor, ahora entiendo por qué dicen aquello de «montarle un Cristo a alguien». Ahora, de hecho, el pressing catch ya no se llama así, ahora se llama pressing love.

El Gobierno ha decretado ya que se acabó lo de darse dos besos al verse, ahora habrá que escupirse a la cara y pisarse un pie. Si es conocido o de la familia, también se le puede meter al otro un dedo en el ojo. ¡Eso es amor!

Sé que es como desear que los Reyes Magos me hagan caso alguna navidad, pero me gustaría que ganara Yago. No porque me caiga bien el hombre del felpudo en el cogote, sino porque es el menos malo de los tres.

¡Un escupitajo a todos!

El gran broncón en Gran Hermano llega a tres días de la final

Hola a todos.

¿Os acordáis que dije que Laura y Marcelo estaban más acarameladitos que nunca porque se acercaba la final? Pues cojo mis palabras y me las meto por donde amargan los pepinos.

El caso es que ayer Marcelo y Laura tuvieron la madre de todas las broncas, la bronca del siglo, la bronca perfecta, el despiporre de las broncas.

El caso es que Marcelo (ese hombre cuyo ojete va a juzgar la ONU por crímenes contra la humanidad) le dijo a Laura que se estaba aprovechando de él. Tócate los huev… ¡Que narices, los huevos, los huevos!

O sea, que el chaval lleva casi cinco meses con una chacha que le hace de todo, que le consiente sus pedos y mocos, que se presta al contacto carnal, que le ha protegido en todas las nominaciones (él la ha nominado a ella) y encima dice, que ella se ha aprovechado.

Y claro, Laura, que es como la dinamita caducada, que la rozas y revienta, se cogió la pataleta del siglo, que a Marcelo se le pusieron los testículos a lo Apollo XIII, o sea, en órbita.

«¡Te voy a perseguir y te voy a liar un pollo!», chillaba Laura mientras le perseguía por la casa, ya estando Marcelo en franca retirada. «¡Sinvergüenza!«, chillaba Laura con ese tono de voz capaz de romper vasos y de matar ballenas torcuales a kilómetros de distancia.

«¡En qué puta hora te conocí, desgraciado!», le decía Laura a su totito, antaño considerado por ella el hombre más chachipiruli sobre la faz de la colina de Guadalix.

El caso es que los psicólogos del programa, que se deben parecer mucho a los domadores de caballos, tuvieron que acudir de urgencia a la casa de Guadalix para tratar a los dos susodichos.

No sabemos si tratarles consistió en hablar con ellos o en darles descargas eléctricas con una pértiga de castigo, pero el caso es que les trataron.

Y claro, a Yago se le abrió el cielo: sus dos mayores competidores han metido la pata hasta el sobaco.

¿Y qué ha hecho el gallego del lomo de armiño en la cabeza? Pues aprovechar para poner a parir a Laura, a ver si consigue mermar su apoyo.

Lo que más gracia me ha hecho es que en los foros, las santas sufridoras fans de la pareja se mostraban consternadas, e incluso engañadas, porque se han dado cuenta de cómo son los totitos.

¡¡¿¿PERO SE DAN CUENTA AHORA??!! Estas chavalas meten el culo en una estufa y no se dan cuenta de que se están quemando hasta que huelen el asado.

En fin. Yo creo que esto no cambia nada: Laura será la ganadora (a mi pesar, que preferiría que una fuerza internacional de paz interviniera la casa, desalojándola y llevándose a Guantánamo a los tres…).

Resumen de la gala de Gran Hermano en que hicieron chantaje emocional a un señor

Marceliano, para el que no lo conozca, es el señor padre de Laura, la concursante de Gran Hermano 12. El señor pasa de ir al plató de Gran Hermano como de pelar naranjas con las nalgas. Y eso, a Gran Hermano le sienta como una patada en el racimo del amor (si el señor GH tiene de eso).

Acostumbrados a que la gente pierda las bragas o se haga pipí en los gayumbos por ir a salir un ratillo, no entienden que Marceliano no quiera ir al templo del saber estar que es el plató de Gran Hermano, a ese reducto de lo trascendente, a ese útero de las ideas.

Pues decidió el programa, con Milá a la cabeza, hacer chantaje emocional al pobre hombre poniéndole ¡¡CUATRO VECES!!  un vídeo de su hija llorando y rogando que por favor fuera al plató, porque quiere verle allí cuando salga.

¡¡MARCELIANO, RESISTE, NO VAYAS, Y QUE LES DEN POR LA TERMINACIÓN DE TU NOMBRE!!

El caso es que ayer Milá (1000á) iba vestida de asesina de gallina de los huevos de oro. De eso, o de Gallina Caponata en versión drag queen.

La tía de Marcelo hizo de nuevo aparición. Todos los familiares van al plató en coche, la tía de Marcelo aparece en su banco en medio de una nube de humo con olor a azufre…

Luego pudimos ver cómo Marta es la responsable de que los pantanos de la Comunidad de Madrid estén al 99% de su capacidad, porque la mujer ha llorado como para reflotar el arca de Noé. También apreciamos cómo la jodía se hacía la dormida mientras Yago y Marcelo, esas encantadoras personas, la ponían verde a ella y a toda la progenie humana desde Adán y Eva.

Pudimos ver innumerables vídeos de los to(n)titos, en actitudes varias. El resumen es que Marcelo pasa de Laura como de guardarse los pedos para sí y que Laura es más tonta que irse a cagar al campo y cagarse fuera, porque le quiere con locura, lo que es igual de explicable que querer con locura a tus almorranas.

Como de costumbre, tuvieron bronca semanal, pero claro, esta fue muy light, porque oliéndole el culo al maletín del dinero, ninguno de los dos quiso ponerse en evidencia. La tía de Marcelo siguió defendiendo a la bombona de metano que tiene por sobrino y poniendo unas caras que la llevas a ver un exorcismo y el cura la bendice a ella.  

No puedo decir que la expulsión de Marta fuera una sorpresa, por desgracia. La gallega se fue por más del 60% de los votos. Quiero desde aquí rendir un sincero homenaje al 40% que votó porque se fueran Marcelo o Laura. Sois la esperanza de este mundo.

Y como en GH sólo una buena bronca entre concursantes les gusta más que meter un dedo en la llaga, nada más irse Marta pusieron a Merche a cantar «Si te marchas». Me imagino a los responsables de Gran Hermano pinchando en un entierro: «No estaba muerto estaba de parranda…».

Yago está con los cojones a lo Mickey Mouse, tan arriba que se le perfilan en la cabeza, porque ahora le toca quedarse siete días solo con los to(n)titos y no es que se quede de sujetavelas, es que va a ser el portacirios mayor del reino. El hombre se quiere ir a dormir al jacuzzi para no soportar los sonidos copulatorios de la pareja.

La ex novia de Yago (no, no nos referimos a Yola Berrocal) intentó defenderle y demostrar que es un chico cariñoso diciendo que ella y él se dedican a recoger a animales abandonados y llevárselos a casa. Bueno, eso también lo hacen los restaurantes chinos y nadie piensa que sean especialmente cariñosos por eso…

Óscar entró de nuevo en la casa, en calidad de «ganador» de la prueba semanal. Su misión era llevar tres globos con los teléfonos a los que hay que llamar si quieres que gane uno de los tres finalistas. Por desgracia no pusieron teléfono para que el premio quede desierto.

Marcelo dice ser estudiante de Historia. Pues debe ser historia de Valdemorcillos del carajo, porque en el Trivial el chaval no daba una

La entrevista con Marta no tuvo mucho donde rascar, quitando que a la muchacha intentaron hundirla con el tema de sus declaraciones sobre el Gallego. Si la hubieran recibido con unos electrodos para darle descargas en las tetillas le hubiera sentado mejor que ver el vídeo y saber que su padre tuvo que defenderla en la prensa gallega.

«La primera cosa que quiero hacer es sacarte una lágrima«, le dice Milá a Marta, que es un poco lo que decían los miembros de la KGB a los interrogados…

Anup se arrancó en un momento dado para decirle, casi tal cual, que no se preocupara, que fuera de la casa se iba a hinchar a conocer varones, y a todos ellos en el sentido bíblico de la palabra.

Marta nos hizo partícipes de sus intenciones de operarse las tetas. Ya sabéis, es la típica cosa que le comentas a cualquiera al conocerle: «Hola, me llamo Gus y llevo puesto un Jes extender».

Y así acabó la cosa, amigos. ¡¡NOS QUEDA UNA SEMANA PARA LA FINAL!!

Marta llega al plató de Gran Hermano… y se acabó lo que se daba

Marta López, expulsada con el 60…, el 60… bueno, con el sesenta y pico de los votos, llega al plató.

Se abraza a sus familiares como si Tiburón III hubiera hecho presa.

Aprovecho para decir que Chari va vestida de fresca celebrando un funeral.

Joaquín saluda cariñosamente a Marta.

Lo primero que hacen, para que se tranquilice, es ponerle un vídeo en el que se curraba las pruebas semanales. Debió ser la única.

«Que no se diga que los gallegos no tengamos huevos», dijo Marta cuando la prueba del templo maldito. Eso sí, no le han perdonado que dijera que el gallego a veces se ve como un idioma para brutos…

«La primera cosa que quiero hacer es sacarte una lágrima», le dice Milá a Marta, que es un poco lo que decían los miembros de la KGB a los interrogados…

Ahora Milá le va a poner el vídeo del gallego. «Es muy posible que los gallegos no hayan votado para que sigas», le dice Milá a Marta. Marta no sabe ni lo que dice.

«Ha tenido hasta que salir tu padre en la prensa para defenderte», dice Milá, que quiere ver a Marta hundida. ¿Porqué no le da unas descarguitas eléctricas?

Yo creo que Marta no dijo nada malo en contra del Gallego. Sólo dijo que hubo un tiempo en el que a los que hablaban en gallego se les consideraba paletos y que a ella no le gusta que los chicos le hablen en gallego. No sé, tampoco creo que sea tan grave…

Le están poniendo el vídeo del Gallego y Marta tiene una cara… A mi me parece que son trivialidades que se dicen en una conversación sin importancia…

Vaaaamos a por la TERCERA VEZ que vemos el vídeo de Laura llorando pidiendo que su padre esté en el plató cuando ella salga. Esto es chantaje emocional y lo demás son tonterías.

Ahora toca el tema de Joaquín. Le ponen el vídeo y la muchacha se muere de vergüenza.

Pero vamos, que llegaron al tema del conejeo. Que el tren entró en el túnel. Que buscaron petróleo. Que bajaron a la mina. Vaciaron los cántaros de la paternidad…

Ahora la muchacha ve cómo Joaquín decía que no la echaba demasiado de menos y que notaba que se separaba de él cuando estaba nominado. Y que le gustan las mujeres más «centradas» y más «formales».

Y claro, cuando se lo chivaron, se cogió un cabreo de padre y muy señor mío.

Lo que pasa es que tanto Marta como Joaquín están en plan buenrollero así que nada, está la cosa olvidada. Mira tú, que pavisosos, con lo divertido que habría estado que se hubieran sacado los ojos en medio del plató…

«Te conozco, creo, un poquito», dice Marta. Sí, concretamente le conoce en el sentido bíblico de la palabra.

Y ahora nos tocan los vídeos con Rubén. Milá le dice que para Marta era sólo una amistad, pero que fuera se vivió de otra manera…

«Tú me recuerdas a Chari», le dijo Rubén a Marta. No estoy seguro de que eso sea un piropo…

Y ahora le ponen el vídeo de Chari llorando, que ponía una cara como de haberse comido un Fary comiendo a su vez un limón, y flipa en colores.

Ahora Chari dice que lo pasó mal porque le pareció que las imágenes eran de más que una amistad. Toma ya.

Ahora habla Anup, para decir que ya no es la Marta de antes, que es la hermana de Gran Hermano 12 y que cuando salga de marcha va a flipar, que hay una cola de chicos esperando por ella.

Ahora el tigre africano cuenta que cuando él sale de marcha las chicas le dan el número de teléfono. Vamos, lo que viene a decir es que pasarlas canutas en la casa merece la pena por lo mucho que ligas luego.

Ahora vemos las imágenes de Marta «cuidando» de Rubén en plan ñoño. Y a Chari diciendo en el plató que estaba «mosqueada».

A Chari hoy no le han dado la doble capa en la cara y sus lunares a lo constelación de ugrano se le ven más que nunca…

Catha tiene una cara de asco… Para mi que está oliendo un pedo y no está segura de que sea suyo.

Bueno, ahora Rubén y Chari vuelven a enzarzarse en el plató, que si no vayas de santo, que si tú dejas que desear…

Ahora vemos cómo Marta ha hablado de Yago como si éste fuera el hijo de San Pedro y la Madre Teresa de Calcuta y cómo éste se burló de ella por eso mismo.

Pero nada, que Marta sigue a partir piedras por Yago, y eso que Milá se empeña en dejarle como si fuera el hijo de Satán y Bloody Mary.

Ahora vemos la interacción de Marta con los totitos.

Vemos a Marcelo, ese hombre, poniendo a Marta a caer de un burro, hablando de ella como si fuera la ayudante personal de Jack el destripador. Porque sí, amigos, Marcelo es muy de querer.

La imagen de la tía del Infierno mirando entre el pelo estropajoso da más miedo que el malo del resplandor… Joder. El próximo Halloween van a vender máscaras con la cara de esta mujer…

Y LA CUARTA VEZ QUE PONEN EL VÍDEO DE LAURA LLORANDO…

Al final, lo que van a hacer es trivializarlo.

Ahora Marta interviene y le pide a Marceliano que vaya al plató.

Marta nos hace partícipes de sus intenciones de operarse las tetas. Ya sabéis, es la típica cosa que le comentas a cualquiera al conocerle: «Hola, me llamo Gus y llevo puesto un Jes extender».

Ahora vemos los jajas jijis erotico-festivos que tuvieron Marta y Arturo, hasta que a Marta le dio el telele y comenzó a mirar con asco a Arturo.

Joder, está nevando que ni en el Polo Norte y con Papá Noel haciendo juguetes. Cualquiera coge la moto mañana.

Ahora aparece, vete tú a saber porqué, Arturo, de la pasada edición. El caso es que Marta comentó que le ponía y ahí se lo han llevado, para que se ponga un poco perraca.

Milá presenta al diseñador, que dice que se ha inspirado en el diseño bizantino. Para mi que se ha inspirado en las granjas de pollos. Además, por la chaqueta que lleva abotonada hasta la nuez, tiene toda la pinta de sexar pollos en sus ratos libres.

Marta conecta con la casa para despedirse:

Les llama campeones y finalistas. A Yago le dice que le quiere mucho y que sabe cómo es, y que fuera hablarán. A Laura le dice que esta semana ha estado un poco más aislada, pero que se ha portado siempre bien con ella.

A Marcelo le dice… bueno, en realidad nada, para cumplir, vamos.

Y Laura pregunta si le ha trasladado a su madre su mensaje. Que sí, que quiere que su padre vaya al plató.

Y ahora les ponen el vídeo con sus entradas en la casa.

Toca que cada uno diga por qué debe ganar:

Laura: que no necesita decir nada, que la gente ya sabe cómo es, que llegar a la final ya es un premio y que si gana, pues mejor.

Yago dice que entró siendo él mismo, que le echaron y le dieron otra oportunidad, que ojalá haya hecho que le gente se lo haya pasado bien.

Marcelo dice que lleva cinco meses dentro de la casa y que nunca se ha mordido la lengua para decir cosas malas ni buenas y que ha sido coherente y que se merece ganar el programa. El público aplaude y Marcelo se ve ganador. No se lo cree ni él.

Pues eso, que se acabó lo que se daba, mañana, como siempre, resumencito. ¡Un beso y que descanséis!

Óscar llega a la casa… y videos de despelleje

Pues sí, nuevo hilo, es que hoy estoy en par costurero.

Oscar ha llegado a la casa. Lleva tres globos y cada uno de los finalistas debe elegir un globo y pincharlo.

Comienzan a pinchar y dentro están unos pergaminos, en los que están los número de teléfono para que les llamen, para ganar y esas cosas.

LLevan 137 días dentro de la casa. Juraría que Milá dijo antes 144… Esto es un cachondeo.

Ahora Milá incita a Óscar a echarles el champán por encima y Óscar se pone a lo Fernando Alonso. Bueno, a lo Alonso no, porque no gana ni con el carrito del supermercado.

Y como bien dice él, a Óscar le echan de la casa por tercera vez en esta edición.

Sigo con este hiiiiiilo.

Ahora vemos un vídeo en el que Yago y Marcelo se pusieron al despelleje desollador del resto de sus compañeros.

Ahí se pusieron, a definir a sus ex compañeros y la mayoría no salían muy bien parados…

Lydia está en el plató vestida con un corpiño… vamos, que sólo con un corpiño.

JA JA JA JA Mira Marcelo el culto, que en el Trivial no daba ni una, el jodío. Por no hablar, como dice Milá de sus faltas de ortografía en el blog…

Y sí, les hicieron el día de Andalucía, por aquello de que bebieran un poco de rebujito y se pusieran un poco beodos y la montaran.

Yago con el sombrero cordobés tiene una pinta de llevar el carro lleno de heno, que no veas.

Y venga cositas para moquear. Les dieron una hoja de papel para que le escribieran a sus familiares. Lo típico, en lugar de poner: Papás, cuando salga tenedme preparado unas fabes con almejas, pusieron cosas de esas de amor y sentimientos.

Y Laura llorando porque quiere que su padre vaya al plató… ¡¡Y NOS CASCAN EL VÍDEO DOS VECES!! Hala, tócate las alforjas del amor.

Pero nada de excusas, oye. ¿Que es el cumpleaños de Rubén, que lleva un mes fuera de la casa? ¡¡Qué más da, lo celebramos y punto!! Alegría, el caso es que los concursantes se mamen un poco y no mueran desnutridos…

Ejemplo de amor: Mientras Marcelo le dice a Laura «me encanta besarte», Laura le quita un grano de la espalda a traición.

A Rubén le entregan los regalos que los concursantes le hicieron en la casa y él, con la chulería que no demostró antes, tira al suelo la tarjeta de Yago. Que detalle más feo… Este Rubén, nos va a sacar carácter, al final.

Yago, sólo ante el totismo

A Yago le quedan siete días por delante que se va a cagar la perra.

Laurita estuvo a punto de cercenarle la mano a Yago. O eso es que Yago es una nena y no sabe jugar como una parleña de pelo en pecho…

El caso es que Yago dice estar harto de los besos, los abrazos y los folleteos de los totitos.

La ex-novia de Yago defiende ahora al susodicho diciendo que Yago es muy buena persona porque tiene la casa llena de animales recogidos de la calle y que eso demuestra que es muy buena persona.

Yo creo que demuestra que Yago tiene síndrome de Diógenes…

Y la Milá se cabrea porque a Silvia no se le oía y se rebela de pasa de leer el cue.

Me acabo de meter el bote de nata en la boca y he apretado el gatillo. Lo necesitaba. Un chute de nata para soportar las dos horas y media que quedan de gala…

Y ahí tenemos la prueba semanal, que la organización puso para que el hámster de la cabeza de Yago se sintiera como en casa dando vueltas en la bola…

Lo raro es que han perdido la prueba… ¿Cómo habrá podido ser? Estos no ganan la prueba ni entrenados por Guardiola.

Y la expulsada es… ¡¡MARTA!!

¡¡MARTA A LA CALLE!!

Que asco, amigos, nos hemos quedado sin ver la cara de asco de Marcelo, con lo que nos gusta…

«¡¡Los totitos en la final!!», chilla Laura.

Ay, amigos, que asquito de final. Ahora Marcelo pensará que es un tío guay y que se merece estar ahí.

Ahora mandan a los finalistas al jacuzzi. Laura tiene puesta la bocina.

Allí les espera Merche, para cantar «Si te marchas», lo cual parece hecho con recochineo hacia Marta, que se acaba de marchar…

Merche les pregunta: «¿Cómo estáis, quillos?».

Nuevo hilo, que éste huele un poco a pedo de Marcelo.

La bronca semanal de los To(n)titos

«A veces pienso que no quiere un novio a su lado, sino un monigote que le baile al son», dice Marcelo de Laura.

¡¡Pero si eso es él!!

Y dice que con Laura sólo puede ser una amiga especial, porque le saca siete años y tienen proyectos de vida diferentes.

La Tía del infierno sale diciendo que esta semana no han discutido, porque han aprendido a no pelearse. NEGATIVO.

Lo que pasa es que Marcelo, como piensa que gala Laura, está más suave que los huevos de un koala.

Ah, pues sí, si que discutieron, pero poco, como con desgana. Si es que ya no son lo que eran…

¿Por qué Marcelo cocina con el torso esmirriao desnudo y con los calzoncillos en modo cagado? Eso lo ve Sanidad y les cierra el chiringuito por cochinos.

¡¡EN 29 SEGUNDOS SABEMOS EL EXPULSADO!!

Será después de la publi y en otro post.

Comenzamos con los Totitos… ¡Y Óscar se va para la casa!

Lo primero que vemos es lo que ya sabíamos: que Marcelo pasa como de comer mierda de Laura. Que no le puede ofrecer lo que se merece.

Tócate los huevos, pero no ha perdido el tiempo en decirle a Laura que si ésta gana quiere que le regale una moto y ella que eso no, pero que se va a comprar un apartamento a su lado.

Marcelo sigue insistiendo en que él no está enamorado de Laura. Pero vamos a ver ¡¡¿¿QUÉ CRIADILLAS HACE CON ELLA??!!

Y Laura diciendo que Marcelo sabe muy bien como tratar a las chicas. Sí, vamos, Marcelo es al trato a las chicas lo que las heladas a los brotes tiernos.

¡¡¡ÓSCAR SE VA PARA LA CASA!!!

Ya sabéis que es sólo una visita.

Esta mañana les han puesto locuciones de sus familiares, por aquello de que se vean unos lloros, que siempre quedan bien en una gala.

Nuevo hilo, amigos y amigas.

Poner verde a alguien y que te escuche

Marcelo y Yago estuvieron poniendo verde a todos sus ex compañeros, entre ellos a Chari, a Rubén… y a Marta, que hacía como que dormía, pero lo estaba escuchando todo.

Madre del amor hermoso, que par de verduleras. Chari y Rubén necesitan un transplante urgente de piel, porque los han despellejado pero bien.

Ahora Rubén se defiende del despelleje diciendo que Yago juega con los sentimientos de la gente. Sí, amigos, a Yago lo que más le gusta es el monopoli y el sientepoli.

«Chulo, prepotente y maleducado» son los calificativos que Rubén le dedica a Marcelo. ¡Bravo por Rubén!

El caso es que Marta ha llorado más que Geno en seis OT consecutivos.

Y nada, que la chiquilla se ha desencantado de su amado Yago, que no qué le habrá visto a parte del lomo de rata que lleva pegado en el cogote.

Y Yago arregló el tema riéndose de ella y comentando lo mal que estaba, pero como el que comenta lo feo que está un gato que pasa por la calle…

Nuevo hilo.

Comienza la Gala de Gran Hermano

Ahí los tenemos. Laura, Marta y Yago en el sofá y Marcelo en plan autista.

Este ha sido el Gran Hermano más largo. Según Milá llevan 144 días de condena.

Ahora vemos la entrada de los cuatro en el programa, cuando sufrimos la sucesión de chonis y muscuchulos que tan para atrás nos echó…

¡¡OSTRAS!! 1000á va vestida de Caballero del Zodiaco con armadura dorada.

O eso, o de la Gallina Caponata vestida para un anuncio de Freixenet.

Pues sí, a Marcelo lo que más le pesa es que la gente fuera no le soporte. Amigo, vas a tener gente que no te soporte como para construir las pirámides en un fin de semana. Pero tranquilo, que también tendrás una buena cohorte de huelepedos a tu lado.

A Yago le joroba que para el segundo y tercero no haya premio. El chaval es práctico, tú.

Julia: «Tienen que llevarse todos bien, como quiere el programa». Ja ja ja ja Esta mujer no sabe en qué programa se ha metido.

La tía de Marcelo vuelve a llegar al plató poseída. Ahora dice que Terry le ha faltado al respeto y Terry la llama Mentirosa. Patricia interviene: al parecer en un ascensor la Tía del Infierno le quitó la cara. ¡¡DIOS!!

A Laura lo que le preocupa es que cuando salga su padre esté en el plató, aunque no se le vea, en la última fila del público.

Milá le ruega otra vez a Marceliano que vaya al plató, aunque sea a la final.

Marta, por su parte, lleva 10 nominaciones y siempre se ha salvado, por lo que le toca lo que vienen siendo los ovarios que los demás la den por expulsada (aunque ella lo piensa también). Esta semana Marta ha estado fuera de la casa y en su lugar han puesto un holograma.

Ahora vemos a Marcelo del santo Cuesco diciendo que Marta es como un mueble.

A Rubén le llama cornudo una chirigota… a la cara

Antes de nada: ¡Gracias Ana por el chivatazo!

Os dejo un vídeo que no tiene precio. Es de una chirigota gaditana llamada Ricas y Maduras. En uno de los cuplés se meten con Chari y Rubén de Gran Hermano 12. Entre otras cosas, a él le llaman reno…

¡¡Pero resulta que Rubén estaba entre el público!! Ja ja ja ja

Su cara de circunstancias es un poema. El cuplé, en el minuto 6, la cara de Rubén, en el 10.40.

P.D: ¡¡ESTA NOCHE GALA!! La vemos todos juntos en directo.