Seguramente te has sentido abrumado cuando navegabas por la red al ver noticias y anuncios relacionados con la visita del Papa a Nueva York o con comentarios de si Shakira ha cantado bien o no “Imagine” en la ONU. Si vives en Nueva York, habrás alucinado al encontrarte la oficina vacía o las carreteras de siempre por primera vez circulables sin tráfico. Y es que la mayor parte de la gran manzana ha sido cortada por medidas de seguridad y se ha recomendado a los trabajadores de la zona que trabajen desde casa, desde ayer y hasta el lunes. Nueva York se ha revolucionado con la visita del pontífice pero detrás hay una cumbre de gran importancia.
Cumbre sobre el Desarrollo Sostenible
Después de casi tres años de consultas globales abiertas, negociaciones tensas y algún cambio de dirección, se han adoptado los objetivos de desarrollo sostenible propuestos (SDGs) por los Estados miembros de las Naciones Unidas. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDGs, por sus siglas en inglés) incluyen 17 objetivos con 169 metas específicas, que tienen como fin erradicar la extrema pobreza, combatir la desigualdad y la injusticia, dar acceso a la educación de calidad a todos, facilitar el acceso a agua potable y lograr el crecimiento económico.
Asamblea General, 69 sesión. / UN
El domingo se habrá aprobado – en una mezcla de asambleas plenarias, “diálogos interactivos” entre los líderes mundiales, representantes de la sociedad civil y organizaciones no gubernamentales – una agenda ambiciosa, resultado de años de consultas en el marco del 70 aniversario de la asamblea de Naciones Unidas. El objetivo: antes de que termine el año 2030, en el planeta no habrá más hambre ni pobreza extrema. El nuevo plan reemplazará a los Objetivos del Milenio aprobados en 2000.
«Nadie puede ser dejado de lado”, dijo ayer el secretario general de la ONU, el surcoreano Ban Ki-moon. “Pero aún queda por delante la verdadera prueba, la implementación. Para ello necesitamos ayuda de todas partes y de todos. Necesitamos compromiso político y colaboración de todos”, añadió. Es necesario “cambiar y mirar más allá de las fronteras nacionales”. Hoy y mañana se espera que los dirigentes se refieran a esta implementación de los objetivos y que discutan un nuevo acuerdo sobre el cambio climático que, según las previsiones, se terminará de perfilar en París a finales de año.
Casi nadie en Nueva York lo vive así pero para algunos se ha presenciado un momento histórico que pretende poner fin a la pobreza, a la desigualdad y al cambio climático. La ONU cojea por muchos lados pero esta vez tengo que admitir que hay mucho trabajo detrás de esta cumbre y hay metas ambiciosas que difícilmente acabarán con la desigualdad en el mundo, pero al menos lograrán acercarse. No obstante, es una pena que pese a la grandeza del asunto, la gente esté más pendiente de cuándo actúa Beyoncé hoy en Central Park o lamentándose de no haberse podido hacer un selfie con Francis.
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26 septiembre 2015 | 19:22