Fernando Alonso, en Mónaco (Foto: Efe).

Fernando Alonso logró un brillante quinto puesto en el GP de Mónaco, pero algunos se quedaron un poco preocupados al ver la enorme distancia que separó a Fernando del cuarto clasificado, Sebastian Vettel.

Concretamente fueron 69.230 segundos los que le sacó el piloto de Ferrari a Alonso, más de un minuto, una distancia enorme que podría llevar a pensar que el McLaren sigue siendo una castaña.

Y aunque es cierto que el MP4-31 sigue siendo un coche del montón y está lejos de alcanzar a Ferrari, también es cierto que no está tan lejos del monoplaza rojo como indicaron esos 69.230 segundos.

Lo ha explicado Eric Boullier, director de McLaren, en la revista Autosport:

«La brecha que hubo entre Vettel y nosotros no fue real porque Fernando estuvo gestionando el ritmo para asegurarse de que sus neumáticos llegaban hasta el final. Si te fijas, Button llegó a ser un par de segundos más rápido que Alonso porque estaba solo y podía empujar sin problemas»

Boullier tiene razón porque Alonso terminó la carrera con neumáticos superblandos y Vettel acabó con blandos. Con esos juegos de neumáticos, el asturiano tuvo que aguantar 46 vueltas y el alemán solo una más, lo que significa que Fernando tuvo que ser mucho más conservador para evitar otra parada en boxes.

Además del dato de los neumáticos, hay que añadir otro y es que Alonso, consciente de que iba a ser imposible alcanzar a Vettel, concentró todos sus esfuerzos en evitar ser adelantado por Nico Rosberg, que venía por detrás con su avión Mercedes.

Rosberg se salta la chicane de Mónaco al intentar adelantar a Alonso. Tuvo que devolverle la posición.

Cuando un piloto tiene que defender su posición, siempre pierde algo de tiempo respecto al piloto que tiene por delante. Por eso la distancia respecto a Vettel se fue ampliando sin remedio.

PD. Contener a un Mercedes con un McLaren durante prácticamente media carrera solo está al alcance de unos privilegiados.