Fernando Alonso se quejó ayer de lo cargado de que está el calendario de la Fórmula 1, que la temporada pasada alcanzó las 20 carreras:

«Veinte carreras son demasiadas y no es fácil mantener un nivel máximo de rendimiento, tanto físico como mental, durante todo el año. Tal vez sería mejor tener una o dos carreras menos en el calendario»

Y no es por trabajar menos, ya que Alonso propone sustituir algunas carreras por tests privados donde los equipos puedan desarrollar sus monoplazas sin la presión de tener que poner a punto el coche para un gran premio:

«El año pasado disputamos el último gran premio a finales de noviembre y casi nos plantamos en Navidad. Sería bueno reducir el número de carreras y añadir alguna sesión de pruebas durante la temporada»

Es cierto que el Mundial de Fórmula 1 ha ido creciendo y aumentando el número de carreras a lo largo de los años, de las siete que había en sus inicios se ha llegado a 20, pero tengo que discrepar con Fernando ya que, como aficionado, prefiero ver el máximo número de pruebas posibles. Sí coincido con Alonso en su deseo de incluir tests durante la temporada.

En 2012 los pilotos ya disfrutaron de un mes de descanso en agosto cuando se paralizó el mundial por vacaciones, una decisión que me pareció correcta, ya que ese mes las audiencias televisivas eran muy inferiores al resto del año. Además, los equipos pueden aprovechar el parón veraniego para mejorar sus monoplazas y darle un giro al campeonato del mundo. Este año, sin embargo, vuelve el GP de Bélgica en pleno mes de agosto.

Eso sí, el Mundial 2013 será más corto que en 2012 porque la suspensión del GP de América, en New Jersey, no ha encontrado sustituto. La temporada constará de 19 pruebas repartidas entre el 17 de marzo y el 24 de noviembre. Es decir, que este año veremos 2,1 carreras al mes, una media que no me parece excesiva.

PD. ¿Os parece adecuado el número de carreras actual en el Mundial de Fórmula 1?