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Parece que determinados pilotos olvidan que sus cuentas corrientes están años luz por encima de las del resto de los mortales y, a veces, evidencian una considerable falta de tacto en plena época de crisis.

Todos recordamos cómo hace unos días Jorge Lorenzo nos enseñó su mansión, repleta de lujos y modelos tomando el sol, en un polémico video que generó muchas críticas. Seguramente la iniciativa fue de la marca que patrocinó ese video y no del piloto mallorquín, que se las ha visto y deseado para justificar aquella innecesaria ostentación de riqueza.

Pues ahora ha sido Lewis Hamilton quién ha tomado el relevo de Lorenzo al mostrar en Twitter, un arma siempre peligrosa en las manos del piloto británico, los lujos a los que tiene acostumbrados a sus dos perros bull-dog.

Hamilton publicó en esa red social imágenes de sus dos perros, Roscoe y Coco, viajando en el interior de su jet privado bajo unas lujosas comodidades con las que solo puede soñar el turista de a pie, más acostumbrado a apretar las rodillas en los estrechos asientos de Ryanair.

Aquí va otra de esas imágenes, que Lewis acompañó del siguiente mensaje:

«Aquí están Roscoe y Coco viajando a lo grande en primera clase. Durmieron durante todo el viaje»

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La ostentación de Hamilton también ha generado críticas en el Reino Unido y algunos medios, como el Daily Mail, han recogido en sus páginas la noticia.

Hay que recordar que Roscoe ha sido protagonista habitual en el paddock de la Fórmula 1 esta temporada, ya que ha acompañado a Hamilton en muchas carreras del Mundial. Lewis logró, incluso, que Bernie Ecclestone le facilitara una acreditación a su perro, con foto incluida, a pesar de que los animales están prohibidos en el paddock.

PD. Personalmente me parece muy simpático el perro de Lewis y le doy la bienvenida al paddock.