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El enfado de Fernando Alonso no ha remitido. El pasado jueves cargó contra parte de la prensa italiana por su empeño en situarle fuera de Ferrari y hoy ha vuelto a mandar un recado tras el GP de Singapur.

Aunque en el circuito asiático se ha visto una leve mejora en el rendimiento del F14T, el piloto asturiano ha querido dejar claro que una parte muy importante del mérito la tienen sus manos. Así se ha expresado cuando le han preguntado si la mejora del Ferrari le daba esperanzas de cara al próximo GP de Japón:

«Sí, bueno… el otro Ferrari ha quedado a 45 segundos, pero veremos qué pasa en Suzuka»

Algunos aficionados han interpretado la frase de Alonso como un ataque a su compañero, Kimi Raikkonen, o como un ataque de soberbia, pero en realidad no van por ahí lo tiros.

La frase de Alonso iba destinada a determinados periodistas italianos, que están haciendo campaña para forzar su marcha de Ferrari. Una campaña que, evidentemente, no responde a cuestiones deportivas, sino personales.

Esos mal llamados periodistas no buscan la marcha de Alonso porque consideren que es un mal piloto (solo un ingenuo podría pensar eso), sino porque su relación con el piloto asturiano no es como ellos querrían, ya sea por el motivo que sea (concesión de entrevistas, amiguismo, críticas al rendimiento de Ferrari, etc).

Y el enfrentamiento con parte de esa prensa italiana ha quedado patente este fin de semana en Singapur. Después de que Alonso criticara el jueves la filtración de rumores sobre su marcha de Ferrari, el periódico La Gazzetta dello Sport ha vuelto a la carga este fin de semana insistiendo en su marcha a McLaren en 2015. Una despedida que, según La Gazzetta, puede hacerse efectiva en el próximo GP de Japón.

Y ante esa presión mediática, Alonso solo ha querido reivindicarse frente a esos periodistas italianos, que se niegan a reconocerle el mérito de mantener a flote a Ferrari. Y les ha recordado que, sin su presencia, seguramente veríamos a la Scuderia en una situación mucho más dramática que la actual.

Hay que admitir, eso sí, que la frase de Alonso «hablaré dentro de un par de semanas» no ayuda a frenar los rumores. Dentro de dos semanas estaremos en Suzuka, la casa de Honda, y eso deja la puerta abierta a las especulaciones sobre su marcha a McLaren-Honda.

PD. Si finalmente Alonso se marcha a otro equipo, ¿cuánto le echarán de menos esos periodistas italianos que ahora intentan forzar su adiós?