Fernando Alonso (Foto: McLaren).

Mercedes, Ferrari y Red Bull contarán en 2017 con una ventaja importante respecto al resto de escuderías. La razón es que esos tres equipos han sido los elegidos para realizar los test de neumáticos de la próxima temporada y, por lo tanto, contarán con una valiosa información sobre el terreno, que el resto de equipos solo verá a través de los datos ‘precocinados’ que les facilite Pirelli.

Uno de los que ha expresado su malestar por esa ventaja para los tres equipos que ahora mandan en la parrilla ha sido el director técnico de Williams, Pat Symonds:

«Creo que supone una enorme ventaja y es algo que todos tendríamos que considerar. Aunque se trata de pruebas a ciegas, siempre tienes la ventaja de intuir en qué dirección van los neumáticos. Los equipos que realizan ese tipo de test parten con ventaja»

No deja de ser sorprendente que en McLaren no hayan protestado porque se trata de una de las principales escuderías de la parrilla y, como tal, debería de participar en esos test de neumáticos.

Las razones de por qué han sido elegidos esos tres equipos no están muy claras. Desde Pirelli aseguran que ofrecieron esa posibilidad a todas las escuderías y que fueron esas tres las que se presentaron voluntarias.

Esa explicación me parece del todo insuficiente porque a nadie se le pasa por la cabeza que McLaren rechazara participar en esos test estando en la situación en la que se encuentra. McLaren necesita apuntarse a cualquier prueba que le pueda aportar un mínimo de información, aunque se trate de un curso de primeros auxilios impartido por la FIA. Quiero decir con esto que no creo que McLaren haya rechazado voluntariamente participar en esos test.

Otra razón, que parece tener más fundamento, es que esos test de neumáticos deben realizarse con motores anteriores a 2015 y McLaren no tienen ninguno porque hasta 2014 montó motores Mercedes. Su relación con Honda se inició en 2015 y por lo tanto no dispone de motores anteriores a ese año.

Esa razón también me parece injustificable porque penaliza claramente a los nuevos fabricantes que, en realidad, son los que más necesitan realizar pruebas para que todos podamos disfrutar de una competición más equitativa.

PD. En los test de Pirelli deberían de participar TODOS los equipos. Y si no se pueden utilizar motores de 2014, deberían utilizarse los de 2015. Lo que no es de recibo es discriminar a unos equipos y favorecer a los que menos lo necesitan.