Por Ramón Jáuregui. Europarlamentario.
Si yo fuera de Podemos, haría posible el gobierno PSOE/Ciudadanos absteniéndome y, ocupando así, en exclusiva, la oposición de izquierdas. ¿Qué pierden con ello? Por supuesto, pierden el gobierno que nunca tuvieron y que, en el fondo, tampoco desean porque saben que no estará en sus manos mejorar la vida de la gente en años de vacas flacas.
Lo que ganan por el contrario es colocar al PSOE -su verdadero rival- ante una gobernación dificilísima en un país atravesado por múltiples y muy serios problemas. Un gobierno obligado, de entrada, a negociar con Bruselas una senda de dos años de reducción del déficit después del fiasco del PP del 2015, que ha dejado las cuentas públicas con el 5% del déficit en un año del crecimiento económico del 3%, aumento del empleo y reducción del coste del petróleo y de los intereses de la deuda.
Podemos gana convertirse en el grupo clave de las izquierdas parlamentarias, en una legislatura que, con seguridad, exigirá muchas mayorías en temas muy importantes. Liderar una oposición de izquierdas, disponiendo de la llave de las mayorías, otorga un protagonismo político excepcional, si se sabe utilizar con inteligencia y prudencia. Si yo fuera de Podemos, no perdería esa ocasión. Una ocasión que necesitan para hacer y organizar un partido político en serio.
Aprendiendo de una realidad que desconocen y pasando de la protesta a la propuesta. Pero, a la propuesta seria, contrastada, realista. Resolviendo sus querellas internas con calma y diálogo. Definiendo un modelo territorial que no sea absorbido por sus mareas nacionalistas en la mitad del país. Si yo fuera de Podemos, me tomaría ese tiempo precioso en esa posición política ideal, para ganar quizás mañana.
Pero, además, abortaría así la división interna que se ha instalado en sus bases por un reproche que no es fácil de combatir: ser responsable de que Rajoy y el PP, sigan en la Moncloa hoy y quizás mañana y ser también responsable de que no haya habido un “gobierno del cambio” PSOE-PODEMOS-CIUDADANOS. Si yo fuera de Podemos habría evitado esa tensión interna y ese reproche político que tendrá largo recorrido, facilitando el gobierno a Sánchez y Rivera con mi abstención, en la investidura.
Pero en fin, me temo que estos argumentos llegan tarde para la cúpula de Podemos y, me temo además, que yo no seré de Podemos.
Pablo Iglesias e Íñigo Errejón durante el desayuno informativo de Europa Press en Madrid el 11 de abril. (GTRES)
Totalmente de acuerdo! El problema es q el ser humano es ambicioso por naturaleza, y esa ambición, en ocasiones, es nuestra perdición.
15 abril 2016 | 09:32
Hay un «pero» Podemos, al contrario que las formaciones políticas «regladas» no asume como «normal» la oposición frontal a los nacionalismos y está claro que hay una gran parte de los ciudadanos -no necesariamente Catalanes, gallegos o vascos- que entienden que negar el derecho a decidir es negar la democracia. No necesariamente, repito, se trata de independentistas.
Hay otro problemas muy relevantes por solucionar en este país, todos lo sabemos, pero no nos engañemos uno no puede ocultar al otro. Y, si estamos de acuerdo en que hay o pueden haber coincidencias programáticas porqué forzar acuerdos a derechas. Las rayas rojas las pone el PSOE.
15 abril 2016 | 09:34
Afortunadamente, usted no es de Podemos. Déjenos que expresamos libremente nuestra opinión a los que si lo somos y vaya a darle consejitos a quién se los pida. Tic tac, tic tac, tic tac…
15 abril 2016 | 09:49
Interesante reflexión.
Cuando Podemos quiere reunirse para presentar un paquete de medidas propio se le dice lo siguiente:
PSOE: El acuerdo con Ciudadanos no se toca.
Ciudadanos: No vamos a tocar ni una coma de nuestro acuerdo.
Y luego son tan caraduras que piden la abstención de Podemos sin pensar en que para ello deberán cumplir alguna parte de su programa para sentirse identificados con el «cambio» que tanto predican y que yo no veo por ningún lado.
Cambio responsable le llamaban a unos. Los que se abstuvieron de votar en contra de la ley LOMCE o de la ley Mordaza.
Partido de izquierdas le llamaban a los otros. Los que firman una impresionante subida del 1% o aceptan gran parte del programa de derechas de Ciudadanos.
A dar lecciones a otros. Hága el favor.
15 abril 2016 | 10:08
Cristian, espero que tu zasca al socialisto le quite las ganas de volver a escribir sobre podemos
15 abril 2016 | 10:10
No, no es de podemos, pero tiene mas razón que un santo. Y dejarte te deja, ahora deja tu.
15 abril 2016 | 10:12
Yo no voté a Podemos para que pactara con ningún partido con tendencias derechonas. Y la política que ha hecho el PSOE, cuando ha gobernado, no difiere ni un pelo de la del PP. Así, que mejor solo que mal acompañado.
15 abril 2016 | 10:28
Muy señor mío (Cristian), ustedes no tienen opinión, ni criterio, ni ética, ni moral, ni preparación, ni honorabilidad, ni principios, ni valores ni nada que se le parezca. Lo que sí tienen es muy buena oratoria, mucha desfachatez y mucha caradura al haber intentado, intentado y logrado, engañar a mucha gente con un discurso populista, dirigido a todas esas personas que se encuentran en un situación muy comprometida y que han visto en ustedes un salvavidas, aunque si llegase el momento, y Dios no lo queira, ese salvavidas se convertiría en una losa que, irremediablemente arruinaría la vida a muchísimas personas en este país.
Por cierto, todavía no les he escuchado decir cómo van ustedes a solucionar los problemas que achacan a este país, lo único que les he oido decir es que van ustedes a aumentar el gasto público para solucionar dichos problemas, lo que denota un supino desconocimiento de los principios económicos más básicos…
Su discurso se basa en el «pueblo», en la «gente», lamentablemente su secretario GENERAL, se preocupó bien poco por esa «gente» a la hora de exigir sillones y carteras… Retratándose como lo que es, una persona zafia, petulante, ególatra, déspota, pedante e inepta.
Para definirle a usted, sólo hay que ver cómo reacciona ante una crítica constructiva, lo que denota su bajeza ética e intelectual, así como una extraña superioridad moral, la cual brilla por su ausencia.
Atentamente,
Un ciudadano
15 abril 2016 | 10:37
Si, claro, eso lo haría un partido de la vieja política, dejar que los otros se estrellen para ganar posiciones. Ustedes mismos se retratan. Los que hemos votado a Podemos lo hemos hecho pensando en que se puede hacer otra política diferente y haciéndolas YA, no esperando 4 años que pueden ser devastadores para muchas otras personas que sufren. En fin, que así nos va….
15 abril 2016 | 10:38
Flipo con la carta, según ella la firma un diputado «Socialista» y «Obrero» dando a entender de que su política de «izquierdas» coincide más con Ciudadanos (partido de derechas y liberal donde los haya) que con un partido más de izquierdas como Podemos.
No entiendo cómo puede entenderse antes con un partido que tenga 40 escaños a otro con más fuerza con 69… y que le puede abrir las puertas a un gobierno de IZQUIERDAS REAL PUDIÉNDOSE UNIR TODAS LAS IZQUIERDAS…
No entiendo cómo puede permitir que su partido «obrero» (y con el beneplácito de los sindicatos) acepte la condición de Ciudadanos de reducir AÚN MÁS las condiciones laborales de sus vecinos.
En fin, PSOE, contra todo pronóstico (o para los que ya os conocemos de la época de Felipe González, ya sabíamos que no os interesa las políticas obreras ni sociales), se niega a ello.
Para colmo tenemos a su predecesor presidente tirando «chinas» para que haya un tripartito PP-Ciudadanos + abstención PSOE. Genial.
Sr. Jáuregui… porque se acuerda de que su partido es de izquierdas ¿no? O al menos esa era la idea inicial, pero me habéis decepcionado, esperaba una España con políticas nuevas… y no os habéis atrevido al cambio real. El pueblo se está dando cuenta y cada día su partido pierde votos, allá ustedes.
Tic tac , Sr. Jáuregui , tic tac…
15 abril 2016 | 11:10
Como se nota que no eres de Podemos……..no vas a entender su noción de política ni que entrenaras 1000 años.
15 abril 2016 | 11:14
Si usted fuera de izquierdas… sabría lo que traman Rivera y los suyos.
15 abril 2016 | 11:21
Y si yo fuera del PSOE rompería el carnet del partido.
15 abril 2016 | 11:22
Hubiera sido más productivo y menos desesperante para la población, que hubiesen aparecido cartas tipo. «Si yo fuera Cháves o Griñan». Esto ya es el colmo del absurdo. Cada eslogan de un representante socialista es más patético que el anterior. Ya pocos tienen duda pese al vano esfuerzo de un partido que ha engañado casi tanto como el pp, que si a Sanchez le hubiesen dejado pactar en primer lugar con Podemos, habría gobierno desde el minuto 1. Qué piel tan fina alegan para lo que dice Podemos y como la de un cocodrilo con ciudadanos. Su carta bien podría haberse titulado. «Qué haría el PSOE si fuese de izquierdas» y no seguir viviendo de unas siglas que ya hace tiempo dejaron de ser apropiadas o coherentes.
15 abril 2016 | 11:36
Respecto al aumento del gasto publico y tus vastos conocimientos económicos. Hay un termino muy básico en economía, Invertir.
Invertir
verbo transitivo
1.
Cambiar el orden, la dirección o la posición de una cosa por los opuestos.
«la tendencia alcista se ha invertido durante el último trimestre»
2.
Emplear una cantidad de dinero en un proyecto o negocio para conseguir ganancias.
«invertí la mitad de mis bienes en acciones; es un buen momento para invertir en esta empresa»
PD: Con esa retorica y aires de intelectual deberías mirarte como has reaccionado al inocuo comentario de Cristian
15 abril 2016 | 12:28
Muy Señor mío (Marc),
Sigues sin contestar la pregunta anteriormente realizada, perdona por mi ignorancia, pero invertir en gasto público no es la solución, aunque tú y tus secuaces os empecinéis en ello.
Después de este ejemplo tan clarificador, ¿me podrías indicar en qué invertir Mr Buffet?
Por cierto, veo que sabes lo que es la RAE, y el copy/paste, a ver si también aprendes a usar el corrector ortográfico.
Atentamente,
Un ciudadano
15 abril 2016 | 12:45
Si yo fuera del PSOE diría a los que me votaron en base a un programa, que me encuentro con un tremendo problema, si no hago lo que quiere Ciudadanos pierdo Andalucía. ¿Qué pierden con ello?, todos los votos de los españoles que les han votado, como yo y que quieren un gobierno de izquierdas
Lo que ganan por el contrario es asegurar a Susana Diaz que va a seguir gobernando en Andalucía, si bien siempre con la espada de Damocles y a expensas de Ciudadanos, convirtiéndose en su seguro servidor.
PSOE gana tener el gobierno y una vez conseguido el gobierno, tener que hacer lo que quiera ciudadanos, porque nunca conseguiría podemos ganar una moción de censura.
Aprendiendo los votantes de una posible realidad en la que no se habían fijado, pasarían de una ilusión de gobierno de izquierdas a una realidad de gobierno de derechas vestido ni de azul, ni de rojo, con una cara que dice ser de centro izquierda pero que ni gobernaría ni existiría, más que para ser el malo de la película y desaparecer para los próximos comicios. Si yo fuera del PSOE me plantearía si me interesa cargarme la historia de un partido, que dice llamarse de izquierdas, o de centro izquierdas, o de centro, dependiendo.
Si yo fuera del PSOE me plantearía que significa que la mitad de los militantes, no ya que votasen en contra, sino que ni siquiera se molestasen en ir a la sede a votar ese acuerdo con Ciudadanos.
Si yo fuera del PSOE, me plantearía cuando decir que el gobierno ya está acordado y será de PSOE y de Ciudadanos, o lo que es lo mismo de Sanchez y Rivera, porque ya lo anunció uno de Ciudadanos y algo habló de facilitar un gobierno de los dos un señor que escribía en un blog.
Pero en fín, espero que estos argumentos no lleguen tarde y la ciudadanía vuelva a vivir el desencanto de un gobierno que no es lo que esperaba
15 abril 2016 | 12:50
Para el «3. Dice ser Cristian», dices textualmente «Déjenos que expresamos libremente nuestra opinión a los que si lo somos y vaya a darle consejitos a quién se los pida».
Es decir, tu puedes exigir expresarte libremente porque eres de Podemos, pero no aceptas que otros lo hagan si no están de acuerdo?
PEDAZO DE EJEMPLO DE TOLERANCIA, EDUCACIÓN Y RESPETO XD jajajajjaja Menos mal que aun queda gente con la que, desde la discrepancia, se puede hablar.
15 abril 2016 | 13:09
Para el 18
El señor Jauregui no dice lo que piensa sino dice lo el quiere que piensen otros. Muy por cierto de los viejos partidos que se apropian de lo que dicen «todos» los españoles. No entienden que no tienen en su poder el pensamiento de yodo un pueblo
15 abril 2016 | 13:19
Y dale. La abstención de Podemos no sirve.
15 abril 2016 | 13:26
19, yo entiendo una opinión, que puede estar fundamentada en el deseo de los viejos partidos, o no. Luego cada uno es libre de tomarla como opinión objetiva o no. Y he aquí el mayor problema en España, que pensar lo que es pensar, se piensa poco y la mayoría se dejan guiar.
Dicho esto, no quita para en determinados puntos del comentario piense que tiene razón. Al final la gracia de esto es que no todos pensemos igual, si no acabaríamos muy mal.
Y por supuesto, mi comentario es una critica absoluta contra alguien que pide libertad de expresión atacando a esa misma libertad de expresión, o el famoso «o conmigo o contra mi». Y eso me recuerda mas a otros tiempos.
15 abril 2016 | 13:34
20:
Es una estrategia para las próximas elecciones. Si te fijas, el primero que no quiere nada con Podemos es ciudadanos, pero la estrategia del Rivera escondido en la cara de Psoe para que se la partan a ellos es dejar de malos de la película a los del círculo. Solo hay que mirar un poquito los acontecimientos. Cuando los de ciudadanos pensaron que el psoe podía llegar a un acuerdo con podemos, van y votan en contra de la de Andalucía en ese parlamento. Si echamos un poco más atrás la mirada, vemos que Susana Díaz dejó de meter caña, cuando se firmó el acuerdo con los ni rojo ni azules para ser del color que me interese en cada momento. Antes, unos días antes de las generales, hicieron un amago de votar en contra también en ese parlamento.
Y si hablamos de Gonzalez, lanza las bombas después de reunirse con los de la UE.
Lo único que nos queda a los votantes, es aislarnos de lo que dicen los partidos, medir milimétricamente lo que hacen y sacamos las conclusiones de lo que les interesamos a unos a otros y a los otros
15 abril 2016 | 13:38
Yo no sé si es consciente de que aunque Podemos se abstuviese, en segunda ronda hacen falta más Síes que Noes. Por lo tanto, veo casi imposible que con 130 (131 con CC) síes, ganen absolutamente nada. El PP va a votar NO. Y muchas concesiones deberían hacer a DyL, ERC, PNV, Bildu para que no voten otra cosa que NO. Y si ceden concesiones a los nacionalistas/separatistas, ¿por qué no cedieron concesiones antes con Podemos? Me parece evidente que el único «por qué» de todo esto es evitar por todos los medios que Podemos rasque poder. Les aterroriza la tirada de manta y quedar en evidencia como está pasando en el ayuntamiento de Madrid.
15 abril 2016 | 14:35
@ Dice ser Rafa: Leyendo tu comentario, creo que los calificativos de «persona zafia, petulante, ególatra, déspota, pedante e inepta» te vienen que ni anillo al dedo. Es muy complicado quedar como un perfecto cretino de manual con otras palabras que las que tú has empleado. Enhorabuena, hacía tiempo que no me encontraba con alguien tan merluzo.
15 abril 2016 | 14:52
Es distinta la opinión fundamentada en el deseo de los viejos partidos? No se si disculpa el que hablen en nombre de todos, espero que no. Los de este señor no son opiniones son sentencias. Eso es una absoluta falta de respeto a la opinión y pensamiento de otros. No por decirlo con palabras individualmente bien sonantes quiere dejar de decir lo que quiere decir en su blog . reconozco que respeto muchísimo mas a quien habla claro que a quien intenta asustarme con las mareas por ejemplo pero con otras palabras que suenan mejor
Que ve vd de ofensivo en que le pida que deje que opinen libremente los que no piensan como ese señor?
Habría cambiado el comentario si hubiese intercalado señor y le pediría? Habría dicho lo mismo.
Si no quieres problemas de este tipo el comentario de 17 es fantástico pero las cosas no cambian por que se utilice una palabra u otra. Lo mas importante desde mi punto de vista es la libertad de pensamiento y lo único que es mudo y nadie puede prohibirlo, ni en las dictaduras. Probablemente por eso. Aun así muchos políticos que deberían de respetarlo y fomentarlo hacen lo contrario todo esto a mi entender
Saludos
15 abril 2016 | 14:59
Qué gracioso, es como Guardiola aconsejando a Simeone sobre lo que tiene que hacer en la próxima eliminatoria de Champions. El señor Jáuregui puede tener la opinión que quiera y es tan respetable como la de cualquiera, pero la presentación y el enfoque del artículo ‘si yo fuera de Podemos’ es un insulto a la inteligencia de un lector normalito tirando a bajo como yo mismo. ¿En serio nos quieren seguir tratando así?
15 abril 2016 | 15:26
Si yo fuera del PSOE descartaría totalmente a Podemos porque no se puede gobernar en coalición con un partido que se niega a pactar con todo quisqui, que convoca referendums internos aplazando tomar la más mínima decisón ultraimportantes para 47 millones de personas.
Si fuera de Podemos pues no esperaría nada más que el poder absoluto sin posibilidad de réplicas ni quejas, porque parece ser su único objetivo. Apoyar que en nombre de un sindicato se pueda entrar a robar en Mercadona, devolver lo recibido a Irán y a Venezuela con cargo a los contribuyentes gobernados, ayudar a los presos de ETA, quitar la valla de Melilla para que los delincuentes africanos sufran menos al romperla, darle sus 600 euros mensuales a todo inmigrante que pasee por aquí y se quede empadronado mientras realmente vive en cualquier otro estado de la tierra… creo que eso es lo que ponía en su programa no hace mucho.
Yo veo inviable un pacto con Podemos y lástima gasto electoral pero es que lo considero infumable. Si pactan creo que el país quedará fatal, ingobernable. Soy partidaria de nuevas elecciones.
Entiendo las posturas del PSOE y de Podemos, ambos desean gobernar sin pactos y hacer la suya, pero también entiendo que no es viable. Sus programas no coinciden, por lo tanto no es posible.
Es mi opinión, Sr. Jáuregui.
15 abril 2016 | 16:04
26: el problema es que les ha valido hasta que los chavaks reivindicaron la soberanía para el pueblo. Lanzaron el mantra de que el demócrata vota.ya está y nos lo creímos. No quisimos hacer ni entender que la soberanía es reclamar y forzar dimisiones obligar a cumplir programas que con nuevas leyes no se pueda manchacar al pueblo. Ahora los dicen que lo mejor es tener un gobierno aunque sea malo. Es el mantra xo ya no les vale. X eso y pq ciudadanos les tiene pillados en andalucia tienen que poner kmo malo de la película al otro. Usando el miedo . me recuerda a su segundo mejor amigo . Tanto ataque me da la sensación de que es pq no les va bien en las encuestas. Centro derecha y centro van para ciudadanos y el PSOE de izquierdas a podemos e izquierda unida. Dios les pille confesados
15 abril 2016 | 16:18
Y si yo fuera Jáúregui me callaría la boca y no me entrometería en las decisiones
soberanas de otras formaciones políticas , máxime, cuando a quién se dirige su
supuesto consejo es una formación política de verdadera izquierda.-
No tanto así el «PSOE»,que como ya es sabido «encanta en retóricas y defrauda en
los hechos» y sin entrar en detalles de la corrupción que arrastra su desprestigiado y
decadente organización cuyo líder y referente de la vieja guardia – Don Cal Viva Gonzáles –
se encargara de desvirtuar y degenerar el originario partido de Izquierda al servicio de los
obreros socialistas republicanos , en un partido de neto corte Neo liberal al total servicio de
la corona ,de la oligarquía ,de la banca y de los poderosos .-
15 abril 2016 | 16:23
Aún no he escuchado ninguna explicación coherente sobre la decisión del PSOE de pactar con un partido de derechas (dicho por Sánchez hasta la extenuación) con cuarenta diputados y marginar a otro de izquierdas (al que votaron muchos exvotantes socialistas) con casi setenta. Creo que el PSOE (y la socialdemocracia) hace mucho tiempo que se siente muy cómodo con la sociedad neoliberal capitalista que se ha instaurado en el mundo, en realidad es su sitio natural.
15 abril 2016 | 19:55
Si yo fuera del PSOE me preocuparía por quedarme sin verdaderos socialistas, me preocuparía por haberme convertido en un partido de derechas, me preocuparía porque me podría dar el gran batacazo.
Que pena dan ustedes, si Pablo Iglesias Posse levantara la cabeza seguramente la agacharía otra vez al ver en que han convertido ustedes el PSOE
15 abril 2016 | 20:57
la estrategia de podemos es muy simplista e infantil, quieren nuevas elecciones porque están convencidos que sacaran mejores resultados, piensan que acabaran sobrepasando al psoe convirtiéndose en el primer partido de izquierdas y por arte de magia piensan que cuando ellos sean los primeros el psoe si que les apoyaran como gesto de bondad y de agradecimiento por todos los maltratos que podemos ha tenido con el psoe .
16 abril 2016 | 17:24
39: Has dado en el clavo. En toda su historia solo los primeros años fueron de izquierdas. Ya con Primo de Rivera se posicionaron al lado de la dictadura y solo cdo P.d Rivera les corto el poder de decisión de a qn poner en la Asamblea Nacional Consultiva, sólo en ese momento decidieron que era malo. En la república hay que recordar que sus grandes presidentes no fueron socialistas y sólo en la última etapa de la república tuvieron presidentes. El PSOE vive de lo que la gente cree xo no de su verdadera historia. Por eso cdo ha tenido poder o posibilidades smpre ha sacado esa cara. La suya
18 abril 2016 | 09:20
Lo que hay que darse cuenta es que los tiempos que estamos viviendo hoy, son totalmente opuestos a lo acontecido en el siglo pasado.
Hoy estamos viviendo tiempos de mucha tecnología con una velocidad de la luz, pero por desgracia esta en la manos de esos pocos recortándonos el derecho a la vida en general con mucho descaro y prepotencia.
España, se encuentra en la continuación de la dictadura fascista del dictador Franco, hoy la continúan son los de siempre pero en una versión moderna siguiendo ordenes y líneas de sus colegas de fuera con la milonga de «democracia de esos pocos». España, esta siendo gobernada por los mismos que nombro el llamado Caudillo, «PP-SOE y Monarquía» con manipuleo engaños y descaro desde la muerte del dictador siendo el PP-SOE la misma cosa, razón por la que no quieren soltar las riendas del poder y pasa lo que esta pasando sin tener un gobierno legítimamente puesto por el Pueblo.
La situación es mala, muy mala. La degeneración humana cada día es mas salvaje, pedir respeto hoy es de risa promovido por los que están para que estas atrocidades no sucedieran, pero desgraciadamente se aprecia que lo están globalizando.
Esperemos que Podemos sea el milagro y redentor de España, pero parece que lo quieren crucificar desde antes de nacer.
19 abril 2016 | 02:13
Solo una pregunta , ¿es el mismo Jauregui que votó a favor de la ley europea para proteger a las corporaciones? si lo es creo que sobra cualquier comentario
19 abril 2016 | 16:28
Dice ser Pep y Dice ser che, absolutamente de acuerdo con uds, Ciudadanos es la marca blanca del PP, Rivera como «líder reformista» y conciliador, tal y como le han intentado promocionar los medios oficialistas y los poderes fácticos de nuestro expoliado y empobrecido Estado de bienestar, es preso de sus fuertes contradicciones discursivas, las mismas que defiende paradójicamente el Grupo Prisa, una y otra vez en sus diferentes medios, especialmente aquellos a los que acuden con mucha asiduidad conocidos políticos o periodistas del PP (Pedro Calvo, Antonio Naranjo…), el mismo grupo que empezó por dinamitar su credibilidad y sentido crítico al despedir a valladares del progresismo más riguroso y honesto como Carnicero una vez fallecido el exresponsable del que fuera emblemático espacio radiofónico nocturno, Hora 25, el malogrado e irrepetible Carlos Llamas, uno de los mejores periodistas de la historia contemporánea de la radio de nuestro país. Aquel espacio en consonancia con el cambio o viraje radical en su línea editorial hacia la derecha o centro derecha (de ahí su defensa indisimulada de Rivera como «nuevo líder centrista»), y que esta misma web ha destacado en estos últimos tiempos, no hace más que traicionar a diario lo que Llamas dignificó con su dirección y honestidad, ese mismo espacio nocturno que supuestamente analiza la realidad política de nuestro tutelado país, haciendo un uso poco valiente y comprometido del derecho a la información, claramente desvirtuado, por unas concesiones vergonzantes a «audiencias» mayoritarias con las que ganar una mayor cuota de mercado, a costa de sacrificar un sentido crítico y una rigurosidad, que con la participación de periodistas tan ambiguos y parciales como Miguel Ángel Aguilar, paradójicamente el único superviviente de aquella brillante etapa con Llamas como responsable, no hacen más que poner en evidencia cada vez que tienen que analizar cualquier movimiento político del partido de Iglesias, bien para cuestionar la crisis interna de su partido (que han gestionado no obstante más mal que bien, algo que ha sido aprovechado por la cadena del Grupo Prisa para recordar día tras día, que el partido Podemos es poco menos que un partido político en proceso de autodestrucción), bien para ensalzar el cambio inexistente de un partido el PSOE que ha optado por pactar de antemano con un partido, C´s con un programa electoral de corte inequívocamente neoliberal en lo económico y conservador en los demás ámbitos de la vida. síntoma éste que es paradigmático del verdadero posicionamiento ideológico del PSOE en los últimos 25 años, es decir, más coherente con los postulados de partidos como C´s, que con el partido de Iglesias, ya sea en el estado español, ya sea en la UE (reforma del art. 135, CE, posicionamiento a favor del TTIP). Nadie discute todos estos detalles, como tampoco nadie puede discutir, al menos los socialistas de pro hartados de comprobar cómo se ha venido desvirtuando los principios fundacionales del PSOE, declaraciones y conductas como las del propio Felipe González, cuando habló de una gran coalición entre PP-PSOE antes de las últimas elecciones generales.
La izquierda real o el progresismo real, la que representan sin duda, Podemos o IU respectivam., son las dos únicas esperanzas de los votantes del lado más progresista de un país, no lo olvidemos tampoco, que es preso de los medios de comunicación oficialistas entregados a la causa de manipular a la opinión pública para servir a los intereses de sus patrocinadores (los medios públicos politizados hasta la náusea, sea en un ámbito autonómico, como Telemadrid -cuya reforma de sus estatuto, una vez más se ha dilatado por motivos que sólo la nueva lideresa del PP madrileño conoce, es decir, atribuibles a no dejar escapar uno de los mayores instrumentos de propaganda que ha tenido el partido popular en las últimas décadas-, sea en el ámbito estatal -TVE-) o a la superviviencia de los mismos (medios financiados por potentes grupos de presión o financieros, que como reconocieron algunos pocos periodistas más «independientes», prefieren sin duda que Podemos no sea nunca alternativa de gobierno, la línea editorial de El País, o los demás medios de la cadena del Grupo Prisa lo demuestran), de su historia contemporánea (corrupción institucional o sistémica, imposibilidad de poder hacer efectiva una ley necesaria, la Ley de Memoria histórica, para reparar al menos la memoria de las vícitmas de la etapa franquista que la comundiad internacional sigue condenando sin predicamento para las instituciones de nuestra pseudodemocracia, y cuyos ecos hoy día se siguen escuchando o silenciando entre buena parte de aquell@s que se hacen llamar así mism@s «demócratas», fortunas o patrimonios amparados o pergreñados por el régimen precedente, etc, etc, etc), y también por qué no decirlo al cambio en el sistema de valores de una parte del censo electoral no sólo incapaz de castigar como se merece la sistémica corrupción aludida (Comunidad Valenciana, Comunidad de Madrid, Islas Baleares…), sino más bien al contrario, de ser connibente con la misma, lo cuasl es más demoledor para valorar la salud democrática de un país y de parte de sus votantes, cuando en diciembre pasado, otorgaron más de 122 escaños en todo el Estado español a un partido con más de 200 imputados entre sus filas, que sepamos hasta el momento (dado que la justicia en estos casos es paradójicamente, lenta y «tuerta», no así con otros miembros de otros partidos rivales, cuyo castigo ya ha sido refrendado por el propio partido, como es el caso de Monedero o la siempre valiente Maestre, en Podemos).
Son demasiadas, sr Jaúregui las razones por las cuales much@s socialistas de bien, están cansados de ver cómo un partido histórico como el PSOE ha terminado abrazando los postulados más radicales del neoliberalismo contemporáneo, haciendo guiños o propuestas de pacto de gobierno contranatura con el supuestamente principal partido rival, el PP (Felipe González, elogiado por Arias Cañete en aquel célebre debate con Valenciano en los comicios europeos), pactando de facto con las otras nuevas generaciones del PP representado por C´s ya sea en el Estado (pacto de gobierno C´s-PSOE) ya sea a nivel autonómico (Susana Díaz en Andalucía), ya sea por razones ajenas al interés general del país (superviviencia de Sánchez como líder del PSOE, aún a costa de traicionar lo criticado sobre C´s durante toda la campaña electoral precedente). De haberse consumado ese pacto, se habría consumado de forma definitiva el golpe final a una izquierda institucional necesitada de cohesión frente a la etapa más dificíl de su intensa historia, aquella que la está poniendo en el ámbito internacional al menos, al borde del abismo ideológico en que está sumida, y que se ha hecho patente en la gestión de la crisis griega (abrazando los postulados de la Troika), de los refugiados de Siria o en el devastador para el ya moribundo estado de bienestar europeo, acuerdo trasatlántico entre EEUU y la UE, pacto al que se han opuesto solamente partidos como el de Iglesias o el de Garzón (IU). El Pablo iglesias, «el buieno» como se refería el actual líder Sánchez, volvería al lugar donde descansa después de observar en qué se ha convertido por acción (González y aquella célebre y única manifestación a la que se le ha visto, acompañando a Cifuentes) o por omisión (Susana Díaz, el propio Sánchez) su partido, el que nació con vocación progresista y democrático, y que ha sucumbido a la más absoluta falta de compromiso e identidad con los valores que ha venido traicionando todos estos años de forma más o menos disimulada (rebaja de impuestos a las clases más altas, connibencia con los grupos de presión en las sucesivas amnistías fiscales registradas a cambio de reformas estructurales que han debilitado los derechos sociolaborales conquistados por las mismas clases medias que han ayudado junto con el PP a empobrecer hasta hacerlas desaparecer, complacencia con los paraísos fiscales en etapas de mayor crudeza de la crisis sistémica actual, debilitamiento del otrora máximo competidor por el voto de la izquierda, es decir, IU, con uno de los políticos más honestos y coherentes de la historia de la izquierda institucional de nuestro país, el ejemplar, éste sí, Julio Anguita), y que han propiciado la aparición del partido de Iglesias.
No seamos cínicos ni ingenuos, creía que un post de este tipo no podría ser escrito por quien representaba para mí, una votante exsocialista de toda la vida, a uno de los más honestos diputados del socialismo contemporáneo (junto con Sánchez Tapias, que votó en contra de la reforma a dos, del art. 135, CE, o el más independiente, Gabilondo, alguien que debería de liderar el PSOE más pronto que tarde), pero he aquí mi error, al comprobar cómo el poder y el ventajismo ha vuelto a poner en evidencia las duras paradojas de un partido que anda a la deriva tras episodios como los vividos en estas fallidas elecciones generales, y que se podrían haber resuelto si el PSOE hubiera solicitado el apoyo de Podemos, IU y las demás fuerzas de izquierdas, con la abstención de C´s que se ha erigido como el falso juez de un encuentro, que sabía perfectamente de antemano al firmar el pacto con el PSOE actual, que iba a terminar en tablas, es decir, sin solución de continuidad, para con ello ganar tiempo y posicionarse como el partido bisagra del PP, algo que ha demostrado sobradamente en CCAAs como Madrid. Apoyar semejante impostura habría sido de haberse producido el final de un partido, el PSOE necesitado de apoyos institucionales futuros, porque sólo desde la Izquierda se puede resolver una crisis sistémica que ha sido creada por las mismas recetas que sus prescriptores neolioberales o neconservadores pretenden de nuevo imponer, y que han llevado al desahucio laboral y social de millones de español@s, que o bien han tenido que exiliarse en busca de la superviviencia, o bien han tenido que irse al banco de alimentos o a Cáritas para suplir el estado de excepción social en que han dejado a las mismas las reformas estructurales del PP español o europeo en España y en el resto de la UE (Portugal, Grecia, España…tutelados y recortados en sus derechos sociales más básicos, imponiendo antes la reforma de sus constituciones bajo chantaje financiero). Rivera es el mismo que dijo que un pacto con el PP no era un signo de regeneracionismo democrático, el mismo que se ha abstenido en la derogación d ela Ley Mordaza o de la LOMCE, con estos ingredientes el menú no es que fuera indigerible, sería fatal para un partido que necesita una vuelta a sus orígenes progresistas, de lo contrario, estará abocado a sufrir los efectos del abrazo del oso ultraliberal, provenientes del prepotente (autoproclamarse el nuevo Adolfo Suárez despues de descalificar o menos preciar gratuitamente al partido de Iglesias en el Congreso es un insulto a la inteligencia de cualquier demócrata con algo de memoria, especialmente tras haber obtenido su contradictorio partido bisagra, sólo 40 escaños, y toido ello a pesar del apoyo institucional que recibió de instituciones financieras muy poderosas próximas al IBEX-35, o de medios de comunicación más próximos al Grupo Prisa), ambicioso pero tramposo, ventajista e incoherente, Rivera, algo que parece ha querido sacrificar el actual PSOE con tal de sobrevivir a su franca decadencia, y es que cambiar marketing político (Sánchez) por ideas progresistas u honestidad intelectual (Sánchez Tapias, Gabilondo, relegado a un segundo plano en la CCAA de Madrid gracias al apoyo de C´s al PP, el partido que ha liderado la corrupción institucional en estas últimas décadas en la CCAA de Madrid, el mismo partido con el que ha pactado Sánchez a nivel estatal en esta fallida investidura), tarde o temprano terminan calando en un electorado, el socialista, cansado de ver tanta contradicción ideológica. Ahora, claro está, volveremos a una nueva campaña electoral para que, gracias al intento de C´s y al pacto ignominioso del PSOE actual, el PP sea el gran beneficiado, y así puedan gobernar de nuevo para una pequeña minoría de élites que han ayudado a detraer dinero del erario público en paraísos fiscales o han contribuido a saquear los bolsillos de sus sufridos ciudadanos por el estallido de la burbuija inmobiliaria (por no hablar de otros episodios deleznables como la gestión de CajaMadrid), pero eso claro está, ya forma parte de la conciencia o falta de conciencia de aquellos millones de ciudadanos que han otorgado su confianza por motivos más o menos confesables al partido que ha hecho de la corrupción institucional a todos los niveles (una justicia nombrada a dedo por el partido en el poder no es una justiicia imparcial ni independiente, véase la mayoría de los miembros del TC) un sello inequívoco de la Marca España. Si Cervantes levantara la cabeza también se exiliaría lo más pronto posible de este desigual, desdemocratizado y tutelado país nuestro.
27 abril 2016 | 02:59
Si yo fuera socialista, o socialdemócrata en su defecto, estaría enfadado. Enfadado con el secuestro de unas siglas que tienen historia de lucha obrera por parte de una serie de personas que, pertenecientes a una alta burguesía, han sabido medrar en una estructura política con el único fin de instalarse. Enfadado con los secuestradores por aceptar las prebendas de los lobbies (de tipo financiero, pero también de la construcción, de las energías y de otros sectores) que les han permitido escalar en las citadas estructuras. Enfadado con personas que se arrogan responsabilidades de estado cuidando poco o nada que la estética y la ética o, dicho de otro modo, el discurso y la práctica, vayan de la mano. Enfadado por haber, en resumidas cuentas, perdido el timón de un partido fundado por trabajadores y para trabajadores que ha acabado blanqueando su alma hasta perder cualquier atisbo de identidad.
Si yo fuera podemita, que no lo soy, estaría también enfadado. Enfadado por haberse iniciado de manera absolutamente acrítica, vendiendo la voluntad de personas de buena fe y evidentes problemas de estima propia a la calculadamente erigida figura de un mesías mediático y un núcleo irradiador (sin segundas) de tecnócratas de la politología que marginan el talento de alguno de sus integrantes, como el propio Errejón, en pos de un constante refuerzo de la figura de autoridad. Una figura basada en la auctoritas y no en la potestas, por tanto en la imposición y no en el mérito. Una figura que denota un flagrante error de diseño abocado a un fracaso bestial en tanto se basan en la falacia de «democratizar» a través de la autoridad. Círculos y consultas son vinculantes cuando se adivina en el horizonte un resultado coherente con el dictado por el núcleo duro. El 90% del tiempo es ninguneado.
Si yo fuera de Izquierda Unida, estaría igualmente cabreado. Cabreado con un Partido Comunista lleno de viejos totems de dictadura interna y sus serviles abogados del diablo de tendencia curiosamente crossover entre lo trotskista y lo stalinista que arruinan cualquier iniciativa digna, copándola para subyugarla al modelo «o es como dice la vanguardia o no será». Cabreado con la tendencia a opacar la escasa brillantez que surge, de tanto en cuanto, de entre sus bases. Cabreado con la mayoritaria cobardía de esta gente brillante a partir de sus miedos a romper dogmas. Cabreado con el incesante flujo de nuevos adeptos al dirigismo más vertical.
Si yo fuera de izquierdas estaría condenadamente hasta las narices de que la supuesta izquierda mayoritaria se haya convertido en el principal obstáculo al cambio, decidiendo pactar con la derecha reactiva sí o sí. Y de la cantidad de fanboys indistinguibles de la derecha pepera que, cambiando el Lacoste por ropa de Panama Jack o Inditex (nos da igual de dónde salga lo que consumimos cuando tenemos dinero para llegar a fin de mes, parece), van tan llenos de pegatinas durante las huelgas como vacíos de principios cuando estas acaban.
Si yo fuera de izquierdas estaría decepcionado con las supuestas alternativas que no quieren democratizar la realidad social, aplicando directivas participativas reales y no de boquilla en sus propias estructuras, y que están más centrados en construir un discurso que suene bien a crear una alternativa para mandar a tomar por saco dependencias de bancos centrales, de corporaciones y de un sistema injusto al que todos sabemos que puede regatearse a veces.
Si yo fuera de izquierdas estaría ya desesperado y rezando por la desaparición del ala más rancia del comunismo, en el fondo una estructura que vive de las subvenciones del estado al que dice combatir, y por la integración de sus escasos cerebros en un frente amplio.
Lo jodido, lo realmente jodido, es que soy de izquierdas en este país.
29 abril 2016 | 12:01