El primer debate televisado, nos quedan unos cuantos más hasta el día de las elecciones al Parlamento Europeo, entre Schulz y Juncker me cogió trabajando en la redacción… por lo que no pude seguirlo, ni siquiera de fondo. Suena a paradoja, pero no lo es. Así que he aprovechado este fin de semana de buen tiempo primaveral, sol y aire prevacacional para ponerme al día. Emociones fuertes.
De la mera proyección de un debate político se deduce que existe algo sobre lo que debatir. Esta obviedad fue puesta en entredicho el pasado jueves, en un cara a cara amistoso, técnico y con más acordes que desacuerdos. El consenso entre los dos candidatos de los dos grandes grupos —PPE y socialdemócratas— fue prácticamente total, salvo en asuntos —es verdad que no menores— como el déficit o el origen de la crisis económica y de deuda.
Juncker y Schulz, momentos antes del debate. (EFE)
Pero bajo esa superficie de leves discrepancias, lo que prevaleció fue una abrumadora coincidencia en los grandes asuntos que preocupan a Europa. Un casi quorum que me recordó a la reunión a la que asistí hace unos meses en La Granja, y donde todos estuvimos de acuerdo en casi todo de una forma tan milimétrica que hasta daba ganas de transformarte en euroescéptico por un día con tal de llevar la contraria.
Es posible que las similitudes del discurso de Juncker y Schulz sean coyunturales. Incluso que tan solo respondan a un cálculo político: frente a un posible futuro europarlamento con más eurófobos, los dos grandes grupos tratan de unir sus fuerzas (a pesar de sus diferencias) para evitar que la Cámara se convierta en un lugar ingobernable. Pero también es posible que detrás de tanta coincidencia haya un problema.
Puede ser un agotamiento del viejo discurso europeísta, en el sentido de que ya no se puede decir nada de Europa que realmente sea original sin salirse al mismo tiempo de la pauta marcada: en este punto las reflexiones de Toni Ramoneda son muy pertinentes. O puede que, como escuché hace poco a un experto europeísta, los grandes partidos se parecen tanto en sus programas que técnicamente no hay nada, o casi nada, sobre lo que debatir de un modo político.
El primer debate televisado entre los candidatos ejemplifica lo mejor y lo peor de Europa. La habilidad y la disponibilidad para llegar a acuerdos, por un lado, y la casi absoluta falta de sana polémica —en el sentido original del término— entre los representantes, por otro. Políticos sin política. Tecnócratas amables que cuando se les pregunta «qué les distingue al uno del otro» —como hizo uno de los presentadores del debate— se sumergen en un incómodo silencio.
no es que digan lo mismo es que los sociatas no tienen programa porque su programa es un fracaso que ha quedado obsoleto y no aporta soluciones sino problemas, lo mejor que podian hacer es disolverse igual que en su dia hizo el nazismo o el feudalismo porque la izquierda lo unico que tiene por argumento es robar a lo que ellos llaman los ricos para sostener a parasitos sociales haciendo el vago , que semanticamente y para que quede bonito lo llaman justicia social y derechos sociales , pero no es mas que robar a uno para regalarselo a un vago sin verguenza, ahi teneis el ejemplo en andalucia de regalar pisos sociales a unos okupas ,unos pisos construidos con los impuestos de las clases productivas andaluzas ¿ se podria defender algo parecido en la europa desarrollada ?¿ que los griegos vivan gratis a costa de los alemanes ? seamos serios por favor, el socialismo esta muerto , marx y keynes estan muertos y enterrados.
12 abril 2014 | 16:14
La socialdemocracia está vendida al mercado. De qué van a debatir?
12 abril 2014 | 17:06
pablo getafe #
le economia de mercado es la que genera dinero, riqueza y empleo para que luego los socialdemocratas puedan repartir sus subvenciones, pagas y demas , el socialismo como sistema economico no existe se limitan a repartir el dinero que ha generado el sistema capitalista o liberalista, si atacan el capitalismo es como si cortasen las raices de las que vive el resto del arbol.
vete a cuba y alli como no hay capitalismo no hay nada que repartir salvo miseria, una vez se acabaron los ricos a los que expropiar ya no hay nada que hacer por eso cuba esta hundida, no produce nada de nada, cuba no es victima de ningun bloqueo porque no tiene nada que exportar a ningun pais del mundo, su unica riqueza que la gente vea sus playas ( algo que no se debe al socialismo ) y que se vayan con su jineteras y jineteros convertidos en el burdel del planeta.
12 abril 2014 | 18:27
El mayor problema es este debate no ha tenido ningún eco mediático. Eso es representativo de lo que importan las elecciones europeas en España. Yo ni sabía que había habido un debate. En los medios y en debates de radio y televisión ni un hueco, ni un comentario. Mucho Bárcenas, mucho Cataluña, mucho crisis en el gobierno andaluz y las imputaciones de la juez Alaya, pero de esto ni mu. Y bueno, de que no tengan nada apenas de lo que discrepar, deja muy a las claras las pocas diferencias que a día de hoy tiene la socialdemocracia de la tercera vía con la derecha europea. Luego se extrañarán de que les coman el terreno otras fuerzas políticas.
13 abril 2014 | 03:55
Al final más capitalismo intragable.
13 abril 2014 | 12:45
Perdoname pero la izquierda no está acabada ni mucho menos, al contrario, tiene que resurgir. La austeridad económica no ha demostrado nada más que ser ineficiente, y solo beneficiar a una parte reducida de la población (ese 5% de la población rica) mientras que el socialismo, siempre y cuando se gestione económicamente de manera correcta, puede reducir la desigualdad y beneficiar a la economia entera. Más gasto público para incrementar la demanda agregada y evitar el temido problema de deflación, las políticas del BCE de tasas de interés al mínimo historico no están siendo suficientes, ya que existe el llamado problema de «trampa de liquidez», las entidades privadas están tan endeudadas que prefieren ahorrar y acabar con sus deudas lo antes posible, por lo que aumentan las reservas en los bancos, (aportando ningún bien común) mientras que es el gobierno el que tiene que vencer esta trampa de liquidez y gastar el dinero que se necesita, generar los empleos para que acabe aumentando la demanda agregada, que es la principal falta en esta crisis.
21 abril 2014 | 13:37