Viaje a la guerra Viaje a la guerra

Hernán Zin está de viaje por los lugares más violentos del siglo XXI.El horror de la guerra a través del testimonio de sus víctimas.

Archivo de mayo, 2013

La discreta diplomacia de España por los homosexuales africanos

Ayer fuimos con Jon Sistiaga a entregar al Ministerio de Asuntos Exteriores las 222.000 firmas que recogimos en Change contra la Ley Antihomosexual en Uganda, que incluye entre otras barbaridades la cadena perpetua para gays y lesbianas. Como sé que muchos de vosotros firmasteis la petición, y os doy las gracias por ello, también fuimos en vuestro nombre.

Con Jon Sistiaga en el Parlamento de Uganda, donde se debate la Ley Antihomosexual, que establece severas penas para gays y lesbianas. Febrero 2013.

Con Jon Sistiaga en el Parlamento de Uganda, donde se debate la Ley Antihomosexual, que establece severas penas para gays y lesbianas. Febrero 2013.

Imposible negar la excelente predisposición y cordialidad de las integrantes de la Oficina de Derechos Humanos. Bien documentadas, dieron cuenta de que no engañan cuando dicen que la defensa de los derechos LGBT es una de sus prioridades.

Sí nos resultó insuficiente y confusa la respuesta a la pregunta de qué está haciendo España, pues las 222.000 firmas en Change van destinadas a pedirle al Ministro Maragallo que actúe. Como expliqué aquí en su momento, no se trata de una quimera, pues la Unión Europea tiene lazos muy estrechos con Uganda, país que está luchando la guerra en Somalia en nuestro nombre, entre tantas otras cuestiones. Por lo tanto, existen mecanismos reales para ejercer presión.

Transcribo la respuesta:

En cuanto a acciones concretas, debe tenerse muy en cuenta la petición expresa de la sociedad civil ugandesa movilizada en estas cuestiones, a través de Embajadas sobre el terreno, de mantener una política muy discreta sobre esta cuestión, de modo que se eviten declaraciones públicas al respecto, evitando un efecto contrario al buscado con la denuncia pública y mayor discriminación del colectivo LGBT.

Cuando entrevistamos con Sistiaga a los principales líderes de la comunidad homosexual en Uganda, el pasado mes de febrero, tuvimos la impresión radicalmente opuesta. Quieren que el mundo actúe y hable alto y claro. Si algo agradecen es que el presidente Barack Obama haya salido dos veces a condenar públicamente la Ley.

Sinceramente, con el aval de 222.000 apoyos, esperábamos más que un “no os preocupéis, estamos trabajando entre bastidores. No podemos dar mayores explicaciones”.