Viaje a la guerra Viaje a la guerra

Hernán Zin está de viaje por los lugares más violentos del siglo XXI.El horror de la guerra a través del testimonio de sus víctimas.

Una guerra de arcos y flechas en Kenia

Chepilat es un humilde pueblo rural, situado en la zona occidental de Kenia. Precarias casas de ladrillos, caminos de tierra. Su calle principal marca el límite entre las provincias de Nianza y Rift Valley. Y también funciona como frontera natural entre dos grupos tribales: los kisii y los kalenjin.

Allí dio sus últimos coletazos la ola de violencia post electoral que dejó más de mil muertos en Kenia y 300 mil desplazados. Los miembros de ambas comunidades se enfrentaron con arcos y flechas. Las cifras de fallecidos varían: entre 14 y 30, dependiendo de la fuente consultada.

Tras haber presenciado la fallida reunión de paz entre ambas comunidades, me dirigí en numerosas ocasiones a Chepilat por si los enfrentamientos volvían a reanudarse. Pero el despliegue del Ejército en la arteria principal, esa suerte de muro que separa a ambas comunidades, ha evitado, hasta el momento, nuevos derramamientos de sangre.

La versión de los kisii

Sí fui testigo de cómo los primeros kalenjin volvieron al pueblo tras haber huido. Del reencuentro con quienes habían sido sus vecinos durante años para convertirse, repentinamente, en enemigos acérrimos. Y pude preguntar a unos y otros qué había generado la violencia.

Julius Makori Sane es el responsable del único dispensario del pueblo. Fue el primero en brindar atención médica a los que llegaban con las flechas enemigas incrustadas en el cuerpo. «Algunos me las pidieron, se las querían llevar de recuerdo», afirma, mientras me muestra las que conservó de los casos más graves, de aquellos que tuvieron que ser derivados a hospitales.

«No odiamos a los kalenjin. Hemos vivido con ellos toda la vida», me explica Makori, que pertenece a los kisii. «El problema es que ellos son pastores y nosotros agricultores. Y nos tienen envidia. Como somos gente de negocios, trabajadora, ganamos dinero y les compramos algunas tierras del otro lado de la calle y construimos allí casas. Después de las elecciones empezaron a decir que esas tierras les pertenecían y nos comenzaron a atacar».

Más allá de decir que no odia a los kalenjin, lo cierto es que el relato que hace de sus supuestas tradiciones guerreras, no los presenta bajo una luz demasiado «querible». «Es gente muy peligrosa, que hace cosas terribles a sus adversarios. Les cortan la cabeza, los brazos. Hacen rituales. Por la noche no puedes salir desprevenido, no puedes andar por su territorio».

La versión de los kalenjin

Para mi sorpresa, la versión que recojo de esos primeros kalenjin que regresan a Chepilat, es la contraria. Gerard San, comerciante de la zona, me dice que las casas quemadas del otro lado de la carretera, no son propiedad de los kisii sino de los kalenjin.

«No ves que son muchos y que viven en una provincia muy pequeña. Quemaron nuestras casas para echarnos, para seguir avanzando sobre nuestro territorio», me explica. «Dos terceras partes de las casas quemadas eran kalenjin, fabricadas con adobe, como las hacemos nosotros».

Según Gerard, los kisii hicieron una colecta para traer a los guerreros chincororo. «Fue algo planeado. Aprovecharon las elecciones para sacarnos de nuestro territorio», sostiene.

En respuesta, Julius Makori dice que sí, es cierto que hicieron una colecta para que los defendieran los guerreros de la secta chincororo, pero después de que los kalenjin comenzaran a atacarlos.

De sectas y tierras

Difícil saber quién comenzó, ya que resulta imposible encontrar fuentes objetivas. Las autoridades estatales no se hicieron presentes en la zona hasta que no se registraron los primeros muertos. Y, según me comentan ambas partes, los policías locales tomaron partido por su propia comunidad.

Con respecto al origen de la tensiones tribales en Kenia, recomiendo un artículo de John Lonsdale, profesor emérito de Historia Africana Moderna, que explica cómo el brutal poder colonial británico fue produciendo las primeras fracturas entre las comunidades autóctonas.

Otro tema fundamental, poco tratado por la prensa, es el de la tierra. Un bien escaso en Kenia, que los kalenjin exigen que se les devuelva en buena parte de la geografía basando sus reclamos en derechos ancestrales que entienden que los kisii y los kikuyus han vulnerado.

Un choque, entre nómadas y agricultores, que también tiene lugar en otras partes del continente, como sucede con los afar en Etiopía. Y que los expertos sostienen que se irán agravando a medida que avance el cambio climático.

Y, finalmente, una cuestión de la que nada se ha hablado en los medios de comunicación: las sectas. Por parte de los kikuyus, la secta mungiki, acerca de la cual ya escribí hace un mes. De los kisii: los guerreros chincororo.

Un aspecto apenas conocido de esta África que desde la distancia parece un conjunto homogéneo. Pero que no sólo se divide en tribus y etnias, sino también en numerosas sectas que se mueven en la sombra del poder.

14 comentarios

  1. Dice ser Hernán Zin

    Compañeros, tomo nota también de vuestras recomendaciones literarias del fin de semana. Saludos a todos!!!! HZ

    30 noviembre -0001 | 00:00

  2. Dice ser Sonrisa Radiante

    Hola!!Siempre el dilema de las tierras.Luchas por tenerlas o a quien pertenecen.Cada etnia tiene su versión de los hechos.Interesante que se formen sectas que se reúnan de esa manera para lograr sus propósitos cada vez me sorprende más el ser humano.Los guerreros chincororo que lucharon contra los kalenjin de forma tribal todo por tierras.En fin siempre las tierras África,Palestina y demás países triste pero la realidad.Saludos a todos y que empezeís la semana con fuerza,alegría y positividad!!Abrazos!!S.R. 🙂

    25 febrero 2008 | 13:17

  3. Dice ser observador.....

    ese último arco está partido, o me lo parece a mi¿?

    25 febrero 2008 | 17:40

  4. Dice ser PROGRE-NEGRO

    LA CULPA ES DE LOS BLANCOS.

    25 febrero 2008 | 17:56

  5. Dice ser Mercedes

    Buenas tardes a todos !!HZ, nunca me acuerdo de agradecerte los links que pones en tus entradas, muy currado todo lo que haces. He descubierto la ‘Revista Pueblos’ y es realmente interesante…En la línea de los comentarios del fin de semana, me atrevo a recomendaros ‘Mil suspiros, mil rebeliones’ de Christine Bird, en él narra un viaje al Kurdistán.Abrazos!!

    25 febrero 2008 | 18:03

  6. enhorabuena por el post, muy interesantehttp://www.QueTriunfo.com/usuario.php?id=1612de verdad.saludos

    25 febrero 2008 | 18:53

  7. Dice ser Cris

    Pues lo que faltaba en toda situación tan terrible son las sectas.Las sectas que un mundo próspero y civilizado pueden llegar a ser demoledoras para el poco raciocinio que queda, me imagino en un lugar como Äfrica…A ver que nos cuentas.Desde luego, hay tantos frentes malignos y abiertos a esta situación, que es difícil ver una solución rápida al problema.Un abrazo a todos,Cris

    25 febrero 2008 | 19:25

  8. Dice ser Sonrisa Radiante

    Kalenjin,kisiis,kikuyos etnias que se enfrentan por tierras.Luchan cada uno por lo que creen es suyo llegando hasta blandir arcos y flechas.Desolador el panorama de África,hambre,miseria,enfermedades y puros intereses de farmaceúticas,gobiernos,compañías.Para ellos esta bien y les conviene que anden siempre en guerras por el continente africano.Muchas materias primas que les interesa coltán,petróleo,diamantes……Y luego la corrupción de sus propios gobiernos donde el propio poder les corrompe.Ojála hubiera una revolución en África y salieran muchos Tomás Sankara y el continente fuera a mejor, mientrás mantengo la esperanza que en el primer mundo, acomodado la gente se conciencie,se rebele y ayude al continente africano.Mucha AMINA (PAZ) para África,prosperidad y bienestar tienen derecho y se lo merecen.Abrazos, besos para todos y a seguir pensando en positivo!!!S.R. :)PD:que tengaís buen día y ……Sonreid.

    26 febrero 2008 | 16:42

  9. Dice ser Javier López Echegoyen

    Hola Hernán. Te cuento que fui de vacaciones sin computadora! y me estoy poniendo al día con tu trabajo en Kenia que es realmente exelente.Un abrazoJLE

    26 febrero 2008 | 23:20

  10. Dice ser Carmen F.

    Interesante punto de vista… y se repite en otros lugares y momentos… no debemos perder de vista la influencia e implicaciones q ha podido tener el colonialismo, tanto en el origen como en el desarrollo de muchos conflictos… y África no es una excepción…Gracias HZ… y enhorabuena por tu trabajo, siempre profundizando más allá de lo q nos cuenta la mayoría…Saludos.

    27 febrero 2008 | 18:54

  11. Dice ser xuslee

    no os mateis por nada en el mundo. un viejo jefe indio dijo al hombre blanco:no se por que quereis que os vendamos esta tierra donde hemos vivido y donde moran las almas de nuestros antepasados y mas tarde heredaran nuestro hijos y los vuestros; si esta tierra solo pertenece a DIOS.no tiene dueño ni precio. mañana no estaremos ninguno,solo quedara el resultado de nuestras acciones para la historia.demos ejemplo y hagamoslo bien hoy y dejemos el interior en paz.con mis mejores deseos xuslee1_@hotmail.com (españa)

    30 mayo 2008 | 18:58

  12. Dice ser alejandro

    andaaaaaa si esos negros se quieren matar que se maten

    19 agosto 2008 | 20:58

  13. Dice ser andres fuentes

    gaw que imteresante todo eso de los arcos yo me interese por esa caricatura de inuyasha; pero mi sueño seria practicar el tiro con arco a pero de esos antiguos no de esos modernos con un monton de hierros atravesados bueno adios.

    13 junio 2009 | 02:18

  14. fijense que para mi faltaron mas dibujos.miren entren a:_ http://www.andrisaymas.blogspot.com_ http://www.andrisay2.blogspot.com_ http://www.soycornejo.blogpot.comlas 2 primeras son mias la otra se la recomiendo da risa; para mis paginas mandenme videos o algin comentario o situacion de la q’ quieran hablar mi correo es:- andresricardof88@gmail.com

    13 junio 2009 | 02:26

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