Por Tom
En los últimos años, las fuerzas policíales de muchos países ha recibido bastante atención, en principio por cosas como las que pasan en Estados Unidos, donde a veces es un crimen ser no-blanco y andar en la calle, o en Filipinas donde te disparan por tomar un ibuprofeno.
Sin embargo, en el Reino Unido y en España la Policía no tiene esa mala fama, hay ciertas suspicacias a veces, pero no llega a mucho más.
En el Reino Unido como en España, la Policía tiene distintas divisiones que tienen funciones distintas. En primer lugar se dividen por países: Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte cuentan con sus propias fuerzas de seguridad. En segundo lugar, dentro de los países la Policía se divide por zonas, por ejemplo Heddlu Dyfed Powys (la policía de Dyfed-Powys en Gales), la Poileas Alba (la policía en Escocia) o la famosa Metropolitan Police Service de Londres.
Luego, aparte, hay varios grupos especiales o más específicos como por ejemplo los de antiterrorismo u operaciones especiales, los que investigan el crimen organizado en todo el Reino o controlan las fronteras o puertos, por ejemplo. A lo mejor os sorprende saber que hay también hay cuatro fuerzas policiales para mantener la paz en las catedrales de York Minster, Chester, Canterbury, y Liverpool.
La policía en el Reino Unido tiene su porción de problemas en cuanto el uso de la fuerza. Por ejemplo, hay una relación entre color de la piel y fuerza según estudios de la propia Metropolitan Police.
Después de una investigación, the Guardian reveló que el uso de la fuerza entre los agentes de la policía de Londres ha subido 79% en un solo año. La unión de oficiales de la policía lo atribuye a recortes en recursos, crecimiento en la violencia y una nueva sistema de informes fueron culpables.
The Met police’s use of force has jumped 79% in one year. The unfortunate truth is that escalating the use of force has proven to be futile. As the use of force has gone up, so has violent crime.https://t.co/klL9z3ZRpD
— David Lammy (@DavidLammy) October 8, 2018
Aún así, no hay tantos casos de brutalidad policial en el Reino Unido y la mayoría se dan en manifestaciones o grupos de personas enfrentándose directamente con los agentes. En casos así una de las técnicas que usaban fue Kettling: crear un cordón de agentes alrededor de un grupo de manifestantes para que no tuvieran acceso a comida ni baños. Algo que fue llevado al Tribunal Europeo de Derechos Humanos por un hombre que se encontró dentro del cordón por casualidad y tuvo que pasar alrededor de siete horas por ahí sin que le dejara salir, ni comer, ni pasar por un baño.
En los últimos días, la Metropolitan Police se ha convertido un poco en un blanco de las críticas por su tratamiento de la gente que forma parte de la manifestación Extinction Rebellion, a veces arrastrando a personas por la acera.
Más de mil personas han sido arrestadas durante los ocho días de la supermanifestación por el clima. La policía ha llegado incluso a desactivar el wifi en las estaciones del London Underground (¡Sí que se están poniendo serios!).
Y es que siempre habrá una fina línea entre fuerza adecuada y la fuerza excesiva, está claro. La diferencia entre las fuerzas policiales británicas y las españolas es que las de aquí van armadas y de repente la fuerza adecuada tiene otra dimensión. Los agentes británicos habitualmente no llevan armas, aunque no por ello está exentos de cometer errores con ellas. En julio de 2005, tras los atentados en Londres, un hombre brasileño fue disparado dentro del London Underground porque corría y no paró cuando se le ordenaron los agentes antiterroristas.
Pues a mi, personalmente, me da un poquito de pánico que hay gente que pide que haya más armas en el país en el que vivo. El máximo responsable de Vox nos dice que “los españoles de bien” pueden ir armados (doy por hecho que a mí, que soy británico, no me van a dar arma). Sin embargo, si incluso un agente de la policía bien entrenado puede errar con ellas, puede por ejemplo dejarse llevar por el miedo y disparar a un perro en la vía pública, como el caso de Sota en Barcelona, ¿qué nos puede pasar a nosotros si vamos todos armados hasta los dientes? La corona del ‘rey de las peleas de discoteca’ sería un reinado muy breve.
El artículo 20.4 del Código Penal español dice que «estará exento de responsabilidad criminal quien obre en defensa de la persona o derechos propios o ajenos siempre que lo haga ante una agresión ilegítima, que los medios empleados para repelerla sean racionales y que no medie provocación previa».
¿A dónde nos podría llevar?
Un guiri hablando de cosas que no entiende.
25 abril 2019 | 11:55 am