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Letizia, una reina sin reloj

Os he dicho en alguna ocasión que me gustan las joyas y me gustan, no tanto para ponérmelas, sino para admirar la pureza de los materiales, el diseño, ese brillo centelleante tan hipnótico… vamos como si fueran una obra de arte. Pues ahora os confieso que los relojes también me encantan y me gustan como pequeños objetos de precisión y porque creo que dicen mucho de una persona.

Las muñecas de la reina siempre están desnudas. (GTRES)

Las muñecas de la reina siempre están desnudas. (GTRES)

Pues bien, Letizia ya no lleva nunca reloj y no puedo entenderlo. Yo miro el mio cada poco tiempo, soy una mujer muy condicionada por el tiempo, supongo que como vosotros, queridos lectores. Por eso no llego a comprender  como una mujer con las responsabilidades de la reina puede vivir sin un guardatiempo en su muñeca.

¿Por qué lleva tan despegados los brazos del cuerpo? ¿Le picará la lana del jersey? (GTRES)

¿Por qué lleva tan despegados los brazos del cuerpo? ¿Le picará la lana del jersey? (GTRES)

A veces he pensado que Letizia no lleva reloj para que no se le identifique con una marca o no se le critique que lleve miles de euros en su mano, algo que no entiendo cuando su marido lo lleva y cuando todos sabemos lo que cuestan los modelajes que le hace Felipe Varela y que él comercializa sin ningún tipo de pudor en su web y en unos grandes almacenes.

Ya sabéis que la austeridad de Letizia con las joyas es cuando menos llamativa teniendo en cuenta las piezas de las reinas de España que ahora ya puede lucir.

Otra imagen de Letizia sin reloj (GTRES)

Otra imagen de Letizia sin reloj (GTRES)

Sé que no le gustan los anillos porque al dar la mano le hacen daño (no se pone su alianza de casada), pero es que tampoco se pone su anillo de pedida, aunque como os conté ese es su anillo maldito. Lo que sigo sin entender es lo del reloj, aunque supongo que con el regimiento de asistentes que tiene seguro que no le hace falta mirar si llega tarde a los actos.

Aquí os pongo fotos recientes de Letizia. Fijaos bien que en ninguna lleva reloj.

La austeridad de la reina Letizia

Este miércoles ojeando el diario  El Mundo me he encontrado con un artículo titulado El Rey limita los regalos que recibe su familia.

A falta de que llegue más trasparencia a la Casa Real, de momento, y según menciona el periódico

La Corona prohibirá los descuentos y servicios ventajosos de que disfrutarían ahora los familiares del Monarca y que, a falta aún de la transparencia prometida, podrían estar relacionados con viajes gratuitos y tarjetas VIP de Iberia, nunca confirmadas ni desmentidas hasta ahora ni por la institución ni por la propia compañía aérea.

Primer plano de Letizia y de su bolso de mano. ¿Demasiado iluminador? (GTRES)

Primer plano de Letizia y de su bolso de mano. ¿Demasiado iluminador? (GTRES)

En este sentido, los viajes de Letizia van por otro lado, ya que ella sí que tiene viajes de Estado. Sin embargo parece que Letizia se está aplicando y quiere dar ejemplo. Para empezar la reina repite modelos sin ningún pudor y con más asiduidad que otras consortes de su rango, quizá para dar esa imagen de contención del gasto. Tampoco hace ostentación de joyas y no suele lucir la gran variedad de tiaras que tiene la Corona. Ni siqueira ha estrenado la tiara Ansorena que le regaló hace unos años su marido, seguramente para no levantar ampollas con la actual situación económica de España.

El Mundo va más allá y asegura que

Hace poco trascendió que la reina Letizia eligió uno de sus atuendos en internet y se valió de un intermediario para comprar el artículo en la tienda, de manera anónima y pagando al contado.

En fin, parece que el pasado de Letizia, como el de cualquier español de a pie, está haciendo mucho bien a la institución y como bien os decía el otro día la monarca ha encontrado un verdadero filón en las compras por internet.

Este miércoles (hay q ver que día más intenso de noticias) se sabía que la Casa del Rey tendrá preparado antes de que acabe 2014 un código de conducta y de regulación de los regalos de la Familia Real.