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Ganoderma lucidum o reishi, língzhī… ¿la seta anti cáncer?

Eric Steinert (Wikimedia Commons)

Eric Steinert (Wikimedia Commons)

Con el nombre científico de Ganoderma lucidum se conoce un hongo saprófito de gran tamaño sobre el que se hacen descansar innumerables beneficios para la salud basados en la milenaria medicina china y oriental. Así, esta seta se conoce con distintos nombres en función del país que se trate: en chino recibe el nombre de língzhī, en japones reishi y en coreano yeongji.

Este post responde a la duda de una seguidora en twitter que me preguntaba mi opinión al respecto de este artículo y de las múltiples alegaciones salutíferas que al parecer se desprenderían de su uso.

Lo cierto es que el uso del hongo en cuestión es de los que más trayectoria tiene en los planteamientos de la medicina tradicional china. Además de ello no son pocos los estudios científicos publicados al respecto de su, teóricamente, probada efectividad en la curación y tratamiento del cáncer además de en las dolencias circulatorias, cuestiones inmunitarias, etcétera. Sin embargo…

Lo que dice el consenso sobre el uso del G. lucidum en el cáncer 

El tema del cáncer, como bien sabes, es un motivo de creciente preocupación en nuestro entorno, en especial porque supone una causa de mortalidad importante. Además de las perspectivas una vez diagnosticado, los pacientes tienen que hacer frente a los efectos secundarios de los tratamientos habituales: la radio y la quimioterapia. En estas circunstancias no pocas personas vuelven su mirada hacia tratamientos basados en la medicina complementaria y alternativa. En principio, este sería el caso de lo que ocurre con el G. lucidum cuyos extractos se suelen utilizar dentro de la medicina tradicional china como un suplemento para fortalecer el sistema inmunológico. Sin embargo, la evidencia clínica de su eficacia es escasa y se necesita de más estudios para proporcionar una información convincente de sus posibles beneficios más allá de la tradición.

La Librería Cochrane publicó en 2012 una revisión de los datos relativos a la utilidad de G. lucidum en el tratamiento del cáncer concluyendo que no se encontraron pruebas de la utilidad de este hongo en el tratamiento de primera línea de esta dolencia. En este documento, se afirma que a día de hoy no hay mayores evidencias que demuestren que el uso de G. lucidum suponga una mayor supervivencia a largo plazo en los pacientes diagnosticados de cáncer. No obstante, teniendo en cuenta su potencial para mejorar la respuesta tumoral y la estimulación de la inmunidad de los pacientes G. lucidum podría ser administrado como un tratamiento complementario junto al convencional. Al mismo tiempo, se detectaron escasos efectos adversos de poca importancia (insomnio, nauseas…) en su uso.

Para finalizar, esta revisión sostiene que en el futuro se debería mejorar la calidad metodológica y la investigación clínica de los próximos estudios en este terreno. En especial, porque las principales limitaciones de esta revisión radican, en primer lugar, en que la mayoría de los estudios contaban con una muestra pequeña y ofrecian dudas  sobre su calidad metodológica. En segundo lugar, porque todos los participantes de los distintos ensayos fueron reclutados entre la población china. Por todo ello, en resumen, facilita que la solidez y la aplicabilidad de estos resultados no sean todo lo deseables que deberían para terminar por sacar una conclusión más contundente.

Por su parte la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha dado respuesta a tres consultas referentes al potencial efecto beneficioso de los extractos de G. lucidum en el bienestar general, en el control del colesterol y en el fortalecimiento del sistema inmune. En todos los casos la respuesta de la EFSA fue la misma: con los datos disponibles no se puede establecer una relación de causa y efecto entre el uso de G. lucidum y las alegaciones anteriormente sugeridas.

Así pues, esto es lo que hay. De momento. Porque si parece que en este terreno podría haber una, al menos, interesante línea de investigación. No sé si decir prometedora, pero desde luego sí interesante, tal y como apunta la American Cancer Society, por lo menos en relación al cáncer de próstata.

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Nota: Quiero agradecer encarecidamente a María José Alonso (‏@mjalonso001) la documentación aportada en forma de enlaces, entre la que es preciso también citar este monográfico sobre las cualidades farmacológicas de los principales principios activos de G. lucidum o al menos de los más estudiados. Y por su puesto a Mercedes López Sánch(@mercedesls66) que alentó el debate sobre este tema y dio pie en una conversación de tuittera a una especie de trabaja cooperativo sin organizarnos previamente (@RaquelBlascoR, @SusanaGregorioM, @gbagaria75, @dietaporter…)

Faseolamina: una zarandaja más en el universo de la pérdida de peso

Quienes la comercian se refieren a ella con nombres diversos: faseolamina a secas; con “ph” al principio, phaseolamina, si quieres ir de erudito botánico; o acabado en “e”, phaseolamine, si te va más el rollo anglófono. La tontería en esencia es la misma.

Phaseolus_vulgaris_seed

El tema no es nada novedoso, hace tiempo ya que la faseolamina juega sus cartas en este inmenso negocio en el que algunos se empeñan en convertir el tablero del adelgazamiento. Unos objetivos en principio deseables si se aspira, además, a cambiar kilos por salud. Sin embargo, las estrategias que se proponen no son, a menudo, las más aconsejables. Así, mientras unos se dedican a proponer sencillas pero alambicadas soluciones en los consabidos libros de moda con dietas milagro, otros se afanan en sacar al mercado los más variopintos complementos alimenticios a los que pasándose por el arco del triunfo la legislación europea no dudan en atribuir asombrosas propiedades adelgazantes, reductoras, quema-grasas, etcétera. Algo que suene bien, que parezca serio y sobre todo que sirva para que la gente se trague el cuento.

¿Cómo se supone que funciona la faseolamina?

La teoría es impecable, atento. Cada vez que ingieres hidratos de carbono con los alimentos, más en concreto hidratos de carbono de cadena larga como el almidón, tu cuerpo los tiene que “trocear” con el fin de absorberlos y obtener la energía de ellos. En esta labor de troceado interviene una enzima denominada alfa-amilasa encargada de romper en fragmentos más pequeños las largas cadenas hidrocarbonadas. Pues bien, la faseolamina es un “ingrediente” que se supone inhibe la acción de esta enzima. Así, si los hidratos de carbono no se trocean, estos no se absorben y por tanto no sumarían calorías. Bonito, a qué sí.

¿Acaso alguien duda de que esto no funciona?

Si dudas haces bien. Y si lo niegas, mejor aun. Te digo esto porque en 2011, hace dos añazos, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) se pronunció de forma muy concreta al respecto de este elemento como facilitador de la pérdida de peso. Puedes consultar el informe al completo aquí. Por si no te lo quieres leer entero esta es una de sus conclusiones:

On the basis of the data presented, the Panel concludes that a cause and effect relationship has not been established between the consumption of phaseolamine and reduction in body weight.

Que traducido viene a ser algo así como:

En base a los datos presentados, el Grupo Especial concluye que no se puede establecer una relación de causa y efecto entre el consumo de faseolamina y la reducción en el peso corporal.

Y no fue hace dos, sino cuatro años cuándo el GREP-AEDN se pronunció en un documento de posicionamiento en referencia a la eficacia y seguridad de la faseolamina para perder peso. Sus conclusiones similares:

La actual bibliografía científica disponible no recoge suficientes estudios en humanos correctamente diseñados que demuestren la eficacia de la faseolamina como suplemento dietético para la pérdida de peso.

Y es que tal y cómo sucede con la mayor parte de este tipo de “ingredientes” los estudios que suelen decir cosas bonitas de ellos son de una pobre calidad científica (escasa muestra, cortos espacios de intervención, sin grupo control, sin “cegar” convenientemente…) y/o están además sufragados o promovidos por quienes los comercializan. ¿Qué resultados suponías que le iban a salir al fabricante en esos estudios que él hace sobre un producto que luego te va a vender? Pues eso, resultados bonitos.

Como tampoco podía ser de otra forma las alegaciones a que este producto es “natural” son frecuentes. La fasolamina se extrae de las alubias (Phaseolus vulgaris, de ahí su ocurrente nombre) y con eso ya basta para decir que es “natural” como si este adjetivo fuese sinónimo incontrovertido de algo beneficioso. Te recuerdo que la toxina botulínica, la cicuta y las Amanita phaloides, entre muchos otros elementos también entran en la categoría de “natural”.

A los fabricantes de productos con faseolamina les debe importar un carajo que no haya estudios de suficiente calidad como para asegurar su efectividad contra los kilos de más. Además, los documentos de la EFSA (con carácter de norma y de directa aplicación según la legislación que regula este tipo de alegaciones) les deben parecer a esos mismos fabricantes algo así como una gacetilla de tres al cuarto y se deben creer que los ciudadanos nos hemos caído de un guindo si creen que con expresiones tan grandilocuentes como vacías de contenido del estilo de “clínicamente probado”, 100% garantizado, “natural”, etcétera, nos pueden engañar tan ricamente.

Y por último, lo de siempre: mi grito entre teclas hacia las dormidas, ausentes o indiferentes autoridades sanitarias ante esta situación. Ya que la comercialización de este tipo de productos no es algo aislado y se hace por parte de sus promotores sin esconderse lo más mínimo. He aquí una relación de fabricantes o distribuidores tras una somera búsqueda en internet:

Nutricion Center y su yNC25 (“anunciado en televisión” declararan orgullosos)

Actafarma y su Excess Control 500 (No perderse la entrada de Jose Menuel López Nicolás al respecto en su blog SCIENTIA)

Soria Natural y su HC Block (de los pocos que además no incluyen en su composición otras zaranzajas sin fundamento como el picolinato de cromo)

Santiveri y su Dietabelt

Y así un largo etcétera de otras marcas menos conocidas. Marcas que muchas veces comercializan este tipo de productos a través de los supermercados (en el mío sin ir más lejos). Sí, de los supermercados. Porque para vender esto no hace falta hacerlo ni mucho menos en una farmacia… aunque algunos fabricantes así se empeñen. Supongo porque piensan que les dará más glamur, o vete a saber.

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Foto: Taragui Wikimedia Commons

Los productos para perder peso a base de pimiento valen eso mismo

¿Te acuerdas de aquella entrada sobre la “dieta de la alcachofa”? Bien, pues esta entrada va de lo mismo, pero en vez de pastillitas y ampollitas con extracto de alcachofa y té verde esta vez abordaré una nueva moda: las pastillitas con extracto de pimiento y, de nuevo también con té verde.

Capsicum_annuum,_paprika

Nueva a medias, porque el tema del té verde lleva bastante tiempo coleando y dando guerra en lo que al perder peso se refiere, eliminar las grasas y demás super-efectos. La parte verdaderamente nueva es la del pimiento. Al menos yo me acabo de desayunar con la propuesta que hacen algunos como elemento favorecedor de la pérdida de kilos.

Bueno a lo mejor es que me he perdido algo y no es un tema tan novedoso como presagio ya que una somera búsqueda en Internet con los términos weight loss (pérdida de peso) y “capsicum” (el género botánico que da nombre al pimiento) arroja la friolera de más de 790.000 resultados. Es decir, el tema parece que está pegando fuerte. O mejor dicho, deben de estar intentando que pegue fuerte, que no es lo mismo.

Mi inquietud por este tema responde al sobresalto que el otro día supuso recibir un correo electrónico con una publicidad (la puedes ver tal cual aquí) referente a las maravillas de un producto que combina el extracto de Capsicum annuum (el pimiento en general) y el de Camellia sinensis (el té también en general), Y digo sobresalto porque las alegaciones que este fabricante español hace de su producto, el Capslim (“Cap” de capsicum y “Slim” de esbelto o delgado en inglés; está claro que no se han matado pensando una denominación comercial) son de todo menos creíbles y ciertas. Veamos qué se dice textualmente de este prodigio de la suple-complementación en materia de obesidad y metabolismo:

  • El concentrado de Pimiento (Capsicum annuum L.) estimula el gasto energético e impide la acumulación de grasa en el organismo. [¡caramba!]
  • El concentrado de Té Verde (Camellia sinensis L.) muestra una gran capacidad antioxidante y de drenaje y, junto con la cafeína, potencia el consumo de energía incrementando la oxidación de las grasas [¡Qué bueno! ¿no?].
  • La acción conjunta de todos los ingredientes de Capslim estimula el efecto termogénico (manera natural del organismo de incrementar el metabolismo energético aumentando el consumo de energía y disminuyendo la acumulación de grasa en el organismo. [vaya, vaya]

Cierto es que no son «reclamos» precisamente novedosos, todos los productos milagro hacen declaraciones semejantes, cuando no idénticas, sobre sus propiedades.

¿Por qué digo que este tipo de productos son «productos milagro»?

Es sencillo por que no hay una suficiente evidencia científica que avale estos grandilocuentes efectos. De hecho la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (la conocida EFSA) fue preguntada de forma bien concreta si se le pueden atribuir a cualquiera de estos dos elementos (el pimiento y el té verde) algunas de las declaraciones que se hacen en la publicidad cuando se venden en el marco de la pérdida de peso. Su respuesta fue contundente: no.

Dichas preguntas y respuestas las puedes encontrar a aquí para el Capsicum Annuum y aquí para la Camellia sinensis.

Más en concreto con respecto a la efectividad del extracto de pimiento la EFSA dice lo siguiente:

EFSA pimiento

En la valoración de las pruebas, el grupo de revisión [el de la EFSA] tuvo en cuenta que el único estudio de intervención en humanos del que se pueden extraer conclusiones para la fundamentación científica de la alegación no encontró ningún efecto del consumo de capsaicina en el mantenimiento del peso corporal después de la pérdida de peso. [se base o no este mantenimiento en el aumento de la termogénesis, el incremento del gasto energético o la “perdida” de calorías]

Así pues, no se puede establecer una relación causa-efecto entre el consumo de capsaicina y el mantenimiento del peso corporal después de la pérdida de peso. Y por tanto las propiedades que se pretendían atribuir al extracto de pimiento, tales como que este es beneficioso y/o necesario para la oxidación de las grasas y el efecto “quema-grasa”, lo que facilitaría la pérdida de peso es falso [o, al menos aun no se ha podido probar de momento]

En cuanto a las maravillas del té verde la opinión de la EFSA también es bastante clara. Sobre el efecto de este para aumentar la beta-oxidación de los ácidos grasos buscando una reducción del tejido adiposo:

EFSA te verde

En base a los datos presentados, el grupo de revisión [el de la EFSA] concluye que no se puede establecer una relación causa-efecto entre el consumo de catequinas de té verde y un aumento de la beta-oxidación de los ácidos grasos ácidos que conduzca a una reducción de la masa grasa corporal.

Sobre su efecto para ayudar a mantener o alcanzar un peso normal, más de lo mismo:

No se puede establecer una relación causa-efecto entre el consumo de catequinas de té verde y que se facilite el mantener un peso adecuado o que ayude a alcanzarlo.

Me parece que, una vez más, ha quedado bastante claro no solo cómo se hacen alegaciones absolutamente falaces y engañosas, sino que se hacen con total impunidad cuando a mi juicio contravienen la legislación europea que específicamente regula estas cuestiones sobre qué se puede decir o no de un determinado alimento o complemento alimenticio. Me refiero al REGLAMENTO (CE) 1924/2006 y más en concreto a lo especificado en su artículo 13. ¿Qué hacen nuestras autoridades sanitarias?

Por último, no quiero despedirme sin comentar el sinsentido que tiene en la mayor parte de los casos el decir por ejemplo que este concentrado se ha obtenido del “pimiento”, así y a las bravas, sin especificar, por ejemplo qué clase de pimiento se ha utilizado. Lo digo porque la especie Capsicum annuus abarca una cantidad de variedades y especies “sinónimas” francamente asombrosa. ¿Crees que es lo mismo el concentrado de un pimiento morrón que el de otro de Padrón; el de uno rojo que el de otro verde; el de una variedad que sea picante que la de otra que no lo sea…? Te comento esto porque la especie es para todos la misma. Sin embargo, a los fabricantes les da igual, anuncian concentrado de Capsicum annuum sea el que sea y se quedan tan anchos. Para que te hagas una idea, se conocen infinidad de variedades de pimiento que responden a la misma especie mencionada o a otras especies que son “sinónimas”, ¿quieres verlas?

  • Capsicum abyssinicum A.Rich.
  • Capsicum angulosum Mill.
  • Capsicum annuum var. abbreviata Fingerh.
  • Capsicum annuum var. abbreviatum Fingerh.
  • Capsicum annuum var. acuminatum Fingerh.
  • Capsicum annuum var. aviculare (Dierb.) D’Arcy & Eschbaugh
  • Capsicum annuum f. chlorocarpum Kuntze
  • Capsicum annuum var. conicum (G.Mey.) Voss
  • Capsicum annuum var. conoides (Mill.) Irish
  • Capsicum annuum var. cordiforme Edwall
  • Capsicum annuum f. erectum Makino
  • Capsicum annuum var. fasciculatum (Sturtev.) Irish
  • Capsicum annuum var. frutescens (L.) Kuntze
  • Capsicum annuum var. globiferum (G.Mey.) Voss
  • Capsicum annuum var. grossum (Willd.) Sendtn.
  • Capsicum annuum f. leucocarpum Kuntze
  • Capsicum annuum var. longum (DC.) Sendtn.
  • Capsicum annuum f. luteum Kuntze
  • Capsicum annuum subsp. microcarpon Dierb.
  • Capsicum annuum var. minimum (Mill.) Heiser
  • Capsicum annuum var. minus (Fingerh.) Shinners
  • Capsicum annuum var. minus Dunal
  • Capsicum annuum f. nigrum Makino
  • Capsicum annuum var. oblongoconicum (Dunal) Cufod.
  • Capsicum annuum var. parvoacuminatum Makino
  • Capsicum annuum f. pendulum Makino
  • Capsicum annuum f. violaceum Kuntze
  • Capsicum axi Vell.
  • Capsicum baccatum Rodschied nom. illeg.
  • Capsicum baccatum Buch.-Ham. ex Wall. nom. inval.
  • Capsicum bauhinii Dunal
  • Capsicum caerulescens Besser
  • Capsicum cerasiforme Mill.
  • Capsicum cerasiforme Willd. nom. illeg.
  • Capsicum ceratocarpum Fingerh.
  • Capsicum cereolum Bertol.
  • Capsicum comarim Vell.
  • Capsicum conicum G.Mey.
  • Capsicum conicum Lam.
  • Capsicum conoide Mill.
  • Capsicum conoides Roem. & Schult.
  • Capsicum conoideum Mill.
  • Capsicum conoideum var. chordale Fingerh.
  • Capsicum conoideum var. oblongoconicum Dunal
  • Capsicum conoideum var. sulcatum Fingerh.
  • Capsicum cordiforme Mill.
  • Capsicum crispum Dunal
  • Capsicum cydoniforme Roem. & Schult.
  • Capsicum dulce Dunal
  • Capsicum fasciculatum Sturtev.
  • Capsicum fastigiatum Blume
  • Capsicum frutescens L.
  • Capsicum frutescens var. cerasiforme (Mill.) L.H.Bailey
  • Capsicum frutescens var. conoides (Mill.) L.H.Bailey
  • Capsicum frutescens var. fasciculatum (Sturtev.) L.H.Bailey
  • Capsicum frutescens var. frutescens
  • Capsicum frutescens var. glabriusculum (Dunal) M.R.Almeida
  • Capsicum frutescens var. grossum (Mill.) L.H.Bailey
  • Capsicum frutescens var. lanicaule Greenm.
  • Capsicum frutescens var. longum(Sendtn.)
  • Capsicum frutescens var. minus Fingerh.
  • Capsicum frutescens var. queenslandicum Domin
  • Capsicum globiferum G.Mey.
  • Capsicum globosum Besser
  • Capsicum grossum L.
  • Capsicum indicum auct.
  • Capsicum indicum var. aviculare Dierb.
  • Capsicum indicum var. conoideum (Mill.) Dierb.
  • Capsicum indicum subsp. elaeocarpon Dierb.
  • Capsicum indicum var. aviculare Dierb.
  • Capsicum indicum var. conoideum (Mill.) Dierb.
  • Capsicum indicum subsp. elaeocarpon Dierb.
  • Capsicum indicum var. ribesium Dierb.
  • Capsicum longum DC.
  • Capsicum milleri Roem. & Schult.
  • Capsicum minimum Mill.
  • Capsicum odoratum Steud.
  • Capsicum odoriferum Vell.
  • Capsicum oliviforme Mill.
  • Capsicum ovatum DC.
  • Capsicum petenense Standl.
  • Capsicum pomiferum Mart. ex Steud.
  • Capsicum purpureum Vahl ex Hornem.
  • Capsicum purpureum Roxb.
  • Capsicum pyramidale Mill.
  • Capsicum quitense Willd. ex Roem. & Schult.
  • Capsicum silvestre Vell.
  • Capsicum sphaerium Willd.
  • Capsicum tetragonum Mill.
  • Capsicum tomatiforme Fingerh. ex Steud.
  • Capsicum torulosum Hornem.
  • Capsicum tournefortii Besser
  • Capsicum ustulatum Paxton
  • Capsicum violaceum Desf. nom. illeg.
  • Piper indicum Garsault

Como para que alguien te diga «con extracto de pimiento» así, sin más y tu te quedes tan ancho. Que no te tomen el pelo. Yo de momento hoy voy a comer un suculento plato de trigo con arroz salvaje y salteado con verduritas, entre ellas pimientos de tres colores (por si acaso). Recuerda come comida. #slurpslurp

Trigo verduras soja

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Foto: Rasbak vía Wikimedioa Commons