Dice J.M. Mulet, autor de “Medicina sin engaños”, que la esperanza tiene mejor mercado que el consuelo… una reflexión que aunque sencilla y previsible no deja de ser una verdad como una catedral. Una realidad que se nos olvida cuando lo que tenemos delante de los ojos es precisamente esa esperanza buenrollista que nos vende la cura para todos los males del mundo en especial si tenemos algún problema de salud. A mi modo de ver esta es la sentencia que mejor resumiría el libro, esperanza (la del incauto) y mercado (la del mercachifle) puestos en sintonía. Insisto, nada que no sepamos pero que convine recordar en plan erudito cuando se cita a Henri Poincaré:
También nosotros sabemos cuán cruel puede ser en ocasiones la verdad, y nos preguntamos cuánto más consolador es el engaño.
Muy en resumen en esta obra vas a poder encontrar todo aquello que callan quienes promueven el uso de falsas y fraudulentas terapias alternativas-complementarias-naturales para promocionarse y hacerte picar. Para ello se disfrazarán en muchas ocasiones de medicina, aunque, ha de quedar bien claro, medicina solo existe una: la que funciona. Puedes apostar a que si las flores de Bach o la aromaterapia tuvieran algún viso de efectividad o utilidad real (más allá de hacer caja sacando los cuartos a los incautos) estas terapias estarán al día siguiente a disposición de los usuarios de la sanidad pública en los ambulatorios de salud o en las consultas especializadas. Pero va ser que no.
He de reconocer que no me lo pensaba leer entero. Si acaso sí ojearlo en profundidad para encontrar aquello que esperaba encontrar y que ya conocía. Confieso que me esperaba una obra que aún interesante y necesaria para muchos lectores contendría datos, argumentos e historias redundantes, al menos en lo que a mi conocimiento refiere. Sin embargo, lo devoré de la primera a la última página. Hay dos cosas que me han parecido especialmente brillantes en esta obra. Por un lado el invertir un buen número de páginas al inicio del libro para explicar por qué sí hemos de confiar en la medicina “oficial”, y por el otro el dar a conocer el verdadero origen de buena parte de las pseudociencias y planteamientos que en la actualidad mercadean feamente con tu salud, ya se trate de un cáncer o una gripe estacional pasando por el hecho de que te vacunes o no de cualquier cosa.
Así, este libro te dará suficientes argumentos para que otorgues a cada terapia su verdadero peso en virtud de la malinterpretada tradición (secular, milenaria, etcétera…), del criterio de autoridad, del amimefuncionismo o de las modas (mucha gente lo usa, no puede estar equivocada) y por tanto servirá para ayudar a poner en alza la razón y el sentido común. Unas virtudes que cuando se activan para obtener el mejor resultado posible entre todos los conocidos se le conoce como evidencia científica. Algo de lo que adolecen todas estas engañifas bienintencionadas-pero-no.
En cualquier caso puede que creas que escribo esta reseña porque J.M. Mulet es un amigo con el que comparto buena parte de las perspectivas científicas a la luz de su labor divulgativa y la mía… y estarías completamente en lo cierto. Pero del mismo modo espero que no tengas la menor duda si te digo que tal y como él sostiene, la información es el mejor antídoto contra la estafa. Así pues, infórmate con esta obra y, si acaso no te convence (pocas cosas hay en este mundo más difíciles de invertir que el sentido de la credulidad) puedes rebatir sus argumentos como bien te parezca. Seguro que tanto él como yo (al igual que muchos otros) estaremos encantados de que nos saquéis de nuestro error.
En definitivas cuentas, tanto si disfrutas de la divulgación en estado puro, si eres afín a las cuestiones científico-sanitarias, si disfrutas con la historia de la medicina, como si lo que quieres es conocer la realidad detrás de las infinitas terapias alternativas de buen rollo al tiempo que salpimientas la lectura con buenas dosis de humor, anécdotas y dobles sentidos, esta es con poco género de dudas una de tus lecturas imprescindibles para este verano… o para cuando sea.
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Nota: no olvides consultar otras obras del mismo autor como «Comer sin miedo«
Buen argumento, trasladado al ámbito de la nutrición clínica y comunitaria: «Puedes apostar a que si la dietoterapia y la planificación dietético-alimentaria tuviera algún viso de efectividad o utilidad real (más allá de hacer caja sacando los cuartos a los incautos) esta terapia estará al día siguiente a disposición de los usuarios de la sanidad pública en los ambulatorios de salud o en las consultas especializadas. Pero va ser que no.»
Por eso cuando terminé mi intervención en el Congreso de Nutricionistas de Valencia del pasado año, me fui al Mc Donalds a comer, a jactarme de comer fritanga de pseudocomida. ¡Qué bien lo pasé presumiendo de ello por twitter!
Soy un tipo muy sano y coherente, y me encanta que me adoréis a mí y no a otros gurús.
03 agosto 2015 | 11:23
Buenas «Mr clon de Mulet»
Touché… no te puedo decir otra cosa… ten por seguro que mientras escribía esa frase me di cuenta inmediatamente de los riesgos que tenía al trasladarla a nuestra profesión. No obstante, tal y como has visto preferí arriesgarme. Me parece muy bien que hayas dado esta réplica, me parece justa en cuanto a realista, aunque con sinceridad no termino de tener claras tus intenciones.
Un saludo
03 agosto 2015 | 11:28
Bienvenido Sr. Revenga, se ve que viene con las pilas cargadas de las vacaciones!! 😉 . Gracias por la recomendación!!.
Y recuerda que si buscas Tiendas Online de Alimentación y Bebidas en España somos tu web de consulta, visítanos en http://elpedidohosteleria.com
03 agosto 2015 | 12:26
me imagino que este libro tendrá alguna alusión a la industria farmacéutica y sus intereses.
o no?
03 agosto 2015 | 12:51
Hola, confío como Daniel L. que en el libro nos hable también de todas las industrias farmacéuticas que mercadean feamente con la salud de la gente, me parece que algo de de eso también hay. En cualquier caso seguro que será un libro muy interesante, espero una segunda parte titulada : «Verdades médicas que eran mentira» ; porque me da la sensación de que la medicina oficial no miente nunca solo se equivoca, ¡y menudas equivocaciones!…. tirando por lo bajo mueren 40.000 en USA al año por medicamentos recetados. Esto también debería ser motivo de reflexión…. Un saludo.
03 agosto 2015 | 13:54
Cuando la medicina alternativa es de verdad eficaz se llama…medicina.
03 agosto 2015 | 17:26
Hola, siento discrepar, pero las flores de bach ya hace tiempo que se recetan en los centros de salud y se preparan y venden en farmacias. Informese mejor antes de escribir eso tan alegremente. Graciaa
03 agosto 2015 | 22:43
Hola Ángela,
Discrepar está bien, pero no por deporte sino con pruebas. No hay ningún problema en reconocer que no pocas farmacias mercadeen con el tema de las flores de Bach. Es fácil de creerlo y además tristemente esperable.
Sin embargo, para asumir como cierto que esta terapia se utilice de alguna forma o se «recete» en los centros de salud públicos de nuestra sanidad te he de pedir que lo pruebes. No me lo creo y por tanto consideraré que hasta que no demuestres tu afirmación en este sentido, no solo es gratuita sino que además es mentira.
Un saludo.
03 agosto 2015 | 23:21
Hola, lo intentare. De momento si te puedo decir que ha sido en catalunya, mas concretamente en sabadell y lo se porque hace unos años quise recomendarselas a una señora que pasaba por una depresion al fallecer su marido, pero no me atrevi. Cual fue mi sorpresa cuando me dijo la solucion que le habia dado la doctora de cabecera. Las flores de bach. Lo dicho, intentare conseguir pruebas, al volver de vacaciones, eso si. Gracias por tu respuesta
03 agosto 2015 | 23:27
Tampoco sería la primera vez que un médico receta algo homeopático o de alguna rama de la homeopatía en el último año; existen ciertos vacios legales un tanto raros, y bastante desinformación para la población al respecto, y estaría bien que el colegio de médicos explicara o acotara este tema, al menos desde la medicina legal, que por cierto yo no sé si existe esta asignatura ya con ese nombre…. (no sé si hace un año se aprobó nosequé leches de homeopatía y medicina general)…no me acuerdo, la verdad.
De todas formas estaría bien saber el marco legal de esta situación porque yo al menos no lo tengo claro, al menos en el tema legal; científicamente lo tengo algo más claro, dicho sea de paso.
Saludos.
P.d. no soy un robot!! XD (El Captcha me provoca a mi locura) un Kayaak?¿?¿?¿, cagonlaputa….menos mal que le di a todo lo que parecía una canoa.
04 agosto 2015 | 04:39
La medicina es un negoción donde se juntan los que recetan y lo que fabrican y ambos olvidan…. mejor dicho «tapan» en pos de sus bolsillos donde nacen los medicamentos que funcionan… luego los mezclan y hacen «dosis» y te hacen esclavo de «síntomas» y «miedos» en anuncios y tú compras.
¿Acaso llegamos a los miles de millones solo con los laboratorios?
¿Les fueron a enseñar a los indios de donde salió la aspirina?
¿Todo era amargo antes de inventar el azúcar procesada?
Los chinos son muchos millones y bastante antiguos que la mayorías
de los pueblos/ciudades/países y no creo sea gracias a las «medicinas» modernas.
La cabeza te enferma,
la cabeza te cura…. dicen y me parece tienen razón.
Demasiada locura y avaricia generalizada pulula por el mundo
04 agosto 2015 | 13:37
daroX, esta es la esperanza de vida en China: https://www.google.ie/publicdata/explore?ds=d5bncppjof8f9_&met_y=sp_dyn_le00_in&idim=country:CHN:USA:JPN&hl=es&dl=es#!ctype=l&strail=false&bcs=d&nselm=h&met_y=sp_dyn_le00_in&scale_y=lin&ind_y=false&rdim=region&idim=country:CHN:USA:JPN&ifdim=region&tstart=-296964000000&tend=1375567200000&hl=es&dl=es&ind=false. Parece que por muchos que sean, hasta que no utilizaron los avances modernos no vivían mucho…
04 agosto 2015 | 17:21