El nutricionista de la general El nutricionista de la general

"El hombre es el único animal que come sin tener hambre, que bebe sin tener sed, y que habla sin tener nada que decir". Mark Twain

Nuevo libro: Comer sin miedo

Comer sin miedoSé que te hace falta, lo has de leer. A ti que tanto te preocupas por lo que comes y dejas de comer, a ti que realizas tantas elecciones y tantos descartes alimentarios con el motivo que sea, te mereces este libro. No, no te lo mereces, lo necesitas.

¿Eres vegetariano porque no soportas la muerte de animales? Bien, pues cada vez que abres la boca para meter comida, aunque sea para comer un suculento salteado de germinados ecológicos, mueren animales por ese motivo. ¿No me crees? Vale, ya te lo decía yo, tienes que leer el libro.

¿Odias todo lo que lleve química o aditivos? ¿temes el hecho de comer alimentos transgénicos y los genes que estos aportan? Estupendo también, seguro que tienes tus argumentos (o deberías tenerlos) para mantener esas conductas. Pero que sepas que cada vez que te llevas un bocado a la boca, atiende: de lo que sea, estás introduciendo química, con mucha probabilidad aditivos (sean naturales como la mayoría o artificiales) y, 100% seguro, genes ajenos a tu especie. ¿Sorprendido? Lee el libro.

¿Te acuerdas de las bayas de goji? Hace cuatro años hacían furor y todo el mundo las conocía. Las vendían, te lo aseguro porque lo viví, en la farmacia, en la verdulería, la tienda de herbodietética, la de frutos secos a peso y, pásmate, también las vi en una carnicería. Estaban en todas partes. ¿De donde vino aquella fiebre, porque ha desaparecido y ahora la gente ya no sabe de qué les hablas, cuál era su verdadero origen, era el Himalaya a más de 4.000 metros? Más bien no. Tendrás que leer el libro.

¿Sabías que lo de que las zanahorias sean buenas para la vista deriva de una ardid histórica en el marco de la guerra aérea acontecida entre la RAF y la Lutwaffe durante la II Guerra Mundial? Pues sí, pero habrás de hacerte con el libro.

¿Son los antioxidantes buenos, son malos, es mejor el vegetarianismo que otras soluciones dietéticas, qué patrón dietético es mejor para adelgazar, está el bisfenol A dejando estéril a la población varonil…? Y así una larga lista de de cuestiones que son abordadas con mucho sentido común en “Comer sin miedo”… ya se sabe muchas veces el menos común de los sentidos.

Es posible que muchas de tus decisiones alimentarias las tomes completamente convencido, estoy seguro, pero, ¿te has parado a preguntarte si estás equivocado, es decir, completamente equivocado ya que lo que te hayan contado o hayas oído poco o nada tenga que ver con la realidad? Te lo pregunto porque se puede estar plenamente convencido de algo y, al mismo tiempo estar equivocado. Esas cosas pasan (Nota: ya que estamos en tiempo de rebajas, hoy te recomiendo dos libros por el precio de uno: “Convencidos pero equivocados” una guía para reconocer espejismos en la vida cotidiana. De Thomas Gilovich, Ed. Milrazones, 2009. Te adelanto que este no es sencillo de encontrar)

Volviendo al tema que nos ocupa, J. M. Mulet, es el autor del libro al que me refiero hoy: Comer sin miedo, Ed. Destino, 2014. En él se ofrecen una serie de perspectivas mucho más amplias al respecto de decenas de temas alimentarios sobre los que, quizá amplíe tu perspectiva y te ofrezca una serie de puntos de vista que, es posible no tuvieras. En sí mismo, no me digas que no es una buena propuesta: ofrecer más puntos de vista, no solo los que tienes. Luego ya si eso, que cada cual haga lo que quiera, pero que al menos que se tomen decisiones tras haber observado estas cuestiones con todos sus matices. Al menos más matices, no solo unos pocos.

Lo más gracioso del tema es que no se trata de las opiniones del autor, sino que en la mayor parte de las ocasiones esa nueva perspectiva se desprende, simplemente, de analizar la cuestión de cada momento (los alimentos ecológicos, las elecciones dietéticas personales, la química de la cocina, etcétera) con una racional lógica o de ponerla bajo el microscopio de la historia. En muchas ocasiones las dos cosas, lógica más historia. No suele hacer falta más para aportar una visión quizá poco frecuente pero terriblemente racional al mismo tiempo sobre cada uno de los temas. En otras ocasiones, las menos, porque no suele hacer falta, se recurre a estudios científicos como estrategia probatoria de sus argumentos o bien como elemento para sembrar la duda razonable. Lo que no es poca cosa cuando la salud está en juego.

Se trata de un volumen de fácil lectura, que consigue a la perfección los que intuyo serían dos de los objetivos originales de su autor: arrojar luz sobre una de las cuestiones más mundanas y debatidas en nuestras vidas que es aquello que comemos; y entretener ya que las bromas y los guiños irónicos son frecuentes a lo largo de toda la obra.

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Post Data: Me siento profundamente agradecido por la mención expresa que J.M. Mulet hace a este blog “El nutricionista de la general”, entre otros, como una fuente de consulta fiable y precisa. Orgulloso me hallo. No es para menos.

16 comentarios

  1. Dice ser Marta

    Yo soy de las que piensa que, partiendo de la base que hay que comer de todo y no abusar de nada, las dietas no sirven absolutamente de nada salvo para ponernos de mal humor y no disfrutar del placer de comer. La clave está en ingerir como máximo 2000 calorías al día y hacer 1 hora de ejercicio diario. También es cierto que el metabolismo de cada persona influye, pero a mi me ha dado siempre muy buen resultado http://xurl.es/9ik46

    16 enero 2014 | 10:20

  2. Dice ser marian

    Algo que me intriga y mucho, es esa premisa de que es buenísimo beber 2 litros de agua al día, se tenga o no se tenga sed; para mi es un sacrificio absoluto que incluso (y se que no soy la única), me da dolor de cabeza, así es, beber sin ton ni son tanta agua, me produce dolor de cabeza.
    Mi reflexión es la siguiente: ¿realmente hacer trabajar de más y/o constantemente a los riñones y a todo el aparato urinario es bueno o desgastante?; si nos bombardean con que hemos de comer lo que el cuerpo necesita, ¿por qué hemos de beber mucho mas que lo que nos pide el cuerpo (que se supone sabio)?
    Por otra parte, sirva como ejemplo los animales irracionales sobre todo salvajes: beben y comen lo que su cuerpo precisa, ni mas ni menos.
    ¿Realmente es saludable inflarnos a agua?… ¿o solo sirve para no dar descanso a los riñones y visitar variedad de retretes con su gasto de papel higiénico correspondiente?.

    16 enero 2014 | 10:43

  3. Dice ser bool

    Este hombre es reflejo de lo mal que está la ciencia en España. Su blog es un ejemplo del maniqueísmo simplón que impera sobre temas como los transgénicos o la toxicidad de algunos poductos de síntesis. Afortunamdamante a este tipo ya lo han calado y han demostrado sus falsedades y falta de rigor https://iconoclastico.wordpress.com/2013/07/17/mala-ciencia-o-cientificos-clarividentes-un-caso-practico-palabra-de-jmmulet/

    16 enero 2014 | 10:59

  4. Gracias bool por su más que necesaria aportación. Y para aquellos que les preocupa lo que comen, contamos con una categoría de Productos Ecológicos en la que encontrarán productores, proveedores y tiendas especializadas.

    16 enero 2014 | 11:24

  5. el-nutricionista-de-la-general

    Hola Marian,

    Pues tienes toda la razón, qué quieres que te diga. Si consultas este documento http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S0212-16112011000100003&script=sci_arttext (Importancia del agua en la hidratación de la población española: documento FESNAD 2010) podrás comprobar que:

    «Para una persona sana la sed es una guía adecuada para tomar agua, con las posibles salvedades de los bebés, los deportistas y una buena parte de personas enfermas y ancianas en los que podría ser necesario “programar” una ingesta de líquidos más allá de su sensación de sed»

    Poco más que decirte. Gracias y un saludo

    16 enero 2014 | 11:24

  6. Dice ser marian

    Muchas gracias por la información sobre la ingesta de agua y el artículo en su totalidad, a veces creo que para alimentarse con lo que mejor se acierta es con el sentido común; muchos alegatos de correcta nutrición vienen avalados por modas, marcas, bulos e intereses.

    Lo de la zanahoria y la vista, me recuerda a lo de comer pescado los viernes de vigilia.

    También subrayable la época en que el pescado azúl era malísimo y hoy es la panacea frente al blanco; algo parecido que con los huevos: fritos versus cocidos (ya no sabes en qué modalidad es menos dañino y más digestivo) y un sin fín mas de historias bien aderezadas para (que muchas veces) consumamos lo que alguien dice que toca.

    16 enero 2014 | 11:45

  7. el-nutricionista-de-la-general

    Hola Marian,

    Pues sí, muchas veces modas, tendencias o intereses… pero otras veces el mensaje cambia porque cambia el conocimiento adquirido. Te sugiero que leas esta entrada que hice hace tiempo https://blogs.20minutos.es/el-nutricionista-de-la-general/2012/11/16/la-maleta-de-asimov-o-por-que-lo-que-ayer-era-bueno-hoy-es-malo-y-viceversa/ (La maleta de Asimov, o por qué lo que ayer era bueno hoy es malo (y viceversa))

    Saludos y gracias

    16 enero 2014 | 12:02

  8. Dice ser Sandra

    Lo de los germinados, los vegetarianos y los bichitos es una falacia. Es obvio que mueren bichitos al lavar las verduras etc, todos los vegetarianos lo sabemos, hacemos lo que podemos evitando los productos animales pero todos sabemos que no podemos evitar cosas así, por ejemplo al coger el coche o el transporte público también mueren, al andar, etc. Pero no por eso vamos a decir que ser vegetariano es inútil para los animales, es una falacia total y muy poco profesional, solo leer esto dan ganas de no leer el libro si todo van a ser argumentos así.

    En el comidista he leído otros argumentos así, por ejemplo sobre los lácteos, que compara el hecho de beber leche de vaca con cocinar bacalao al pil-pil.

    Y otros argumentos que tiene como que los tomates ecológicos no son naturales porque se ha hecho una selección de semillas, como diciendo: total que más da que sean ecológicos que transgénicos, si los dos no tienen nada de natural.

    Con argumentos así se pone al nivel del señor aquel que recomienda beber agua de mar porque «las ballenas y los delfines nunca van al médico porque beben agua de mar».

    También he leído que dice que es peligroso ser vegano porque puede tener deficiencias de aminoácidos y vitaminas. Así, en el aire, sin especificar. Las organizaciones de salud más reconocidas dicen que ser vegano es saludable y seguro en cualquier etapa de la vida, pero él como es muy chulo les lleva la contraria.

    Además de con argumentos de este tipo poco se le puede tratar de ser objetivo.

    Saludos!

    16 enero 2014 | 12:12

  9. Dice ser marian

    Cierto, no todo son falacias sino conocimiento más amplio y certero sobre determinados alimentos y sobre nuestro propio organismo, de ahí que la información nutricional a veces sea variable y que será fidedigna, siempre que sea firmada por auténticos expertos.

    En cuanto a lo qué comemos y sus añadidos (sustancias químicas, colorantes, conservantes, etc…) seamos carnívoros, veganos o ayunistas, lamentablemente es así, alimento sano, ya ni la leche materna (de lo que se come, se cria), demasiada contaminación (natural y/o artificial) de ahí el incremento de enfermedades variadas de tipo alérgico y ya casi epidémico.

    Tal vez en un futuro no muy lejano, tengamos que alimentarnos a base de pastillas y alimentos creados y controlados exclusivamente en laboratorios como los astronautas.

    16 enero 2014 | 13:10

  10. Dice ser Alexis

    según esto, todo da entonces igual, porque buscar para comer un restaurante limpio, aunque comas en uno limpio , algo de sudor o mierda del suelo tendrá la comida, o porque preocuparse por lavar los platos, da igual si esta sucios o comer comida en mal estado, lo que no mata engordad, muy lógico el argumento de ese libro y de este articulo

    menuda estupidez de articulo

    16 enero 2014 | 13:36

  11. Dice ser marian

    Es la realidad y es lo que tenemos, comamos con inteligencia y dejemos los fanatismos. Todo es relativo. Sin mas.

    16 enero 2014 | 13:46

  12. Dice ser rg

    Leyendo las opniones encontradas sobre el autor del libro y otras personas, en el caso del link que han puesto digo otras personas pues quien lo escribe es anónimo, me doy cuenta una vez más de lo difícil que resulta la divulgación científica y lo que hay que lidiar por medio, y si además unos por populismo y protagonismo, otros por envidia o por exceso de celo en acotar una sola cosa en exclusiva patinan, meten la pata y no rectifican, mala imagen das y más discordia y duda genera en la gente de a pie el enfrentamiento poco adecuado, o mal llevado entre esas opiniones encontradas.

    A mi las cosas de mullet me parecen unas más acertadas que otras pero leyendo a quienes le desacreditan de forma tan taxativa me doy cuenta lo fragil que es perder el norte y acabar divulgando una pelea en vez de una información abierta, quiero decir, una información no absolutista.

    Y es que usando el sentido común y los datos sociales, no científicos, que aporta por ejemplo Nicolás Olea respecto al tema de los «venenos» no me queda más que pensar que la agricultura ecológica hace unos años que se ha convertido en un negocio tal cual, uno más sujeto a las mismas sospechas que la gran industria alimentaria, y que el uso indiscriminado de sustancias prohibidas es más patente en agricultores minoristas, menos vigilados, tal y como Olea cuenta con datos, de forma que aunque cada uno lo maquille para su lado, aunque se traduzcan las cosas a gustode cada uno del inglés al español, me parece a mi que se obvian temas tan sencillos pero reales como que esa agricultura a pasado de ser una «utopía» a una «realidad» alimentaria como toda la que nos rodea: por razones no científicas acaba cometiendo los mismos errores que la contraria y usando las mismas cosas con diferentes nombres.

    El libro lo leeré porque me parece interesante, como tambiñen las opniones encontradas.

    Saludos.

    16 enero 2014 | 16:11

  13. ¡Hola!
    Muy bien traído el libro «Convencidos, pero equivocados. Guía para reconocer espejismos en la vida cotidiana», de Thomas Gilovich.
    En efecto, este clásico del pensamiento crítico anglosajón, enseña a rechazar las ideas viciadas y a desarrollar los «hábitos mentales» que estimulan una visión del mundo más exacta.
    Aunque es de hace un tiempo, si se pide en librerías lo sirven en unos días y también se puede adquirir a través de nuestra web: http://www.milrazon.es/Libros/Convencidos-pero-equivocados-guia-de-Thomas-Gilovich.aspx.
    Un saludo.

    17 enero 2014 | 19:34

  14. Dice ser Sandra

    Acabo de leer esta carta a Mulet, por parte de catedrático de física y química
    http://www.disfrutalaciencia.es/archivos/140010062913respuesta%20a%20jose%20miguel%20mulet%20(transgenicos%20versus%20ecologicos)%20%20(28-6-13).pdf
    ya está bien de reirle las gracias y no decirle las cosas claras

    20 enero 2014 | 19:39

  15. Dice ser Raul Gomez

    Desconozco si este doctor en bioquímica se cree todo lo que escribe o es un vendido, y lo cierto es que no se cual de las dos posibilidades es más peligrosa, aunque casi prefiero la segunda, cualquier cosa menos meter un dedo en la boca de un tonto.

    28 enero 2014 | 00:52

  16. Estimado amigo, lo acabo de leer, y conociéndome, sabes que estaré en profundo desacuerdo con algunos pasajes. Aquellos relacionados con la agricultura ecológica. Sesgado, interesado, inapropiado, contradictorio. A ver sí tengo oportunidad de explayarme.

    01 febrero 2014 | 02:49

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