El nutricionista de la general El nutricionista de la general

"El hombre es el único animal que come sin tener hambre, que bebe sin tener sed, y que habla sin tener nada que decir". Mark Twain

Nuevo libro: La dieta inteligente

Hace unos pocos meses vio la luz el trabajo editorial de tres compañeras de profesión que amablemente me hicieron llegar un ejemplar para conocer mi opinión.

Afortunadamente y muy en contra de la actual tendencia de publicar libros sobre dietas con postulados disparatados y enfrentados con todas las recomendaciones, “La dieta inteligente” aborda el tema del comer con criterio y racionalidad. Cierto es que gran parte del mismo está enfocado a la pérdida de peso, pero en él también se podrán encontrar diversas claves para todas aquellas personas que se cuestionan, aunque sean pequeños matices, su comportamiento alimentario. De forma práctica toca muchos de los obstáculos con los que la población general se topa a la hora de cambiar su estilo de alimentación: la falta de tiempo, el fumar (o dejar de fumar), los horarios laborales, la falta de recursos en la cocina, etc.

Dos terceras partes del libro están dedicadas al abordaje del tema en sí, de los distintos elementos que intervienen en los hábitos alimentarios tales como el gasto energético, la motivación para el cambio sin dejar de apuntar pequeñas píldoras relativas a muchos de los mitos más frecuentes que rodean al mundo de la nutrición, incluidas las dietas milagro. La última parte consiste en un compendio de recetas tipo que, a modo de ejemplo podrían formar parte de las dietas semanales que como tal se detallan en sus páginas.

Fenomenal el trabajo de estas dos dietistas-nutricionistas, Julia Farré Moya y Anabel Fernández Serrano, que junto a la tecnóloga de los alimentos, Juana Mª González, nos dejan, ya era hora, una obra sensata en las estanterías de aquellos libros dedicadas a las dietas.

Si me lo permiten las autoras, he de decir que la cuestión de plantear u ofrecer a los lectores (y llegado el caso a sus pacientes) dietas calibradas al milímetro, por calorías y gramos de alimento, no es mi fórmula preferida a la hora de reconducir los hábitos de una persona, ni tan siquiera al principio. Pero qué duda cabe que este tipo de ejercicio de la profesión sigue teniendo sus defensores y seguidores. Al igual que a cualquiera le pueden gustar los coches y “ser” de una marca y otra persona, de igual forma “ser” de otra. Lo importante en este caso es que conduzcas lo que conduzcas se haga respetando las recomendaciones de circulación y sabiendo en todo momento qué se tiene entre manos.

Les invito, tal y como hacen las autoras en su web que le echen un vistazo a su libro descargándose el índice y primer capítulo en este enlace.

 

5 comentarios

  1. Dice ser Lucia

    Yo también me lo leí! y creo que nuestra opinión se asemeja bastante: http://www.dimequecomes.com/2012/06/la-dieta-inteligente-jm-gonzalez.html

    18 septiembre 2012 | 16:45

  2. Dice ser Oswaldo

    Pues yo también lo he leído y más que la dieta inteligente (los que no la seguimos, somos tontos), a mí me parece la dieta de siempre. Come poco y no te pases con las calorías, ese es el resumen del libro, la dieta que se lleva recomendando años y que se ha visto una y otra vez que a largo plazo no funciona. Que no, que no funciona por mucho que insistáis. A ver si utilizamos este argumento no solo con las llamadas dietas milagro, que también es aplicable a esta dieta inteligente. Hay estudios que lo demuestran.

    Por no hablar de algunas cosas muy discutibles y contradicciones, para las que no presentan pruebas científicas, claro. Porque las que presentan son media docena y anecdóticas.

    Lo menos malo es cuando hablan de la compra o de la planificación de la comida, puede tener su interés.

    18 septiembre 2012 | 19:12

  3. Dice ser Luisa

    Yo no he leído el libro, pero a partir de los comentarios aquí mostrados, tengo mis dudas si hacerlo. Yo no estoy tampoco muy de acuerdo con las dietas que miden las calorías. Aunque es cierto que cada persona y metabolismo son distintos. Pero aun así soy mas partidaria de llevar una dieta sana y variada, comiendo 5 veces al día para mantener el metabolismo actvo, e introducir movimiento en mi día a día. En cualquier caso, para quien desee ver mas dietas, su funcionamiento y sus pros y contras, aconsejo http://www.stopgrasa.com, donde encuentras todo esto y muchas claves para llevar una vida sana y comer delicioso..

    19 septiembre 2012 | 09:22

  4. Dice ser Javier

    Pero estamos locos? Acaso hay alguna dieta en el mundo que no se basé en las calorías consumidas? Existe una nueva ley en el universo que nos permite comer más calorías d las que gastamos?
    Y Luisa, una web en la que me vas a vender productos para adelgazar 4 kilos en 2 semanas… deberías de ir a la cárcel. Qué tipo de titulación legal te permite dar esos consejos?
    En fin, si en vez de dietas habláramos del glaucoma, nos llevaríamos las manos a la cabeza si unos cuantos indocumentados empiezan a vendernos sus soluciones.

    19 septiembre 2012 | 23:23

  5. Dice ser pollito

    No he podido leer el primer capítulo del libro… al parecer hay que tener un cierto dominio de las llamadas «redes sociales» del que yo carezco para descargárselo. Pero a juzgar por el comentario que de él hace el blogger es más de lo mismo. Con el pecado original de todos los dietistas-nutricionistas: creer que el aumento de la masa grasa es consecuencia de una mala conducta alimentaria (gordo = vago y glotón), cuando en realidad es exactamente al revés: los gordos comen más y se mueven menos porque el cuerpo les pide literalmente engordar. Lo que hay que atacar es el problema subyacente (el defecto en la regulación del tejido graso) y no el síntoma (la «mala conducta» alimentaria).

    02 octubre 2012 | 06:49

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