¡Impresionante e inaudito!
¿Cómo es posible que la Troika tomara una decisión tan importante para los chipriotas sin contar con sus reacciones? Y si contaron con sus reacciones, ¿cómo es posible que la decisión estuviera tan mal tomada?
¿Si tan convencidos estaban la UE, el FMI y el BCE de las medidas, cómo es posible que sean ahora tan flexibles? ¿Les preocupa Chipre o los rusos que supuestamente blanquean dinero en ese país?
Si querían hacer experimentos financiero-fiscales, más les valdría hacerlos con gaseosa que sobre las cuentas de las personas. Y si no es un experimento, el rigor es una exigencia.
¡No entiendo nada!
Pero si esa Troika pretende imponer orden en el sistema financiero europeo más le vale hacerlo con seguridad y seriedad, si no quiere que empecemos a perderles el miedo.
Entretanto, parece que a Chipre le salvará la Troika verdadera, la rusa, formada por su iglesia ortodoxa, su banca y su Putín.
Entretanto, por aquí deberíamos pensar en una «perestroika» (reestructuración) de nuestra Troika particular.