El maldito cambio climático me está afectando casi tanto como a la Madre Natura, queridos.
Si, estos vaivenes térmicos que nos azotan me hacen sentir tan espiritualmente incómoda como un cocktail mal agitado, lo que me empuja a ir de una punta a otra de reginaexlibrislandia con una cadencia frenética, como si me deslizara sobre raíles.
Hoy en pleno ataque me detuve en seco frente a las baldas de biografías. Necesitaba una víctima y me topé con ella, y cuando quise darme cuenta era demasiado tarde: oleadas de rabia al rojo vivo me ascendían desde los intestinos hasta el paladar, donde rompían contra mis dientes para reventar en palabras:
– Que alguien sea un ángel y me diga por qué existen las biografías. ¿Por qué? ¿Para qué? Dadme autobiografías o memorias, pero quitadme de la vista esos relatos contados por chismosos con delirios intelectualoides. Me repatean, me enferman, hieren mi sensibilidad regia, cielos, especialmente los ‘no autorizados’. Visualizo al investigador acartonado y voraz, hurgando sin pudor en la vida de su objeto de estudio, revisando cartas, papeles, detalles, objetos… y se me llevan los demonios. Es una descortesía atroz, una indiscreción del tamaño de mi pelucón y a mi, curiosa insaciable, me molesta, me molesta, ¡ME MOLESTAAA! Si quieres saber la vida de Rimbaud, cielo, léete toda su obra y decodifícalo entre líneas, sigue su rastro histórico y contextualízalo tu mismo, llega al hombre a través de la obra, pero sin intermediarios
Nadie en reginaexlibrislandia osó tocarme la retahíla, así que vacié mi cargador retórico del tirón. La verdad es que me quedé como nueva, queridos, embargada por una placidez celestial, en total armonía con el universo. Fue cuando me atusaba el pelucón cuando una frase me quebró el recién estrenado karma:
– Pues yo si leo biografías. El secreto está en ver quién las ha escrito y saber tú cómo interpretarlas… Te ahorra tiempo, y es un bien escaso.
Era un cliente que, para mi vergüenza, presenció mi ataque de incontinencia verbal transitoria y tuvo a bien empujarme muy sutil y educadamente a una nueva reflexión sobre un temita en el que, quizá, debo virar un poco más al gris…
Y vosotros, queridos, ¿leéis biografías? Si es así, ¿por qué lo hacéis? ¿qué opináis del género?
Pues yo «confieso»leer biografias o cuadernos o como se quiera llamar.Me gustó el «cuaderno de todo»de Carmen M.Gaite;el cuaderno amarillo de Paniker y la de Pavese,que no recuerdo el titulo.Un saludo
11 marzo 2008 | 2:39
Las biografías me aburren considerablemente. Las prefiero como notas en los prólogos (o apéndices) de alguna obra del autor. De esa forma, conoces el contexto de la obra, y leyéndo la misma conoces al autor.Todo lo demás me aburre, como ya he dicho.
11 marzo 2008 | 9:31
A las biografías les ocurre lo mismo que a ese género que se denomina «novela histórica». Su calidad depende del tema y del escritor.Leer las biografías de Erasmo o de Sebastián Castellio por Stefan Zweig vale realmente la pena. No es lo mismo, claro está, que dedicarse a los cotilleos sobre orinales palaciegos escritos por Menganito Portérez de Palacios. Leer «León el Africano» por Amin Maalouf es también un placer, y no podrá compararse nunca con «El último forúnculo del penúltimo templario» escrito por Fulanito Enígmez.Como suele ocurrir en otros ámbitos, no sé si en todos, la calidad es básica. Y si es un criterio elitista, que lo sea.
11 marzo 2008 | 10:07
Disculpa si he enviado dos veces un mensaje similar a tu entrada: el ordenador me ha fallado inesperadamente.No creo que las biografías constituyan géneros literarios aparte. A lo sumo, son etiquetas de clasificación para su venta. La biografía es un ensayo, cuyo interés (como ocurre con el resto de los ensayos) depende del tema y del buen hacer del autor. Una parte nada desdeñable de los ensayos historiográficos son de tipo biográfico, y constituyen un grupo de obras de gran calidad. Pienso, por ejemplo, en el “Conde Duque de Olivares”, de Elliott, o en las biografías de Erasmo y de Sebastián Castellio escritas por Stefan Zweig.Es cierto que hay mucha cosa encuadernada que circula por ahí. Pero las obras de calidad, como las que citaba antes, no son comparables con los cotorreos de orinales palaciegos escritos por Abundio Cotíllez y Aristocracio. Y, estableciendo una comparación con la denominada novela histórica, obras respetables como “León el Africano” de Amín Maalouf, o “Q”, de Luther Blisset, no deberían compararse con las toneladas de “El último forúnculo del penúltimo templario”, de Pantuflo Enígmez y demás autores igualmente inspirados.
11 marzo 2008 | 10:21
Alguna vez he leído alguna, pero confieso que prefiero sacar mis propias conclusiones de ciertos personajes a través de su obra… Me apasiona hacerles un retrato psicológico, no lo puedo evitar.
11 marzo 2008 | 11:31
Jajaja. Muy bueno el post. Me habría encantado presenciar ese ataque antibiografías! Yo también me niego a leerlas.Y si quieres un cocktail para reflexionar prueba con un bloody mary 😉
11 marzo 2008 | 12:26
Hace poco que te he descubierto, pero tu blog es ya uno de mis favoritos.Yo sí que leo biografías (pocas, muy pocas). Pero parto ya de la idea que no me las creo. Depende de quién las escriba y sobre quién, pero generalmente la idea de «novela, novela, novela» no me abandona. O lo que es lo mismo: «otra historieta», que, como todas, se fundamentará en alguna vivencia (o bastantes más) real.
11 marzo 2008 | 13:41
A mí solo me gustan cierto tipo de biografías… No me gustan las biografías chismosas, ni las no autorizadas… Yo y mi miniyo científico devoramos biografías de los grandes descubridores, inventores o científicos de la historia de la humanidad (Marie Curie, Albert Einstein y Tomas Alva Edison son mis favoritos)… Mi curiosidad histórica me lleva a leer también biografías de reyes y reinas, y otros muchos personajes históricos interesantes…Incluso me he leido más de una biografía sobre el mismo personaje, para poder añadir nuevos puntos de vista…
11 marzo 2008 | 16:29
A mi me ocurre como a Sand ,..me gustan las biografias de personajes que son historia,por lo que hicieron o descubrieron..sobre todo mujeres.Todo lo que tenga que ver con la historia me interesa mucho, y me gusta saber la clase de vida, la forma de actuar o pensar de otras épocas.No me atraen las biografias de famosos ,o chismosas, para eso no leeria y solo veria tele.Por cierto,leí la biografia de Garcia Marquez «vivir para contarla»..y es un truño .Esto que leo al final de la página es muy interesante para debatirlo !¿Y si un etarra leyera El Principito?!.No lo hará, pero me temo que habria que explicarle..que lo que parece un sombrero….no es mas que lo que no pudo digerir una gran BOA.
11 marzo 2008 | 17:39
Muy bueno tu post, a mí si me gustan las biografias, sobre todo las de los personajes que tienen que ver con la historia y por supuesto cuando el que escribe es una persona que se documenta bien y escribe amenamente sino se convierte en un «ladrillo» y eso no lo soporto, me gustan las biografias bien documentadas y escritas amenamente. Saludos, por cierto vivo en Caracas y tengo planeado ir a España (Madrid) dentro de poco donde consigo la dirección de tu librería?
11 marzo 2008 | 22:43
Pues a mi algunas biografías de determinados personajes si me parecen interesantes… lo único que hay que leer varias de distintos autores para un mismo personaje porque ya sabemos que la historia depende de la pluma que la escriba…Saludos
12 marzo 2008 | 10:05
Hola a todos!!!No no leo biografías y nunca las he leído y eso que desde que veo un libro me abalanzo a leerlo,pero las biografías nunca me han interesado en eso comparto con Regina ex libris.Abrazos!!!S.R. 🙂
12 marzo 2008 | 11:48
Tampoco me encantan las biografías; normalmente se ven teñidas de algo que escapa a la verdad. Quizás porque incluso en la propia vida, la que cada uno se cuenta, hay demasiados claroscuros.Apúntate un tanto, Regina ex-libris.
12 marzo 2008 | 14:29
Es como todo en esta vida: hay biografías buenas, muy buenas,interesantes, pestiños, petardas, vacuas, falsas, teñidas, censuradas, remendadas, inanes, aceptables, infumables…A mi, personalmente,me encanta la Historia, y creo (una opinión como cualquier otra) que las biografías son parte de ella (me refiero a las de personajes con alguna trascendencia escritas por autores serios y documentados, no a la de Britney Spears escrita por la presidenta de su club de fans, por ejemplo). Yo he aprendido muchísima historia leyendo, por ejemplo, la biografía de María Estuardo de Antonia Fraser, la de María Antonieta de Zweig, o varias de Winston Churchill, por citar algunas.Pero, lamentablemente, creo que en este género pasa como en la novela histórica o pseudohistórica: hay muy pocas perlas entre un montón de bazofia.
12 marzo 2008 | 19:17
Me encantan las biografías si están escritas por buenos escritores o historiadores: La vida de María Antonieta de Stephan Zeig, todas las que podido disfrutar de Hernán Cortés, la vida de Pancho Villa por Paco Ignacio Taibo, la vida de Antonio Pérez por Marñaón… Hay muchas muy buenas, Regina, casi tan buenas como tu blog, el mejor de la web. Para los que nos gusta la historia es un género imprescindible, guapetona.
15 marzo 2008 | 10:10
Acostumbraba a empaparme de biografías de artistas y grupos musicales: U2, Sex Pistols, Smashing Pumpkins, The Cure, Led Zeppelin, Bowie, Depeche Mode, Joy Division, Brian Ferry, etc.Pero me di cuenta de que todas ellas, no eran mas que extensos panfletos elaborados por «Groupies», para otros tantos no tan lanzados en el tema de la escritura.Algunos de ellos, periodistas, me hicieron caer en la firme idea de que no hay nada peor que un periodista/groupie: ¿Quienes mejor que ellos para decorar, adornar o manipular la información sobre las vicisitudes de cualquier artista o formación?.Saludos.
17 marzo 2008 | 11:57
MAL XQ NO TIENE FOTOS
12 mayo 2008 | 20:58
loca maldita que te estas creyendo para querer ser dios . Estupida
29 abril 2009 | 17:05