Otra vez de vuelta después de unas largas vacaciones en las que no he escrito ni una línea. Me propuse tener para septiembre varios post pero la realidad es que no he sido capaz de escribir ninguno.
A partir de ahora cambiaré los textos con menor frecuencia, tres veces a la semana en lugar de las 5 de antes. Las razones son diversas y la falta de tiempo es una de las primordiales. Prometo, eso sí, seguir contestando a todo el mundo con la mayor rapidez posible. Ya sabéis que me interesan mucho vuestras opiniones y que de ellas aprendemos todos.
Para retomar la línea quiero empezar con unas reflexiones y unos datos para la reflexión.
Es evidente que el panorama del vino y del viñedo español está cambiando de forma radical. Aparecen nuevas zonas, algunas de gran interés, nuevos bodegueros, en demasiados casos con viejas ideas pero también gente joven con ganas de hacerlo realmente bien y creyendo que la clave está en el viñedo.
Pero este cambio no es siempre positivo. Estamos generando eso que llamamos uniformidad del gusto, la globalización del estilo de los vinos y contra eso tenemos que luchar todos los días. Cada uno con nuestras armas. El consumidor exigiendo y los profesionales siendo eso, profesionales.
Hemos hablado ya de numerosas causas para esa uniformidad. Voy a dar ahora una serie de datos que nos pueden ayudar a entender todavía más los problemas que generan estos cambios.
En Rioja en 1983 las hectáreas inscritas eran 38.349. En 1990 había 43.074 hectáreas con una producción ese año de 161 millones de litros, lo que daba un rendimiento medio de 3.743 litros por hectárea. En el año 2006 las hectáreas ya eran 60.390, es decir, 17.316 más. La producción fue de 276 millones de litros lo que supone un rendimiento de 4.573 litros por hectárea.
En Ribera del Duero en 1989 había 9.146 hectáreas, de las que el 57% tenía más de 40 años. Hoy hay 20.711 hectáreas de las que el 46,41% se plantaron después del año 1996 y más del 16% son viñas plantadas en el siglo XXI.
En Navarra en 1984 la Garnacha representaba el 84,45% del total del viñedo. En 2005 representa sólo el 25,72%. En 1984 el Merlot era inexistente hoy representa el 12,45%. En el año 1990 la producción fue de poco más de 66 millones de kilos de uva en el año 2005 superó los 145 millones.
Más hectáreas, viñedos más jóvenes, cambios en las prácticas culturales de cultivo, rendimientos más altos, más presencia de la madera, en 1990 en Rioja había 547.000 barricas, en 2006 la cifra era de 1.197.000, más modernidad, menos particularidad. Vinos más iguales.
Ostras Paco¡¡ Me dejas en ascuas…¿que viñedo es ese de mi tierra?… estoy flipando jejejeje
30 noviembre -0001 | 0:00
Bienvenidos los dos, veo que habeis vagueado como es debido durante este verano lo cual me alegra y mucho.Sobre la reflexión solo darte la razón en una situación que me temo que ira aun a peor con el tiempo.Cuanto mas me interno en el «bosque del vino» mas miedo siento. De todos modos las apuestas tambien estan ahi, en las pequeñas DO sin superficie ni medios y en las pequeñas bodegas obligadas o dispuestas a seguir haciendolo bien y no mucho…
01 septiembre 2008 | 13:27
Bienvenedido despues de las seguro que merecidas vacaciones. Una cadencia de tres post a la semana y contestando los comentarios, no está nada mal, y si los post son de calidad como es el caso, tela las horitas que le dedicas al blog.De los datos que nos das el que más me impresionó es el del parque de barricas, ya que se duplicó en apenas 16 años. Un saludo y contento de que vuelvas con las pilas cargadas.
01 septiembre 2008 | 14:41
D.O. Rioja esta perdiendo fuelle, ya que se han realizado inversiones multimillonarias en maquinarias, bodegas y formación de profesionales en la D.O. La Mancha….Solo en el centro de la mancha hay una extensión 10 veces superior a la de Rioja, Ribera del Duero o Navarra. solo les faltaba la inversión en calidad… cosa que se ha conseguido muy lentamente…Os animo a tomar un buen Añil de las bodegas de Villacañas.
01 septiembre 2008 | 16:46
Gracias a todos por escribir de vinos, pero espero tengáis en consideración hablar no de las siempre conocidas y apreciadas muncialmente denominaciones de origen como La Mancha, La Rioja… Os invito a descubrir un sabor único en los vinos de nuestro país. El lugar es remoto, en una isla remota, Tamargada, La Gomera, Islas Canarias. El color y aroma que desprenden las pocas bodegas que existen en dicho pueblo son de merecida mención. Un afamado periodista de Canarias, García Raúl, tiene unión a dicho cultivo, no haciendo posible más que 300 botellas por añada y a un precio que casi alcanza los 5 euros. No es para mí este un espacio de publicidad, puesto que no vende el vino de manera profesional, sino como un hobbie que ha seguido generación a generación. Desde hace dos décadas hasta ahora me he convertido en gran amante de los vinos y este tiene un sabor único y posiblemente incomparable.
01 septiembre 2008 | 18:00
Están bien esos datos que aportas, no obstante no me parece totalmente justa la comparativa que haces debido a que en Rioja comparas rendimientos mientras que en Ribera comparas exclusivamente edad. Es claro que los rendimientos son determinantes en lo referente a la producción de vinos tintos de calidad, no obstante también son determinanates otros factores como suelo, clima, etc. Por otra parte, me he molestado en buscar en la página web del Consejo Regulador de Ribera del Duero los rendimientos que se obtienen en dicha zona y sorprendentemente el año pasado el rendimiento medio por hectárea fue de tan solo 3715 kg/Ha aproximadamente, mientras que en los últimos cinco años, este rendimiento ha sido de 3933 kg/Ha. La verdad, comparar estos rendimientos con muchas (por no decir todas)otras zonas de España y pero aun si nos vamos a nivel mundial, justifica la dedicación y el sacrificio de los viticultores y bodegas de la Ribera del Duero en aras de la calidad, especialmente si tenemos en cuenta que la mayor parte de los vinos comercializados lo hacen bajo la contraetiqueta genérica, al contrario de lo que ocurre en otras zonas en las que con mayores rendimientos producen en su mayoría crianzas y reservas.Es tan solo mi opinión.Un saludo.
02 septiembre 2008 | 8:45
Bienvenido y bien hallado tras unas largas pero seguroq ue merecidas vacaciones. Tu último párrafo es demoledor, Paco. Estoy completamente de acuerdo con los datos y con el diagnóstico y aunque subyace un poso de amargura o de contrariedad, no sé si lo leo claramente. Para mí la situación que describes es una desgracia, una calamidad y, creo que como tú, me afano por ir conociendo vinos que tengan «alma propia» y que, de alguna manera, sean «únicos», irrepetibles de año en año, cada uno distinto, cada uno con sus peculiaridades, con sus sabores debidos al clima y al territorio y a las variedades y no a las levaduras y las enzimas. Ya puestos y de paso, que vivan los vinos naturales, que no te la pegan jamás, gusten más o menos. Ofrecen lo que son.SaludosJoan
02 septiembre 2008 | 8:46
Xylotrechus, no puedo comparar rendimientos de ahora en Ribera del Duero con rendimientos de hace varios años por la simple razón de que no los conozco con exactitud. En la página del Consejo Regulador sólo aparecen los datos del los 5 últimos años y sería in teresante compararlos con los de hace 30 ó 30 años, pero yo no tengo el dato si alguien lo tiene, por favor, que nos lo diga. Por cierto no os pongáis nombres tan complicados de escribir que me cuesta horrores recordarlos y tengo que estar mirando.Joan más que amargura hay una cierta tristeza. Me da pena el cambio que se está dando en el viñedo español y me temo las consecuencias que está teniendo y que va a tener. Mañana os contaré sobre un viñedo de Galicia que me impresionó hasta la emoción.
02 septiembre 2008 | 10:19
Hola Paco:Estoy leyendo un libro, que si no lo has leído, te lo recomiendo mucho. «Wine Politics» Me gustaría compartir algunos datos, que vienen a ilustrar lo que tú comentas:Chateau Latour tenía rendimientos de 12 hl/ha en los cincuentas, cuando el promedio era de 30 hl/ha, en los sesenta rozó los 40, pero en 1970 a 30 hl/ha.En 1970 había declarados 35 mil productores en Burdeos, 12,500 en 1999 y 10 mil en 2005.Yo todavía no entiendo este incremento en los rendimientos, cuando hay otro dato: 18 millones de litros de vino fueron a parar a las destilerías en Burdeos en 2005.Saludos
07 septiembre 2008 | 17:55
Benjamín, no conozco el libro. Lo buscaré. El aumento de rendimientos es algo que, por desgracia, se da en todos los sitios, sólo se salvan unos pocos viñedos excepcionales.Burdeos tiene dos caras. La ganadora, que representan unos pocos, muy pocos, vinos, por lo que se pelea el mercado en todo el mundo. La perdedora es el resto que las está pasando canutas.Los grandes han sido la locomotora pero se han separado tanto del resto de vagones que ya no pueden hacer esa función.
07 septiembre 2008 | 18:54