Pese a que Smile, lo nuevo de Katy Perry, es una canción con potencial, la situación actual en la que nos encontramos, su embarazo (casi a término) y la ausencia de interés en tipo de música que está de horas bajas, están haciendo que el último lanzamiento de Katy Perry pase un poco desapercibido.

En ocasiones, las malas decisiones, como la de la portada de su disco, se pagan caras y lo mismo podría decir del videoclip de Smile porque no aporta absolutamente nada. ¿Es novedad ver a Katy Perry haciendo el payaso? No. ¿Es notorio ver a Katy Perry embarazada en un videoclip cuando hace tan solo unas semanas ha estrenado otro embarazada y desnuda? No.

Aunque algunos críticos musicales aseguran que esta canción podría estar a la altura de Roar, temazo que estrenó en el año 2013 y con el que brilló en la Super Bowl, yo discrepo y las cifras hablan por sí mismas: nada de números 1 mundiales. Para que os hagáis a la idea, en el Reino Unido la canción ha entrado al puesto 96 de las listas de éxitos.

A la espera de escuchar el disco al completo que saldrá el próximo mes, lo único bueno que puedo sacar de Smile es su positividad y que el hecho de que la Perry regrese al pop, que consiga un ‘hitazo’ y desbanque a los ritmos latinos.

«Escribí la canción que titula al álbum cuando estaba saliendo de uno de los periodos más oscuros de mi vida, en el que había perdido la sonrisa. Todo este álbum es mi camino hacia la luz, con historia sobre fuerza, esperanza y amor». ha dicho Katy Perry sobre esta canción.