Este sábado se cumplieron 35 años de la muerte en accidente de aviación de Félix Rodríguez de la Fuente. 35 años sin Félix. Un episodio que conmocionó a toda la sociedad española, hasta el punto de que, como ocurre con esos acontecimientos cruciales de nuestra historia, todavía hoy la gente se pregunta: ¿Dónde estabas tú cuándo murió Félix?
35 años después, lo que muchos nos preguntamos ahora es: ¿Qué queda del mensaje de Félix? Y la respuesta es tan sorprendente como maravillosa: Todo. Queda todo e incluso más.
Es verdad que seguimos cazando lobos, envenenando rapaces, contaminando ríos y talando bosques, pero también es verdad que lobos, rapaces, ríos y bosques están ahora mucho mejor que entonces. Y algo aún más importante. La sociedad española puede enorgullecerse de ser una de las más concienciadas ambientalmente del mundo, gracias en parte a la benefactora influencia de Félix.
También por suerte somos muchos los puretas que, cada uno en sus trabajos y con sus familias, llevamos con orgullo ese toque especial que nos insufló el querido naturalista burgalés.
Miles de ellos, cuando aún eran muy niños, le escribieron preciosas cartas que siempre él respondía personalmente con celeridad y cariño. Algunas de esas cartas, por fin, podemos leerlas emocionados. Porque con el objeto de conmemorar el 35º aniversario del fallecimiento de Félix Rodríguez de la Fuente, la fundación que lleva su nombre ha rescatado de su archivo personal una primera selección de cartas que le fueron dirigidas por jóvenes admiradores en los años 60 y 70 del pasado siglo. ¿Está entre ellas la tuya?
Las cartas enviadas, especialmente en el caso de niños y jóvenes, ilustran la pasión por la naturaleza que despertó en ellos el mensaje de Félix a través de su obra en televisión, radio y medios escritos. Son muchos los remitentes que le anuncian su intención de dedicarse en un futuro a trabajar para conservar la fauna y alguno incluso le pregunta “qué hay que estudiar para llegar a ser como usted o algo parecido”.
Algunos escritos se acompañan de preciosas poesías, dibujos realizados a mano, recortes de periódico con noticias sobre animales o retratos de Félix.
El archivo que ha digitalizado la Fundación contiene copias de las respuestas enviadas por Félix a muchos de sus seguidores, en las que les animaba a seguir su vocación de naturalistas y les agradecía sus muestras de afecto.
En algún caso, Félix invita a un joven a unirse al Club de los Linces de Adena (actual WWF-España), ofreciéndose incluso a hacerse cargo del coste al decirle que “si tienes dificultades económicas para pagar la cuota, dímelo y yo mismo la abonaré en tu nombre”. Además, en sus respuesta Félix a menudo adjuntaba una fotografía firmada, que seguramente muchos admiradores todavía conserven a pesar de los años transcurridos.
A través de una nota de prensa, Odile Rodríguez de la Fuente ha resaltado que
“el archivo personal de Félix Rodríguez de la Fuente es una radiografía de la sociedad de los años 60 y 70 e ilustra el despertar de toda una generación, que descubrió su amor por la naturaleza gracias al trabajo de divulgación realizado con tanta pasión por mi padre”.
Las primeras cartas digitalizadas se han publicado en una sección especial de la página web de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente, bajo el título “35 años con Félix”, a la que poco a poco se irán añadiendo más contenidos.
La Fundación también anima a los seguidores de Félix que aún conserven sus cartas a enviarlas en formato digital a info@felixrodriguezdelafuente.com junto con algún comentario personal, a fin de poder añadirlas a este nuevo archivo común y compartido que, sin duda, es el mejor de los homenajes posibles al legado de Félix, 35 años después de su fallecimiento.
—
Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras: