Gracias a los registros sedimentarios del lago Montcortés (Lleida), donde los depósitos son anuales, investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN), el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE) y el Instituto de Física Química Rocasolano (IQFR), todos del CSIC, han logrado reconstruir a lo largo de casi 3.000 años las lluvias extremas y relacionarlas con la Oscilación del Mediterráneo, un patrón atmosférico a gran escala que condiciona la precipitación de este área del planeta.
La reconstrucción, que va desde el año 763 a.C. al 2012, ayuda a entender las fluctuaciones del clima mediterráneo a lo largo de exactamente 2775 años ininterrumpidos. Y permite conocer con exactitud en qué año y hasta en qué época se registraron grandes tormentas en el oeste del Mediterráneo.
¿Y qué tiene esto que ver con los romanos? Pues mucho. Lee el resto de la entrada »