La crónica verde La crónica verde

Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera. (Pablo Neruda)

Las grullas de Sibelius buscan un oso en Ávila

Grullas

Continuamos la crónica de la ruta de las aves Bird Flyway. 1.700 kilómetros de norte a sur siguiendo a los ánsares escandinavos en su viaje hacia el sur de España. La primera estación fue en la laguna de La Nava (Palencia) y la segunda el Urdaibai Bird Center (UBC).

Tercera estación: la Reserva Ornitológica de la Laguna de El Oso, en las abulenses tierras de La Moraña. Una fría llanura cerealista a casi 900 metros de altitud, más propia para ver avutardas, pero salpicada de numerosos lavajos o lagunas que sirven de refugio a muchas aves migratorias. Aquí nos interesan los gansos, a quienes estamos siguiendo en su periplo hacia el sur peninsular, pero también buscamos grullas, cada vez más frecuentes por estos lares.

El Oso

El Oso vetón de El Oso (Ávila).

Llegamos a El Oso ya de noche. ¿El Oso? ¿Había tantos osos en Ávila como para dedicarles el nombre de todo un pueblo?

La pequeña localidad, apenas 200 vecinos, recibe tal nombre por el verraco de granito con forma de oso que, al menos desde el siglo XIII, se encuentra a la entrada de la iglesia, aunque su origen es vetón, esculpido por tanto hacia el siglo V a.C. Otros verracos, como los famosos de Guisando, se considera que tienen forma de toro, pero no seré yo quien trate de identificar el bicho. Si dicen que es un oso, pues un oso es.

Nos alojamos en el propio pueblo, en la casa rural La Lagunilla. Nuestros caseros no pueden ser mejores, pues son los propietarios de la contigua panadería Pindado, así que no nos van a faltar ni pan ni magdalenas recién hechas, de esas que se hunden pesadas en el vaso de leche para delicia de los devotos de Proust.

No nos podemos entretener con añoranzas gastronómicas pues mañana toca madrugar para ver amanecer en la laguna. La reserva tiene una extensión de 16 hectáreas y está incluída en el Catálogo Regional de Zonas Húmedas de Interés Especial de Castilla y León. Es también una de las nueve reservas ornitológicas de SEO/BirdLife.

El espíritu de Sibelius

¿Y qué pinta Sibelius en este artículo? Pues que justo en diciembre de hace 150 años, el 8 de diciembre de 1865, nacía el genial compositor Jean Sibelius. Finlandés como algunas de las grullas y ánsares que quizá nos esperan mañana en la laguna, fue un enamorado de las aves migratorias. Las veía pasar por encima de su casa, en ese retiro rural de Ainola en el que se encerró para no volver a componer nunca más. De ellas llegó a decir:

«Es extraño saber que no hay nada en todo el mundo que me afecte -nada del arte, la literatura o la música- del modo en que lo hacen estos cisnes y grullas y gansos salvajes. Sus voces y su ser».

El 18 de septiembre de 1957 Sibelius admiraba emocionado una bandada de grullas: «¡Han vuelto! Los pájaros de mi juventud», gritó emocionado a su hija Margareta. Dos días después falleció.

Grullas musicales y águilas imperiales

Noche cerrada. Frío en el rostro. Nos encaminamos silenciosos al escondite de la laguna de El Oso, una construcción de madera ¿finlandesa? A lo lejos se oye el murmullo nervioso de cientos de aves acuáticas que barruntan la cercanía del amanecer. Muy pronto empieza el espectáculo. Las más madrugadoras son las grullas, cuyo trompeteo les delata incluso antes de iniciar el vuelo en ordenada formación escandinava (otra vez Sibelius) camino de los campos donde se buscarán el sustento diario. Sus estilizadas siluetas, contrastadas sobre un cielo que poco a poco va tiñéndose de rojos y malvas, será difícil de olvidar.

Contamos 905 grullas comunes (Grus grus). No está nada mal para unos pájaros que se han metido entre pecho y pluma más de 3.500 kilómetros de viaje. Hay muchos jóvenes nacidos este mismo año, como delata su plumaje grisáceo y esa fijación que tienen de estar siempre junto a sus padres, pues son de las pocas aves que mantienen un estrecho vínculo familiar durante sus largas migraciones.

Press trip

Press trip en El Oso.

Tampoco podían faltar los gansos. Unos 500 salen igualmente ruidosos de la laguna, entre cercetas, ánades reales, silbones, cucharas y toda la pajarería habitual de estos lavajos.

Tan sólo un blanquinegro grupo de patilargas permanece inactivo junto al agua, como si todo este frenesí matutino no fuera con ellas. Son cigüeñas blancas (Ciconia ciconia). Exactamente 73 ejemplares, igualmente en migración activa sólo que éstas vienen del sur, de África, y no de Escandinavia como sus vecinas aladas. Muy pronto, pues san Blas es el 3 de febrero, pero ya sabemos que el refrán que anunciaba su llegada no funciona desde hace décadas.

La sorpresa, no por esperada menos sorpresa, la veremos con el telescopio a lo lejos. Son dos águilas imperiales ibéricas (Aquila adalberti) cazando a primera hora de la mañana. Y una lo consigue, a juzgar por la rapidez con la que la vemos tirarse al suelo y moverse nerviosa en lo que imaginamos es la preparación de su desayuno. David Campbell, de la revista Birdwatch Magazine, nuestro compañero en este singular Press trip, no la había visto nunca, así que nos debe una botella de vino.

Intentaremos observarlas más cerca paseando por los cercanos pinares, aprovechando que se nos ha unido al grupo Lorena, una joven colaboradora del Ayuntamiento. Pero además de una letrina de tejón y cientos de macetas para recoger la resina de los pinos tiradas por el suelo poco más veremos.

Toca pues visitar la joya de la corona divulgativa: el centro de interpretación Lagunas de La Moraña.

20151217_122848

Viajeros con alas

Este centro nace con la vocación de convertirse en la puerta de entrada de La Moraña para aquellos visitantes que quieren conocer un singular espacio donde las aves viajeras, como los turistas, siempre están de paso. A la espera de su próxima inauguración, el nuevo edificio pretende potenciar y difundir los valores naturales de la comarca y con ello propiciar su desarrollo económico. Servirá tanto como centro de interpretación como dinamizador de la educación ambiental y del turismo rural.

En su doble faceta de centro de recepción y de interpretación, contará con medios audiovisuales, reproducciones de aves casi vivas y cámaras de visión directa para observar a las aves en su hábitat en tiempo real. También contará con un punto Bird Flyway, desde donde será posible seguir la migración de ánsares y águilas pescadoras en su interminable viaje vital transeuropeo de norte a sur y de sur a norte.

El Centro Lagunas de La Moraña dispone de dos plantas donde se explican los distintos hábitats de la comarca y se habla de las grullas, los gansos, las aves esteparias, el águila imperial y la migración de las aves. Se han habilitado también salas oscuras dedicadas a los animales de la noche, los búhos, lechuzas y murciélagos.

Juan Carlos Rico, técnico del Ayuntamiento de El Oso, ecologista y entusiasta del proyecto, además de nuestro experto guía por la zona, está convencido de que ánsares y águilas ayudarán a mejorar la calidad de vida de este pequeño pueblo comprometido con su futuro. «Las aves son nuestra gran riqueza», asegura sin titubeos.

Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras:

3 comentarios

  1. Dice ser Federico

    Si quieres ver grullas en cantidades industriales en Extremadura.

    19 enero 2016 | 17:37

  2. Dice ser J. Luis

    Un sitio espectacular para darse una sobredosis de sosiego y paz espiritual mientras ves el trasiego de grullas, gansos y muchas especies de anátidas, llevarse unos prismáticos para quedarte con la boca abierta viendo las águilas imperiales que siempre se dejan ver por allí y te olvidas del mundo.

    Un acierto crear esa reserva esteparia, aunque aún poco conocida, será santuario de peregrinación anual obligatoria para los fanáticos de las aves.

    Una ruta preciosa, fuera de las autovias, para ir al El Oso desde Madrid es ir hasta San Martín de Valdeiglesias y ahí tomar dirección Avila, atravesando la sierra hasta Avila y de ahí hasta El Oso. Se pasa por El Tiemblo, la reserva de Iruelas, El Barraco, Avila, etc.. Un viaje de unos 160 Km llenos de experiencias vitales.

    http://1drv.ms/1P5jmhE

    20 enero 2016 | 14:33

Los comentarios están cerrados.