El 37% de los españoles respiramos aire que incumple los límites legales

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2012 el 94% de la población respiró aire contaminado. El 37% o lo que es lo mismo unos 17,3 millones de Españoles respiró aire que infringe los limites legales establecidos por la Unión Europea.

Estos son los datos que se desprenden del informe anual de la OMS y que ponen una vez más a nuestro país en el punto de mira en materia de calidad de aire. Las instituciones europeas se han cansado de otorgar más prórrogas a nuestro país por los repetidos incumplimientos en esta materia, tanto es así, que la Comisión propone abrir un procedimiento de infracción contra España por el incumplimiento de la normativa que regula la calidad de aire. De no tomarse las mediadas oportunas a tiempo, la situación podría derivar en una multa millonaria (se calcula en función de la gravedad y el PIB del país infractor).

34072-800-421

Skyline de Madrid y la evidente contaminacion

Según el informe «aire limpio 2012» realizado por Ecologistas en Acción, las comunidades de Madrid y Cataluña, son las que más población concentran bajo los niveles de incumplimiento o aire malsano. Algunos de sus municipios registran los mayores niveles de óxido de nitrógeno, monóxido de carbono y partículas en suspensión, contaminantes todos ellos procedentes mayoritariamente de las emisiones de vehículos de combustión interna (el tráfico rodado). También, aunque en menor medida, provenientes de la industria o de actividades como aeropuertos ( Barajas o El Prat) y el puerto en el caso de Barcelona.

A estas condiciones de aire contaminado, se le atribuyen más de 500.000 muertes anuales prematuras en Europa (unas 20.000 en nuestro país) y un sobrecoste millonario en sanidad, horas de trabajo perdidas, bajas de larga duración, etc. La OMS es consciente del problema y por ese motivo ha incluido la contaminación del aire en el Grupo 1 (el más alto de la escala) de «sustancias» que pueden provocar un cáncer.

Imagen-facilitada-por-el-Depar_54352807207_54028874188_960_639

La ciudad de Barcelona «bajo la nube tóxica». La Vanguardia

Para tratar de corregir dicha situación, las administraciones han activado una serie de planes destinados a reducir la contaminación. El Ayuntamiento de Madrid,  recientemente ha presentado su plan de acción 2015-2020 o «plan azul», donde entre otras medidas se permitirá la circulación de vehículos ECO en el carril BUS-VAO,  actuaciones en la recarga de vehículos eléctricos y medidas sobre la actividad en el aeropuerto de Barajas, entre otras. Un plan de poco más de 81 millones de euros, cifra que puede resultar un poco escasa si tenemos en cuenta la magnitud y urgencia del problema (más de confirmarse una sanción por parte de la UE). En la ciudad de Barcelona se trabaja en diferentes medidas como la incorporación del Taxi eléctrico y el Bus eléctrico (ya en fase de pruebas). La Generalitat de Catalunya ha redactado un plan de mejora para la calidad del aire 2015.

Bus eléctrico.1379942976743

Bus eléctrico de Barcelona. El Periodico

En mi opinión, tendríamos que apostar mucho más por el transporte público en general y en particular en el transporte eléctrico (tranvía, metro, bus, Taxi, etc.). Otra apuesta seria  la restricción de la circulación de los vehículos más contaminantes en nuestras ciudades y/o la implantación las denominadas zonas ZBE (Zonas de Bajas Emisiones) de forma decidida como en otras ciudades de la UE y no de forma cosmética. La promoción de las tecnologías eléctricas en transporte privado, que aunque no son la solución a todos nuestros problemas, ofrecen una clara mejora en eficiencia, que contribuye a la reducción del volumen total de contaminación y sobretodo a la reducción de la concentración de contaminantes en el aire de nuestras ciudades (donde vive la mayor parte de la población).

Taxi_Eléctrico_01-1

Primer Taxi eléctrico en Valladolid. Un ejemplo a seguir. Coches.com

 

 

 

 

 

 

2 comentarios

  1. Dice ser Antonio

    O tambien puede la gente elegir una opcion intermedia….LA MOTOCICLETA!

    Que ademas, mejora el tema del aparcamiento y los atascos.

    PD:En Madrid sobretodo.

    26 diciembre 2013 | 16:58

  2. «Por primera vez en al menos 800.000 años, la concentración de este gas de efecto invernadero ha superado la marca de las 400 partes por millón. Cuantos más gases se emitan mayor será el incremento de la temperatura, y mas difícil, si es que posible, detener el calentamiento

    En el entorno remoto de las islas Hawái, en medio del océano Pacífico y alejado de toda fuente importante de contaminación, desde hace algo más de medio siglo se viene midiendo en el observatorio de Mauna Loa con precisión la concentración atmosférica de dióxido de carbono. A 3.000 metros de altitud, es la estación más antigua que, interrumpidamente, ha venido midiendo esta variable tan importante de nuestro planeta. El 7 de mayo de 2013 entrará en la historia de la humanidad y del planeta porque, por primera vez en al menos 800.000 años y puede que desde el Plioceno (hace de casi tres millones de años), la concentración de este gas de efecto invernadero ha superado la marca de las 400 partes por millón (ppm). Hace unos 200 años, cuando se inventó la maquina de vapor, estábamos en 280 ppm.

    Muy pocas personas son los que aún viven que, al nacer, hubieran respirado aire por debajo de 300 ppm. Casi todos hemos vivido ya en esa centena. Y, desde luego, nunca nadie ha vivido un cambio de más de 100 ppm a lo largo de su vida. Es más, un cambio de esta magnitud y rapidez es totalmente excepcional en la historia reciente de nuestro planeta. Y, lo que es peor aún, de no detener las emisiones, quienes ahora nacen y empiezan a respirar aire de 400 ppm es probable que, al final de su vida, respiren aire de 600 e incluso muchas más ppm.

    El dióxido de carbono es un gas inocuo para nosotros en este nivel de concentraciones; sin embargo, es un gas que tiene efecto invernadero. Es este gas, junto con otros pocos gases y vapores, son los que hacen que Ia Tierra sea un sitio calentito, sin grandes extremos térmicos en la mayor parte de su superficie, lo que ha permitido la vida tal como la conocernos, incluida nuestra propia aparicion como especie Homo sapiens. Liberar dióxido de carbono a la atmósfera hace que el clima se caliente. Y el calentamiento del clima no es un asunto baladí.

    Todos, de una manera u otra, dependemos del clima del lugar en el que habitamos. Cambiar el clima es, en última instanciar cambiar el funcionamiento de todos los ecosistemas de los cuales dependemos para nuestro sustento y bienestar; es cambiamos a nosotros mismos.

    Puede que muchos piensen que el cambio climático será algo del futuro, pero no es verdad. Está con nosotros desde hace tiempo. Muchos han o hemos sufrido sus efectos, y muchos más los seguiremos sufriendo, tanto más cuanto mayores sean las emisiones. Puede también que muchos piensen que tenemos tiempo para reaccionar, pero están confundidos. Cuantos más gases se emitan mayor será el incremento de la temperatura, y mas dificil, si es que posible, detener el calentamiento. Si queremos que el clima no se caliente más alla de 1,5ºC, como piden muchos países en desarrollo en el marco de las Naciones Unidas, hay que empezar desde hoy mismo a reducir las emisiones.

    De no hacerlo y continuar como hasta ahora, en 2030 esta meta será ya inalcanzable. Para hacerla posible, habría que disminuir drásticamente las emisiones a tasas que ponen nuestra propia capacidad, y no digamos nuestra voluntad, en un durisimo aprieto. No hay acuerdos en el horizonte para conseguir tal meta. Pero, lo que es peor, no se necesitará mucho más que otra década para hacer imposible la meta de evitar que el planeta se caliente por encima de 2°C, objetivo que han acordado otros muchos países por entender que superar esa cifra supondría una interferencia peligrosa sobre el clima. Inalcanzable significa que no podremos evitarlo y que la alteración que se produzca continuará durante siglos. El tiempo apremia como quizás pocos llegan a concebir.

    El 7 de mayo de 2013 habrá sido un mal día para toda la humanidad, pues evidencia que los deseos de los gobiernos del mundo no se corresponden con la tozuda realidad de que las emisiones no disminuirán si no se adoptan las decisiones oportunas. Esta frontera no debió cruzarse nunca. Como en tantas otras cosas, la ciencia, aun con sus limitaciones, hace ya mucho tiempo que dio la voz de alarma. El mensaje era correcto v, con el tiempo, no ha hecho sino incrementarse. Pero los humanos reaccionamos mal ante lo imprevisto y preferimos aceptar la duda que, en no pocas veces, algún mercader siembra, antes que hacer lo necesario para evitar el mal que, sin lugar a dudas, todos querríamos evitar; eso sí, a poder ser, sin coste.

    Pero eso no es posible. Detener el calentamiento tiene un coste, pero este es mínimo y más pequeño, mucho más pequeño, que los daños que se derivaran de no hacerlo. Es en días como este, que serán recordados durante siglos, cuando debemos exigirnos a nosotros mismos un poco de reflexión, un alto en el camino, para recapacitar sobre lo que es verdaderamente importante y decidir que “si queremos, podemos”. Tú decides».

    Artículo de José Manuel Moreno Rodríguez, Catedrático de Ecología en la Universidad de Castilla La Mancha y autor revisor en el IPCC (Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático) de la ONU.
    12/05/2013

    29 diciembre 2013 | 00:36

Los comentarios están cerrados.